2025-12-05
La fiesta de Santa Ana y "Santanina" en Castilla
29 de Julio del 2019 - Antonio Parra Galindo (Cuideiru)
El sol dora las peñas y esta luz de Sacramenia me llega al alma, son recuerdos de aquellos carros vivanderos, de las reatas de mulas. Enganchaba el carro de madrugada el abuelo y los machos; se llamaban el uno Cordobés y el otro Noble. Uno era bueno y el otro malo debía de ser hermano de judas pues a mi tía Paulina le soltó una coz que la quebró la nariz a la pobre. Pero era Santana, chiquitos, no apurarse ya faltaba poco para meter el grano al silo; altas estaban las trojes esperando los trigos el bieldo, caricia de los cierzos aquellas largas parvas de las tardes interminables en el trillo dando vueltas y revueltas. Conjurábamos el aburrimiento con alguna cantiña que salía de cuerpo bronca y espesa y avergonzada como el vino de la tierra.
Apretaban los calores y el abuelo Benjamín cantaba el prefacio poniendo motes a los pueblos de la redolada... "Castro los chivos Torreadrada las cabras Fuentesoto cagaberros que se crían en Peñacolgada donde caga y mea la zorra cuando a ella le da la gana. Membibre para molinos Aldeasoña no vale nada. El Vivar tiene buen vino pero Valtiendas le gana", etcétera.
La fiesta de Santa Ana dividía en dos partes el verano de aquellos días augustos de pobreza y escasez en el cuerpo y en el alma grandes esperanzas.
Al cruzar la Pobeda media legua antes pasar a Pecharomán el abuelo se santiguaba a la vista del monasterio de Santa María. El macho Noble, que era burdeño de buenas ancas y mejores andares, hacía una reverencia pero el Cordobés un yeguato que había mercado el abuelo en Turégano en la feria de San Andrés, refractario al yugo, indómito jumento, quería desuncirse del hermano, pegaba una taina.
Conque el tío Benjamín Galindo Martín, que así mi abuelo se llamaba, y era algo pariente del Empecinado aquel guerrillero que anduvo de maqui a la facción cuando lo de la Francesada, por estos cuetos, le sentaba las costuras al arisco animal con la tralla.
Este echaba a andar derecho como una vela pues era muy fino de cabos aquel yegüato.
Los monjes blancos entonaban maitines y a nuestro mulo esos cantos le ponían fuera de sí. Debía de ser de la raza de Caín pero qué se le va a hacer el mundo está lleno de buenos y malos. El abuelo dejó de llamarle "Cordobés" y aquel mulo zaino atendía por el nombre de "Hereje"
Portaban los de Sacramenia en andas a la Abuela de Xto. Subíanla hasta el cerro a la iglesia de san Miguel sobre la cima por aquel camino de cabras entre jotas y donaires parabienes, besos al jarro y de hoy en un año.
Teníamos una sensación mística; nuestra fe nos avalaba en el desamparo ante las incógnitas de la vida y había en aquel fervor mucho de sincretismo. El manto que llevaba la Virgen podía ser el de Demetria o la diosa Ceres arrastrapeplos como la Cibeles que protegía las cosechas. Sacramenia su pobre nombre lo indica fue uno de los vivaques o "mansio" de la Legio VII fundado por manipularii (soldados rasos) de ese encuadre.
Su propio nombre lo indica: muros sagrados y a estos muros sagrados he regresado al cabo de más de sesenta años buscando protección y amparo. Sub tuum praesidiunm Sancta Dei Genitrix.
El cura, un cura pispo repeinado y galante con aires de buen mozo, le deben de haber salido muchas novias por estos pagos y hace bien qué coño hay que aumentar la demografía y mitigar la oligantropía que asuela las tierras a esta orilla del Duero parece un azote bíblico es un dictamen judío, el pueblo que no olvida la destrucción del templo, por Vespasiano y sus legiones, un castigo de Dios por lo de entonces, una Némesis religiosa bien orquestada desde las Redes que ellos dominan me prohíbe que cante en latín a Salve Regina, la gente no se la sabe, siento pena muy adentro por sentir mis viejas creencias atropelladas por ese odio infame al latín que era la lengua de la Iglesia Romana.
