EL
OJO QUE NI CANTA NI LLORA PERO PIDE GUERRA A TODAS HORAS
Soy
el farolero de la puerta el sol cojo mi linterna y enciendo un farol
ay farolero que te vi un poquito alumbrado dame un poco de farol
aunque sea apagado. Los faroleros de la puerta el sol, venida la
tarde, se quitaban la gorra cuando pasaban ante la estatua de la
Mariblanca que fue una meretriz famosa que encandiló a todo Madrid y
que jodía de balde con buen continente.
Acoto
la Carajicomedia del
canciller Ayala que era un hombre corrido que conocía el percal
cliente y usuario de todas las mancebías. Los vestiglos azotaban la
calle la Montera y hoy ahí siguen de haciendo guardia y plantón por
la Ballesta.
A
mitad del pasado siglo que lo recuerdo bien pues fue mi primer polvo
(me estuve lavando la boca un mes) antes estaban las coaxcas en
Echegaray ojo avizor sacerdotisas del gusto con el octavo ojo humano
(narices, cavidades oculares, orejas, boca, ombligo y dos a los que
no se les ve: crija y verija por otro nombre carajo, el ojo
flogístico de por atrás me gusta más) a mano. Es el que ni canta
ni llora pero pide guerra a todas horas.
Los
entendidos dicen que a veces tienen largas discusiones y
acoplamientos más tarde las pichas y los coños.
Mariblanca
jodía de balde y por caridad como santa Mefisa virgen y mártir.
Lo
de la pobre santa Mefisa que de virgen nada de mártir todo lo que
quieras es un imposible metafísico pero con esa palma la coronan en
el martirologio diz que murió cabeza abajo bajo el hacha de un
verdugo napolitano según declara en su panfleto don Diego Fajardo.
Agustina de Aragón que también sirvió a la patria con entereza
acabó sus días en un burdel de Barcelona que así es de
desagradecida España con sus hijas más preclaras. Al igual que
Mariblanca.
Algunos
doctores recomiendan que para arreciar con furor es bueno ir antes a
por setas al bosque o al pinar arguyendo nadie sabe por qué que
sexología y micología van de la mano un sí es no en unión
hipostática. Precisamente, es necesario a tal efecto micológico
abstenerse de toda espiritosa pócima
y abrazar el nefalismo que es abjurar de Baco pero no confundir con
nefelismo, ciencia que trata sobre la formación de las nubes y las
tormentas. La seta es encomendada para los anafrodisiacos inapetentes
y abstenerse los afrodisíacos. Sin embargo, aunque
me des cinco duros no voy contigo al pinar que tienes sabañones y me
los puedes pegar (cantar
segoviano).
Este
parece tiempo de furores uterinos y huyendo de la peste china las
mozas duran más y gritan en los gineceos quiero más mientras sorben
el zumo del ojo que no canta ni llora pero eyacula invitando a pecar
en los berreaderos de Internet.
Los
modernos globalistas creen haber descubierto la pólvora, pero la
cuestión es más vieja que el andao
palante
En
la literatura porno castellana el morbo de los conventos atiza la
imaginación de los católicos obsesionados con el pecado mortal de
pensamiento palabra y obra:(con meneartela no sólo te condenas
también te estás haciendo cisco, me dijo un cura a mí cuando yo
machacaba el ajo sin parar)
“la
humilde sor Quiteria
Hija
de aquel seráfico divino
Llevando
al refectorio el pan y el vino
Rompió
un jarro en el camino
Estando
presente la comunidad
Al
punto humilde se confiesa
A
la abadesa
Por
romper el cazo diamantino
Madre,
a mí me pesa
Ella
se fue a la portería
Y
alzó el habito con gran paciencia
Hallando
bajo las faldas
A
dos frailes mozos
Que
el jarro la rompían reciamente
Cumpliendo
con el gusto
En
obediencia.
Ay
Dios, madrugaste, vecina, a sacar pollos quiera tu suerte que no
encuentres al diablo y te coma el coco pues dicen las vecinas que
crían palomos y las que del huerto cogen cohombros que apenas se
acuestan y cierran los ojos cuando con un pepino de la mano al codo
le dan por las piernas golpes tan sabrosos que crujen los dientes de
dentera todos (cantar de ronda del siglo XVII) que bien se dijo no
haber calabaza sin tapón ni mujer de quita y pon
Se
quitaban el cenojil y el jubón pues por lo visto no se habían
inventado los panties entonces
y las bragas enjutas eran ropa de hombre. El destocarse era uno de
los gozos más saludables para los castellanos viejos viendo cómo se
despedía su dama tan despacio en las alcobas recónditas.
Madre
la mi madre.
Que
me come el quiquiriquí
Rascalo
hija que también
Me
come a mí
Dale
si le das Carasa
Una
mozuela de Logroño
Hilando
me mostró el co...po
De
lana negro que hilaba.
Estas
coplillas están sacadas del Cancionero General. Hay otra versión
menos “verde”: Me dice mi madre no vayas a Logroño porque los
muchahos dicen mucho co... ño”
lo que demuestra que el erotismo es cosa alborozada para alegrar los
corazones en tiempos de pandemia o pandemónium del Covid19 y
mantener a raya al cretinismo informativo de nuestras teles y
periódicos al servicio del NOM pues parece que el ingenio ha
fenecido entre nosotros. Saborear la drupa del melocotón uterino es
manjar de dioses digo yo.