2010-08-20
2010-08-13
ESTE-OESTE UNA NOVELA DE LA POSGUERRA ESPAÑOLA
martes, 10 de agosto de 2010
Cada vez que veo a Jaime Jiménez-Arnau, subido a la noria de la noche de los sábados, que conduce un cara de piña con ramalazo cáscara amarga y en los que comparecen los de siempre (el del pelo blanco, la catalana rubia de bote, algunas veces Maria Antonia a la que deseo que se ponga buena. Ellos en el banco rojo; por el azul, una pepera tocinera, el ex de Ana Rosa, la querindonga del torero y que fue ex de un tenista, la hija de la reina de las mañanas, y otras culonas, con un tal Calabuch con pinta de cura del vicio y apellido de película de Berlanga etc.… y allí está Jimy como gallo del corral, el único espadachín con un poco de ingenio en medio de este guirigay de cotorras, el único que sabe contar un cuento o sacarle punta a un chascarrillo aun afuer de echarle mucha sal gorda, muy a diferencia del melifluo Peñafiel, voyeur de los altos tálamos y las testas coronadas que se gana la vida haciéndoles la pelota o destripando a los borbones) , verdad es que me repatea un poquito: el que el hijo de un gran novelista -y buen escritor él- tenga que hacer de palanganero de este burdel mediático.
Sin embargo, “carmina autum non dabunt”, ya lo decía Horacio. La literatura no da para comer. Y ahora mucho menos.
Acabo de terminar de leer una novela escrita por su padre, José Antonio Jiménez-Arnau, Este-Oeste, que perfila y matiza la psicología de los españoles de posguerra. Es una novela río que mantiene el interés del lector embebecido desde cada una de sus casi setecientas páginas. La historia es ni más menos que los vencedores perdieron la guerra y que desde el año 45 hasta hoy España ha estado en manos de los norteamericanos, los ingleses. Somos una democracia vigilada. En este contexto uno se alarma ante la rusofobia del protagonista, Mauricio, germanófilo hasta las cachas. Por otra parte, un falangista monárquico tampoco casa. ¿A qué se debe a esta falta de información de los españoles bien enterados? Acaso porque desde 1945 o tal vez mucho antes, 1898, hemos dejado de existir con voz propia y seamos una colonia norteamericana. No obstante, el general Franco, hábil estratega al que el autor-cosa rara- no menciona ni una sola vez a lo largo de las casi 700 páginas de la novela, durante un interregno de treinta años de gobiernos va a cortar ese cordón umbilical que hacía de España una nación sumisa a las veleidades y vaivenes forasteros. La mano que mece la cuna, el ojo oculto, son la judeomasonería. Franco los supo mantener a raya. Tampoco se alude a ellos de la misma forma que se obvia mencionar al Caudillo. Por las páginas de este libro se canta el gol de Zarra en Maracaná y se cuentan el millón y medio de manifestantes cuando lo de la manifestación de la Plaza de Oriente. Este es el Epos sonando como telón de fondo los titulares de los noticieros. Nuestra vida moderna se mueve a impulso de “headlines” y de primeras páginas- El Ethos es la defensa de unos valores cristianos entreverada con la moralina del sermón de algún cura que pretende fundar la iglesia de los pobres (¿el padre Soler pudo acabar como el padre Llanos, cambiando de chaqueta?) y el Eros son las putas de Chicote Si Alemania se sometió a un proceso de desnazificación, España ha tenido que pasar por las horcas caudinas de la desespañolización. En medio de esta marabunta lo prescrito ha sido el cambio de chaqueta. El autor perfila una serie de personajes bien logrados en el que revive o recrea un mundo como es de don Luís Portillo, el suegro del protagonista Mauricio, un lerrouxista putañero, habitual de la barra de Chicote y del Abra, que cree en la democracia parlamentaria, un falangista Ercilla que héroe de sus ideales sucumbe en la estepa rusa, y otro falangista, inasequible al desaliento que luce un yugo en las fechas en la pechera pero a medida que se acercan los rusos y los americanos a Berlín se arranca este distintivo y va a firmar el pésame de condolencia a la embajada norteamericana cuando muere Roosevelt. Luego está Rosi la chica de alterne a la que pervierte un brigadista muerto en Brunete que de convierte la protagonista o antagonista de Mauricio el cual luego se demuestra que no es tan incorruptible excepto en su amor y respeto hacia la Rosi.
La música de fondo de esta gran epopeya es la cantinela de que hay que sobrevivir en medio del río revuelto. Camaleón que se duerme se lo lleva la corriente. “Todo el mundo había dado la vuelta. Incluso en España donde los trajes y las ideas se habían vuelto del revés” .
El estilo garboso, sencillo, es del, con un dialogo magistral que colocan al autor entre los grandes de la novela española de la segunda mitad del siglo veinte.
Es una injusticia aparte de un desacato a la verdad ningunear, preterir, a autores de la categoría del padre de Jaime Jiménez Arnau a quien como digo me repatea verle de animador o palanganero de esa prensa de la entrepierna que se ha convertido en una incesante lavativa una tarántula martilleando nuestras meninges y como ya hablé largo y tendido de este puterío nacional que se ha convertido más que en tema en monotema quisiera echarlo lejos de mí pero no ha quedado otra salida para los vencidos. O te conviertes en palanganero del sistema o haces mutis por el foro. Una magna caterva de silenciosos incomprendidos metecos en su propio país tiene que ir lampando como Jimy porque hay que subirse al carro de los vencedores so pena de no ser arrastrados y caminar atrás con la argolla al cuello del incomprendido. Esta gran novela con atisbo y reclamos profetas parece intuirlo retratando unos seres vacíos y oportunistas acomodaticios ficticios y facticios.
¿Quién traerá la monarquía parlamentaria? Los mismos que vestían camisa azul y saludaban a la romana brazo en alto. Es la derecha del dinero y los negocios turbios magistrados y periodistas diplomáticos exportadores de wólfram que se sientan en las mesas del Chicote y dejan que les soplen los cuartos las Lamias y las Floras que hacen la barra. El tema es viejo como el mundo y cuando el autor describe lías ardidas de estas barbianas de lujo creí rememorar párrafos de fray Antonio de Guevara en sus epístolas familiares “hermosas de rostros, altas de cuerpos, anchas de frente, gruesas de pechos, cortas de cintura, largas de manos, pulidas en el vestir, amorosas en el mirar, y muy cautas en el pedir” que casualidad la mayor parte de las putas de aquel Madrid eran vascas hijas de familia y educadas por monjas.
