2022-07-06

LA LUCHA CONTRA EL MAL (zlo) Y EL GRITO DE RESURRECCIÓN RUSO

 




ZLO (EL MAL) HISTORIAS PARA LA DEFENSA DE LA DE CRISTIANA

 

Salió el patriarca a bendecir barbas patriarcales con sus ornamentos episcopales ricas capas pluviales recamadas de oro que contrastan un poco con la pobreza de vida de este santo varón que vive en Moscú en un humilde piso alquilado donde ha recibido amenazas de muerte y ha sufrido las molestias del vecino de arriba que inundó de polvo las habitaciones y encharcó su biblioteca.

El lujo y el boato de la Santa Iglesia Ortodoxa la reservan sus ministros para engalanar el “esplendor de su casa”. La frágil y enteca figura de Su Beatitud revela la austeridad de vida del monje que fue no sé sí en el monasterio de Valaam famoso hontanar de la ortodoxia o en uno de los muchos conventos que circundan a la capital rusa y que llaman El Anillo de Oro como uno de los principales baluartes que tiene el cristianismo hoy en el mundo.

Salió a bendecir y bendijo a la manera tradicional con las dos manos juntando el índice, el pulgar y el dedo corazón de la diestra y siniestra a una multitud enfervorizada de cerca de cincuenta mil personas que se agolpaba a las puertas de la catedral de Cristo Redentor lujosamente engalanada y consagrada después de haber servido durante varias décadas de museo del ateismo.

 En su alocución final animó a los creyentes a persistir en la defensa de la fe aduciendo que uno de los objetivos de la iglesia rusa es la pugna contra el mal (zlo, un concepto muy importante en la teología oriental que tiene que ver poco con la secularidad y disquisiciones intelectuales al uso en la iglesia latina), contra las fuerzas oscuras y a la propagación de la caridad y del perdón. Que los cristianos no deben tomarse la justicia por su mano ni responder a la provocación.

Y en la santa noche de pascua en la fiesta de la resurrección se había producido una verdadera provocación sacrílega mientras la clerecía entonaba el Tedeum tradicional de la liturgia de este día (molobien) cuando los coros cantan la estrofa “Vuestra resurrección, Cristo Dios, cantan los ángeles en cielo y tierra pues bajando al sepulcro nos rescataste de la muerte”surgió un tropel de mujeres desnudas de un grupo inglés autodenominado Pussy riot (literalmente, la revolución del felpudo) enarbolando pancartas ofensivas a la religión tirando botes de brea sobre las casullas de los popes, parando el tráfico y colocando silicona en las puertas de los autobuses para inutilizarlos impidiendo el regreso de los congregantes que regresarían al hogar tras la celebración de la vigilia.

 Lector desde hace casi cincuenta años de los autores rusos son incesantes las alusiones a este momento cuando el pueblo retorna a sus quehaceres transfigurados al cabo de los oficios divinos de la Resurrección.  A Rusia no hay que olvidarlo lo llaman el país de la Resurrección puesto que cuando parece muerta y apabullada o pisoteada resurge para consternación de sus enemigos.

Un personaje de Chejov tras saludar a todos los viandantes con el tradicional ósculo (tres besos al grito de Xto resucitó a lo que contesta el homenajeado con un verdaderamente resucitó) le dice a su mujer:

-Son las tres de la mañana y en Vladivostok se estarán preparando para acudir a la misa de medianoche, Irina Petrovna

-Así es, Alexei Ivanovich. Como siempre. Los años pasan, nos hacemos viejos. Pero Cristo resucita todas las primaveras.

-Esa es la esperanza. - dice melancólico Alexei que debía de ser un trasunto del propio Antón Chejov que era hijo de un diácono y que siempre recordó el amplio y largo ceremonial a veces hasta cansarse  pues la misa se sigue durante más de dos horas de pie, cuando niño en Tula.

El sacrilegio cometido por las “pussys” tan bigotudas e indecentes cabe las gradas de la gran catedral moscovita ha conmovido profundamente a la sociedad rusa. Hace falta ser ruso para leer a Pushkin, hace falta ser ruso para entender lo que representa para su idiosincrasia el fulgor de la noche santa, luz sagrada adornada con los huevos pintos, el triple beso y los saludos de la Boskresenia. Es la fiesta entre las fiestas cuando se soslayan las enemistades, se entierra el hacha de la guerra y en tiempos de los zares se declaraban las treguas sagradas porque el Evangelio manda perdonar a los enemigos.

