2021-03-09

españa lucha contra el lobo

 El ganadero salmantino que durmió 38 noches seguidas en una furgoneta para proteger a sus ovejas del lobo

“Hubo un año en el que me mataron 75 ovejas solo de enero a octubre y eso fue tremendo”, asegura Salustiano García

Tiene 67 años y es de Bañobárez, “zona muy lobera” y cuenta que allí siempre ha habido lobos que entraban por Portugal vía Puerto Seguro o La Bouza. “A pesar de eso nunca te acostumbras a él y cuando te ataca el ganado nunca lo olvidas”, cuenta. Ahora tiene 200 ovejas “para entretenerme” y reconoce que no baja nunca la guardia. “El lobo -dice Salustiano- escoge menú y ni pasa la visa”.

–¿Cuántas veces eligió menú en su explotación?

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–Ni me acuerdo. La primera vez tendría yo 25 años y me mató terneros y cuando te pasa algo así no sabes ni qué hacer. Luego hubo un año en el que me mataron 75 ovejas solo de enero a octubre y eso fue tremendo. Encima del estrés del rebaño hubo 194 ovejas que se quedaron más de un año sin parir y encima vino una primavera mala. Lo que quieren aprobar de no cazar al lobo es el desastre número uno para el campo.

–¿Qué cree que ocurrirá?

–Se va a inundar de lobos esto y la vida será imposible para el ganadero. El lobo vendrá a matar y eso para nosotros no es vivir.

–¿Cree que aumentará el furtivismo, como antiguamente?

–La gente tiene miedo a que les pillen y les sacudan. No creo.

–¿Vivió esa época contra la que tanto luchó Félix Rodríguez de la Fuente?

–Recuerdo de niño que salían remolques cargados de gente para ir de ‘ojeo’, de 10 o 12 pueblos. Si se volvía con el lobo era día de fiesta. Eso no volverá. Ahora es la patrulla de Medio Ambiente la que se encarga si hay muchos ataques. Lo que no puede ser es que nos quieran hacer retroceder a la vida que tenían nuestros antepasados.

–¿Qué vida era esa?

–Lo de ir a dormir todas las noches para vigilar el ganado. La gente habla del lobo porque no tiene ni idea de lo que es. Cuando a mí me pasó lo de los ataques a mis ovejas me pasé hasta 38 días durmiendo en la furgoneta y cuando me fuí a casa, el 39, no era capaz de dormirme.

–¿Llegó a ver al lobo?

–De noche nunca. Huelen y no se acercan pero sí ves en algún momento nerviosas a las ovejas porque también lo presienten. Una Navidad recuerdo que me pidieron ovejas y corderos para un Belén en el pueblo; los llevé, me tomé un café y cuando llegué a las 6 me habían matado 12 corderos y eso es algo que me repateó. ¿Qué hago? Y así fue cuando decidí poner un mallazo de 1,93 que me costó un buen dinero y puse los mastines. He llegado a tener 14 mastines.

El ganadero salmantino que durmió 38 noches seguidas en una furgoneta para proteger a sus ovejas del lobo

–¿Y los mastines son la solución?

–A mí no me atacan desde que los tengo, también todas las noches de todo el año voy por la noche a encerrar a las ovejas en el mallazo. Apunté que cuando tenía los 14 mastines me gastaba 450 euros al mes todos los meses entre pienso y gasóil. El lobo huele que están ahí los perros y prefiere ir a otros sitios donde sea más fácil matar sin tener que luchar.

–Pues ponen todos los ganaderos cercado alto, mastines ¿y cree que se acabó el problema?

–No es tan fácil. Yo ahora como tengo ya pocas ovejas tengo 6 mastines y los tengo atados. Pero es que ahora el campo no es como antes, el pastor no está todo el tiempo con el ganado y el mastín se queda solo y es un animal que tiene que estar controlado. Por ejemplo, de Bañobárez a Sancti-Spiritus habrá 33 o 34 kilómetros todo de fincas y si todos ponen mastines, ¿qué pasa? La gente va por los caminos con sus perritos o los cazadores de caza con los suyos y se puede liar y luego el mastín que aprende a matar ganado lo tiene metido en la cabeza. Yo por eso los até con una cadena de 25 metros. Luego prefiero no tener yo para desayunar que se queden los perros sin comer. Nunca les falta de nada. El lobo es listo y sabe que si entra tiene un problema. Luego hay una cosa, que si entra el lobo y el mastín está suelto, huye el perro. El perro tiene que estar lobeado y estar allí con las ovejas para que sepa que las tiene que defender. Cacharros como eso que dispara no sirven porque luego el lobo se acostumbra.

–¿Por qué sigue encerrando a las ovejas si el lobo hace tiempo que no le ataca?

–No sabes nunca cuándo va a volver.

–¿Qué le diría a uno de los que defienden que se deje de cazar el lobo?

–Le diría que se viniera conmigo pero sin tener su sueldo asegurado. Le diría, ‘te doy las ovejas y te das cuenta cómo se vive con ellas y el lobo’. Yo tengo más horas en el campo de noche que de día. Cuántas veces he estado aquí y no me he ido hasta las 6 de la mañana. Una vez el lobo me olió a las 4 o 5 y no se arrimó y a las 6.30 me llamó otro ganadero para decirme que tenía al lobo a la puerta. Yo he visto cómo en la finca de un tío mío había una perrita parida y una noche llegaron lobos la mataron y se la comieron. Esto hay que vivirlo para saber cómo es. Ves a ovejas que por fuera parece que no tienen nada y luego abres y ves todo destrozado por dentro.

El ganadero salmantino que durmió 38 noches seguidas en una furgoneta para proteger a sus ovejas del lobo

–¿Nunca pensó en dejar de ser ganadero?

–Rendirme yo, nunca, sería lo último. Pero es verdad que nunca te acostumbras y lo que decía antes, nunca olvidas. El que ha tenido siniestros eso nunca lo puede tragar porque ves que es un animal que no mata para comer, mata por destruir, por placer. Y eso no se le perdona.

–¿Por qué cree que hace bastante que no hay ataques en su zona?

–Cuando ha habido problemas con algún lobo son los agentes de Medio Ambiente los que vienen y se ocupan. Ellos están en zonas de conflicto. Cuando pasa eso nos dicen que no nos acerquemos por la zona donde están ellos porque el lobo nos huele y se aleja. Son animales muy listos. Y ahora llegan cuatro descerebrados y hablan sin experiencia pero es que esto hay que vivirlo. Si a nosotros con los lobos que nos entran por Portugal ya nos basta, no hace falta que vengan ya de más sitios. Lo que no podemos es volver al pasado, vivir como nuestros antepasados.

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