EL GORRIÓN DE SAN PAULINO
San Paulino de York
era un monje de la abadía de St Chad devoto y cumplidor de la regla pero tenía
una duda cuando cantaba el salterio. Aquel versículo del Eclesiastés que reza
un año de Dios equivale a un milenio de los hombres. No le cabía la cabeza. Una
mañana escuchaba el canto de un gorrión y salió tras él camino del bosque. El gurriatillo
entonaba a viva voz el salmo del tiempo de Dios que dura mil años del hombre. San
Paulino pensaba que Dios es intemporal. Carece de tiempo porque es infinito y
la temporalidad es finitud, acabamiento. El gorrión alzó su vuelo entonando con
más vigor desde la quima de un tejo su sentencia. Paulino de York le siguió en
sus evoluciones cantores toda la mañana y toda la tarde. A la puesta del sol el
pájaro encantador desapareció y él se dispuso a regresar al monasterio. Para su
sorpresa encontró que el monasterio que él conoció emplazado en una montaña estaba
ahora en un valle rodeando las riberas del rio Ouse. Llamó a la puerta pero el
portero no quiso abrirle. Pidió presentarse al abad de St Chad pero éste no le
reconocía, hablaban en otra lengua, vestían otro hábito. El oficio divino ya no
se cantaba en el latín que él conoció al profesar en la regla sino en otra
lengua desconocida. Había cambiado el rito y se rezaba e vernácula. Habían pasado
mil años. San Paulino entonces cayó de rodillas ante el abad reconociendo su
error cuando antaño cantaba el oficio divino, quedó convencido de que era
verdad lo que enseñaba la Biblia. Los días del señor van por otro camino. Dios se
hace otras cuentas. Pidió perdón a la comunidad por su yerro aunque el pecado por
él cometido era de buena fe y el prior lo absolvió. Habían pasado mil años y a
los pocos días estando en oración entregó su alma a Dios. Dicen los buenos
cistercienses del convento de St. Chad que algunas mañanas vuela por el
claustro cantando latines la vieja máxima el gorrión de san Paulino: Dies Dei non est dies hominum (el tiempo de
Dios no se parece al tiempo del hombre)
martes,
04 de octubre de 2022
No hay comentarios:
Publicar un comentario