Kuprin tiene un relato hermosísimo en que narra cómo los huéspedes de una casa a pupilo de Kiev celebran la noche y toman el pastel de pascua en el cuarto de una pobre mujer que ejercía de prostituta. Todos son perdedores, gente hundida por el destino y a los que la vida había dado muchos coscorrones pero que en ese momento recuperan la inocencia perdida y vuelven con nostalgia a la pureza de la infancia al grito de Cristo ha resucitado; Cristo de verdad  resucitó. La narración roza el límite de lo inefable.

Cincuenta mil personas abarrotaban la plaza la mayoría jóvenes y cerca de siete mil policías vigilaban pero ningún miliciano osó intervenir para cargar contra los alborotadores de la Pussy riot ante la explanada de la catedral del Salvador en atención al significado de la pascua rusa. Se acordonó el recinto y no han podido trascender fotografías de ese gran sacrilegio con visos de profanación y afrenta a la tradición y costumbres patrias.

Algunos periódicos dicen que se trata de unos cuantos chicos englobados en el término de “liberales” demasiado genérico y evasivo para enmascarar la crudeza del problema. Las fuerzas oscuras le han declarado la guerra al cristianismo vía twitter, facebook y los llamados grupos sociales que al preconizar la globalidad actúan como verdaderos caballos de tropa para minar la moral de los creyentes y distribución una doctrina de perversión y de desesperación.

A muchas verstas de la Plaza Roja en Jerusalén otra chusma de exaltados jóvenes hebreos se dedicó a escupir a los clérigos que hacían un vía crucis en la Calle Dolorosa. Y un archimandrita sirio de rito maronita tuvo que refugiarse en un convento católico para no ser linchado por la multitud. No se trata pues de unos grupúsculos de gamberros ocasionales sino que responden a un frío diseño bien situado y con mucho mando en plaza y poder arriba. Uno no concibe cómo puede Israel el pueblo de la promesa en cuya lengua escribieron Isaías, Amós, Jeremías y otros grandes profetas orquestar una campaña contra los creyentes en Jesucristo y unirse a las huestes del mal (zlo) porque esa actitud sería atentar contra sus propios principios pero esa actitud parece un hecho consumado.

 Aquí en Alcalá de Henares movimientos similares como el Pussy a favor de las banderas arco iris puso en berlina a monseñor Reig que en su sermón de las siete palabras condenó la homosexualidad.

 El prelado ha tenido que recoger velas ante la fuerte presión mediática orquestada por el cejijunto y sañudo autodenominado demócrata don Pedro Jota (ya ajustaremos cuentas). No es esa la actitud de los metropolitas rusos que han hecho un llamado a la defensa de la fe aun a fuer de someterse a la amenaza del martirio.

Valiente y enérgica actitud que no percibimos en occidente donde noticias como la declaración del gobierno noruego, retando a Arabia Saudí, y prohibiendo la construcción de mezquitas en su territorio mientras en los países mahometanos no se permita el culto de las iglesias cristianas, no trascienden o se ocultan.

 Los carteles con leyendas obscenas injuriaban al bendito patriarca Cirilo al que llamaban “talibán” por haber condenado la homosexualidad o en medio de la rogativa pascual realizando simulacros procaces del acto sexual, indignidades que la pluma de este periodista se resiste a consignar y otras injurias al clero y al pueblo de Dios.











































































































































































































































































































































Al declararle la guerra a la Santa Rusia estos agentes del agit-prop anglosajón con hondas raices en el estado de Israel y en Internet las Pussy lo tienen crudo porque la iglesia ortodoxa es un bastión del patriotismo con una historia de más de mil años.

 La reacción del patriarcado y de la sociedad sec enmarca en los límites de la prudencia, el perdón a los alborotadores, y el bochorno pero en la firmeza de condena a la rusofobia a la información torticera y amenazante.

Rusia militarmente es inconquistable, posee arsenales nucleares y uno de los mejores ejércitos del planeta. El mensaje a los agitadores es que la tolerancia puede tener un límite. Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen.