A FAVOR DEL MANIFIESTO EN
PRO DEL CASTELLANO EN ESPAÑA CON ALGUNA RESERVA.
Antonio Parra Galindo
El profesor don Fernando
Savater es una de las inteligencias vivas con que aún contamos en el
país. La sensatez y la congruencia de un vasco universal. Un buen
filósofo y un gran novelista. Con la vellera – bueno no es viejo
Fernando- se le está `poniendo cara de pera como a Gil Robles pero
no pasa nada otros crecemos a lo ancho y no somos el talle de espiga
de nuestra mocedad. Desciende el golpe ocular, se desalmenan los
dientes, echamos barriga no tenemos el poderío y la verga de cuando
la metíamos en cualquier agujero (cosa muy natural y que hay que
aceptar sin remedio, que pidan árnica y viagra una de calamares,
marchando, todavía con alguna manipulación…) pero se nos ha
afilado la imaginación y nuestra percepción posee una mayor acuidad
que cuando jóvenes. Por eso el manifiesto a favor del castellano es
uno de los acontecimientos más congruentes que hemos presenciado en
los últimos meses.
España es diferente y
sucede que en ciertas partes de este maravillosa nación la nación
de naciones la más vieja del continente europea a los niños de las
escuelas se les nigue la educación en la lengua común que es la
nuestra la de Quevedo y Cervantes. Adonde vamos a ir a parar.
La derecha echa culpa de
esta desgracia o mejor dicho sinrazón desalmada a ZP pero lo cierto
es que esta merma es el resultado de un desfalco a nuestros intereses
nacionales un borrón del escriba poco perspicuo de los que
escribieron la constitución. Y esa ley ha de ser enmendada velis
nolis. Lo de las ikastolas y las señeras coloradas ha empezado a
rendir su fruto. Café para todos. El objetivo era desespañolizar
España por exigencias del guión que escribía don Enrique Kissinger
el del abrazo de la muerte. Bueno nuestro bello idioma parece que
ahora se enfrente a otro besos y a otro abrazo de la muerte y
suspiros en inglés. Nos vendieron la burra mal capada pero yo bien
que lo dije.
Politizar el asunto no
viene al caso. Cela me dijo en una entrevista una vez que las
lenguas no se imponen mediante decreto del Boletín Oficial del
Estado. Y aquí se pretende legislar sobre algo tan humano espontáneo
y personal como es la jerga que tiene utilizar el personal; eso
ocurre sólo entre los totalitarios y fascistas y a juzgar por lo que
dicen hay bastantes pedisecuos de don Adolfo Hitler en Cataluña y en
Vascongadas. Ya decía yo que el botijero Pujol me recordaba un poco
a un Goebbels con tortículis con el cuello de medio lado y el
Arzallus esa mala bestia aprendió oratoria y jesuitismo en la
Alemania del Reich.
Si están vivas seguirán
vivitas y coleando. El error el craso error de aquellos padres de la
patria de cuyo nombre no me acuerdo o no quiero acordarme (Cisneros,
Peces Barba y otros ínclitos tribunos de la plebe, impresentables)
es considerar que el castellano era una herencia del franquismo.
Tiene la cosa tres pares de perendengues. Mira que llamarnos
fascistas a los 400 millones que nos expresamos en la maravillosa
locución de Lope, de tirso o de Cervantes o estaban bobos aquellos
patres consripti o dormidos en la higuera.
Claro que obedecían
ordenes de los desde el principio quisieron balcanizar España y
desmontar la unidad nacional obrando al dictado del bueno de Henry
Kissinger y de esa furia hispanófoba que nos hemos encontrado
vagando por el mundo. A los españoles nos odian y nos persiguen
tanto como persiguieron a los judíos y a lo mejor es que muchos de
nosotros tenemos algo de judíos. Pero en fin nos hicieron
“malfetría”. Y ahí está.
Este capitulo de la
constitución es una mala pasada una judiada para que nos entendamos.
Yo habito esta lengua que forma parte de mi refugio interior. Nos
podrá arrebatar todo pero no serán capaces de quitarnos la palabra.
Desde luego suscribo el manifiesto pero con algunas chavetas. Hago
reserva Vg.:
1.- el inglés
compulsivo desde los kindergarten en la Comunidad de Madrid, tal y
como pide doña Esperanza Aguirre.
2.-Que nos devuelvan las
editoriales y los periódicos que nos quitaron.
3.-Que el cine que vemos
y que la televisión que masticamos hasta el aburrimiento no sean
seriales norteamericanos o malas traducciones de peores novelas de
autores ingleses.
4.-Que se devuelva a los
jóvenes universitarios la fe y la ilusión con la cultura española.
Algunos no saben que nuestra literatura es una de las más antiguas y
mejor perfiladas del mundo pero ellos los pobres tienen que comulgar
con ruedas de molino.
5.-Que nuestros poetas,
novelistas y cineastas puedan publicar y rodar en su propia lengua. Y
que se vaya a un convento de cartujos Vargas Llosa. Me jarta ese
fulano el perulero del que bueno que viniste ché. Él es juez y
parte del enredo y no nos va a enseñar este trasandino a escribir en
nuestro idioma. Debe de ser porque don Mario cree en la venganza de
los indios y eso que no fuma tabaco.
6.-Que se acabe el
papanatismo del guirigay de nuestras malas radios comerciales. Que se
descrispe un poco el país.
7.-Y que Casillas don
Iker es el mejor portero del mundo y que merece una calle en Mostotes
de donde se hizo el bando aquél contra los franceses y viva la madre
que le parió a nuestro guardameta de la selección.
8.- Y que nuestros
contertulios, nuestros políticos y nuestros periodistas del rollo en
la pomada lean un poco más a Quevedo. Ganarán perspectiva, no dirán
tantas burradas y se desasnarán un poco.
Me formé cuando
estudiaba románicas con catalanes. Don Sebastián Mariné Bigorra un
español de la tarraconense me enseñó el latin y a don Martin
Riquer le debo ese entusiasmo por el medievalismo que fue la plenitud
de mi vida. Conozco la obra de Raimundio Lulio y el Corominas fue mi
diccionario herramienta pero el catalán últimamente se me ha
atragantado. Me parece una lengua sosa, poco evolucionada y sin un
respaldo literario que le haga fuerte para afrontar el futuro. El
gallego de los BNG es un chapurreado lleno de mezcolanzas indigestas.
Vale para hablar con la burra y ponerse ciego de orujo debajo del
cabazo cuando no te ve nadie. Ese vasco aldeano y reivindicativo no
me dice nada. Nada tiene que ver con los zortikos que cantaba don Pío
por lo bajini Es un fósil. Tampoco se ha resucitado el bable o al
menos el bable que yo conocía el que sabía Alarcos y que me sale
cuando me he tomado unos cuantos culines en el chigre.
En fin que esto de las
lenguas regionales o los viejos Coros y Danzas es una receta para el
desastre. Parece que la constitución nos la escribieron los
enemigos. Habría que reformarla. Ahí tiene razón el profesor
Savater. Con su ponderación y congruencia conjura a los imbeciles a
los que con ganas siempre de enredar confunden la velocidad con el
tocino. Y los culos no son las temporas, señores míos.