GIRONELLA
Fallecido en enero de 2003
son veinte años sin José María Gironella un referente y paradigma para aquellos
jóvenes del 68 que queríamos emular sus triunfos. Fue el último de los grandes
best Sellers. Los cipreses creen en Dios la voluminosa novela sobre la guerra
civil vendió seis millones de copias. Hizo rico a Lara. Fui una vez a Gerona en
peregrinación y a orillas del Ter visité aquella librería de viejo que abrió al
poco de ganar el nadal el año 47. Subí a la catedral un verdadero adarve
bastión de la lucha contra los invasores franceses y me pasée por los tránsitos
del viejo seminario gerundense. Gironella también quiso ser cura y el seminario
dejó huella una huella cristológica indeleble que también porto dentro de mí.
leí a Papini pero el mundo es diverso multi espectáculo y poliédrico lo que no
evita que los seguidores del crucificado los que seguimos leyendo a Papini
seamos considerados unos avenates. Cristo Jesús era un loco de atar a ojos del
sanedrín. Mamamos aquella rebeldía que se convirtió en idiosincrasia. el autor
de un millón de muertos es un novelista intercadente e irregular. Después de párrafos
geniales su prosa decae y se desvencija por los pródromos del tópico y es que
este escritor gerundense sufría depresiones. Una larga fosa mental como una
sima lo tuvo al borde del suicidio. Sin embargo, su visión del mundo tiene vigencia
a día de hoy por ejemplo en sus libros de viajes. Hace un retrato de la
revolución cubana. Bajaron los barbudos de Sierra Maestra el rosario al cuello
e invocando a la Virgen de la Caridad del Cobre. Patria o muerte. Fidel Castro
el hijo de aquel emigrante gallego que nació en un bohío y se educó con los
jesuitas es uno de los personajes más grandiosos que vivieron en el siglo XX. Todos
somos supervivientes se titula el libro, pero Gironella no ha sobrevivido al
bamboleo de los acontecimientos que han puesto al mundo del revés y hoy es un escritor
olvidado. Un catalán señero y gigantesco en medio de ese catalanismo de enanos
Puigdemont, el tal Pere, el Bizco Morgueras y otros cómitres de la infernal
galera separatista. Los españoles se desentienden y cuando ven un titulo como
el que orquesta Gironella con un millón de muertos en cartera tratan de pasar
hoja. Eso no es memoria histórica pero los muertos siguen ahí dando gritos. Un aldabonazo
a nuestra conciencia
sábado, 11 de marzo de
2023