TURGUENEV ALMA RUSA
En 1840 Rusia padeció un
invierno tan crudo que se secaron hasta los robles. Murieron muchos bosques, el
Volga se congeló, se esquilmó la caza y en las aldeas los mujiks perecieron de
frío o de inanición. Se organizaron rogativas y las iglesias de las aldeas
estaban de bote en bote con el pueblo arrodillado frente a los iconos y los
popes suplicando la divina intercesión.
He vuelto a abrir un libro de uno de mis
escritores rusos favoritos Iván Turguenev “narraciones de un cazador”.
Siempre acostumbro a
insertar una fecha al final de la página de los libros que me transportaron a
los paraísos de la imaginación (fui desde niño empedernido lector… la cachimba
fue mi compañera de viaje a lo largo de mis vigilias pues sin el humo de mi
pipa no hubiese sido capaz de aguantar el traqueteo de este tren de la literatura
que nos hace viajar por mundos sin moverse de sitio) pone una fecha 3 de enero
de 1993.
Pasaron pues treinta años. A lo largo de estos
seis lustros mucho ha cambiado el mundo pero yo sigo aferrado a mis sueños
calentando la silla en el aposentillo de mi chiscón carreteando libros yendo y
viniendo a los tenderetes de lance en la Cuesta Moyano acumulando sabiduría y dolor
pues ya dijo el sabio Salomón que saber allega pesares.
Mucho mejor entregarse
al nefelismo de las nubes del no saber receta para ser feliz. Yo pobre de mí
fumo leo y no practico el nefalismo de los abstemios porque a lo largo de mis
días apuré una cuantas garrafas.
Nefelismo es estar en las nubes y nefalismo es
abstenerse del vino y de las mujeres. Yo no practico esos vicios. Leo y sufro.
Me gustan los rusos sobre todo las rusas, remo
contra corriente y con tales mimbres no hago carrera de mí porque la incorrección
política es poco recomendable en estos tiempos.
Sin embargo, aquí que este periodista dio en
lo cierto. Rusia está ganando la guerra y mi rusofilia vence a los rusofobos
que andan que no les llega la camisa al cuerpo.
Creo que fue un autor inglés el que dijo que
Rusia imprime carácter, subyuga y algo de eso me ocurrió a mí hace muchos años.
Por eso al releer a Turguenev me he reencontrado con el alma rusa.
Ese misterioso país donde la naturalezala Shirokaia
priroda es única, navego por sus ríos, entro en las isbas y hablo con los campesinos.
A lo lejos alza el vuelo un bando de becadas, miro a lo alto y contemplo como
gobiernan el firmamento una comitiva de alfaneques
que barruntaron la cadaverina del erial.
Vuelvo a escuchar el
canto del ruiseñor ruso (solovei)
y me pongo un poco a la altura de las circunstancias.
Se escucha el tañido de
una campana. En la lejana aldea tocan a vísperas.
Cuando tenía veinte años
me fui a Paris uno de los primeros libros que compré era “Premier Amour”
leyendo a Turguenev me entraron ganas de ser escritor y he seguido esta vocación
que para mi es como un sacramento los rusos me invistieron caballero andante de
la palabra obtuve el toque de varas en la acolada de Londres y París. Pasé hambres
y carestías, pero Franco fue generoso conmigo y me hice periodista y
corresponsal. He alcanzado las altas cimas del periodismo sendas corresponsalías
en Londres y en Nueva York.
Escribí doce novelas y veinte
poemarios cinco ensayos y cientos de artículos y crónicas. He logrado mi sueño
le doy gracias a Dios aunque sea un autor incognito e ignorada por la gran
patulea laica judaica de cuya mano regresó Torquemada a nuestra patria pero yo
me rio de los inquisidores.
Mis artículos en la red son un corte de manga
a los nuevos censores de la libertad y de la democracia. Nunca fue tan difícil ni
tan lacrimoso en España escribir. Jamás se desdeñó tanto a los genios y a los
escritores. España crucifica a sus profetas.
Bajo su yugo esto es un
perpetuo gemir de dientes.
Han traído con ellos los instrumentos de
tortura psicológica, no quieren poner la túnica purpura de los locos y ceñir
nuestras sienes con una corona de espinas, no bien alcanzaron el titulo de los
crucifixores, ellos son ni mas ni menos los nuevos deicidas.
Contra estos esbirros de la información los
escritores rusos que respiran serenidad perdón y humanismo constituyen un
verdadero baluarte
domingo, 18 de diciembre
de 2022
No hay comentarios:
Publicar un comentario