POLONIA Y EL APOCALIPSIS. EL TERRIBLE ENIGMA WOJTYLA
Me levanto con el canto del tercer gallo antes de que el sol empine sus apolíneos rayos por las crestas guadarrameñas. Esta es semana de las letanías mayores que acompañan al último nocturno. A flagello terremotus… libera nos domine… a peste, fame et bello… ab ira et odio et mala voluntate… a insidíis diaboli… ab Spiritu fornicatione libera nos domine. Rogamos a dios que nos exonere de nuestra culpa y nos libera de la amenaza de la guerra, la peste y del flagelo del terremoto (la tierra está temblando más de lo habitual en 2010, año marcado en rojo por los escoliastas ¿qué va a pasar?- de la furia del huracán, pero sobre todo del espiritu de la fornicación y de la insidia demoníaca, algo muy de actualidad en un mundo bajo la tiranía del gran mentiroso, libéranos Señor, Tú que nos puedes librar.
Pienso en esto cuando el entrelubricán del nuevo día trae el sonido de los primeros gorjeos de las aves y sobrecogido por la certeza de mi fe acometida de estertores, dudas, imprecaciones y soledades termino las letanías. En la liturgia romana se celebraba con motivo con las fechas de la Robigalia las fiestas del campo. Robigalia era la diosa Cibeles para los romanos el 25 de abril. En España las rogativas se denominaban las de marquillos el verde. Entre los muzárabes eran muy frecuentes las rogativas. En esto copiaban todo lo relacionado con ello en el rito crisosotomico. No hay misa ortodoxa en la cual no se cante a dúo entre el diacono y los coros las letanías.
Un adagio ruso advierte “como va el pope, así la letanía”. Al hilo de esto, ciertas reflexiones sobre Polonia, la última guerra mundial empezó allí a causa del corredor de Dantzig. El pueblo polaco es muy celoso de guardar su pasado y el patriotismo exaltado lo trasladan a su forma de sentir la religión que bordea el fanatismo. Practican un catolicismo no frills y esta virtud o vicio supersede las líneas de demarcación de la fe del amor. En Polonia nació la teología del holocausto y de allí vino Wojtyla aferrado al concepto de poder irrefutable y dogmático que tienen todos los eclesiásticos poloneses.
No quiero abundar en el tema al que ya me he referido múltiples veces y menos hoy día de san Justino uno de los grandes apologetas. En la epístola de su misa conmemorativa se lee la epístola de san Pablo a Corintios: los judíos piden signos y los griegos sabiduría y yo por mi parte- observa el apóstol de las gentes- predico a cristo crucificado, el cual es piedra de escándalos y motivo de befas, me acusan de estulticia”. Los obispos polacos debieran meditar en lo que les dijo san pablo a los corintios a ver si rebajan el pistón mientras se celebran los funerales por el avión siniestrado en Esmolensko.
La obcecación de Cziniewsky el primer ministro por llegar a Katyn y hace valer su postura en pro de los escudos antimisiles y el recuerdo de un atroz episodio de la guerra mundial y no un acto de sabotaje por parte de los “odiados ruskis”- odiados para los polacos- ha sido el desencadenante de la tragedia cuyas exequias no se si se han podido celebrarse con toda la pompa que hubieran deseado los organizadores puesto que los jefes de estado mundiales no han podido aterrizar en Varsovia como consecuencia de la nube cósmica que ha esparcido el volcán islandés en erupción por el hemisferio norte. Otro signo apocalíptico que se agrega a la presura gentium o afluencia de extranjeros que conocemos en Madrid donde la cifra de emigrantes aumenta de forma pavorosa bajo la égida del imbecil de ZP, un “mandao” un agente del mundialismo.
Otro signo de que hay algo que viene es el enfriamiento de la caridad, la falta de caridad y la persecución y a la cortina del silencio con los que se cerca de los que proclaman la verdad. Yo predico a Cristo crucificado no al Vaticano y a sus pederastas, nunca a Wojtyla, el cual se abstuvo de hablar de la gran ramera que ha corrompido la tierra con la fornicación (APOC. 19) para no desairar a las fuerzas oscuras que lo promovieron al pontificado. Y la elección de uno del Este había sido anunciada por vaticanologos eminentes – allí siempre tuvo gente muy importante, destacada, la CIA- como Bruce Marshall, novelista inglés colaborador de los M16 en su título “The Pope”.
Por todos los signos, por todos los síntomas no es descabalado anticipar que estamos viviendo tiempos apocalípticos, un proceso lento y largo que empezó con la revolución rusa, incoada por individuos de origen hebreo o polaco (menos Stalin todos eran judíos) y financiada por banqueros norteamericanos, y que Dios sabe como va a concluir. Preciso será reconocerlo pero sin perder la perspectiva ni la esperanza. Algún día Aquel por el que sufrimos angustia y persecución recompensará nuestros dolores y persecuciones por él. Y creo que con estas razones que aduzco explicó la causa por la cual la canonización de ese “pájaro” sería un insulto a la santa tradición de la SRI
sábado, 17 de abril de 2010
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