Tatiana Parra Galindo
Tatiana Parra Galindo
se llama mi sobrina. Fue adoptada al cabo de una larga peripecia en la cual se
produjeron hechos inexplicables. Sería cuestión larga de narrar aquí.
Mi hermana Fuen una enfermera soltera quería
fundar una familia monoparental.
Acababa de fallecer mi
padre y yo la recomendé gestionar la adopción de unja niña rusa. Se fue a la
lejana Siberia, creo que a la ciudad de Omsk en uno de cuyos orfanatos la
encontró.
Era una niña muy linda con los ojos rasgados y
hoy es una veinteañera guapísima.
Mi hermana, desoyendo mis consejos, trató de
desvincularla de sus orígenes.
La trajo con cinco
años, sólo hablaba ruso.
¡Qué gran trauma en su vida!
Mucho me hubiera gustado tratar a esta niña,
hablarle de la historia de su país pero la Marifuen cortó estas comunicaciones por lo sano con ánimo de exterminar todo
vínculo con su pasado. La bautizamos por la iglesia católica por ablución.
─¿Sabéis si fue
bautizada por inmersión en la iglesia ortodoxa rusa?
Me dijeron que no. Que
sus padres debían de ser el uno alcohólico
y que la madre ejercía la prostitución.
¿Y qué? Dije yo.
Mi hermana es un poco
bruta y no me habla desde entonces.
Pero dio a la niña una buena educación y
cuando cumplió ocho años la prepararon para recibir la Comunión. Y aquí surgió
otro detalle exasperante y bochornoso. El cura claretiano se negó a darle el
Pan de los Ángeles alegando que la aspirante al sacramento era de padre
desconocido o habida dentro de una familia mono parental.
En la Santa Iglesia Ortodoxa los niños tienen
acceso al sacramento de la Eucaristía desde la lactancia prácticamente.
La fiesta de la Primera Comunión celebrada
entre nosotros con tanto rumbo y jolgorio es una imitación del Bad mitrah con que los judíos celebran
la entrada en la sinagoga de los circuncisos al alcanzar el uso de razón o la capacidad
de discernimiento.
Ahora creo que Tatiana Parra Galindo, pasadas
unas crisis de identidad contra las cuales se rebeló y le causó ciertos
disgustos a la bruta de mi hermana, y con razón, encauza sus pasos por la vida ─asumo
que en una buena dirección─.
Pido al señor que la
lleve camino recto.
Sin embargo, el haberla negado sus orígenes me
parece un hecho cruel. Tan cruel como la decisión de ese cura porro que se negó
a administrarle el sacramento el día de su primera comunión.
domingo, 30 de marzo
de 2025
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