Don Luís Portillo el propietario de unos grandes almacenes le pone un piso a su querida. Uno se cruza con bares que huelen a marisco y cañitas de cerveza, que se suben en taxis de gasógenos y veranean en San Sebastián. Buenos padres de familia que tienen a sus Blancas amarradas en blanca y se divierten con las muchachas de vida alegre. O con curas evangélicos que fundan un conventillo para pobres en la calle Jaén de Cuatro Caminos. Todos ellos aprenden a sobrevivir a nadar y guardar la ropa y a distinguir entre un ladrido y un mordisco. Lo que es impepinable es que desde Hayes y Ernesto Bevin al régimen franquista lo toleraron si no lo apoyaron los anglos. La habilidad de Franco fue salvar los muebles y jugar con la monarquía de don Juan al ratón y el gato. La monarquía fue una imposición de los vencedores. Estaba claro desde el principio que aquel sistema estaba condenado a morir y con su muerte se vienen abajo los ideales por los cuales habían perdido la vida más de un millón de jóvenes en nuestra guerra civil. Los sucesivos capítulos del libro son un retrato de las pequeñas vidas de estos seres egoístas acostumbrados a tener siempre la sartén por el mango.
No eran los falangistas de Hedilla ni de Onésimo sino una multitud confusa de españoles no del todo bien informados o que no querían saber. Que querían vivir. La obsesión de esta derecha era Rusia pero lo que desconocían es que el marxismo era un sistema de quita y pon que les vino a las democracias occidentales para probar sus armas en el campo de batalla y hacer negocios. Yo creo que estaban equivocados porque Rusia no era culpable o tan culpable como algunos creyeron. Y muchos de estos falangistas ignoraban la causa por qué murió Calvo Costéelo.
No murió por oponerse a Lenin -. La Pasionaria no era más que un scapegoat- sino por oponerse a entregar al capitalismo de Londres el control de los monopolios de hidrocarburos. La mano peluda o la mano negra hizo que las apariencias fueran otras. Uno saca la conclusión después de la lectura de Este-Oeste de que una buena novela es aquella que nos hace reflexionar nos embebece e infunde alientos de vida copiando la realidad vista desde el ojo triangular del novelista omnisciente que crea mundos y nos anima a ser comprensivos tal vez mejores. Una buena novela es aquella en la que se reflejan como en un espejo los valores o virtudes y carencias de una sociedad.
Más allá de lo que consideramos permanente no hay nada definitivo. La línea separadora de las luces y las luces es tenue y el bien y el mal se entreveran. La acción de este relato río de la posguerra española cruza por los territorios comanches del estraperlo, las carestías aunque aquí todos los personajes son ricos y no viven en escuálidos cuartos realquilados con derecho a cocina sino en casas de calles nobles como Lagasca 67B, luego se entrega a los meandros del ambiente selecto de los empresarios que hacen negocios y salta por las cascadas y torrentes de los miedos del buen burgués que odia pensar o decir con Bulgakov en su “Guardia Blanca” que han ganado los americanos pero Jiménez Arnau ve venir la clausura de una era con la muerte de España y su secesión en autonomías.
Pero buen observador apunta cómo Mauricio se siente odioso- se caminaba ya en los cincuenta hacia el hedonismo de nuestros días- por haber echado barriga cerca de los cuarenta años y es que la vida moderna va a tener un fuerte componente sensualista que dejará fuera de combate a los gordos los feos los viejos.
Los moradores de Lagasca 67B en este folletón se dan cuenta de estar viviendo en un mundo banal de fuertes convencionalismos pero que siga la bola.
Hay que decir las cosas correctas y pensar como piensa el Amo para no acabar en las tinieblas exteriores. Por lo demás en el libro hay muchas bodas y funerales en Santa Bárbara. Uno se cruza la mirada con las chicas topolino. El novelista que fue diplomático describe las interioridades de esta carrera donde confluye el ambiente de las oposiciones, el respeto al escalafón. Sin embargo, si España se acaba o se fractura muchos españolitos van a tener que ir olvidando una prestamera un carguito en la administración publica. Tambien tenía buen ojo para el conocimiento femenino. Algunas de las mujeres se rinden al chulo al que las maltrata y las saquea y se portan de un modo cruel con sus pretendientes honestos.
En esto del amor las buenas personas no tienen sitio y ocuparan convirtiéndose simplemente en un buen hombre. Pero ya lo decía Tirso en el Condenado por desconfiado “Eres mujer mala que quieres y regalas al que mal te trata” presenta un cuadro de costumbres y él lector que no puede soltar el libro de las manos va observando cómo se cierra un círculo.
Casi nos atreveríamos a calificar esta novela publicada en el año 61 y que se une a otros éxitos de J.A.G-Arnau como “De pantalón corto”, obra autobiografiíta y no sé si esta lo es cómo un tour de force, una obra maestra a la cual le sobran doscientas páginas. Por desgracia ¡ay! hoy prima lo contrario a la excelencia: la literatura basura, la degeneración sicalíptica o coprológica y por eso ahí tenemos a Jimy que no deja de parecerme un tio listo haciendo de bufón en los programas rosa bailándoles el agua a putas y folclóricas o jaleando los pelos del Cara de Piña el conductor de la Noria. Aun así sigue contando los mejores chistes y teniendo las mejores ocurrencias aunque algún día alguien podría sentarles las costuras por decir esas burradas que dice de los Franco. Esta enemiga hacia don Francisco con cuya nieta matrimonió el bueno de Jimy debe de venirle de familia porque su padre diplomático, articulista del ABC y guionista de cine, elide mención alguna al General en este “Este-Oeste” que a mí me ha dado que pensar bastante.