No puedo explicar mi fe. Es un misterio no exento de atropelladas supersticiones y de querencias. No la toquéis más que así es la rosa pero mi vida se esparce por estos andurriales que colonizaron los monjes blancos del Cister.
Siento ganas de llorar a la vista de una imagen de Santa María. El Cid Campeador llevaba un icono de Santa Ana en el arzón y yo lo llevo en el alma. Protectora de la vida. Abogada de las parturientas. Las parteras siempre colocaban su imagen a la cabecera de las parturientas deseándolas una hora corta. La religión nos religa nos ata a la vida, al dolor de la existencia y al buen vino de esta tierra.
El vino de la comarca es el mejor del mundo. Una vez paré en una bodega de Valdezate y salí con los pies para arriba y la cabeza para abajo. Después de la misa y el sermón que pronunciaba el cura Francisco nuestro pariente y la procesión nos convidaba a comer un cuarto asado el Sastrín casado con una prima de mi tía Inés, la de Fuentepiñel.
Luego al baile. Tocaba una orquesta de Peñafiel los Pichilines. El abuelo mercaba peladillas garrapiñadas de Alcalá y tiraba un par de rondas al tiro pichón, gustabale la escopeta, era buen cazador, acto seguido enganchaba y a eso de la media tarde retornábamos a Fuentesoto. Siempre parábamos en Pecharromán donde tenía un amigo que fue soldado en la guerra de Cuba nos convidaba a merendar en la bodega escabeche de cubillo y una achicharronada y ya bien fartucos que quedábamos matando el hambre de semanas.
Aquel pan y aquel vino ya no lo he vuelto a probar nunca. Han fenecido los molletes y los corruscos no se cuecen aquellas hogazas porque la Melitona ya no amasa el pan. Se dejó la levadura en Pamplona ¡ay Ursula que esta haciendo! , como muchos de aquellos a los que oí cantar en el trillo y danzar en el baile de la vida que es también una danza de la muerte. Que Santa Ana nos proteja y de hoy en un año.
Nunca se llevaron bien los de Sacramenia y los de Fuentesoto y por fiestas de San Pedro degollaron a tres por una moza. La cruz que recordaba aquel asesinato en que tuvo la culpa el vino y una mujer cerraba la puerta del Redondillo vegas abajo según se sale de Fuentesoto. Unos y otros se dieron muerte a navajazos por una moza. Colijo que desde aquélla los de Fuentesoto en Sacramenia no somos bienquistos.
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desolacion de nuestro campamento de robledo Posted: 03 Aug 2019 06:41 AM PDT Desolación del campamento de Robledo El campamento de robledo milicias universitarias quince bajo la lona cabe el cerro matabueyes nuestro Grafenwohr donde aprehendimos a cantar y a amar a España es un erial abandonado el altar donde se decía la misa de campaña por los diversos pateres de los regimientos es morada de las zarzas menos mal que se llevaron el ara y no lo profanaron. Pese a todo eso, el cristo del Llano Amarillo sigue ahí manteniendo el tipo sobre un pino gigantesco en su cruz como una cumbre alta mirando misericordioso a nosotros pecadores que recordamos aquellos tiempos con nostalgia. ¿Qué fue de ti, España?             |
Posted: 03 Aug 2019 03:04 AM PDT Donald Trump and the perils of loving Israel just a little too much President Donald Trump speaks on the South Lawn at the White House, July 15th, 2019. (Jabin Botsford/The Washington Post via Getty Images) ADVERTISEMENT WASHINGTON (JTA) — It would have been remarkable in any administration: a Summit on Combating Anti-Semitism with appearances by some of the president’s top guns, including the secretary of the Treasury, the secretary of Education and the FBI director. And all hosted by and presided over by the attorney general. That was the lineup at Monday’s all-day seminar at the Justice Department, and the turnout was appreciated by the Jewish professionals and lay leaders in the room, no matter what else they thought about President Donald Trump. Here was an entire day devoted to what that attorney general, William Barr, called “a marked