erotismo VI

 

QUE NI HIERE NI MATA NI PICA NI MUERDE. GÓNGORA AMANTE DE LA VIDA QUE ES AMOR

El mayor poeta de la lengue nuestra fue un apasionado del vivir y no oculta su reverencioa por la pasión amorosa en sus letrichas, décimas, jarchas y villancicos por ser el tema parte de la vida. A pesar de ser clérigo y benefoiciado de la mezquita de Córdoba abre la caja de pandora y entra en la alcoba de los altares de Venus sin ningun rebozo:

"¿Hay quien me compre un juguete

que ni hiere ni mata ni pica ni muerde?

Yo lo vendo por travieso

Y no porque a nadie ofende

Es alegre, juguetón

Y por las niñas se pierde

Guardaos, ninfas, de enojalle

Que vive Dios que arremete

Y cuando esteis más seguras

Por vuestrs postigos entre

Que ni hiere ni mata ni pica ni muerde

Es alegre a todas horas

Y amanece o no amanece

Hay vecina que daría cuanto tiene

Por tenelle

Porque le conocen ya

Y a fe que son más de siete

Las noches que por pecar

Ha amanecido la muerte

Que no hiere ni mata ni pica ni muerde

Es de condición tan noble

Que cuando más furia tiene

Las niñas juegan con él

Al juego de esconderse

A mí me daba Juanilla

La esposa de Juan Llorente

Una hora de descanso

Por un palmo de juguete

Que ni hiere ni mata ni pica ni muerde

Decidme dama hermosa

Qué es aquello tieso

Con dos limones al cabo

Barbado a guisa de nabo

Blando y duro como güeso

De corajudo y travieso

Llorando leche sabrosa

¿Qué es aquello que se lanza

por las riberas del Júcar

parece caña de azucar

aunque da botes de lanza

hiere sin tomar venganza

de la parte querellosa

Qué cosa es esa cosa?

Aquel ojal que está hecho

Junto a fuenterrabía

Digame, señora mía

¿cómo es ncho siendo estrecho?

Y ¿por qué mirando al techo

Es su fruta más sabrosa?parece tintero de asiento

Que bulle

Y no reposa

decidme señora mía que cosa es esa cosa.

El gran Góngora rie del amor que le causa embeleso a sabiendas de que todo es un juego aunque tenga sus riesgos. Coito y agonía se asemejan ya lo dijimos. En el abrazo el hombre y la mujer hacen las paces con la muerte pero la jodienda es parte fundamental de esa vida que se nos va como el acertijo de donde las dan las toman. P ues debió de gustarle de usar la posición del misionero al uso de los lupanares del Potro cordobés el barrio judio establecimientoo de las mozas de pago. Joder es cerner nos dice y hay que cribar el gran cedazo lo malo es cuando surje el gatillazo que él tan bien describne en el soneto a Marfisa. Se muestra picaresco y nada trágico en sus composiciones muy en contra de la misogenia de Quevedo que no tiene para las mujeres todas le parecen meretrices palabras de respeto. Arrebatan la capa y la salud de sus pupilos. En ese “porfiar hasta metella e hinccar hondo” tiene don Luis de Gongora y Agorte mucho de niño traviesoque descubre la sexualidad cuando cantaba el Oficio en el coro. La estola del cura tiene la virtud de curar el mal de madre. Cupido tiene un parchís para que jueguen los niños y las niñas a la perionola. Ya se hablaba en el s.XVII de juguetes sexuiales del que no se separan las masturbadoras de la Red