JACK LONDON UN COCAINOMANO
SOCIALISTA 1876-1916 PRONOSTICÓ EL COVID Y EL ENFRENTAMIENTO DE USA CON CHINA POR
GUERRA BACTERIOLOGICA
La literatura a veces está
imbuida de un extraño estro profético lleno de inspiración. Los que escribimos
con afán de búsqueda de la verdad, la belleza y la compasión hacia las miserias
de la condición humana algo sabemos al respecto. A mí me pasa. Di a la estampa
ciertas corazonadas adelantándome a los acontecimientos. Dios me libre de
ufanarme de profeta, pero es un hecho.
Al hilo de lo dicho aduzco el caso de Jack
London un mediocre novelista norteamericano de ideas socialistas que sólo
publicaba para ganar dinero ─pasa con frecuencia no hay gente que ame más la
peseta que los que se proclaman heraldos de la lucha de clases. Todos millonarios
y ahí tenemos el caso de Felipe González del rey de España y los grandes epígonos
del mundo de la comunicación, con cresos bienes gananciales en sus cuentas
corrientes─ el cual en 1904 después de haber trampeado las calles de San
Francisco como vagabundo se hizo publicista y ganó muchos dólares con sus
novelas. Fue el que inventó el bestseller.
En una de ellas editada al
principio del pasado siglo, movido por ciertas ideas xenófobas has los chinos
(había sido marinero en un junco y contrajo el escorbuto se le cayeron todos
los dientes en la marina mercante) anunció la guerra bacteriológica, el COVID
elaborado en Pekín sería el primer preámbulo.
Los cañones y los barcos de guerra serían sustituidos
por los gérmenes, las bacterias y los bacilos. Esto ocurriría el año de 1976
coincidiendo con la independencia norteamericana. Los chinos serían exterminados
por el tío Sam. Singular profecía.
Marra en cuanto a la fecha del acontecimiento.
Asimismo, se equivoca en la procedencia del virus elaborado al parecer en
matraces ucranianos en un laboratorio perteneciente al hijo del presidente Biden.
Señala que tras la victoria de Japón en la guerra rusojaponesa el eje de la hegemonía
mundial se desplazaría de Europa a Asia.
Japón en alianza con Hitler
declararía la guerra a los EE. UU y los americanos tendrían que emplearse a
fondo y lanzar desde la panza del Enola Gay la primera bomba atómico. Pero
el peligro según Jack London estaba en Pekín. Es por esto por lo que los
laboratorios de la ciencia norteamericana situados en California (ahí acierta)
crearían un producto capaz de arrasar mediante una epidemia a media humana.
Está hablando a bulto y sin
demasiadas precisiones del COVID que atribuyeron a las matraces y tubos de ensayo
de la ciudad de Wuhan pero que habían sido llevados allí desde los USA. Digo yo
que si la comunidad científica americana habrá leído este cuento de Jack
London.
Mao anunció la llegada de la “bomb people”
y la superpoblación de Extremo Oriente. Una idea que aterra a este novelista de
la izquierda norteamericana que era algo xenófobo. Mutatis mutandis, en
realidad el autor estadounidense nos anuncia con más de un siglo de antelación
la guerra de Ucrania y la subida al poder de Yim Pi al frente de una potencia
camino de convertirse en la primera mundial. Otra idea lanzada en el escrito es
la imposibilidad de entenderse con una cultura jeroglífica lo cual es falso. Al
menos los chinos saben como entenderse con occidente. Amen de eso la idea de
primar a China como baluarte contra Europa surgió de las cavernas del Pentágono
cuando Kissinger estuvo al frente del Departamento de Estado. Cría cuervos que
te comerán los ojos. Pi va a ser pese a quien pese el gran sucesor de Mao y un líder
para el siglo XXI
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