Por lo visto es una consigna y explotar el morbo de los Franco da dinero aunque sea poco ético. Yo jamás me prostituiría como lo hace G.A júnior pero parece ser que esa es la única salida actualmente tambien para un escritor. Pero me asusta el que su hijo pudiera llegar a alcanzar el título de palanganero en el tiovivo del Cara de Piña. La otra alternativa sería el exilio interior para nosotros por mandato de esta infausta monarquía que nos desgobierna – hasta Marruecos nos chotea- por cuya restauración lucharían mi padre y el de Jimy y tantos españoles de los dos bandos dejarían la piel en las dehesas de la Piel de Toro. Tengo la impresión de que aquellos idealistas no sabían por qué morían. Yo sí. El enemigo no era el que ellos creían. Y es que las cosas con frecuencia no son lo que parecen.
martes, 10 de agosto de 2010
Cada vez que veo a Jaime Jiménez-Arnau, subido a la noria de la noche de los sábados, que conduce un cara de piña con ramalazo cáscara amarga y en los que comparecen los de siempre (el del pelo blanco, la catalana rubia de bote, algunas veces Maria Antonia a la que deseo que se ponga buena. Ellos en el banco rojo; por el azul, una pepera tocinera, el ex de Ana Rosa, la querindonga del torero y que fue ex de un tenista, la hija de la reina de las mañanas, y otras culonas, con un tal Calabuch con pinta de cura del vicio y apellido de película de Berlanga etc.… y allí está Jimy como gallo del corral, el único espadachín con un poco de ingenio en medio de este guirigay de cotorras, el único que sabe contar un cuento o sacarle punta a un chascarrillo aun afuer de echarle mucha sal gorda, muy a diferencia del melifluo Peñafiel, voyeur de los altos tálamos y las testas coronadas que se gana la vida haciéndoles la pelota o destripando a los borbones) , verdad es que me repatea un poquito: el que el hijo de un gran novelista -y buen escritor él- tenga que hacer de palanganero de este burdel mediático.
Sin embargo, “carmina autum non dabunt”, ya lo decía Horacio. La literatura no da para comer. Y ahora mucho menos.
Acabo de terminar de leer una novela escrita por su padre, José Antonio Jiménez-Arnau, Este-Oeste, que perfila y matiza la psicología de los españoles de posguerra. Es una novela río que mantiene el interés del lector embebecido desde cada una de sus casi setecientas páginas. La historia es ni más menos que los vencedores perdieron la guerra y que desde el año 45 hasta hoy España ha estado en manos de los norteamericanos, los ingleses. Somos una democracia vigilada. En este contexto uno se alarma ante la rusofobia del protagonista, Mauricio, germanófilo hasta las cachas. Por otra parte, un falangista monárquico tampoco casa. ¿A qué se debe a esta falta de información de los españoles bien enterados? Acaso porque desde 1945 o tal vez mucho antes, 1898, hemos dejado de existir con voz propia y seamos una colonia norteamericana. No obstante, el general Franco, hábil estratega al que el autor-cosa rara- no menciona ni una sola vez a lo largo de las casi 700 páginas de la novela, durante un interregno de treinta años de gobiernos va a cortar ese cordón umbilical que hacía de España una nación sumisa a las veleidades y vaivenes forasteros. La mano que mece la cuna, el ojo oculto, son la judeomasonería. Franco los supo mantener a raya. Tampoco se alude a ellos de la misma forma que se obvia mencionar al Caudillo. Por las páginas de este libro se canta el gol de Zarra en Maracaná y se cuentan el millón y medio de manifestantes cuando lo de la manifestación de la Plaza de Oriente. Este es el Epos sonando como telón de fondo los titulares de los noticieros. Nuestra vida moderna se mueve a impulso de “headlines” y de primeras páginas- El Ethos es la defensa de unos valores cristianos entreverada con la moralina del sermón de algún cura que pretende fundar la iglesia de los pobres (¿el padre Soler pudo acabar como el padre Llanos, cambiando de chaqueta?) y el Eros son las putas de Chicote Si Alemania se sometió a un proceso de desnazificación, España ha tenido que pasar por las horcas caudinas de la desespañolización. En medio de esta marabunta lo prescrito ha sido el cambio de chaqueta. El autor perfila una serie de personajes bien logrados en el que revive o recrea un mundo como es de don Luís Portillo, el suegro del protagonista Mauricio, un lerrouxista putañero, habitual de la barra de Chicote y del Abra, que cree en la democracia parlamentaria, un falangista Ercilla que héroe de sus ideales sucumbe en la estepa rusa, y otro falangista, inasequible al desaliento que luce un yugo en las fechas en la pechera pero a medida que se acercan los rusos y los americanos a Berlín se arranca este distintivo y va a firmar el pésame de condolencia a la embajada norteamericana cuando muere Roosevelt. Luego está Rosi la chica de alterne a la que pervierte un brigadista muerto en Brunete que de convierte la protagonista o antagonista de Mauricio el cual luego se demuestra que no es tan incorruptible excepto en su amor y respeto hacia la Rosi.
La música de fondo de esta gran epopeya es la cantinela de que hay que sobrevivir en medio del río revuelto. Camaleón que se duerme se lo lleva la corriente. “Todo el mundo había dado la vuelta. Incluso en España donde los trajes y las ideas se habían vuelto del revés” .
El estilo garboso, sencillo, es del, con un dialogo magistral que colocan al autor entre los grandes de la novela española de la segunda mitad del siglo veinte.
Es una injusticia aparte de un desacato a la verdad ningunear, preterir, a autores de la categoría del padre de Jaime Jiménez Arnau a quien como digo me repatea verle de animador o palanganero de esa prensa de la entrepierna que se ha convertido en una incesante lavativa una tarántula martilleando nuestras meninges y como ya hablé largo y tendido de este puterío nacional que se ha convertido más que en tema en monotema quisiera echarlo lejos de mí pero no ha quedado otra salida para los vencidos. O te conviertes en palanganero del sistema o haces mutis por el foro. Una magna caterva de silenciosos incomprendidos metecos en su propio país tiene que ir lampando como Jimy porque hay que subirse al carro de los vencedores so pena de no ser arrastrados y caminar atrás con la argolla al cuello del incomprendido. Esta gran novela con atisbo y reclamos profetas parece intuirlo retratando unos seres vacíos y oportunistas acomodaticios ficticios y facticios.
¿Quién traerá la monarquía parlamentaria? Los mismos que vestían camisa azul y saludaban a la romana brazo en alto. Es la derecha del dinero y los negocios turbios magistrados y periodistas diplomáticos exportadores de wólfram que se sientan en las mesas del Chicote y dejan que les soplen los cuartos las Lamias y las Floras que hacen la barra. El tema es viejo como el mundo y cuando el autor describe lías ardidas de estas barbianas de lujo creí rememorar párrafos de fray Antonio de Guevara en sus epístolas familiares “hermosas de rostros, altas de cuerpos, anchas de frente, gruesas de pechos, cortas de cintura, largas de manos, pulidas en el vestir, amorosas en el mirar, y muy cautas en el pedir” que casualidad la mayor parte de las putas de aquel Madrid eran vascas hijas de familia y educadas por monjas.
