2024-05-07

lago Ilmen Rusia mesiánica resumen de una conferencia que di en 1989 al caer la URSS

 

Lago ilmen

 

Cuenta la leyenda que a orillas del lago limen se paseaba sadko tocando el gusli. Tan bien tocaba el joven que las cúpulas de las iglesias de la hermosa ciudad de Novgorod brillaban más que el sol. Al paso del joven músico por la ribera las encrespadas olas del famoso lago donde acamparon nuestros divisionarios de la blau y fue escenario de una de las más gloriosas gestas revertiría la calma y regresaría la bonanza. Hasta el propio zar de las aguas saltaba a la superficie desde lo hondo de su reino linfático escoltado por una turba de ondinas y de nereidas. Cuando Sadko atacaba las cuerdas de su instrumento el mundo parecía dominado por un poderoso sentimiento de caridad y reinaba la armonía entre los hombres. Se acaban las guerras y las disputas y volvía la pureza de las costumbres y el amor a cristo presidía las relaciones. Nadie robaba ni cometía adulterio. En una ocasión en que el zar de las aguas reinaba en su palacio de cristal a escuchar la voz de Sadko acercándose rozagante y magnífico le dijo: bien tocas padrecito y bien mereces una recompensa y como premio a tu arte te daré la mano de mi hija Volxova- la princesa Volxova era la más bella y casta entre las mujeres. Sadko sin embargo aunque agradecido por la deferencia  rehusó la mano de la princesa y se hizo pope. Llegó a archimandrita y cantaba tan bien que cuando entonaba las letanías. Toda la ciudad acudía embelesada a escuchar los recitales. Al eco de su voz entre vaharadas de incienso  veía pasear a los ángeles por el sabaoth de las cúpulas. Los enfermos curaban y aquellos en cuyo corazón anudaran los malos espíritus se veían pronto libres de las cadenas de los vicios y pecados. El conjuro mágico de la voz del humilde pope no ya el Sadko mozo sino un eclesiástico de barbas bizantinas que llevaba aun rosario a la cintura operaba efectos taumatúrgicos. Este bello cuento es un poco el símbolo de la ortodoxia: que cristo ha resucitado venciendo a la muerte y a todos los males del mundo. En la ortodoxia se unen el culto cristológico y la devoción marial. La invocación en la liturgia oriental a María es continua porque la Teotokops simboliza la victoria sobre el mal (zlo) con sus poderes angélicos. Ella es el nuevo miguel que aplastará la cabeza del dragon[1]. Si existe alguna diferencia entre la religiosidad eslava y la latina seria este matiz que carga más el acento sobre la intuición que el intelecto. La teología de santo Tomás es maravillosamente discursiva una pirámide perfecta donde cada sillar apoya al siguiente al de delante y al de detrás. La bizantina se abstiene del silogismo y la entimema y no intenta revelar el misterio de la redención a la luz de la razón. Simplemente cree en el misterio. Su única garantía es la resurrección del cristo total. El conservadurismo, este apego a las ancestrales tradiciones hace que el cristianismo oriental se parezca al que hubo en Asia menor. Está prácticamente intacto en sus preces, abluciones, misales, antifonarios y en sus ancestrales canticos. Desde san Cirilo y san Metodio. Es precisamente este apego a la tradición lo que llena de encanto su maravillosa liturgia la cual es grande y a la vez humilde y deprecante. En sus iglesias no se tolera otro instrumento musical que el de la voz humana. El canto coral. Los cantos y motetes en fabordón. La polifonía y de esta aura de musical se desprende como una aura de incienso celestial. La recitación hesicasta consigue que los creyentes guiados en su ascenso del camino místico por los staretz alcancen la perfección. Fueron cristiandades que según la leyenda fueron evangelizadas por san Andrés que predicó en Novogorod a orillas del Dniéper. Pero no hay Novgorod sin lago Ilmen. Aquí precisamente vinieron a luchar los soldados de la división frente al bolchevismo aquí donde Sadko tocaba su guzla a la vista de las cúpulas de cebolla de las catedrales e iglesias de esta ciudad. Fue un puñado de españoles idealistas quijotescos que lo dieron todo a cambio de nada,. Padecieron las privaciones y fatigas del hielo la nieve y el hambre y en verano los cancanos y los mosquitos insoportables de la rasputiza o deshielo. Los que pudieron regresar de Rusia luego serian médicos periodistas filólogos catedráticos o empresarios. Ninguno fue capaz de olvidar a Rusia para bien o para mal. Lo dieron  todo a cambio de nada. Sui sueño era Europa pero no la Europa de los mercaderes, era la Europa de las catedrales de los talleres y de la justicia social presididos por la cruz y la fraternidad de Xto. No la Europa de las cresas plusvalías y materialista sino aquella Europa que rinde culto a los valores del espíritu. Se combatía por dos palabras heimat y rodena. Novgorod colonizada por los suecos significa en dialecto varego la ciudad de la isla. Su catedral esta dedicada a santa Sofía y varios monasterios. Precisamente durante un corto periodo de tiempo fue liberada y pudo establecerse el culto divino previamente suprimido el marxismo. Etimológicamente Ilmen significa mar de barro, pero no fue barro lo que se encontraron los esquiadores del capitán Ordaz sino hielo a 52 grados bajo cero aquella sangrienta trágica tercera semana de enero de la que se cumple ahora medio siglo. Tuvieron 196 bajas solo quedaron siete supervivientes en el batallón.

“las guerras-ya lo decía Tito Livio- son concertadas por los más viles y abyectos y combatidas por los más valientes y generosos”[música]. En un tiempo en que son derribados pedestales y caen las estatuas como en un cuento de Oscar Wilde, tras el derrumbe del Muro de Berlín en la Europa del Este no sólo cambian los nombres de las calles sino que también se profanan tumbas de soldados convertidas en blanco del furor vindicativo de este finisecular sometido a los desmanes de un nuevo Termidor revanchista totalmente anticristiano. Suprimido el comunismo y derrumbado el sistema soviético de una forma tan acelerada y sorprendente, por todos los rincones de Europa se alzan blandiendo las espadas ensangrentadas los nuevos sacerdotes de Moloq cabalgando sobre alazanes de fuego que rasgan los aires agitando las crines en las que en lugar de cabellos crecen serpientes. En un periódico alemán leía yo recientemente un reportaje estremecedor: el cipo o estela funeraria de un cementerio soviético donde yacían los restos de los caídos en la guerra patria había sido profanado. La cruz con los nombres de los fallecidos fue hecha pedazos. ¿Qué culpa tendrán los muertos? Ocurrió en Minsk. La desalmada acción de estos gamberros sembró la indignación en la población pero nadie se atrevió a protestar. En la antigua URSS no sólo hay hambre. Hay miedo. Stalin está muerto y bien muerto. A Lenin se le suprime el culto y los privilegios. Se quema en efigie a Breznev pero ahora mandan más que nadie los bolcheviques unos bolcheviques que no hablan sino la lengua de los que antes se consideraban sus rivales. Ellos sin embargo son los herederos de los que tomaron el palacio de invierno y los perversos descendientes de Abrahán Litwaski que comandaba el pelotón de sayones que disparó contra el zar y su familia en los sótanos de la tahona de Ipatiev el Rico Mercader en Yekateringrad el 17 de julio de 1918. Han vuelto a rusia la nación amada por cristo la Trstse mira[2]  que fue de siempre una nación tiranizada por las fuerzas del anticristo. Sin embargo este es el tributo de sangre y de odio que han de pagar los países mesiánicos. Por ese cabo España guarda semejanzas con Rusia. ¿Tendrá que sufrir España ese mismo trauma? No lo permita Dios, ese “bog” que Zinoviev trató de hacer descender como de una cruz del diccionario y que mandó que se escribiese con minúscula.

Por lo pronto sobre los cielos cobrizos de la estepa esos cielos que el gran escritor divisionario Tomas Salvador describió y vivió ese sol ruso como falto de vitaminas sobrevuelan grandes bandas de cuervos. Esas siniestras aves han aventado la cadaverina guiados por una rapacidad que atisba el amplio expolio. Si bien es esto cierto también parece que la religiosidad del pueblo ruso registra un nuevo florecer. Están llenos los templos aumentan las vocaciones sacerdotales y aspirantes al sacramento del bautismo. Y se siente el blesni[3] de la cristiandad. Xto regresa a sui nación preferida con palabras de perdón y de reconciliación. El que es fuente de eterna misericordia como entona con cadencia suplicante el diacono en su canto litúrgico. La riqueza de su expresión adorante. La magnificencia de sus coros. El subir del incienso y el refulgir del oro de las casullas y de esos iconostasios que parecen pintados por fray Angélico. Todo eso debió de impresionar a Tomas Salvador así como otros muchos de los expedicionarios participantes en la campaña. Habría que hablar de una expresión que sólo existe en idioma ruso: la “sobornostb[4]. Cierto que en la gran marcha a pie desde Polonia hasta la Rusia profunda muchos se sentirían despeados y derrotados por la inmensidad misteriosa de la estepa. Sin embargo darían por bien empleadas sus fatigas y los sufrimientos que trae aparejados la vida del soldado al comprobar que las poblaciones les aclamaban por libertadores. Se abrían las iglesias al culto al paso de los regimientos blindados de la Wehrmacht. Volvían a brillar las lámparas en las credencias de los altares de Minsk, Posad, Grigorovo. Se encendían candelas a la Virgen. Volvieronse a escuchar las estrofas del himno del Akathistos[5].