increase in reported instances of anti-Semitic hate crimes.” In his remarks, he more than any other speaker in a day of speeches described the full range of threats facing Jews: “gunmen motivated by hatred against Jews,” people “attacking Jews in the streets and vandalizing synagogues,” “harassment of Jewish individuals and businesses” and a “sharp uptick in attacks on Orthodox Jews, particularly in the Crown Heights neighborhood.” And then there was “the problem of anti-Semitism on campus,” which along with the boycott Israel movement turned out to be perhaps the main focus of the panel discussions that followed. “On college campuses today, Jewish students who support Israel are frequently targeted for harassment, Jewish student organizations are marginalized, and progressive Jewish students are told they must denounce their beliefs and their heritage in order be part of ‘intersectional’ causes,” Barr said. Many Jews on the left bristle at this emphasis, suggesting that the focus on campuses and the spate of anti-BDS laws are veiled attempts to silence pro-Palestinian sentiment by casting it as hate speech. But the summit audience, like nearly all of the panelists, seemed to share a worldview that ranged from centrist to conservative. They might argue among themselves whether the Boycott, Divestment and Sanctions movement or white supremacy is worse, but on the whole agree that there is a “crisis” on campuses led by a movement that “attempts to disguise its Jew hatred as hatred for the State of Israel and the anti-Zionist endeavor” (as the State Department’s anti-Semitism envoy, Elan Carr, said in his remarks). The tight linkage of Jewish and pro-Israel concerns reflects a mainstream Jewish project going back decades that sees American Jewish identity closely bound up with support for (and attacks on) Israel. And probably no administration has done more to work that connection into both its domestic and foreign policy. In their remarks, both Secretary of the Treasury Steve Mnuchin and Secretary of Education Betsy DeVos spoke of Trump’s decision to move the U.S. Embassy to Jerusalem from Tel Aviv. Fighting anti-Semitism is supporting Israel, and supporting Israel means fighting anti-Semitism, was the unmistakable message of the day.  Attorney General William Barr speaks at the Summit on Combating Anti-Semitism at the Department of Justice in Washington, July 15, 2019. (Saul Loeb/AFP/Getty Images) Under any other president, in perhaps any other era, this lashing together of Jewish and Israel interests would have been seen by the Jewish mainstream as hugely validating. But events happening outside of the summit have some saying “Be careful what you wish for.” Trump’s attacks on four liberal congresswomen of color, telling them to “go back” to their ancestral countries (only one was born outside of the United States) was exactly the kind of bigotry that the summit was devoted to combating. If you doubt that, imagine if the president — any president — had lobbed that remark at a Jewish lawmaker. “Dual loyalty” is a slur closely associated with Jews, but that doesn’t mean it can’t be used to attack any immigrant, ethnic or religious group. Bigotry is bigotry, even if you think the target has said things that were just as bad. Trump, er, complicated things further by dragging Israel into the mess he manufactured. In defending his remarks, he laid the blanket charge that all four of his targets “hate Israel with a true and unbridled passion.” One of them, Rep. Ilhan Omar, D-Minn., “says horrible things about Israel, hates Israel, hates Jews,” he said later. Some, of course, welcomed Trump as a defender of the Jews against the harshly anti-Israel things Omar has said. That includes Sen. Lindsey Graham, R-S.C., who said of all four women, “They accuse people who support Israel of doing it ‘for the Benjamins.’ They’re anti-Semitic. They’re anti-America.” The Republican Jewish Coalition shared Graham’s remarks enthusiastically. But others saw danger when a president defends his bigoted rhetoric by invoking Israel and anti-Semitism. “I was disturbed by the president’s weaponization of people’s indignation about anti-Semitism from some of these women to cloud the accusations of racism against him,” Deborah Lipstadt, a professor of Jewish history and Holocaust studies at Emory University, told The Washington Post. With its own right-wing government and a moribund peace process, Israel is not exactly popular on the center-left (let alone the anti-Israel far left, which would love to gain more recruits). The Democrats bear some of the blame for the liberal drift from Israel. But it can’t be good for Israel and its case for it to be so closely associated with the most polarizing president in anyone’s memory, especially when he invokes it to defend behavior even a small but growing segment of his own party considers out of bounds. I heard Trump’s Israel remarks in defense of his “go back” tweet and thought of Tevye’s lament: “I know, I know. We are Your chosen people. But, once in a while, can’t You choose someone else?” Trump’s remarks and divisive behavior hardly came up during the anti-Semitism summit, as exactly no one expected they would. Still, in Barr’s remarks you could hear a conventional vision of tolerance that Trump in no way seems to embrace. “We are a pluralistic nation composed of very distinct groups, each bound together by ethnicity, race, or religion – each group proud of its identity and committed to its faith and traditions,” he said. “Yet despite these differences, we can be bound together into a broader community. Not one that seeks to grind away our distinctive identity. Not one that seeks to overbear our religious commitments, which must be paramount. But one that respects, indeed delights in, the freedom of each of us that give meaning to our lives – that help us understand our place and our purpose in this Creation. “This real sense of community cannot be politically mandated. It arises from the genuine affinity, affection and solidarity that grows out of a shared patriotism and that spontaneous feeling of fellowship that arises from a shared sense of place, shared experience and common local attachments. These bonds are the surest safeguard against racial hatred, including anti-Semitism.”  Andrew Silow-Carroll is JTA’s Editor in Chief. Previously he served as editor in chief and CEO of the New Jersey Jewish News and wrote an award-winning weekly column in the Times of Israel. He was also the managing editor of the Forward newspaper, editor of the Washington Jewish Week, senior editor of Moment magazine, and a reporter for the Jewish Telegraphic Agency. |
Posted: 03 Aug 2019 03:00 AM PDT UN PAQUIDERMO EN LA CASA BLANCA Y UN RINOCERONTE DE DOWNING STREET Comportamiento paquidérmico Donald Trump Han entrado don Boris en política Como dos elefantes en una cacharrería Comportamiento paquidérmico Arriban a nuestras costas Fugitivos en pinazas y barzas Todo el áfrica negra ne Barcelona Y qui nosotros con el rabo entre las piernas Haciendo lo del avestruz Europa humillado y clavada En el árbol del holocausto Sus esbirros gritan blasfemias Y al pie de la cruz jugaban a los dados A España le tocó la china Humillados y ofendidos estamos |
Posted: 03 Aug 2019 02:42 AM PDT PERISTASIS PERISTOMA Perístasis, peristoma, Toma jeroma pastillas de goma Nos quedamos sin argumento Esto es un compló Noticias 24 se repiten las cebollas Siempre lo mismo Catástrofes en Rusia Alguien por detrás agita La manivela de las consignas Pero les van a dar caña a los judíos El odio del norte las pateras La gran invasión Que secundan los imponentes caballos de Troya Rige los designios De la bola el mundo El hacedor de noticias es el rain maker Y en el mundo llueven lágrimas a cantaros Cada día una crujía Un asesinato Contemos la historia De los violadores en cuadrillas Son moros argelinos Pero el local