Don Luís Portillo el propietario de unos grandes almacenes le pone un piso a su querida. Uno se cruza con bares que huelen a marisco y cañitas de cerveza, que se suben en taxis de gasógenos y veranean en San Sebastián. Buenos padres de familia que tienen a sus Blancas amarradas en blanca y se divierten con las muchachas de vida alegre. O con curas evangélicos que fundan un conventillo para pobres en la calle Jaén de Cuatro Caminos. Todos ellos aprenden a sobrevivir a nadar y guardar la ropa y a distinguir entre un ladrido y un mordisco. Lo que es impepinable es que desde Hayes y Ernesto Bevin al régimen franquista lo toleraron si no lo apoyaron los anglos. La habilidad de Franco fue salvar los muebles y jugar con la monarquía de don Juan al ratón y el gato. La monarquía fue una imposición de los vencedores. Estaba claro desde el principio que aquel sistema estaba condenado a morir y con su muerte se vienen abajo los ideales por los cuales habían perdido la vida más de un millón de jóvenes en nuestra guerra civil. Los sucesivos capítulos del libro son un retrato de las pequeñas vidas de estos seres egoístas acostumbrados a tener siempre la sartén por el mango.
No eran los falangistas de Hedilla ni de Onésimo sino una multitud confusa de españoles no del todo bien informados o que no querían saber. Que querían vivir. La obsesión de esta derecha era Rusia pero lo que desconocían es que el marxismo era un sistema de quita y pon que les vino a las democracias occidentales para probar sus armas en el campo de batalla y hacer negocios. Yo creo que estaban equivocados porque Rusia no era culpable o tan culpable como algunos creyeron. Y muchos de estos falangistas ignoraban la causa por qué murió Calvo Costéelo.
No murió por oponerse a Lenin -. La Pasionaria no era más que un scapegoat- sino por oponerse a entregar al capitalismo de Londres el control de los monopolios de hidrocarburos. La mano peluda o la mano negra hizo que las apariencias fueran otras. Uno saca la conclusión después de la lectura de Este-Oeste de que una buena novela es aquella que nos hace reflexionar nos embebece e infunde alientos de vida copiando la realidad vista desde el ojo triangular del novelista omnisciente que crea mundos y nos anima a ser comprensivos tal vez mejores. Una buena novela es aquella en la que se reflejan como en un espejo los valores o virtudes y carencias de una sociedad.
Más allá de lo que consideramos permanente no hay nada definitivo. La línea separadora de las luces y las luces es tenue y el bien y el mal se entreveran. La acción de este relato río de la posguerra española cruza por los territorios comanches del estraperlo, las carestías aunque aquí todos los personajes son ricos y no viven en escuálidos cuartos realquilados con derecho a cocina sino en casas de calles nobles como Lagasca 67B, luego se entrega a los meandros del ambiente selecto de los empresarios que hacen negocios y salta por las cascadas y torrentes de los miedos del buen burgués que odia pensar o decir con Bulgakov en su “Guardia Blanca” que han ganado los americanos pero Jiménez Arnau ve venir la clausura de una era con la muerte de España y su secesión en autonomías.
Pero buen observador apunta cómo Mauricio se siente odioso- se caminaba ya en los cincuenta hacia el hedonismo de nuestros días- por haber echado barriga cerca de los cuarenta años y es que la vida moderna va a tener un fuerte componente sensualista que dejará fuera de combate a los gordos los feos los viejos.
Los moradores de Lagasca 67B en este folletón se dan cuenta de estar viviendo en un mundo banal de fuertes convencionalismos pero que siga la bola.
Hay que decir las cosas correctas y pensar como piensa el Amo para no acabar en las tinieblas exteriores. Por lo demás en el libro hay muchas bodas y funerales en Santa Bárbara. Uno se cruza la mirada con las chicas topolino. El novelista que fue diplomático describe las interioridades de esta carrera donde confluye el ambiente de las oposiciones, el respeto al escalafón. Sin embargo, si España se acaba o se fractura muchos españolitos van a tener que ir olvidando una prestamera un carguito en la administración publica. Tambien tenía buen ojo para el conocimiento femenino. Algunas de las mujeres se rinden al chulo al que las maltrata y las saquea y se portan de un modo cruel con sus pretendientes honestos.
En esto del amor las buenas personas no tienen sitio y ocuparan convirtiéndose simplemente en un buen hombre. Pero ya lo decía Tirso en el Condenado por desconfiado “Eres mujer mala que quieres y regalas al que mal te trata” presenta un cuadro de costumbres y él lector que no puede soltar el libro de las manos va observando cómo se cierra un círculo.
Casi nos atreveríamos a calificar esta novela publicada en el año 61 y que se une a otros éxitos de J.A.G-Arnau como “De pantalón corto”, obra autobiografiíta y no sé si esta lo es cómo un tour de force, una obra maestra a la cual le sobran doscientas páginas. Por desgracia ¡ay! hoy prima lo contrario a la excelencia: la literatura basura, la degeneración sicalíptica o coprológica y por eso ahí tenemos a Jimy que no deja de parecerme un tio listo haciendo de bufón en los programas rosa bailándoles el agua a putas y folclóricas o jaleando los pelos del Cara de Piña el conductor de la Noria. Aun así sigue contando los mejores chistes y teniendo las mejores ocurrencias aunque algún día alguien podría sentarles las costuras por decir esas burradas que dice de los Franco. Esta enemiga hacia don Francisco con cuya nieta matrimonió el bueno de Jimy debe de venirle de familia porque su padre diplomático, articulista del ABC y guionista de cine, elide mención alguna al General en este “Este-Oeste” que a mí me ha dado que pensar bastante.
Por lo visto es una consigna y explotar el morbo de los Franco da dinero aunque sea poco ético. Yo jamás me prostituiría como lo hace G.A júnior pero parece ser que esa es la única salida actualmente tambien para un escritor. Pero me asusta el que su hijo pudiera llegar a alcanzar el título de palanganero en el tiovivo del Cara de Piña. La otra alternativa sería el exilio interior para nosotros por mandato de esta infausta monarquía que nos desgobierna – hasta Marruecos nos chotea- por cuya restauración lucharían mi padre y el de Jimy y tantos españoles de los dos bandos dejarían la piel en las dehesas de la Piel de Toro. Tengo la impresión de que aquellos idealistas no sabían por qué morían. Yo sí. El enemigo no era el que ellos creían. Y es que las cosas con frecuencia no son lo que parecen.
2010-08-07
2010-08-01
lo que pensaba en realidad Cervantes de los moriscos. No se puede manipular la historia
el ABC en su edición del sábado glosa un libro d cierto profesor de Harvard sobre Cervnantes y los moriscos. Obvia un pasaje del Quijotne en el cual el caballero de la triste figura se encuentra con un paisano suyo del Toboso profeso de la relignión de mahoma que ha vuelto a Castilla disfrazado de peregrino a Compostela. Todas las limosnas que recogne van a parar al turco. Ya decía yo que no hay que fniarse muchi de alianza de civilizaciones ni tampoco de peregrinaciones por santas que parezcan. A los españoles nos la están metiendo doblada. Lean este articulo porque Cervantnes tampocno parna enn nnbarnnrann anten el tema judío
2010-07-29
SAN VLADIMIRO
nSAN VLADIMIR SERÁ EN RUSIA 28 DE JULIO FIESTA NACIONAL.
Durante el principado de San Vladimir y de su esposa Olga los eslavos fueron bautizados.
La cruz no es tan sólo símbolo de la redención sino también aglutinante de la unidad patria
Corren rumores por Moscú de que el presidente Mevdevev es tataranieto (tras el affaire que tuvo con una bailarina) del último Zar Nicolás II
Antonioparragalindo
Rusia vuelve, frente a la petulancia occidental que mantiene frente a ella un sospechoso complejo de superioridad y de proteicas suspicacias que acaso alberguen envidia y un cúmulo de desconocimientos históricos, surgidos no al albur de la casualidad, sino de un odio cainita y volteriano, a maravillar al mundo, al proclamar que el 28 de julio cuando la Santa Iglesia Ortodoxa memora la fiesta de San Vladimir y de Santa Olga como fiesta nacional. Es el día de la Evangelización o de la cristianización llevada a cabo en el siglo X por ambos príncipes cristianos. Es una jugada sorprendente del presidente Mevdevev el cual, se dice por ahí, es descendiente por línea extraconyugal del ultimo zar Nicolás II. Si se comparan los retratos de los dos personajes se observará entre los dos un parecido sorprendente que inspira bondad, serenidad, y un cierto aplomo. Putin está en la sombra y los dos dirigentes se compenetran como uña y carne.
El príncipe Vladimir es el equivalente ruso a nuestro Apóstol Santiago, el cual no con pocos trabajos y desalientos- la Virgen bajó al Pilar para animarle- predicó la doctrina de Jesús en la Hispania romana y es el referente que congrega a los españoles de todas las regiones, de todos los signos, y de todas las épocas (bueno congregó porque ahora nuestros políticos parecen renuentes a asumir la historia del país que ministran) empuñando el estandarte de la fe contra la morisma primero, luego contra los luteranos y por último en la colonización de la América que habla español. Boanerges, el hijo del trueno, es el símbolo de la España católica como Santa Vladimir y su esposa portan el lábaro de la ortodoxia.
Los dos al bautizarse en las riberas del Dnieper trajeron en pos a la magna caterva de tribus eslavas que moraban en la taiga, en la estepa y a orillas del Volga y del Don, las estribaciones del mar Caspio hasta Finlandia y Letonia, o las márgenes del Mar Caspio y del lago Baikal. Un conjunto de más de 300 pueblos de lenguas y razas diferentes en total. Se calcula que sólo en Siberia existen alrededor de sesenta etnias. Rusia, la santa Rusia, empezó a vivir bajo los palos y la cruz ortodoxa que había llevado desde Tierra Santa por san Andrés campeó como una lunaria en los campanarios con cúpulas de cebolla. “O bona cruz salvum me fac” (cruz bondadosa, hazme salvo) cuando lo asparon en Calcedonia.
Entonces, por la vasta geografía del país más extenso del planeta surgieron los famosos bulbos que se divisan al recorrer la campiña rusa que rematan los tradicionales templos, unos de madera, otros de estuco y la mayor parte de piedra. Las torres resplandecen bajo la luz del sol porque algunos, los más ricos como el San Basilio del Kremlin, llevan láminas de malaquita o planchas de oro macizo como la de las catedrales de Petersburgo y de Kazan.
Un hecho tan señalado nos lleva a pensar que de una forma casi milagrosa ha surgido una renovación del espiritu religioso al cabo de casi nueve décadas de ateismo programado. Un ruso siempre será un ruso. Nunca un comunista. Hace unos años escribí yo un largo ensayo sobre el carácter misterioso y mesiánico de la vida de ese pueblo, El Molde de un Enigma, y los hechos estan avalando mi hipótesis. De forma que muchos creyentes católicos entre los que me encuentro – llevo lustros rezando y padeciendo persecución por esta causa- sintamos el viento de renovación que trae el Espiritu desde más allá de los Urales. Spiritus ubi vult spirat. Sopla como quiere y cuando quiere y yo hago esta reflexión mientras escucho mis cintas y grabaciones diexistas a lo largo de tanto tiempo. La himnodia maravillosa de los coros monásticos de Vologda me dice que comprender es perdonar. Porque en su código de valores la Provoslavia – nunca les llamen cismáticos por favor que los cismáticos somos acaso nosotros- buscan en el evangelio no sólo la palabra de vida sino la aspiración hacia el Bien y la Belleza hacia la cual se orienta toda su liturgia. Percibo en el tintineo de los turíbulos e incensarios y las antífonas de los diáconos la música de las esferas que nos acercan a Dios.
Una cosa muy importante: en sus misas las homilías no duran más de tres o cuatro minutos, nada de largos sermones de campanillas, habituales en el mundo católico y protestante. Para ellos la religión entra por los sentidos. Por los ojos, por el olfato, por el oído. “FIDES ex auditu”, nos recuerda san Pablo. La fe a través del oído. Nada de charlitas, ni de púlpitos y ambones. Dejemos que se nos esponje el corazón. ¿Deberá occidente volver la mirada hacia Moscú, la tercera Roma para salvarse? Lo cercioran algunas profecías. Vuelve a nacer la luz por levante. Ex oriente lux. Los rusos nos están dando una lección. “Slava tibi upabanie nashe. Slava tibie Xriste boshe. Spàsite nas”.
29/07/2010
Durante el principado de San Vladimir y de su esposa Olga los eslavos fueron bautizados.
La cruz no es tan sólo símbolo de la redención sino también aglutinante de la unidad patria
Corren rumores por Moscú de que el presidente Mevdevev es tataranieto (tras el affaire que tuvo con una bailarina) del último Zar Nicolás II
Antonioparragalindo
Rusia vuelve, frente a la petulancia occidental que mantiene frente a ella un sospechoso complejo de superioridad y de proteicas suspicacias que acaso alberguen envidia y un cúmulo de desconocimientos históricos, surgidos no al albur de la casualidad, sino de un odio cainita y volteriano, a maravillar al mundo, al proclamar que el 28 de julio cuando la Santa Iglesia Ortodoxa memora la fiesta de San Vladimir y de Santa Olga como fiesta nacional. Es el día de la Evangelización o de la cristianización llevada a cabo en el siglo X por ambos príncipes cristianos. Es una jugada sorprendente del presidente Mevdevev el cual, se dice por ahí, es descendiente por línea extraconyugal del ultimo zar Nicolás II. Si se comparan los retratos de los dos personajes se observará entre los dos un parecido sorprendente que inspira bondad, serenidad, y un cierto aplomo. Putin está en la sombra y los dos dirigentes se compenetran como uña y carne.
El príncipe Vladimir es el equivalente ruso a nuestro Apóstol Santiago, el cual no con pocos trabajos y desalientos- la Virgen bajó al Pilar para animarle- predicó la doctrina de Jesús en la Hispania romana y es el referente que congrega a los españoles de todas las regiones, de todos los signos, y de todas las épocas (bueno congregó porque ahora nuestros políticos parecen renuentes a asumir la historia del país que ministran) empuñando el estandarte de la fe contra la morisma primero, luego contra los luteranos y por último en la colonización de la América que habla español. Boanerges, el hijo del trueno, es el símbolo de la España católica como Santa Vladimir y su esposa portan el lábaro de la ortodoxia.
Los dos al bautizarse en las riberas del Dnieper trajeron en pos a la magna caterva de tribus eslavas que moraban en la taiga, en la estepa y a orillas del Volga y del Don, las estribaciones del mar Caspio hasta Finlandia y Letonia, o las márgenes del Mar Caspio y del lago Baikal. Un conjunto de más de 300 pueblos de lenguas y razas diferentes en total. Se calcula que sólo en Siberia existen alrededor de sesenta etnias. Rusia, la santa Rusia, empezó a vivir bajo los palos y la cruz ortodoxa que había llevado desde Tierra Santa por san Andrés campeó como una lunaria en los campanarios con cúpulas de cebolla. “O bona cruz salvum me fac” (cruz bondadosa, hazme salvo) cuando lo asparon en Calcedonia.
Entonces, por la vasta geografía del país más extenso del planeta surgieron los famosos bulbos que se divisan al recorrer la campiña rusa que rematan los tradicionales templos, unos de madera, otros de estuco y la mayor parte de piedra. Las torres resplandecen bajo la luz del sol porque algunos, los más ricos como el San Basilio del Kremlin, llevan láminas de malaquita o planchas de oro macizo como la de las catedrales de Petersburgo y de Kazan.
Un hecho tan señalado nos lleva a pensar que de una forma casi milagrosa ha surgido una renovación del espiritu religioso al cabo de casi nueve décadas de ateismo programado. Un ruso siempre será un ruso. Nunca un comunista. Hace unos años escribí yo un largo ensayo sobre el carácter misterioso y mesiánico de la vida de ese pueblo, El Molde de un Enigma, y los hechos estan avalando mi hipótesis. De forma que muchos creyentes católicos entre los que me encuentro – llevo lustros rezando y padeciendo persecución por esta causa- sintamos el viento de renovación que trae el Espiritu desde más allá de los Urales. Spiritus ubi vult spirat. Sopla como quiere y cuando quiere y yo hago esta reflexión mientras escucho mis cintas y grabaciones diexistas a lo largo de tanto tiempo. La himnodia maravillosa de los coros monásticos de Vologda me dice que comprender es perdonar. Porque en su código de valores la Provoslavia – nunca les llamen cismáticos por favor que los cismáticos somos acaso nosotros- buscan en el evangelio no sólo la palabra de vida sino la aspiración hacia el Bien y la Belleza hacia la cual se orienta toda su liturgia. Percibo en el tintineo de los turíbulos e incensarios y las antífonas de los diáconos la música de las esferas que nos acercan a Dios.
Una cosa muy importante: en sus misas las homilías no duran más de tres o cuatro minutos, nada de largos sermones de campanillas, habituales en el mundo católico y protestante. Para ellos la religión entra por los sentidos. Por los ojos, por el olfato, por el oído. “FIDES ex auditu”, nos recuerda san Pablo. La fe a través del oído. Nada de charlitas, ni de púlpitos y ambones. Dejemos que se nos esponje el corazón. ¿Deberá occidente volver la mirada hacia Moscú, la tercera Roma para salvarse? Lo cercioran algunas profecías. Vuelve a nacer la luz por levante. Ex oriente lux. Los rusos nos están dando una lección. “Slava tibi upabanie nashe. Slava tibie Xriste boshe. Spàsite nas”.
29/07/2010
2010-07-28
LOS 14 SANTOS AUXILIADORES
LOS CATORCE SANTOS INTERCESORES
Antonioparragalindo
Es posible que marzo sea el más cruel del año, según T.S. Elliot. Febrero y abril con marzo poco se llevan. Febrero sobre todo era mes nefasto y nefasto viene de nefas (lo sacrílego, lo impío, lo que es contrario a la ley de dios y a la naturaleza). Julio, empero, el mes dedicado a Cesar, es el de la plenitud, la sazón cerealera. Los campos dan su fruto. Mes fausto de lunas muy fuertes. Nacían muchos niños. Los latinos, a pesar de su heliocentrismo, se pasaban parte del año mirando para el calendario lunar, de modo que albur de este azar selenita formulaban sus presagios. Para ellos junio, dedicado a la diosa Juno la esposa de Júpiter, Julio, a Cesar y Agosto, a Augusto, eran mensualidades álgidas, fáusticas; es decir: Tales días eran portadores de buenos augurios, frente al fatalismo de las calendas “februarias” o las idus de marzo.
La ciencia y tecnología modernas no han sido capaces de superar ese conocimiento innato de las cosas de la naturaleza a la luz del escrutinio de la posición de los astros y de la medición de los ciclos estacionales que tenían los romanos.
Para mí, aunque no crea en los horóscopos, julio siempre fue un mes de suerte al igual que su precedente y su subsiguiente en el calendario. La iglesia que es sabia y sacraliza los días fastos y los nefastos a imitación del pueblo romano de quien incorpora y cristianiza algunas de sus divinidades oscuras convirtiéndolas en santos de origen mítico o fabuloso. San Cristóbal el primero de los 14 santos intercesores es Prometeo portando a hombros el globo terráqueo se transforma en el Niño Jesús.
En junio teníamos en mi segoviana ciudad las fiestas de la Minerva en la Octava del Corpus – aquí la diosa de la sabiduría se transforma en saber eucarístico- y luego las de San Antonio porque en junio veneraban los romanos a una divinidad menor del Janículo que encontraba a las amas de casa los objetos perdidos. En agosto las honras a Afrodita diosa del amor y de la fecundidad o mito de Cibeles se corresponden con las de la Nuestra Sra de la Asunción. Julio, insistimos, el mes en que el sol alcanza su cenit es también el de las lunas más fuertes del año la iglesia honra a la gran pléyade de mártires que sucumbió en dos persecuciones acérrimas las de Nerón y las de Diocleciano (los papas Apolinar, Nazario, San Pantaleón abogado contra la langosta, Santa Cristina de Lena mártir siciliana, San Rufino y san Senen.
El 25 de julio – la fiesta en España fue desplazada por la de Santiago Apóstol- la iglesia romana celebraba el almanaque de los Catorce Santos auxiliadores. A la cabeza viene San Cristóbal o san Cristobalón un forzudo peregrino que porta sobre sus gigantescos hombros al Cordero de Dios que quita los pecados del mundo. Es la vera efigie de Hércules que ayuda a los mortales en los malos pasos de la vida. Por eso le honran por patrón los caminantes peregrinos y los conductores automovilistas. Otros bienaventurados a los que los fieles han de acudir en búsqueda de remedio espiritual para sus necesidades temporales son:
San Jorge que mata la mosca y asusta al dragón. Abogado contra las enfermedades de la piel.
San Blas contra los males de garganta.
San Erasmo abogado de los que padecen tanto diarreas como tarazón y otras enfermedades estomacales
San Pantaleón. Los campesinos sacaban su imagen con dos manos clavadas cuando había plaga de langosta. El mártir de Nicomedia es uno de los más portentosos de los martirologios y menologios pues su sangre licua dentro de una ampolla que guardan las agustinas de Madrid en la encarnación.
San Vito contra el mal del baile que lleva su nombre, así como las picaduras de serpiente
San Dionisio o san Denis, patrono de Paris, que porta su propia cabeza en la mano intercede contra la posesión diabólica
San Ciriaco. Acudan a él los que tienen mal de vista o padecen de cataratas.
San Acacio que porta una corona de espinas contra los dolores de cabeza
San Eustaquio con su trompa y sus dos ciervas blancas protege a los cazadores y monteros
San Gil vale contra el pánico, las obsesiones y la posesión diabólica
Santa Margarita siempre tuvo a su cargo a los que tienen dolor de riñones, y mira por las embarazadas en la hora del parto.
Santa Bárbara Bendita que en el cielo estás escrita con el signo de la cruz paternóster amen Jesús. Lleva en su escudo un castillo, la palma de su martirio y con su mención conjura los peligros de la electrocución y de la muerte repentina.
Santa Catalina y su rueda es reina de sabiduría y abogada de letrados, oradores y estudiantes.
A la vista de tan formidables valedores no sería vanagloria presumir que la grey cristiana perseguida siempre por el mundo a manos de los impíos y dando tumbos entre la certeza y la oscuridad se agarra a buenos redaños.
Pedir y se os dará. Mas no nos dejes caer en la tentación, máxime cuando el diablo se te mete en casa y se apodera del cuerpo y del alma de tu mujer – de esos padecimientos obra en mi poder un listín casi incontable- porque es el peor de los demonios meridianos y el tormento es atroz, peor que el ecúleo, los garfios, o la cama de hierro candente. Señor, defiéndeme. Virgen Santísima… “sub tuum praesidium”, busco tu protección.
Pero los compinches de Belcebú en esta hora occidua son tan cizañeros como cerreros y la mayor ignominia para un mortal la hacen pasar por lo más natural (cometer adulterio es para estas engañadas como beberse un vaso de agua) del mundo de la mano de esa muchacha de pueblo tan perversa que ha llegado a ministra de ZP y la llaman Bibiana. Gracias a ella, el femíneo sexo está que arde, en pie de guerra y necesita unos buenos exorcismos. Doña Bibi la Víbora. Libéranos, Dios, la picadura de esa serpiente. Confringe gracias a ella porque esta ministra de la igualdad igualitaria azupa a las mastinas de esta rehala el aire del verano el estridor de los cuchillos largos de la violencia domestica. Se oyen gritos en los patios de luces y en los cuartos de atrás. Tenemos al enemigo dentro. “Intus est equus Troianus”.
En muchos hogares se vive el drama satanista–y ellos según dicen, nunca ellas, serían los culpables, Señor cuanto sufrimiento aparta de mí este cáliz- de esas pobres mujeres de pueblo que por Lucifer poseídas al grito de non serviam proclaman furibundas yo hago lo que me apetece, no tengo que rendir cuentas, soy la dueña de mi cuerpo (antes los cuerpos eran templos del Espiritu Santo, ahora no por lo que se ve) prostituyen a las hijas, insultan y amenazan a los maridos y se transforman en harpías y en gárgolas cuyas bocas vomitan odio. Son ellas epitome de la cruz inversa porque han conseguido poner al mundo del revés, y son causa próxima de tanto llanto y tragedia anónima, el pan de cada día en la vida moderna. Un dolor sordo se eleva a los cielos.
Que nos valgan los Santos Auxiliadores. Que la rueda de Santa Catalina a estas malcasadas les dé la vuelta y les saque del pozo de la lujuria, el consumismo, el materialismo egoísta, la protervia y la soberbia. Ellas han truncado los sueños de amor y han tornado los paraísos en infiernos. Si la familia se destruye todo está destruido. Malamente se toleran los insultos pero mucho peor los cuernos. Convertios. “Metanoite”, digo con San Pablo pero este pueblo es sordo de oído y duro de cerviz. No escuchan. El Juicio Universal se acerca.
29/07/2010
Antonioparragalindo
Es posible que marzo sea el más cruel del año, según T.S. Elliot. Febrero y abril con marzo poco se llevan. Febrero sobre todo era mes nefasto y nefasto viene de nefas (lo sacrílego, lo impío, lo que es contrario a la ley de dios y a la naturaleza). Julio, empero, el mes dedicado a Cesar, es el de la plenitud, la sazón cerealera. Los campos dan su fruto. Mes fausto de lunas muy fuertes. Nacían muchos niños. Los latinos, a pesar de su heliocentrismo, se pasaban parte del año mirando para el calendario lunar, de modo que albur de este azar selenita formulaban sus presagios. Para ellos junio, dedicado a la diosa Juno la esposa de Júpiter, Julio, a Cesar y Agosto, a Augusto, eran mensualidades álgidas, fáusticas; es decir: Tales días eran portadores de buenos augurios, frente al fatalismo de las calendas “februarias” o las idus de marzo.