En diversos narradores de la Blau hemos podido compulsar este punto de contacto entre la religiosidad y el idealismo: ese entusiasmo con los valores del espíritu. De ahí que para muchos de los diccionarios el contacto con la Rusia lejana supusiera una catarsis, un cierto embeleso al ser deslumbrados por los fulgores viejos del antiguo cristianismo. Estamos convencidos de que aquellas quintas que van desde el año 32 AL 40 ES DECIR LOS NACIDOS ENTRE 1912 Y 1920 FUERON un prodigioso apéndice de penetración histórica. Algún día se les terminará haciendo justicia puesto que como dijo el romance tras de tiempos vendrán tiempos y máxime ahora cuando las cosas pasan deprisa y vienen tan aceleradas. Los españoles llevábamos sin salir a Europa desde los Tercios. El común denominador de aquella generación fue la espiritualidad y tengo que aludir aquí a Las cartas del sargento Basilio de José García Luna. Espiritualidad y sentido del humor todo junto. Otra constante en todos ellos es la ausencia de odio. En División 250 y en las Cartas del Sargento Basilio se habla del hermano Iván y del hermano Mischa “que nos incomodan con su música de viento: los temibles organillos de Stalin”. Muchos se sienten deslumbrados por la literatura rusa. Habían leído a Chejov en su nostalgia angélica donde la aspiración a los ideales nobles choca con la rutina de la existencia y el tedio de los hombres vencidos. O contemplado el alma humana a través de Dostoievski o Tolstoi o admirada las perfectas descripciones de la naturaleza de Turguenev. La narrativa rusa pàrece un corollario o sobrehaz a las paginas del Evangelio. Asi que las iglesias que ellos contemplaron seguían siendo las mismas que las retratadas por los maestros rusos: edificios sólidos, de traza cuadrada con un atrio o antojana que lindaba con el camposanto, de muros abocinados de madera o de ladrillo rara vez de piedra y con cúpulas bulbiformes. Hasta en las aldeas más míseras alza su cresta por encima de las techumbres de balago de las islas el chapitel del templo ortodoxo con sus cruces trilobuladas una exegesis trinitaria en medio del campo y el bosque. Son torres sin campanarios.[6]. en el interior no suele haber bancos o reclinatorios porque a las ceremonias litúrgicas se suele asistir de pie. Tampoco hay imágenes o estatuas de santo una reminiscencia del tiempo de los iconoclastas. En las naves laterales suelen aparecen copiosos iconos y lamparillas de la virgen iluminado el rostro de la Theotokos (esa Virgen del Perpetuo socorro pintada por san Lucas que trajeron los españoles de Lepanto) todos ellos oscurecidos por la pátina del tiempo. El altar donde se consagra y se alza el cuerpo y la sangre del Redentor por una mediana algo más que la altura de un hombre (iconostasio); la ortodoxia por herencia de los misterios órficos se guardó de la consagración coram populo a sabiendas de que en toda religión ha de subyacer una cierta magia. Cuando todo se desvela no hay misterio. Al iconostasio que solo se abre un par de veces durante la eucaristía se accede por una cancela o verja que abre y cierra el diacono y que se llama puerta real o “darov dvor[7]. Las puertas quedan patentes durante la celebración en las siguientes ocasiones: durante las suplicaciones o epiclesis equivalente a nuestras letanías mucho más incesantes en el rito de san Basilio; en el trisagio o invitatorio o Agios como formula del concilio de Nicea contra los arrianos; en la comunión que imparte el subdiácono bajo las dos especies y por último en la bendición final que el celebrante imparte haciendo la señal de la cruz en aspa como san Andrés. La anáfora es mas larga que el canon latino y el padrenuestro se canta una vez y se reza tres. El coro canta con frecuencia el Slova Tibie o gloria a Ti. Es un rito hermoso, cuajada de simbolismo y de reminiscencias ancestrales de gestos mayestáticos y de una solemnidad suprema. Las capas pluviales y dalmáticas recamadas de oros y cobaltos llevan en los vuelos grabada la palabra Niké (victoria) y la feligresía se persigna con frecuencia y realizan las genuflexiones o el plakon. Los ortodoxos rara vez se arrodillan. Doblan el torso a veces hasta tocar el suelo con los dedos de la mano. Se rigen por el calendario juliano que marca sus fiestas con respecto al gregoriano con dos semanas de retraso. Tampoco coinciden en la celebración de la pascua salvo una vez cada quinientos años. Es la fiesta más importante del año. Después la de la Trinidad. Radiezstvo o Natividad. Blagovenia que suele coincidir con la de San Antón. En las fiestas mariales son importantes de Blagosloveñie el 18 de diciembre y la Ushpenie o Durmición el 15 de agosto. El santoral deriva de los menologios griegos y en ellos se dan santos que no figuran en el martirologio romano como san Mistofan, san Spiridon, san Josafat pero sí san Jorge por ejemplo común a Ambos ritos uy que paradójicamente orientales y occidentales celebran el 23 de abril. Son importantes las celebraciones de los profetas mayores: San Daniel, san Ezequiel, San Ezequiel o san Jeremías. La fiesta de san Andrés el 12 de diciembre es una de las mayores y con motu propio. La de san Juan Crisóstomo la celebran el 30 de noviembre cuando nosotros veneramos a san Andrés por este retraso apuntado entre el calendario juliano y el gregoriano.

A san juan Bocadeoro el patriarca de Constantinopla expulsado al exilio de los montes de armenia por fustigar en sus sermones las corruptelas de la corte se le profesa gran devoción. Un pueblo de gran sensibilidad como el ruso tan inclinado a hablar y habida cuenta de sus grandes capacitaciones literarias se encuentra en la fuerte tradición oral surgida al pairo de los rapsodas pues es el país de los cuentacuentos y de los rapsodas tienen que venerar a la fuerza al Crisóstomo[8]. Rusia es el cuento de los cuentacuentos y de las “sdachi” y que ha llegado a la cultura del mundo historias tan hermosas como la de Blancanieves o Zoliuska. Rusia al igual que Irlanda tiene una fuerte implantación oral por los estratos campesinos de su población. En la narración breve nadie consiguió ponerle un pie delante a Chejov o Andreiev. En ambos autores un par de pinceladas sirven para condensar el pálpito de lo bello, ese fulgor misterioso traspasado de serenidad y de clemente unción la cual se refleja en los iconos.

Los rusos no tuvieron edad barroca. Se plantaron directamente en la modernidad desde la edad media. De ahí que la tradición cristiana sin pasar por la contrarreforma o la ilustración. Para su suerte desconocieron las luchas y escándalos a los que dio lugar el papado. Fue un verdadero don de dios tener iglesias autocefalas y con ello se libraron de las guerras de religión motivadas en parte por el escándalo y las corrupciones de la sede apostólica durante el siglo XVI. El haber estado en parte bajo la dominación otomana en parte dio a los patriarcados cierta cohesión y fue un verdadero milagro que no desaparecerá el cristianismo. Eso se debe en parte a un regalo de los zares herederos del imperio bizantino. De este hecho arranca su supuesto mesianismo. Tan hondo caló en el pueblo ruso ese sentido mesiánico que la palabra para designar a un campesino y a un creyente es la misma: “xristianki” como hombre o mujer de vida sencilla que guarda los mandamientos. Por fútil  que parezca, esta idea sin embargo es muy importante a la hora de entender tanto el alma como la historia de este pueblo tan castigado por las desgracias que rara vez cae en la protesta airada o en la desesperación. En la gran narrativa rusa solo aletea el aliento resignado de la aceptación de la voluntad de dios. Los soldados españoles se sorprendían de la mansedumbre, servicialidad y falta de rencor que observaban en los soldados y oficiales que hacían prisioneros en sus escaramuzas con el ejército rojo. Pese a su desgracia parecían completamente avenidos a su destino en el acatamiento de la voluntad de dios. Ese talante melancólico inclinado hacia la belleza sin jamás una mala queja o un lamento sabiendo percibir la vida desde una óptica triste pero esperanzada en la resurrección de cristo se muestra en su gran capacidad espiritual. Pero al propio tiempo esta resignación les vuelve indolentes y abúlicos a los rusos. Casi resulta inexplicable cómo un imperio ha podido derrumbarse en estos últimos días sin que haya pasado nada y sin que se haya disparado un solo tiro. Las babiushcas moscovitas armadas de infinita paciencia hacen cola a las puertas de los Gastronom con sus mostradores vacíos en espera de una ración de carne de leche o patatas. Esa actitud resignada, ese fatalismo anta la volia boshe. Esta actitud resignada, este talante fatalista, lleno de sumisión, se cruza constantemente como un espectro por las páginas más brillantes de la literatura rusa aunque Dostoyevsky hable de una franja de locura pesimista que las llena de nihilismo en periodos de abatimiento. Es un pais que se extenuó primero en la lucha contra el tártaro y después contra el turco. Es Europa y Asia a la vez. El ángel de la melancolía rusa (tascá) se torna en ironía sapiencial en Gogol (ponia) y se vuelve complicada clarividencia en Dostoyevsky. Es sencillamente ganas de vivir en Pushkin que se asoma a los rostros de los tahúres que juegan en las noches de Petersburgo a la caza de la dama de picas. Y en Chejov es esa sonrisa añorante que se convierte en suspiros y en taedium vitae. La vida no es más que un triste jardín de los cerezos desde donde se nos expulsa. Suenan los golpes secos del hacha en el jardín. Nos amenazan los acreedores, la vulgaridad, la indiferencia, el desamor. Todas las historias de grandeza concluyen en la crujía de un hospital en la galería o en la cárcel o en el convento para perderse irremisiblemente en ese pañuelo de tierra que nos aguarda. Solo el vaskresenia o la esperanza de la resurrección en Xto puede mitigar tanto dolor. Aquí yace la clave del gran humanismo ruso: en las veras esencias del cristianismo. De su mano alcanzaría su novelística las más altas cimas de excelsitud literaria o se hundió en los penetrales de los flujos de conciencia psicológicos. El alma rusa se ha enfrentado al bien y al mal con una sonrisa misteriosa “ylibiatsa”. Es la sonrisa de Basilio el patriarca de Constantinopla que no aceptó las exigencias del emperador Valente. O es la sonrisa que el viajero encuentra al llegar a Moscú y que puede ocultar siempre cartas bajo la manga. Es la misma sonrisa con que los mujiks acogían el látigo de los barin. La troika siempre avanzará por la taiga a golpes knut. Ante la tiranía del amo sólo cabe el ensimismamiento. El mujik sometido parece decirle a sus propias barbas:

     -Ahora tú ganas, me maltratas, tu comportamiento es infame, pero poco importa porque al final resucitará cristo y nos librará a ti y a mi del oprobio de nuestros pecados. El se apiadará de tus culpas y a mí me librará de la injusticia.

Pero semejante mansedumbre no es sinónimo de debilidad sino que es capacidad de aguante o “vinolit”. Es la resistencia rusa que plantó cara a Hitler y a Napoleón. Stalin cuando se vió perdido y con los alemanes a las puertas de Moscú hubo de acudir al patriarca Sergio y apelar al patriotismo eslavo que es profundamente religioso. Rusia –la shirokaya natura[9]- es casi imposible conquerir militarmente. Siempre se guarda una carta en la manga y exige cuando parece vencida. Es el pais de la resurrección. De la gran pascua rusa que Rimski Korsakok pasó a los pentagramas. Los que ahora mismo venden la piel del oso antes de cazarlo debieran ser cautelosos. “Russland is krank-decía el orto dia un comentarista de la Radio Deutsche Welle- aber night todkrank[10]. Creo que muchos veteranos de la Blau aquí presentes y que sobrevivieron al invierno ruso y a las pulgas y fiebres de la rasputitsa[11] aun mucho peor creo que entenderán lo que quiero decir con tal afirmación. Rusia tiene una cara oculta como la luna.

Entre los escritores unos son pro occidentales (raspasaniets o zapadniets) y otros eslavófilos. Culpan a la religión los zapadniets del atraso de la incuria y de la incultura nacional  como Turguenev mientras otros los raskolniki dicen que Rusia ha de centrarse sobre si misma. Tal es el caso de Dostoyevsky. Solzhenitsin ha venido a determinar que el Oeste está podrido. Se está refiriendo a los banqueros ingleses a los ambientes cosmopolitas alemanes que generaron la Weltanshaung y los padrinos del warmongering o maestros ajustadores de los conflictos. La ortodoxia por su parte va en contra de ese latido pesimista y trae un mensaje de alegría el de la resurrección



[1] Al menos eso esperamos los creyentes

[2] corazón del mundo

[3] resplandor

[4] catedralidad, adoración en común.

5 Rito de la virgen en la liturgia de Oriente

[5] himno a la Virgen.

[6] Al igual que en las iglesias mozarabes el campanario ortodoxo suele ser exento y el campanario en cuanto tal se encuentra en un cobertizo o galpón

[7] puerta de los dones

[8] boca de oro literalmente en griego

 

 

 

 

 

 

 

[9] Inmensidad natural

[10] Rusia está enferma pero no herida de muerte.

[11] deshielo

Himno de la infantería española

 

Ardor guerrero vibre en nuestras voces

Y de amor patrio henchido el corazón

Entonemos el himno sacrosanto

Del deber de la patria y del honor

De los que amor y vida te consagran

Escucha España la canción guerrera

Canción que brota de almas que son tuyas

De labios que besaron tu bandera

De pechos que esperaban anhelantes

Besar la cruz aquella

Que forma con la espada de la patria el arma

Con que habrán de defenderla

Nuestro anhelo es tu grandeza

Que seas grande y fuerte… bis

Y por verte temida y honrada todos tus hijos irán a la muerte

Si al caer en lucha fiera

Ven flotar victoriosa tu bandera

Ante esa visión postrera

Tus hijos  morirán

Y la patria al que la vida le entregó

Le devuelve agradecida

El beso que recibió

El esplendor

 De gloria de otros días

Tu celestial figura ha de envolver

Que aun te queda la fiel infantería

Que por saber morir sabrá vencer

Y volarán tus hijos ansiosos al combate

Tu nombre invocará

Y la sangre enemiga de sus espadas

Y la española sangre derramada

Tu nombre y hazañas cantarán

Y estos infantes de la raza hispana

Que sienten apoderarse de sus pechos

Con la épica nobleza castellana

El ansia altiva de los grandes hechos

Le prometen ser fieles as su historia

Y dignos de tu honor y te tu gloria

 

 

 


 

LA TRAGEDIA DE CANALEJAS PRESIDENTE DE GOBIERNO ASESINADO POR UN TERRORISTA. SU HIJO PEPE SERÍA PASEADO EN LA CHECA DE FOMENTO EN 1936

 

Dos fechas fatídicas en nuestros anales: 12-XI-1912 y 12-XI-1936. Yo tomaba el metro en Moncloa y emergía en Sol. La Fuente de Mariblanca ya había desaparecido pero el oso de Madrid ramoneaba empinado sobre las hojas del madroño de Madrid justo en la esquina de Puerta del Sol y Carretas estaba la librería ─ cerró a últimos de los 80─ donde asesinaron a don José Canalejas y Méndez presidente de gobierno. Con frecuencia me paraba ante el escaparate de la Librería Sanmartín para ver las novedades literarias (se especializaba en historia de España y temas militares) y recordaba el infausto magnicidio. Hoy la librería es un tienda de moda casual para la mujer pero al pasar por allí camino de mi trabajo en la hemeroteca en la calle La Magdalena se me ocurría pensar que los españoles llevamos un tigre en la cabeza y en el corazón un león que saca la zarpa devoradora y nos sumerge cada cierto tiempo en guerras civiles. Canalejas presidía un partido liberal moderado que preconizaba una reforma de la beneficencia, se preocupaba por el obrero y decretó la conscripción obligatoria o servicio militar para promover la subida de status de las clases menos favorecidas que encontraron en el ejército una forma de empleo mediante el alistamiento. Esto no lo tuvo en cuenta su asesino el catalán Manuel Pardiñas que le disparó tres tiros a quemarropa. Falló dos pero el tercero le destrozó la cabeza. La muerte del tribuno se suma a la de Prim,  la de CÁNOVAS, la de EDUARDO DATO y la de Carrero Blanco. Luctuoso palmarés.  Como las desgracias no vienen solas el hijo del insigne premier José CANALEJAS Fernández sería años adelante uno de los muchos fusilados en Paracuellos después de haber sido torturado en la cárcel de Fomento. Las hordas marxistas arrasaron la casa del insigne abogado recién llegado de la universidad de Oxford arrasaron su piso en la calle Huertas e incendiaron la finca de la familia en Otero de Herreros al pie del Monte segoviano de la Mujer Muerta. La viuda de Canalejas Purificación Fernández Cadenas se salvó de la saca gracias a una miliciana que había sido aya de la familia. Entrambos hoy son dos nombres olvidados porque la memoria histórica unilateralmente promociona a los muertos de un bando olvidando a los otros. Tenemos los españoles un tigre en la cabeza. Esos zarpazos, frutos de la desmemoria y la inconsciencia, pueden resultar peligrosos.

 Feria Tertia in Rogationibus ~ Ferial

Sancta Missa

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Ante Missam


Incipit
In nómine Patris,  et Fílii, et Spíritus Sancti. Amen.
2
Beginning
In the Name of the Father, and of the Son,  and of the Holy Ghost. Amen.
S. Introíbo ad altáre Dei.
M. Ad Deum, qui lætíficat juventútem meam.
S. Júdica me, Deus, et discérne causam meam de gente non sancta: ab hómine iníquo et dolóso érue me.
M. Quia tu es, Deus, fortitúdo mea: quare me repulísti, et quare tristis incédo, dum afflígit me inimícus?
S. Emítte lucem tuam et veritátem tuam: ipsa me deduxérunt, et adduxérunt in montem sanctum tuum et in tabernácula tua.
M. Et introíbo ad altáre Dei: ad Deum, qui lætíficat juventútem meam.
S. Confitébor tibi in cíthara, Deus, Deus meus: quare tristis es, ánima mea, et quare contúrbas me?
M. Spera in Deo, quóniam adhuc confitébor illi: salutáre vultus mei, et Deus meus.
S. Glória Patri, et Fílio, et Spirítui Sancto.
M. Sicut erat in princípio, et nunc, et semper: et in sǽcula sæculórum. Amen.
S. Introíbo ad altáre Dei.
M. Ad Deum, qui lætíficat juventútem meam.
3
P. I will go in to the altar of God.
S. To God who giveth joy to my youth.
P. Judge me, O God, and distinguish my cause from the nation which is not holy: deliver me from the unjust and deceitful man.
S. For Thou, O God, art my strength: why hast Thou cast me off? and why go I sorrowful whilst the enemy afflicteth me?
P. Send forth Thy light and Thy truth: they have conducted me and brought me unto Thy holy mount, and into Thy tabernacles.
S. And I will go in to the altar of God: to God who giveth joy to my youth.
P. To Thee, O God, my God, I will give praise upon the harp; why art thou sad, O my soul, and why dost thou disquiet me?
S. Hope in God, for I will still give praise to Him: the salvation of my countenance and my God.
P. Glory be to the Father, and to the Son, and to the Holy Ghost.
S. As it was in the beginning, is now, and ever shall be, world without end. Amen.
P. I will go in to the altar of God.
S. To God who giveth joy to my youth.
V. Adjutórium nostrum  in nómine Dómini.
R. Qui fecit cælum et terram.
Confíteor Deo omnipoténti, beátæ Maríæ semper Vírgini, beáto Michaéli Archángelo, beáto Joánni Baptístæ, sanctis Apóstolis Petro et Paulo, ómnibus Sanctis, et vobis, fratres: quia peccávi nimis cogitatióne, verbo et ópere: mea culpa, mea culpa, mea máxima culpa. Ideo precor beátam Maríam semper Vírginem, beátum Michaélem Archángelum, beátum Joánnem Baptístam, sanctos Apóstolos Petrum et Paulum, omnes Sanctos, et vos, fratres, oráre pro me ad Dóminum, Deum nostrum.
M. Misereátur tui omnípotens Deus, et, dimíssis peccátis tuis, perdúcat te ad vitam ætérnam.
S. Amen.
M. Confíteor Deo omnipoténti, beátæ Maríæ semper Vírgini, beáto Michaéli Archángelo, beáto Joánni Baptístæ, sanctis Apóstolis Petro et Paulo, ómnibus Sanctis, et tibi, pater: quia peccávi nimis cogitatióne, verbo et ópere: mea culpa, mea culpa, mea máxima culpa. Ideo precor beátam Maríam semper Vírginem, beátum Michaélem Archángelum, beátum Joánnem Baptístam, sanctos Apóstolos Petrum et Paulum, omnes Sanctos, et te, pater, oráre pro me ad Dóminum, Deum nostrum.
S. Misereátur vestri omnípotens Deus, et, dimíssis peccátis vestris, perdúcat vos ad vitam ætérnam.
R. Amen.
S. Indulgéntiam,  absolutiónem et remissiónem peccatórum nostrórum tríbuat nobis omnípotens et miséricors Dóminus.
R. Amen.
4
P. Our help  is in the Name of the Lord.
S. Who made heaven and earth.
P. I confess to almighty God, to the blessed Mary ever Virgin, blessed Michael the Archangel, blessed John the Baptist, the holy Apostles Peter and Paul, to all the Saints, and to you, brothers, that I have sinned exceedingly in thought, word, and deed, through my fault, through my fault, through my most grievous fault. Therefore I beseech the blessed Mary, ever Virgin, blessed Michael the Archangel, blessed John the Baptist, the holy Apostles Peter and Paul, all the Saints, and you, brothers, to pray to the Lord our God for me.
S. May almighty God be merciful to thee, and forgiving thy sins, bring thee to everlasting life.
P. Amen.
S. I confess to almighty God, to the blessed Mary ever Virgin, blessed Michael the Archangel, blessed John the Baptist, the holy Apostles Peter and Paul, to all the Saints, and to you, Father, that I have sinned exceedingly in thought, word, and deed, through my fault, through my fault, through my most grievous fault. Therefore I beseech the blessed Mary, ever Virgin, blessed Michael the Archangel, blessed John the Baptist, the holy Apostles Peter and Paul, all the Saints, and you, Father, to pray to the Lord our God for me.
P. May almighty God be merciful to thee, and forgiving thy sins, bring thee to everlasting life.
S. Amen.
P. May the  almighty and merciful Lord grant us pardon, absolution, and remission of our sins.
S. Amen.
V. Deus, tu convérsus vivificábis nos.
R. Et plebs tua lætábitur in te.
V. Osténde nobis, Dómine, misericórdiam tuam.
R. Et salutáre tuum da nobis.
V. Dómine, exáudi oratiónem meam.
R. Et clamor meus ad te véniat.
V. Dóminus vobíscum.
R. Et cum spíritu tuo.
Orémus,
Aufer a nobis, quǽsumus, Dómine, iniquitátes nostras: ut ad Sancta sanctórum puris mereámur méntibus introíre. Per Christum, Dóminum nostrum. Amen.
Orámus te, Dómine, per mérita Sanctórum tuórum, quorum relíquiæ hic sunt, et ómnium Sanctórum: ut indulgére dignéris ómnia peccáta mea. Amen.
5
P. O God, Thou wilt turn again and quicken us.
S. And thy people shall rejoice in Thee.
P. Show us, O Lord, Thy mercy.
S. And grant us Thy salvation.
P. O Lord, hear my prayer.
S. And let my cry come before Thee.
P. The Lord be with you.
S. And with thy spirit.
Let us pray.
Take away from us our iniquities, we beseech Thee, O Lord, that we may be worthy to enter with pure minds into the Holy of Holies, through Christ our Lord. Amen.
We beseech Thee, O Lord, by the merits of Thy Saints, whose relics are here, and of all the Saints, that Thou wouldst vouchsafe to forgive me all my sins. Amen.
Introitus
Isa 48:20
Vocem jucunditátis annuntiáte, et audiátur, allelúja: annuntiáte usque ad extrémum terræ: liberávit Dóminus pópulum suum, allelúja, allelúja.
Ps 65:1-2
Jubiláte Deo, omnis terra, psalmum dícite nómini ejus: date glóriam laudi ejus.
V. Glória Patri, et Fílio, et Spirítui Sancto.
R. Sicut erat in princípio, et nunc, et semper, et in sǽcula sæculórum. Amen.
Vocem jucunditátis annuntiáte, et audiátur, allelúja: annuntiáte usque ad extrémum terræ: liberávit Dóminus pópulum suum, allelúja, allelúja.
6
Introit
Isa 48:20
Declare it with the voice of joy: make this to be heard, allelúja: and speak it out even to the ends of the earth. Say: The Lord hath redeemed his people, allelúja, allelúja
Ps 65:1-2
Shout with joy to God, all the earth, sing ye a psalm to his name; give glory to his praise.
V. Glory be to the Father, and to the Son, and to the Holy Ghost.
R. As it was in the beginning, is now, and ever shall be, world without end. Amen.
Declare it with the voice of joy: make this to be heard, allelúja: and speak it out even to the ends of the earth. Say: The Lord hath redeemed his people, allelúja, allelúja.
Kyrie
S. Kýrie, eléison.
M. Kýrie, eléison.
S. Kýrie, eléison.
M. Christe, eléison.
S. Christe, eléison.
M. Christe, eléison.
S. Kýrie, eléison.
M. Kýrie, eléison.
S. Kýrie, eléison.
7
Kyrie
P. Lord, have mercy.
S. Lord, have mercy.
P. Lord, have mercy.
S. Christ, have mercy.
P. Christ, have mercy.
S. Christ, have mercy.
P. Lord, have mercy.
S. Lord, have mercy.
P. Lord, have mercy.
Gloria
omit.
8
Gloria
omit.
Oratio
V. Dóminus vobíscum.
R. Et cum spíritu tuo.
Orémus.
Deus, a quo bona cuncta procédunt, largíre supplícibus tuis: ut cogitémus, te inspiránte, quæ recta sunt; et, te gubernánte, éadem faciámus.
Per Dóminum nostrum Jesum Christum, Fílium tuum: qui tecum vivit et regnat in unitáte Spíritus Sancti Deus, per ómnia sǽcula sæculórum.
R. Amen.


Orémus.
de S. Maria
Concéde nos fámulos tuos, quǽsumus, Dómine Deus, perpétua mentis et córporis sanitáte gaudére: et, gloriósa beátæ Maríæ semper Vírginis intercessióne, a præsénti liberári tristítia, et ætérna pérfrui lætítia.

Contra persecutores Ecclesiæ
Ecclésiæ tuæ, quǽsumus, Dómine, preces placátus admítte: ut, destrúctis adversitátibus et erróribus univérsis, secúra tibi sérviat libertáte.
Per Dóminum nostrum Jesum Christum, Fílium tuum: qui tecum vivit et regnat in unitáte Spíritus Sancti Deus, per ómnia sǽcula sæculórum.
R. Amen.
9
Collect
V. The Lord be with you.
R. And with thy spirit.
Let us pray.
O God, from Whom all good things do come, grant to us thy humble servants that by thy holy inspiration we may think those things that be good, and by thy merciful guiding may perform the same.
Through Jesus Christ, thy Son our Lord, Who liveth and reigneth with thee, in the unity of the Holy Ghost, God, world without end.
R. Amen.


Let us pray.
of the Blessed Virgin Mary
Grant, we beseech thee, O Lord God, unto all thy servants, that they may remain continually in the enjoyment of soundness both of mind and body, and by the glorious intercession of the Blessed Mary, always a Virgin, may be delivered from present sadness, and enter into the joy of thine eternal gladness.

Contra persecutores Ecclesiæ
Ecclésiæ tuæ, quǽsumus, Dómine, preces placátus admítte: ut, destrúctis adversitátibus et erróribus univérsis, secúra tibi sérviat libertáte.
Through Jesus Christ, thy Son our Lord, Who liveth and reigneth with thee, in the unity of the Holy Ghost, God, world without end.
R. Amen.
Lectio
Léctio Epístolæ beáti Jacóbi Apóstoli
Jas 1:22-27
Caríssimi: Estóte factóres verbi, et non auditóres tantum: falléntes vosmetípsos. Quia si quis audítor est verbi et non factor: hic comparábitur viro consideránti vultum nativitátis suæ in spéculo: considerávit enim se et ábiit, et statim oblítus est, qualis fúerit. Qui autem perspéxerit in legem perfectam libertátis et permánserit in ea, non audítor obliviósus factus, sed factor óperis: hic beátus in facto suo erit. Si quis autem putat se religiósum esse, non refrénans linguam suam, sed sedúcens cor suum, hujus vana est relígio. Relígio munda et immaculáta apud Deum et Patrem hæc est: Visitáre pupíllos et viduas in tribulatióne eórum, et immaculátum se custodíre ab hoc sǽculo.
R. Deo grátias.
10
Lesson
Lesson from the letter of St James the Apostle
Jas 1:22-27
Dearly beloved: But be ye doers of the word, and not hearers only, deceiving your own selves. For if a man be a hearer of the word, and not a doer, he shall be compared to a man beholding his own countenance in a glass. For he beheld himself, and went his way, and presently forgot what manner of man he was. But he that hath looked into the perfect law of liberty, and hath continued therein, not becoming a forgetful hearer, but a doer of the work; this man shall be blessed in his deed. And if any man think himself to be religious, not bridling his tongue, but deceiving his own heart, this man's religion is vain. Religion clean and undefiled before God and the Father, is this: to visit the fatherless and widows in their tribulation: and to keep one's self unspotted from this world.
R. Thanks be to God.
Alleluja
Allelúja, allelúja.
V. Surréxit Christus, et illúxit nobis, quos rédemit sánguine suo. Allelúja.
Joannes 16:28
Exívi a Patre, et veni in mundum: íterum relínquo mundum, et vado ad Patrem. Allelúja.
11
Alleluia
Allelúja, allelúja.
V. Christ is risen and hath shone upon us whom he redeemed with his blood. Alleluia.
John 16:28
I came forth from the Father, and am come into the world: again I leave the world, and I go to the Father. Allelúja.
Evangelium
Munda cor meum ac lábia mea, omnípotens Deus, qui lábia Isaíæ Prophétæ cálculo mundásti igníto: ita me tua grata miseratióne dignáre mundáre, ut sanctum Evangélium tuum digne váleam nuntiáre. Per Christum, Dóminum nostrum. Amen.
Jube, Dómine, benedícere. Dóminus sit in corde meo et in lábiis meis: ut digne et competénter annúntiem Evangélium suum. Amen.
V. Dóminus vobíscum.
R. Et cum spíritu tuo.
Sequéntia +︎ sancti Evangélii secúndum Joánnem
R. Glória tibi, Dómine.
Joann 16:23-30
In illo témpore: Dixit Jesus discípulis suis: Amen, amen, dico vobis: si quid petiéritis Patrem in nómine meo, dabit vobis. Usque modo non petístis quidquam in nómine meo: Pétite, et accipiétis, ut gáudium vestrum sit plenum. Hæc in provérbiis locútus sum vobis. Venit hora, cum jam non in provérbiis loquar vobis, sed palam de Patre annuntiábo vobis. In illo die in nómine meo petétis: et non dico vobis, quia ego rogábo Patrem de vobis: ipse enim Pater amat vos, quia vos me amástis, et credidístis quia ego a Deo exívi. Exívi a Patre et veni in mundum: íterum relínquo mundum et vado ad Patrem. Dicunt ei discípuli ejus: Ecce, nunc palam loquéris et provérbium nullum dicis. Nunc scimus, quia scis ómnia et non opus est tibi, ut quis te intérroget: in hoc crédimus, quia a Deo exísti.
R. Laus tibi, Christe.
S. Per Evangélica dicta, deleántur nostra delícta.
12
Gospel
Cleanse my heart and my lips, O almighty God, who didst cleanse the lips of the prophet Isaias with a burning coal, and vouchsafe, through Thy gracious mercy, so to purify me, that I may worthily announce Thy holy Gospel. Through Christ our Lord. Amen.
Give me Thy blessing, O Lord. The Lord be in my heart and on my lips, that I may worthily and in a becoming manner, proclaim His holy Gospel. Amen.
P. The Lord be with you.
S. And with thy spirit.
Continuation  of the Holy Gospel according to John
R. Glory be to Thee, O Lord.
John 16:23-30
In that time, Jesus said to His disciples: Amen, amen I say to you: if you ask the Father any thing in my name, he will give it you. Hitherto you have not asked any thing in my name. Ask, and you shall receive; that your joy may be full. These things I have spoken to you in proverbs. The hour cometh, when I will no more speak to you in proverbs, but will shew you plainly of the Father. In that day you shall ask in my name; and I say not to you, that I will ask the Father for you: For the Father himself loveth you, because you have loved me, and have believed that I came out from God. I came forth from the Father, and am come into the world: again I leave the world, and I go to the Father. His disciples say to him: Behold, now thou speakest plainly, and speakest no proverb. Now we know that thou knowest all things, and thou needest not that any man should ask thee. By this we believe that thou camest forth from God.
R. Praise be to Thee, O Christ.
S. By the words of the Gospel may our sins be blotted out.
Credo
omit.
13
Creed
omit.
Offertorium
V. Dóminus vobíscum.
R. Et cum spíritu tuo.
Orémus.
Ps 65:8-9; 65:20
Benedícite, gentes, Dóminum, Deum nostrum, et obaudíte vocem laudis ejus: qui pósuit ánimam meam ad vitam, et non dedit commovéri pedes meos: benedíctus Dóminus, qui non amóvit deprecatiónem meam et misericórdiam suam a me, allelúja.
14
Offertory
P. The Lord be with you.
S. And with thy spirit.
Let us pray.
Ps 65:8-9; 65:20
O bless our God, ye Gentiles: and make the voice of his praise to be heard. Who hath set my soul to live: and hath not suffered my feet to be moved: Blessed be God, who hath not turned away my prayer, nor his mercy from me, allelúja.
Súscipe, sancte Pater, omnípotens ætérne Deus, hanc immaculátam hóstiam, quam ego indígnus fámulus tuus óffero tibi Deo meo vivo et vero, pro innumerabílibus peccátis, et offensiónibus, et neglegéntiis meis, et pro ómnibus circumstántibus, sed et pro ómnibus fidélibus christiánis vivis atque defúnctis: ut mihi, et illis profíciat ad salútem in vitam ætérnam. Amen.
Accept, O holy Father, almighty and eternal God, this unspotted host, which I, Thy unworthy servant, offer unto Thee, my living and true God, for my innumerable sins, offenses, and negligences, and for all here present: as also for all faithful Christians, both living and dead, that it may avail both me and them for salvation unto life everlasting. Amen.
Deus,  qui humánæ substántiæ dignitátem mirabíliter condidísti, et mirabílius reformásti: da nobis per hujus aquæ et vini mystérium, ejus divinitátis esse consórtes, qui humanitátis nostræ fíeri dignátus est párticeps, Jesus Christus, Fílius tuus, Dóminus noster: Qui tecum vivit et regnat in unitáte Spíritus Sancti Deus: per ómnia sǽcula sæculórum. Amen.
O God, who, in creating human nature, didst wonderfully dignify it, and still more wonderfully restore it, grant that, by the Mystery of this water and wine, we may be made partakers of His divine nature, who vouchsafed to be made partaker of our human nature, even Jesus Christ our Lord, Thy Son, who with Thee, liveth and reigneth in the unity of the Holy Ghost, God: world without end. Amen.
Offérimus tibi, Dómine, cálicem salutáris, tuam deprecántes cleméntiam: ut in conspéctu divínæ majestátis tuæ, pro nostra et totíus mundi salúte, cum odóre suavitátis ascéndat. Amen.
In spíritu humilitátis et in ánimo contríto suscipiámur a te, Dómine: et sic fiat sacrifícium nostrum in conspéctu tuo hódie, ut pláceat tibi, Dómine Deus.
Veni, sanctificátor omnípotens ætérne Deus: et béne  dic hoc sacrifícium, tuo sancto nómini præparátum.
17
We offer unto Thee, O Lord, the chalice of salvation, beseeching Thy clemency, that it may ascend before Thy divine Majesty, as a sweet savor, for our salvation, and for that of the whole world. Amen.
Accept us, O Lord, in the spirit of humility and contrition of heart, and grant that the sacrifice which we offer this day in Thy sight may be pleasing to Thee, O Lord God.
Come, O almighty and eternal God, the Sanctifier, and bless  this Sacrifice, prepared for the glory of Thy holy Name.
Lavábo inter innocéntes manus meas: et circúmdabo altáre tuum, Dómine: Ut áudiam vocem laudis, et enárrem univérsa mirabília tua. Dómine, diléxi decórem domus tuæ et locum habitatiónis glóriæ tuæ. Ne perdas cum ímpiis, Deus, ánimam meam, et cum viris sánguinum vitam meam: In quorum mánibus iniquitátes sunt: déxtera eórum repléta est munéribus. Ego autem in innocéntia mea ingréssus sum: rédime me et miserére mei. Pes meus stetit in dirécto: in ecclésiis benedícam te, Dómine.
V. Glória Patri, et Fílio, et Spirítui Sancto.
R. Sicut erat in princípio, et nunc, et semper, et in sǽcula sæculórum. Amen.
18
I will wash my hands among the innocent: and I will compass Thine altar, O Lord That I may hear the voice of praise: and tell of all Thy wonderous works. I have loved, O Lord, the beauty of Thy house and the place where Thy glory dwelleth. Take not away my soul, O God, with the wicked: nor my life with blood-thirsty men. In whose hands are iniquities, their right hand is filled with gifts. But I have walked in my innocence: redeem me, and have mercy on me. My foot hath stood in the direct way, in the churches I will bless Thee, O Lord.
V. Glory be to the Father, and to the Son, and to the Holy Ghost.
R. As it was in the beginning, is now, and ever shall be, world without end. Amen.
Súscipe, sancta Trínitas, hanc oblatiónem, quam tibi offérimus ob memóriam passiónis, resurrectiónis, et ascensiónis Jesu Christi, Dómini nostri: et in honórem beátæ Maríæ semper Vírginis, et beáti Joannis Baptistæ, et sanctórum Apostolórum Petri et Pauli, et istórum et ómnium Sanctórum: ut illis profíciat ad honórem, nobis autem ad salútem: et illi pro nobis intercédere dignéntur in cælis, quorum memóriam ágimus in terris. Per eúndem Christum, Dóminum nostrum. Amen.
Receive, O holy Trinity, this oblation which we make to Thee, in memory of the Passion, Resurrection and Ascension of our Lord Jesus Christ, and in honor of Blessed Mary, ever Virgin, blessed John the Baptist, the holy Apostles Peter and Paul, and of all the Saints, that it may avail unto their honor and our salvation, and may they vouchsafe to intercede for us in heaven, whose memory we celebrate on earth. Through the same Christ our Lord. Amen.
S. Oráte, fratres: ut meum ac vestrum sacrifícium acceptábile fiat apud Deum Patrem omnipoténtem.
M. Suscípiat Dóminus sacrifícium de mánibus tuis ad laudem et glóriam nominis sui, ad utilitátem quoque nostram, totiúsque Ecclésiæ suæ sanctæ.
S. Amen.

Secreta
Súscipe, Dómine, fidélium preces cum oblatiónibus hostiárum: ut, per hæc piæ devotiónis offícia, ad cœléstem glóriam transeámus.
Per Dóminum nostrum Jesum Christum, Fílium tuum: qui tecum vivit et regnat in unitáte Spíritus Sancti Deus, per ómnia sǽcula sæculórum.
R. Amen.

de S. Maria
Tua, Dómine, propitiatióne, et beátæ Maríæ semper Vírginis intercessióne, ad perpétuam atque præséntem hæc oblátio nobis profíciat prosperitátem et pacem.

Contra persecutores Ecclesiæ
Prótege nos, Dómine, tuis mystériis serviéntes: ut, divínis rebus inhæréntes, et córpore tibi famulémur et mente.
Per Dóminum nostrum Jesum Christum, Fílium tuum: qui tecum vivit et regnat in unitáte Spíritus Sancti Deus, per ómnia sǽcula sæculórum.
R. Amen.
20
P. Brethren, pray that my Sacrifice and yours may be acceptable to God the Father almighty.
S. May the Lord receive the Sacrifice from thy hands, to the praise and glory of His Name, to our benefit and that of all His holy Church.
P. Amen.

Secret
Receive, O Lord, the prayers of thy faithful with offerings of victims, that by these services of pious devotion we may pass to heavenly glory.
Through Jesus Christ, thy Son our Lord, Who liveth and reigneth with thee, in the unity of the Holy Ghost, God, world without end.
R. Amen.

of the Blessed Virgin Mary
Through thy mercy, O Lord, and the intercession of blessed Mary ever Virgin, may this oblation obtain for us prosperity and peace both now and forever.

Contra persecutores Ecclesiæ
Prótege nos, Dómine, tuis mystériis serviéntes: ut, divínis rebus inhæréntes, et córpore tibi famulémur et mente.
Through Jesus Christ, thy Son our Lord, Who liveth and reigneth with thee, in the unity of the Holy Ghost, God, world without end.
R. Amen.
Præfatio
V. Dóminus vobíscum.
R. Et cum spíritu tuo.
V. Sursum corda.
R. Habémus ad Dóminum.
V. Grátias agámus Dómino, Deo nostro.
R. Dignum et justum est.

Paschalis
Vere dignum et justum est, æquum et salutáre: Te quidem, Dómine, omni témpore, sed in hoc potíssimum gloriósius prædicáre, cum Pascha nostrum immolátus est Christus. Ipse enim verus est Agnus, qui ábstulit peccáta mundi. Qui mortem nostram moriéndo destrúxit et vitam resurgéndo reparávit. Et ídeo cum Angelis et Archángelis, cum Thronis et Dominatiónibus cumque omni milítia cœléstis exércitus hymnum glóriæ tuæ cánimus, sine fine dicéntes:

Sanctus, Sanctus, Sanctus Dóminus, Deus Sábaoth. Pleni sunt cæli et terra glória tua. Hosánna in excélsis. Benedíctus, qui venit in nómine Dómini. Hosánna in excélsis.
21
Preface
P. The Lord be with you.
S. And with thy spirit.
P. Lift up your hearts.
S. We have lifted them up to the Lord.
P. Let us give thanks to the Lord our God.
S. It is meet and just.

Easter
It is truly meet and just, right and for our salvation, at all times to praise Thee, O Lord, but more gloriously especially in this season when Christ our Pasch was sacrificed. For He is the Lamb Who hath taken away the sins of the world: Who by dying hath destroyed our death: and by rising again hath restored us to life. And therefore with Angels and Archangels, with Thrones and Dominations, and with all the hosts of the heavenly army, we sing the hymn of Thy glory, evermore saying:

Holy, Holy, Holy, Lord God of Sabaoth! Heaven and earth are full of Thy glory! Hosanna in the highest! Blessed is He that cometh in the Name of the Lord! Hosanna in the highest!
Canon
Te ígitur, clementíssime Pater, per Jesum Christum, Fílium tuum, Dóminum nostrum, súpplices rogámus, ac pétimus, uti accépta hábeas et benedícas, hæc  dona, hæc  múnera, hæc  sancta sacrifícia illibáta, in primis, quæ tibi offérimus pro Ecclésia tua sancta cathólica: quam pacificáre, custodíre, adunáre et régere dignéris toto orbe terrárum: una cum fámulo tuo Papa nostro N. et Antístite nostro N. et ómnibus orthodóxis, atque cathólicæ et apostólicæ fídei cultóribus.
22
Canon
We therefore, humbly pray and beseech Thee, most merciful Father, through Jesus Christ; Thy Son, our Lord, that Thou wouldst vouchsafe to accept and bless these  gifts, these  presents, these  holy unspotted Sacrifices, which in the first place we offer Thee for Thy holy Catholic Church to which vouchsafe to grant peace, as also to preserve, unite, and govern it throughout the world, together with Thy servant our Pope, and our Bishop, and all orthodox believers and professors of the Catholic and Apostolic Faith.
Meménto, Dómine, famulórum famularúmque tuarum N. et N. et ómnium circumstántium, quorum tibi fides cógnita est et nota devótio, pro quibus tibi offérimus: vel qui tibi ófferunt hoc sacrifícium laudis, pro se suísque ómnibus: pro redemptióne animárum suárum, pro spe salútis et incolumitátis suæ: tibíque reddunt vota sua ætérno Deo, vivo et vero.
Be mindful, O Lord, of Thy servants and handmaidens, N. and N. and of all here present, whose faith and devotion are known unto Thee, for whom we offer, or who offer up to Thee, this sacrifice of praise for themselves, their families and friends, for the redemption of their souls, for the health and salvation they hope for; and who now pay their vows to Thee, the everlasting, living and true God.
Communicántes, et memóriam venerántes, in primis gloriósæ semper Vírginis Maríæ, Genetrícis Dei et Dómini nostri Jesu Christi: sed
et beatórum Apostolórum ac Mártyrum tuórum, Petri et Pauli, Andréæ, Jacóbi, Joánnis, Thomæ, Jacóbi, Philíppi, Bartholomǽi, Matthǽi, Simónis et Thaddǽi: Lini, Cleti, Cleméntis, Xysti, Cornélii, Cypriáni, Lauréntii, Chrysógoni, Joánnis et Pauli, Cosmæ et Damiáni: et ómnium Sanctórum tuórum; quorum méritis precibúsque concédas, ut in ómnibus protectiónis tuæ muniámur auxílio. Per eúndem Christum, Dóminum nostrum. Amen.
24
We pray in union with and honor the memory, especially of the glorious ever Virgin Mary, mother of our God and Lord Jesus Christ:
and of the blessed Apostles and Martyrs Peter and Paul, Andrew, James, John, Thomas, James, Philip, Bartholomew, Matthew, Simon, and Thaddeus; Linus, Cletus, Clement, Xystus, Cornelius, Cyprian, Lawrence, Chrysogonus, John and Paul, Cosmas and Damian, and of all Thy Saints, through whose merits and prayers, grant that we may in all things be defended by the help of Thy protection. Through the same Christ our Lord. Amen.

Hanc ígitur oblatiónem servitútis nostræ, sed et cunctæ famíliæ tuæ,
quǽsumus, Dómine, ut placátus accípias: diésque nostros in tua pace dispónas, atque ab ætérna damnatióne nos éripi, et in electórum tuórum júbeas grege numerári. Per Christum, Dóminum nostrum. Amen.
25

We therefore beseech Thee, O Lord, graciously to accept this oblation of our service, as also of Thy whole family;
and to dispose our days in Thy peace, preserve us from eternal damnation, and rank us in the number of Thine Elect. Through the same Christ our Lord. Amen.
Quam oblatiónem tu, Deus, in ómnibus, quǽsumus, bene  díctam, adscríp  tam, ra  tam, rationábilem, acceptabilémque fácere dignéris: ut nobis Cor  pus, et San  guis fiat dilectíssimi Fílii tui, Dómini nostri Jesu Christi.
Which oblation do Thou, O God, vouchsafe in all respects, to bless,  approve,  ratify,  make worthy and acceptable; that it may be made for us the Body  and Blood  of Thy most beloved Son Jesus Christ our Lord.
Qui prídie quam paterétur, accépit panem in sanctas ac venerábiles manus suas, elevátis óculis in cælum ad te Deum, Patrem suum omnipoténtem, tibi grátias agens, bene  díxit, fregit, dedítque discípulis suis, dicens: Accípite, et manducáte ex hoc omnes.
Who, the day before He suffered, took bread into His holy and venerable hands, and with His eyes lifted up towards heaven unto Thee, God, His almighty Father, giving thanks to Thee, He blessed  it, broke it and gave it to His disciples saying: Take and eat ye all of this,

HOC EST ENIM CORPUS MEUM.


28

FOR THIS IS MY BODY.