se reserva El derecho de adscripción Burdas mentiras y patrañas La pitanza que de odio nos engorda Violencia domestica Hay voces que dicen que había que matar a esa locutriz o dictora Escarbas en la pecorea de maldades Recitadora de miserias y catástrofes Que lleva un cuarto de siglo Sin cambiar tocado Ana blanco Lo deja vu El parte La monserga cotidiana La Cleopatra de la primera cadena Una etarra al frente del panel de la noticia Con cara de no haber roto un plato En Baracaldo se cargó a veinte guardias civiles Y fichó por la CIA Es por tal cosa inmune Ese atropello me revuelve las tripas: Que una terrorista esté Dirigiendo la torre de la información Y los españoles tragamos Perístasis peristoma Peristoma Perístole la acción peristalquica persiste Veneno en capsulas Todos los días pócimas de llanto Distorsionando la imagen de un mundo feliz El terror sionista ha nacido Nadie sabe cómo ha sido Información de cada día Se regodean los judíos Risas de Israel Estentóreas carcajadas Españoles raza maldita Acordaos de cuando entonces |
Posted: 29 Jul 2019 12:34 PM PDT La fiesta de Santa Ana y "Santanina" en Castilla29 de Julio del 2019 - Antonio Parra Galindo (Cuideiru) El sol dora las peñas y esta luz de Sacramenia me llega al alma, son recuerdos de aquellos carros vivanderos, de las reatas de mulas. Enganchaba el carro de madrugada el abuelo y los machos; se llamaban el uno Cordobés y el otro Noble. Uno era bueno y el otro malo debía de ser hermano de judas pues a mi tía Paulina le soltó una coz que la quebró la nariz a la pobre. Pero era Santana, chiquitos, no apurarse ya faltaba poco para meter el grano al silo altas estaban las trojes esperando los trigos el bieldo caricia de los cierzos aquellas largas parvas de las tardes interminables en el trillo dando vueltas y revueltas. Conjurábamos el aburrimiento con alguna cantiña que salía de cuerpo bronca y espesa y avegonzada como el vino de la tierra. Apretaban los calores el abuelo Benjamín cantaba el prefacio poniendo motes a los pueblos de la redolada... "Castro los chivos Torreadrada las cabras Fuentesoto cagaberros que se crían en Peñacolgada donde caga y mea la zorra cuando a ella le da la gana. Membibre para molinos Aldeasoña no vale nada. El Vivar tiene buen vino pero Valtiendas le gana", etcétera. La fiesta de Santa Ana dividía en dos partes el verano de aquellos días augustos de pobreza y escasez en el cuerpo y en el alma grandes esperanzas. Al cruzar la Pobeda media legua antes pasar a Pecharomán el abuelo se santiguaba a la vista del monasterio de Santa María. El macho Noble que era burdeño de buenas ancas y mejores andares hacia una reverencia pero el Cordobés un yeguato que había mercado el abuelo en Turégano en la feria de San Andrés, refractario al yugo, indómito jumento, quería desuncirse del hermano, pegaba una taina. Conque el tío Benjamín Galindo Martín, que así mi abuelo se llamaba, y era algo pariente del Empecinado aquel guerrillero que anduvo de maqui a la facción cuando lo de la Francesada, por estos cuetos, le sentaba las costuras al arisco animal con la tralla. Este echaba a andar derecho como una vela pues era muy fino de cabos aquel yeguato. Los monjes blancos entonaban maitines y a nuestro mulo esos cantos le ponían fuera de sí. Debía de ser de la raza de Caín pero qué se le va a hacer el mundo está lleno de buenos y malos. El abuelo dejó de llamarle "Cordobés" y aquel mulo zaino atendía por el nombre de "Hereje" Portaban los de Sacramenia en andas a la Abuela de Xto. Subíanla hasta el cerro a la iglesia de san Miguel obre la cima por aquel camino de cabras entre jotas y donaires parabienes besos al jarro y de hoy en un año. Teníamos una sensación mística; nuestra fe nos avalaba en el desamparo ante las incógnitas de la vida y había en aquel fervor mucho de sincretismo. El manto que llevaba la Virgen podía ser el de Demetria o la diosa Ceres arrastrapeplos como la Cibeles que protegía las cosechas. Sacramenia su pobre nombre lo indica fue uno de los vivaques o "mansio" de la Legio VII fundado por manipularii (soldados rasos) de ese encuadre. Su propio nombre lo indica: muros sagrados y a estos muros sagrados he regresado al cabo de más de sesenta años buscando protección y amparo. Sub tuum praesidiunm Sancta Dei Genitrix. El cura, un cura pispo repeinado y galante con aires de buen mozo le deben de haber salido muchas novias por estos pagos y hace bien qué coño hay que aumentar la demografía y mitigar la oligoantropía que asuela las tierras a esta orilla del Duero parece un azote bíblico es un dictamen judío, el pueblo que no olvida la destrucción del templo, por Vespasiano y sus legiones, un castigo de Dios por lo de entonces, una Nemesis religiosa bien orquestada desde las Redes que ellos dominan me prohíbe que cante en latín a Salve Regina, la gente no se la sabe, siento pena muy adentro por sentir mis viejas creencias atropelladas por ese odio infame al latín que era la lengua de la Iglesia Romana. No puedo explicar mi fe. Es un misterio no exento de atropelladas supersticiones y de querencias. No la toquéis más que así es la rosa pero mi vida se esparce por estos andurriales que colonizaron los monjes blancos del Cister. Siento ganas de llorar a la vista de una imagen de Santa María. El Cid Campeador llevaba un icono de Santa Ana en el arzón y yo lo llevo en el alma. Protectora de la vida. Abogada de las parturientas. Las parteras siempre colocaban su imagen a la cabecera de las parturientas deseándolas una hora corta. La religión nos religa nos ata a la vida al dolor de la existencia y al buen vino de esta tierra. El vino de la comarca es el mejor del mundo. Una vez paré en una bodega de Valdezate y salí con los pies para arriba y la cabeza para abajo. Después de la misa y el sermón que pronunciaba el cura Francisco nuestro pariente y la procesión nos convidaba a comer un cuarto asado el Sastrín casado con una prima de mi tía Inés la de Fuentepiñel. Luego al baile. Tocaba una orquesta de Peñafiel los Pichilines. El abuelo mercaba peladillas garrapiñadas de Alcalá y tiraba un par de rondas al tiro pichón, gustabale la escopeta, era buen cazador, acto seguido enganchaba y a eso de la media tarde retornábamos a Fuentesoto. Siempre parábamos en Pecharromán donde tenía un amigo que fue soldado en la guerra de Cuba nos convidaba a merendar en la bodega escabeche de cubillo y una achicharronada bien fartucos que quedábamos matando el hambre de semanas. Aquel pan y aquel vino ya no lo he vuelto a probar nunca. Han fenecido los molletes y los corruscos no se cuecen aquellas hogazas porque la Melitona ya no amasa el pan. Se dejó la levadura en Pamplona ¡ay Ursula que esta haciendo! , como muchos de aquellos a los que oí cantar en el trillo y danzar en el baile de la vida que es también una danza de la muerte. Que Santa Ana nos proteja y de hoy en un año. Nunca se llevaron bien los de Sacramenia y los de Fuentesoto y por fiestas de San Pedro degollaron a tres por una moza. La cruz que recordaba aquel asesinato en que tuvo la culpa el vino y una mujer cerraba la puerta del Redondillo vegas abajo según se sale de Fuentesoto. Unos y otros se dieron muerte a navajazos por una moza. Colijo que desde aquélla los de Fuentesoto en Sacramenia no somos bienquistos. CONDICIONES ENVIAR CARTA POR INTERNET Debe rellenar todos los datos obligatorios solicitados en elformulario. Las cartas deberán tener una extensión equivalente a un folio a doble espacio y podrán ser publicadas tanto en la edición impresa como en la digital. ENVIAR CARTA POR CORREO CONVENCIONAL Las cartas a esta sección deberán remitirse mecanografiadas, con una extensión aconsejada de un folio a doble espacio y acompañadas de nombre y apellidos, dirección, fotocopia del DNI y número de teléfono de la persona o personas que la firman a la siguiente dirección: Calvo Sotelo, 7, 33007 OviedoBUSCADOR |
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