


























SANTA CLARA´S DAY FULL MOON SUPER MOON
Beautiful and serene august night, dear Helen:
my mom is dying of old age 94, after a plentiful life full of merits and
endeavours, and your auntie Fuen dressed her up to receive the Espouse with a
night dress she embroidered herself year ago.
I m sure there might be for her a place in
Paradise and this in this marvellous day break she shall be escorted to heavens
by her guardian angel the Holy Virgin and Santa Clara of Assisi she venerated.
When she was pregnant of me, she attended Mass
at the Franciscans and took a candle to the altar of Saint Anthony of whom she
was devout.
The result of this devotion was my name I was
christened for San Antonio my tutelary patron. Poor mother Juani on her dying
bed. Last night I kissed her goodbye. She was a beautiful woman in her days but
now her face was emaciated, haggard, all bones no flesh her mouth horribly open and her nose sharp with that
macabre sharpness of agony and the pang of death.
We sang for her the symbol of faith I believe in one god father almighty credo
in unum deum the room was full of peace and I felt a sacred, invisible,
presence of the blessed (her husband Silvino, her mother Leonides and her
father Benjamin, her sisters Rosario and Felisa my two little infant brothers
Henar and Juan José, her nephew Austin and her brother Pedro came to give the
accolade of ingress to the eternal glory.
Your sisters Henar, Almu and Cris and your
nieces Carla and Sofia and Daniel were at her bedside.
Here is the reason, why I am not sad in this
mournful dawn, but happy, because my faith tells me that a recompense a place
of light and peace waits the Just.
She worked hard of her life, she bore seven
children and brought up four, a woman without letters, nearly illiterate but
gifted with super intelligence. Thanks to her vision, all of us (Javier,
Fernando, Fuencisla and myself) went to the university and took masters and
degree. What a pity, my dear Helen, you never met your granny. Physically you
resemble Juanita.
You had her nose – Jewish nose-, Helen and
penetrating eyes. We missed you.
Although your absence has been one of my many
sins and faults and probably the drama of my life, I am on the conviction that
your grand mother will protect you and guide your steps through life from that
little corner of heavens where she dwells. God bless.
That is my message in this clear night of the
great month of August with a super moon above illuminating a radiant peaceful
sky. Hark and pay attention, people of good will. The earth looks a pond of
serenity and one can perceive fluttering of angelical wings when a good soul
enters paradise under the escort of the cherubim and seraph. Since I do not
know your whereabouts of address, Internet is the exclusive means I have to
convey the sad news of Juani s decease, my dear estranged English daughter
Helen Parra-Hugh. Stay well and high, like this August super moon. Vita mutatur, non tollitur. Life is not
taken from us, but mutates, as we Christians sing in the rites for the dead,
like an omen of predestination, reincarnation, and resurrection.
12 August 2014
REUNION EN LA CUMBRE JUNTA DE PASTORES OVEJA MUERTA
El Trampas zanahorio
Parlamentando sermones de paz
Cuando es señor de la guerra
Vertieron sangre ucraniana
Y rusa
Y ahora aw peoclaman los aerifices
Al judío maldito de la voz
Rajada
Crímenes de guerra
No le cabía un piñón por el culo
Al verse recibido y rodeado
Por los jerifaltes
Es el enano teniéndoselas tiesas
Con Trump. Macron, la Melones, el Turner. El Mertz
Shmertz, etcetera
Faltaba Sánchez
A los españoles nos dieron la patada
Reunión de pastores
Oveja muerta
Rusia ganó la guerra
Pero los otanazis
Quieren cobrar y pasarnos
Factura de la pelleja
De la oveja muerta
miércoles, 20 de agosto de 2025
SAN BERNARDO ABAD, EL CISTER, SACRAMENIA HONREMOS AL GRAN ABAD DEL ROMANICO
Alcanza su zenit el verano cuando los días van acortando. La trilla y la siega acabaron pero aguardaba la vendimia. Hoy 20 de agosto.
Íbamos mi abuelo Benjamín y yo tal día como hoy a uno de los majuelos,
el de la cuesta del hoyo Castrillo por donde la fuente Colorada, de su
propiedad a ver las cepas y alegre y ceremonioso atentaba debajo de las hojas
de aquella uva aragonesa que daba un tinto superior:
─Están pintonas
Quería decir honremos a Baco que nos da el mejor mosto de Castilla la Vieja y los racimos generosos colgaban de la rama de la cepa, ya no siendo verdes sino moradillos.
La cosa iba buena, había que ir preparando los lagares de octubre. Endespués reunía a todos sus nietos (Agustin, Maudillo, la Rosario, Lidia, Pedrico, Salva y yo) y nos montaba en el carro. Los machos el Cordobés y el Noble bien recuerdo los nombres de la pareja de mulos bajaban la cuesta de San Vicente dejando la ermita románica atrás más contentos que unas pascuas.
El abuelo les ponía cascabeles en la collera y tira millas, una hora de camino y de pronto avistábamos los muros del monasterio de santa María de Sacramenia. Llegábamos a misa.
Los curas de las parroquias de la contornada hacían misa solemnes en latín, tantos kyries, tantos credos, tantos gloriapatris, ¡cuánta belleza y devoción!.
Después la romería y los cohetes, el baile, las garrapiñadas de Alcalá, algún humilde juguete para entretener nuestros ocios aldeanos. Éramos niños tristes y éramos niños alegres a la vez. Arriba la banca.
Los mozos hacían corrillos alrededor del Tío Bigotes el del mandil y se gastaban los cuartos en aquel tenderete trolero cuando no les veía la Benemérita.
Los guardias se quedaban mirando a las parejas y si algún mozo se arrimaba a la novia más de la cuenta el cabo decía que corra el aire.
El tambor, la gaita y el caramillo habían sonado en aquel redondel delante de las puertas del cenobio desde siglos.
En mi infancia tuve la suerte de asistir a una romería medieval. El abuelo volvía contento después de los traguillos y de las parladas que había tenido con los de su cuadrilla y los que eran de su quinta.
Él estaba muy orgulloso de ser de la quinta del rey Alfonso XIII (1886).
Y decía que su padre Toribio se libró de ir a la guerra de Cuba por ser hijo de viuda. El regreso a Fuentesoto era cuesta arriba y tardábamos algo más que a la ida cuando ya los luceros tachonaban las altitudes del empíreo y las mujeres salían a recibirnos para vernos llegar sin dejar de mirar para arriba.
En el cielo de las noches de agosto “lloraban
las lágrimas de san Lorenzo”.
─¿Qué nos traéis, padre ─decía mi
tía Paulina cuando desuncíamos bajo el bardal de la portada
─Garrapiñadas de Alcalá y un “sí,
señor, y un mande usted”
─¿Había mucha fiesta?
─Algo había─ decía Benjamín que
era hombre de pocas palabras y de menos explicaciones
Ahora que lo pienso cuando han pasado tantos años recuerdo con devoción grande a aquel abad francés que fundó la orden del Cister y propagó por Europa la devoción a María.
Era la regla del ora et labora, los cantos de vísperas en monasterios edificados en valles nemorosos apartados donde era más fácil el encuentro con Dios y con la naturaleza.
Yo he sido un poco cisterciense a lo largo de mis días y suelo rezar el “Acordaos” antes de dormirme que aquel monje nos enseñó cuando no trasegué más de lo que cumple el dulce vinillo el cual a cultivar él nos enseñó. Glorioso san Bernardo, siempre fuiste santo de mi devoción.
Mira para Europa destruida. Llegue
a ti nuestro clamor.
miércoles, 20 de agosto de 2025