Símili modo postquam cenátum est, accípiens et hunc præclárum Cálicem in sanctas ac venerábiles manus suas: item tibi grátias agens, bene  díxit, dedítque discípulis suis, dicens: Accípite, et bíbite ex eo omnes.
29

In like manner, after He had supped, taking also this excellent chalice into His holy and venerable hands He blessed  , and gave it to His disciples, saying: Take and drink ye all of this,

HIC EST ENIM CALIX SANGUINIS MEI, NOVI ET ÆTERNI TESTAMENTI: MYSTERIUM FIDEI: QUI PRO VOBIS ET PRO MULTIS EFFUNDETUR IN REMISSIONEM PECCATORUM.


Hæc quotiescúmque fecéritis, in mei memóriam faciétis.
30

FOR THIS IS THE CHALICE OF MY BLOOD OF THE NEW AND ETERNAL TESTAMENT, THE MYSTERY OF FAITH; WHICH SHALL BE SHED FOR YOU AND FOR MANY UNTO THE REMISSION OF SINS.


As often as ye do these things, ye shall do them in remembrance of Me.

Unde et mémores, Dómine, nos servi tui, sed et plebs tua sancta, ejúsdem Christi Fílii tui, Dómini nostri, tam beátæ passiónis, nec non et ab ínferis resurrectiónis, sed et in cælos gloriósæ ascensiónis: offérimus præcláræ majestáti tuæ de tuis donis ac datis, hóstiam  puram, hóstiam  sanctam, hóstiam  immaculátam, Panem  sanctum vitæ ætérnæ, et Cálicem  salútis perpétuæ.
31

Wherefore, O Lord, we Thy servants, as also Thy holy people, calling to mind the blessed Passion of the same Christ, Thy Son, our Lord, and also His Resurrection from the dead and His glorious Ascension into heaven: do offer unto Thy most excellent Majesty of Thine own gifts, bestowed upon us, a pure  Host, a holy  Host, an unspotted  Host, the holy  Bread of eternal life, and the Chalice  of everlasting salvation.

Supra quæ propítio ac seréno vultu respícere dignéris: et accépta habére, sicúti accépta habére dignátus es múnera púeri tui justi Abel, et sacrifícium Patriárchæ nostri Abrahæ: et quod tibi óbtulit summus sacérdos tuus Melchísedech, sanctum sacrifícium, immaculátam hóstiam.
32

Upon which vouchsafe to look with a propitious and serene countenance, and to accept them, as Thou wert graciously pleased to accept the gifts of Thy just servant Abel, and the sacrifice of our patriarch Abraham, and that which Thy high priest Melchisedech offered to Thee, a holy Sacrifice, and unspotted Victim.
Súpplices te rogámus, omnípotens Deus: jube hæc perférri per manus sancti Angeli tui in sublíme altáre tuum, in conspéctu divínæ majestátis tuæ: ut, quotquot ex hac altáris participatióne sacrosánctum Fílii tui Cor  pus, et Sán  guinem sumpsérimus, omni benedictióne cælésti et grátia repleámur. Per eúndem Christum, Dóminum nostrum. Amen.
We most humbly beseech Thee, almighty God, command these offerings to be borne by the hands of Thy holy Angels to Thine altar on high, in the sight of Thy divine majesty, that as many as shall partake of the most holy Body  and Blood  of Thy Son at this altar, may be filled with every heavenly grace and blessing. Through the same Christ our Lord. Amen.
Meménto étiam, Dómine, famulórum famularúmque tuárum N. et N., qui nos præcessérunt cum signo fídei, et dórmiunt in somno pacis. Ipsis, Dómine, et ómnibus in Christo quiescéntibus locum refrigérii, lucis, et pacis, ut indúlgeas, deprecámur. Per eúndem Christum, Dóminum nostrum. Amen.
Remember also, O Lord, Thy servants and handmaids N. and N., who are gone before us with the sign of faith, and rest in the sleep of peace. To these, O Lord, and to all that rest in Christ, grant, we beseech Thee, a place of refreshment, light, and peace; Through the same Christ our Lord. Amen.
Nobis quoque peccatóribus fámulis tuis, de multitúdine miseratiónum tuárum sperántibus, partem áliquam et societátem donáre dignéris, cum tuis sanctis Apóstolis et Martýribus: cum Joánne, Stéphano, Matthía, Bárnaba, Ignátio, Alexándro, Marcellíno, Petro, Felicitáte, Perpétua, Agatha, Lúcia, Agnéte, Cæcília, Anastásia, et ómnibus Sanctis tuis: intra quorum nos consórtium, non æstimátor mériti, sed véniæ, quǽsumus, largítor admítte. Per Christum, Dóminum nostrum.
To us also, Thy sinful servants, confiding in the multitude of Thy mercies, vouchsafe to grant some part and fellowship with Thy holy Apostles and Martyrs, with John, Stephen, Matthias, Barnabas, Ignatius, Alexander, Marcellinus, Peter, Felicitas, Perpetua, Agatha, Lucy, Agnes, Cecilia, Anastasia, and with all Thy Saints, into whose company we beseech Thee to admit us, not weighing our merits, but pardoning our offenses. Through Christ our Lord.
Per quem hæc ómnia, Dómine, semper bona creas, sanctí  ficas, viví  ficas, bene  dícis et præstas nobis.
Per ip  sum, et cum ip  so, et in ip  so, est tibi Deo Patri  omnipoténti, in unitáte Spíritus  Sancti,
omnis honor, et glória.
Per ómnia sǽcula sæculórum.
R. Amen.
36
By Whom, O Lord, Thou dost ever create, sanctify,  quicken,  bless,  and give unto us all these good things.
By Him,  and with Him,  and in Him  is to Thee, God the Father  almighty, in the unity of the Holy  Ghost,
all honor and glory.
P. World without end.
S. Amen.
Preparatio Communionis

Orémus: Præcéptis salutáribus móniti, et divína institutióne formáti audémus dícere:

Pater noster, qui es in cælis. Sanctificétur nomen tuum. Advéniat regnum tuum. Fiat volúntas tua, sicut in cælo et in terra. Panem nostrum quotidiánum da nobis hódie. Et dimítte nobis débita nostra, sicut et nos dimíttimus debitóribus nostris. Et ne nos indúcas in tentatiónem:
R. Sed líbera nos a malo.
S. Amen.
37
Preparation for Communion
Let us pray. Instructed by Thy saving precepts, and following Thy divine institution, we are bold to say:
Our Father, who art in heaven, hallowed be Thy Name; Thy kingdom come; Thy will be done on earth as it is in heaven. Give us this day our daily bread. And forgive us our trespasses, as we forgive those who trespass against us. And lead us not into temptation.
M. But deliver us from evil.
P. Amen.
Líbera nos, quǽsumus, Dómine, ab ómnibus malis, prætéritis, præséntibus et futúris: et intercedénte beáta et gloriósa semper Vírgine Dei Genetríce María, cum beátis Apóstolis tuis Petro et Paulo, atque Andréa, et ómnibus Sanctis, da propítius pacem in diébus nostris: ut, ope misericórdiæ tuæ adjúti, et a peccáto simus semper líberi et ab omni perturbatióne secúri.
Per eúndem Dóminum nostrum Jesum Christum, Fílium tuum.
Qui tecum vivit et regnat in unitáte Spíritus Sancti Deus.
V. Per ómnia sǽcula sæculórum.
R. Amen.
Pax Dómini sit semper vobíscum.
R. Et cum spíritu tuo.
38
Deliver us, we beseech Thee, O Lord, from all evils, past, present, and to come; and by the intercession of the Blessed and glorious ever Virgin Mary, Mother of God, and of the holy Apostles, Peter and Paul, and of Andrew, and of all the Saints, mercifully grant peace in our days, that through the assistance of Thy mercy we may be always free from sin, and secure from all disturbance.
Through the same Jesus Christ, Thy Son, our Lord.
Who with Thee in the unity of the Holy Ghost liveth and reigneth God,
P. World without end.
S. Amen.
P. The peace  of the Lord be  always with  you.
S. And with thy spirit.
Hæc commíxtio, et consecrátio Córporis et Sánguinis Dómini nostri Jesu Christi, fiat accipiéntibus nobis in vitam ætérnam. Amen.
May this mixture and consecration of the Body and Blood of our Lord Jesus Christ be to us who receive it effectual unto eternal life. Amen.
Agnus Dei, qui tollis peccáta mundi: miserére nobis.
Agnus Dei, qui tollis peccáta mundi: miserére nobis.
Agnus Dei, qui tollis peccáta mundi: dona nobis pacem.
40
Lamb of God, who takest away the sins of the world, have mercy on us.
Lamb of God, who takest away the sins of the world, have mercy on us.
Lamb of God, who takest away the sins of the world, grant us peace.
Dómine Jesu Christe, qui dixísti Apóstolis tuis: Pacem relínquo vobis, pacem meam do vobis: ne respícias peccáta mea, sed fidem Ecclésiæ tuæ; eámque secúndum voluntátem tuam pacificáre et coadunáre dignéris: Qui vivis et regnas Deus per ómnia sǽcula sæculórum. Amen.
O Lord Jesus Christ, who saidst to Thine Apostles: Peace I leave you, My peace I give you: regard not my sins, but the faith of Thy Church; and vouchsafe to grant her that peace and unity which is agreeable to Thy will: Who livest and reignest God, world without end. Amen.
Dómine Jesu Christe, Fili Dei vivi, qui ex voluntáte Patris, cooperánte Spíritu Sancto, per mortem tuam mundum vivificásti: líbera me per hoc sacrosánctum Corpus et Sánguinem tuum ab ómnibus iniquitátibus meis, et univérsis malis: et fac me tuis semper inhærére mandátis, et a te numquam separári permíttas: Qui cum eódem Deo Patre et Spíritu Sancto vivis et regnas Deus in sǽcula sæculórum. Amen.
O Lord Jesus Christ, Son of the living God, who, according to the will of Thy Father, with the cooperation of the Holy Ghost, hast by Thy death given life to the world; deliver me by this Thy most sacred Body and Blood, from all my iniquities and from all evils; and make me always cleave to Thy commandments, and suffer me never to be separated from Thee, Who livest and reignest, with the same God the Father and the Holy Ghost, God, world without end. Amen.
Percéptio Córporis tui, Dómine Jesu Christe, quod ego indígnus súmere præsúmo, non mihi provéniat in judícium et condemnatiónem: sed pro tua pietáte prosit mihi ad tutaméntum mentis et córporis, et ad medélam percipiéndam: Qui vivis et regnas cum Deo Patre in unitáte Spíritus Sancti Deus, per ómnia sǽcula sæculórum. Amen.
Let not the partaking of Thy Body, O Lord, Jesus Christ, which I, though unworthy, presume to receive, turn to my judgment and condemnation; but let it, through Thy mercy, become a safeguard and remedy, both for soul and body; Who with God the Father, in the unity of the Holy Ghost, livest and reignest God, world without end. Amen.
Panem cæléstem accípiam, et nomen Dómini invocábo.
V. Dómine, non sum dignus, ut intres sub tectum meum: sed tantum dic verbo, et sanábitur ánima mea.
V. Dómine, non sum dignus, ut intres sub tectum meum: sed tantum dic verbo, et sanábitur ánima mea.
V. Dómine, non sum dignus, ut intres sub tectum meum: sed tantum dic verbo, et sanábitur ánima mea.
44
I will take the Bread of heaven, and will call upon the Name of the Lord.
V. Lord, I am not worthy that Thou shouldst enter under my roof; say but the word, and my soul shall be healed.
V. Lord, I am not worthy that Thou shouldst enter under my roof; say but the word, and my soul shall be healed.
V. Lord, I am not worthy that Thou shouldst enter under my roof; say but the word, and my soul shall be healed.
Corpus Dómini nostri Jesu Christi custódiat ánimam meam in vitam ætérnam. Amen.
The Body of our Lord Jesus Christ preserve my soul unto life everlasting. Amen.
Quid retríbuam Dómino pro ómnibus, quæ retríbuit mihi? Cálicem salutáris accípiam, et nomen Dómini invocábo. Laudans invocábo Dóminum, et ab inimícis meis salvus ero.
Sanguis Dómini nostri Jesu Christi custódiat ánimam meam in vitam ætérnam. Amen.
46
What return shall I make to the Lord for all He has given to me? I will take the chalice of salvation, and call upon the Name of the Lord. Praising I will call upon the Lord, and I shall be saved from my enemies.
The Blood of our Lord Jesus Christ preserve my soul unto life everlasting. Amen.
Communio

47
Communio

Quod ore súmpsimus, Dómine, pura mente capiámus: et de múnere temporáli fiat nobis remédium sempitérnum.
Corpus tuum, Dómine, quod sumpsi, et Sanguis, quem potávi, adhǽreat viscéribus meis: et præsta; ut in me non remáneat scélerum mácula, quem pura et sancta refecérunt sacraménta: Qui vivis et regnas in sǽcula sæculórum. Amen.
48
Grant, O Lord, that what we have taken with our mouth, we may receive with a pure mind; and from a temporal gift may it become to us an eternal remedy.
May Thy Body, O Lord, which I have received, and Thy Blood which I have drunk, cleave to my bowels; and grant that no stain of sin may remain in me, who have been fed with this pure and holy Sacrament; Who livest and reignest for ever and ever. Amen.
Communio
Ps 95:2
Cantáte Dómino, allelúja: cantáte Dómino et benedícite nomen ejus: bene nuntiáte de die in diem salutáre ejus, allelúja, allelúja.
49
Communion
Ps 95:2
Sing ye to the Lord and bless his name: shew forth his salvation from day to day, allelúja, allelúja.
Postcommunio
S. Dóminus vobíscum.
R. Et cum spíritu tuo.
Orémus.
Tríbue nobis, Dómine, cæléstis mensæ virtúte satiátis: et desideráre, quæ recta sunt, et desideráta percípere.
Per Dóminum nostrum Jesum Christum, Fílium tuum: qui tecum vivit et regnat in unitáte Spíritus Sancti Deus, per ómnia sǽcula sæculórum.
R. Amen.


Orémus.
de S. Maria
Sumptis, Dómine, salútis nostræ subsídiis: da, quǽsumus, beátæ Maríæ semper Vírginis patrocíniis nos ubíque prótegi; in cujus veneratióne hæc tuæ obtúlimus majestáti.

Contra persecutores Ecclesiæ
Quǽsumus, Dómine, Deus noster: ut, quos divína tríbuis participatióne gaudére, humánis non sinas subjacére perículis.
Per Dóminum nostrum Jesum Christum, Fílium tuum: qui tecum vivit et regnat in unitáte Spíritus Sancti Deus, per ómnia sǽcula sæculórum.
R. Amen.
50
Post Communion
P. The Lord be with you.
S. And with thy spirit.
Let us pray.
Grant us, O Lord, fed with the virtue of a heavenly table, to desire what is right, and to gain what we desire.
Through Jesus Christ, thy Son our Lord, Who liveth and reigneth with thee, in the unity of the Holy Ghost, God, world without end.
R. Amen.


Let us pray.
of the Blessed Virgin Mary
Grant, O Lord, that we, who had partaken of the aids of salvation, may be everywhere protected by the patronage of blessed Mary ever Virgin, in whose honor we have offered these gifts of thy majesty.

Contra persecutores Ecclesiæ
Quǽsumus, Dómine, Deus noster: ut, quos divína tríbuis participatióne gaudére, humánis non sinas subjacére perículis.
Through Jesus Christ, thy Son our Lord, Who liveth and reigneth with thee, in the unity of the Holy Ghost, God, world without end.
R. Amen.
Conclusio
S. Dóminus vobíscum.
M. Et cum spíritu tuo.
51
Conclusion
P. The Lord be with you.
S. And with thy spirit.
V. Benedicámus Dómino.
R. Deo grátias.
52
V. Let us bless the Lord.
R. Thanks be to God.
Pláceat tibi, sancta Trínitas, obséquium servitútis meæ: et præsta; ut sacrifícium, quod óculis tuæ majestátis indígnus óbtuli, tibi sit acceptábile, mihíque et ómnibus, pro quibus illud óbtuli, sit, te miseránte, propitiábile. Per Christum, Dóminum nostrum. Amen.
May the performance of my homage be pleasing to Thee, O holy Trinity: and grant that the Sacrifice which I, though unworthy, have offered up in the sight of Thy Majesty, may be acceptable to Thee, and through Thy mercy, be a propitiation for me, and for all those for whom I have offered it. Through Christ our Lord. Amen.
Benedícat vos omnípotens Deus,
Pater, et Fílius,  et Spíritus Sanctus.
R. Amen.
54
P. May almighty God the Father, Son,  and Holy Ghost,
bless you.
S. Amen.
V. Dóminus vobíscum.
R. Et cum spíritu tuo.
Inítium +︎ sancti Evangélii secúndum Joánnem
R. Glória tibi, Dómine.
Joann. 1, 1-14.
Junctis manibus prosequitur:
In princípio erat Verbum, et Verbum erat apud Deum, et Deus erat Verbum. Hoc erat in princípio apud Deum. Omnia per ipsum facta sunt: et sine ipso factum est nihil, quod factum est: in ipso vita erat, et vita erat lux hóminum: et lux in ténebris lucet, et ténebræ eam non comprehendérunt.
Fuit homo missus a Deo, cui nomen erat Joánnes. Hic venit in testimónium, ut testimónium perhibéret de lúmine, ut omnes créderent per illum. Non erat ille lux, sed ut testimónium perhibéret de lúmine.
Erat lux vera, quæ illúminat omnem hóminem veniéntem in hunc mundum. In mundo erat, et mundus per ipsum factus est, et mundus eum non cognóvit. In própria venit, et sui eum non recepérunt. Quotquot autem recepérunt eum, dedit eis potestátem fílios Dei fíeri, his, qui credunt in nómine ejus: qui non ex sanguínibus, neque ex voluntáte carnis, neque ex voluntáte viri, sed ex Deo nati sunt. Genuflectit dicens: Et Verbum caro factum est, Et surgens prosequitur: et habitávit in nobis: et vídimus glóriam ejus, glóriam quasi Unigéniti a Patre, plenum grátiæ et veritátis.
R. Deo grátias.
55
P. The Lord be with you.
S. And with thy spirit.
The beginning +︎ of the holy Gospel according to John
R. Glory be to Thee, O Lord.
John 1, 1-14

In the beginning was the Word, and the Word was with God, and the Word was God. The same was in the beginning with God. All things were made by Him, and without Him was made nothing that was made: in Him was life, and the life was the Light of men; and the Light shineth in darkness, and the darkness did not comprehend it.
There was a man sent from God, whose name was John. This man came for a witness, to testify concerning the Light, that all might believe through Him. He was not the Light, but he was to testify concerning the Light.
That was the true Light, which enlighteneth every man that cometh into this world. He was in the world, and the world was made by Him, and the world knew Him not. He came unto His own, and His own received Him not. But as many as received Him to them He gave power to become sons of God, to them that believe in His Name, who are born not of blood, nor of the will of the flesh, nor of the will of man, but of God. Here all kneel. And the Word was made flesh, and dwelt among us: and we saw His glory, the glory as of the Only begotten of the Father, full of grace and truth.
R. Thanks be to God.