2015-11-07

LUIS SUAREZ Y EL CAUDILLO. todo para el opus dei y los sionistas





francos y sefarad un amor secreto, pedidos a este blog
bibliopolis@outlook.es
precio 20€


LUIS SUAREZ Y FRANCO

 

Francisco Franco el caudillo es uno de los prohombres señeros de nuestra historia pero es también la figura más manipulada. Todo cristo trata de arrimar el ascua a su sardina en una tergiversación que no cesa. A mí me cupo el honor y la desgracia de ser corresponsal de la prensa del Caudillo que era mucho más democrática y veraz, objetiva que la que ahora nos pasma nos irrumpe nos provoca nos abruma donde todo son mentiras y vainas. Se me quejaba el otro día un colega alemán de que la violencia física y la carnaza son la aflicción de nuestros cuerpos y la mentira sojuzga las almas dentro de este estado de cosas: el pueblo no sabe de la misa la media lo que está pasando.la objetividad, ah la objetividad, estos esbirros la retuercen el pescuezo como a una gallina y también los ruiseñores van a la olla. La verdad dejó dfe ser objetiva. Es mera propaganda. Los que no adulen aquellos que no sean corifeos del gran enagranaje son arrojados fuera de la muralla a las tinieblas exteriores de la infamia, la difamación, el sambenito, por los poderosos contubernios. Don Luis Suarez historiador del Establecimiento – ahora sólo tienen voz y voto para opinar los ingleses y los del “clan”, me refiero a Joseph Pérez los pedisecuos de Americo Castro y alguno más- ha dicho en una entrevista que “echa de menos a Franco”. Pues… Pachasco. A muchos otros nos está pasando lo mismo y no salimos a publicar nuestra desventura por los periódicos ¿Cómo no? Los de su cuerda entraron a saco en los archivos de la Fundación Francisco Franco.

Tengo experiencias amargas al respecto cuando traté de conseguir una aproximación. Estaban sus cancerberos a la mira que me echaron a patadas cuando yo llegué allá con mi libro “Franco y Sefarad un amor secreto”. Lo escribí por encargo de Luis Suarez. Cuando se lo presenté ni siquiera me recibió. Lo publiqué casi treinta años después de haberlo redactado.

Se me cayeron los palos del sombrajo pero con mi oprobio y humillación a cuestas me topé con una verdad: el ascendiente judío de los Franco y su ayuda a los hebreos perseguidos durante el tan traído y llevado asunto del Holocausto que se ha convertido en un dogma de fe. También me di cuenta que el sionismo tiene poco que ver con los judíos tan perseguidos y difamados. El sanedrín siempre moró en los altos palacios del dinero, la banca, el cine, las prensas y los medios audiovisuales mientras el pueblo moraba irredento en el gueto.  

Hace unos años y poco antes de morir pude tener una charla en Piedras Blancas, Asturias, con mi colega del Arriba Eugenio Suarez autor de uno de los libros capitales para estudiar la congoja que afligió a las comunidades sefarditas de Bucarest, Salónica y Sofía, “Corresponsal en Budapest”. Se trata de un texto descatalogado que obre en mi poder y que nunca ha sido reeditado. Vaya usted a saber por qué.

Otro descubrimiento: la religión mosaica es una religión de paz que nos enseñó a cantar salmos y a rezar el “Magnificat” que defendió siempre al pobre y al perseguido pero algunos quieren convertirle en el credo de la guerra.

Franco en su amor indefectible a Sefarad pertenecía al estamento de los judíos temerosos de Dios portadores del fuego sagrado, del amor a los libros y los avances tecnológicos que ha dado Israel en pugna con los planteamientos del dogma católico. Su fe era un poco la fe del carbonero y nada meapilas de los de la democracia cristiana ni de los de Ibañez Martín el sorderas que una vez que le preguntó un purpurado como estaba su mujer contestó que muy buena y muy caliente, señor obispo, altamente recomendable. Eso sí, no faltaba a misa los domingos.

Era un gran político. Buen militar y  acaso no tan eximio estratega porque la guerra civil la prolongó demasiado tiempo. Desde mis tiempos de Nueva York me he mantenido vigilante sobre este asunto, hablé con varios rabinos, pertenecía a la Liga Anti Difamación, incluso entrevisté a la gran Golda Meir y el 22 de noviembre fui invitado a rezar un kadish por el alma de nuestro jefe del Estado. Franco era una versión en castellano de Isaac Rabin vilmente asesinado por entender como entendía también Koestler que la creación del Eretz Izrael, desplazando a los habitantes naturales de Palestina y limítrofes puede llevar a Oriente Medio a la catástrofe.

No era un dictador sino un oligarca a la manera de Putin, pero gigantes, políticamente hablando, de esta catadura les vienen grandes a las fuerzas oscuras que controlan el negocio de las armas, de la emigración masiva de los pueblos (hay que transfretar culturas y suprimir naciones en este afán de pensamiento único) y el mundo del dinero.

Prefieren a los mindundis serviles, personajes de cartón piedra que respondan al perfil de un estereotipo previamente diseñado. Divide y vencerás. Que entren los manipulables. Fuera los que piensen por su cuenta y ofrezcan rasgos de marcada personalidad.

Abate sobre el mundo sus alas el ángel del mal y yo creo que el gran pueblo de Israel va a ser una de las peores víctimas de esta distorsión y manipulación de la historia. Israel debiera de dejar de matar a sus profetas y poner su fe su confianza y su esperanza en el Dios de sus padres no el de estos ídolos advenedizos. Por lo demás, me siento muy orgulloso de mi libro a pesar de que los de la Fundación me echaran del despacho y me hayan corrido a gorrazos por estas campas. Viva Franco. Arriba España.

Un líder como él sería el maná para un España afligida por sus errores sus pecados en los tiempos que corren de confusión y de desolación. Sin embargo, no seamos pesimistas. Vendrán tiempos mejores. Para mí escribir es un acto de amor y yo seguiré escribiendo hasta que Dios me lleve gracias a este invento judío que es Internet contra la guerra, contra los pufos, los enredos contra tanto odio tanta reivindicación tanto gilipollas y tantas vainas.