La ciencia y tecnología modernas no han sido capaces de superar ese conocimiento innato de las cosas de la naturaleza a la luz del escrutinio de la posición de los astros y de la medición de los ciclos estacionales que tenían los romanos.
Para mí, aunque no crea en los horóscopos, julio siempre fue un mes de suerte al igual que su precedente y su subsiguiente en el calendario. La iglesia que es sabia y sacraliza los días fastos y los nefastos a imitación del pueblo romano de quien incorpora y cristianiza algunas de sus divinidades oscuras convirtiéndolas en santos de origen mítico o fabuloso. San Cristóbal el primero de los 14 santos intercesores es Prometeo portando a hombros el globo terráqueo se transforma en el Niño Jesús.
En junio teníamos en mi segoviana ciudad las fiestas de la Minerva en la Octava del Corpus – aquí la diosa de la sabiduría se transforma en saber eucarístico- y luego las de San Antonio porque en junio veneraban los romanos a una divinidad menor del Janículo que encontraba a las amas de casa los objetos perdidos. En agosto las honras a Afrodita diosa del amor y de la fecundidad o mito de Cibeles se corresponden con las de la Nuestra Sra de la Asunción. Julio, insistimos, el mes en que el sol alcanza su cenit es también el de las lunas más fuertes del año la iglesia honra a la gran pléyade de mártires que sucumbió en dos persecuciones acérrimas las de Nerón y las de Diocleciano (los papas Apolinar, Nazario, San Pantaleón abogado contra la langosta, Santa Cristina de Lena mártir siciliana, San Rufino y san Senen.
El 25 de julio – la fiesta en España fue desplazada por la de Santiago Apóstol- la iglesia romana celebraba el almanaque de los Catorce Santos auxiliadores. A la cabeza viene San Cristóbal o san Cristobalón un forzudo peregrino que porta sobre sus gigantescos hombros al Cordero de Dios que quita los pecados del mundo. Es la vera efigie de Hércules que ayuda a los mortales en los malos pasos de la vida. Por eso le honran por patrón los caminantes peregrinos y los conductores automovilistas. Otros bienaventurados a los que los fieles han de acudir en búsqueda de remedio espiritual para sus necesidades temporales son:
San Jorge que mata la mosca y asusta al dragón. Abogado contra las enfermedades de la piel.
San Blas contra los males de garganta.
San Erasmo abogado de los que padecen tanto diarreas como tarazón y otras enfermedades estomacales
San Pantaleón. Los campesinos sacaban su imagen con dos manos clavadas cuando había plaga de langosta. El mártir de Nicomedia es uno de los más portentosos de los martirologios y menologios pues su sangre licua dentro de una ampolla que guardan las agustinas de Madrid en la encarnación.
San Vito contra el mal del baile que lleva su nombre, así como las picaduras de serpiente
San Dionisio o san Denis, patrono de Paris, que porta su propia cabeza en la mano intercede contra la posesión diabólica
San Ciriaco. Acudan a él los que tienen mal de vista o padecen de cataratas.
San Acacio que porta una corona de espinas contra los dolores de cabeza
San Eustaquio con su trompa y sus dos ciervas blancas protege a los cazadores y monteros
San Gil vale contra el pánico, las obsesiones y la posesión diabólica
Santa Margarita siempre tuvo a su cargo a los que tienen dolor de riñones, y mira por las embarazadas en la hora del parto.
Santa Bárbara Bendita que en el cielo estás escrita con el signo de la cruz paternóster amen Jesús. Lleva en su escudo un castillo, la palma de su martirio y con su mención conjura los peligros de la electrocución y de la muerte repentina.
Santa Catalina y su rueda es reina de sabiduría y abogada de letrados, oradores y estudiantes.
A la vista de tan formidables valedores no sería vanagloria presumir que la grey cristiana perseguida siempre por el mundo a manos de los impíos y dando tumbos entre la certeza y la oscuridad se agarra a buenos redaños.
Pedir y se os dará. Mas no nos dejes caer en la tentación, máxime cuando el diablo se te mete en casa y se apodera del cuerpo y del alma de tu mujer – de esos padecimientos obra en mi poder un listín casi incontable- porque es el peor de los demonios meridianos y el tormento es atroz, peor que el ecúleo, los garfios, o la cama de hierro candente. Señor, defiéndeme. Virgen Santísima… “sub tuum praesidium”, busco tu protección.
Pero los compinches de Belcebú en esta hora occidua son tan cizañeros como cerreros y la mayor ignominia para un mortal la hacen pasar por lo más natural (cometer adulterio es para estas engañadas como beberse un vaso de agua) del mundo de la mano de esa muchacha de pueblo tan perversa que ha llegado a ministra de ZP y la llaman Bibiana. Gracias a ella, el femíneo sexo está que arde, en pie de guerra y necesita unos buenos exorcismos. Doña Bibi la Víbora. Libéranos, Dios, la picadura de esa serpiente. Confringe gracias a ella porque esta ministra de la igualdad igualitaria azupa a las mastinas de esta rehala el aire del verano el estridor de los cuchillos largos de la violencia domestica. Se oyen gritos en los patios de luces y en los cuartos de atrás. Tenemos al enemigo dentro. “Intus est equus Troianus”.
En muchos hogares se vive el drama satanista–y ellos según dicen, nunca ellas, serían los culpables, Señor cuanto sufrimiento aparta de mí este cáliz- de esas pobres mujeres de pueblo que por Lucifer poseídas al grito de non serviam proclaman furibundas yo hago lo que me apetece, no tengo que rendir cuentas, soy la dueña de mi cuerpo (antes los cuerpos eran templos del Espiritu Santo, ahora no por lo que se ve) prostituyen a las hijas, insultan y amenazan a los maridos y se transforman en harpías y en gárgolas cuyas bocas vomitan odio. Son ellas epitome de la cruz inversa porque han conseguido poner al mundo del revés, y son causa próxima de tanto llanto y tragedia anónima, el pan de cada día en la vida moderna. Un dolor sordo se eleva a los cielos.
Que nos valgan los Santos Auxiliadores. Que la rueda de Santa Catalina a estas malcasadas les dé la vuelta y les saque del pozo de la lujuria, el consumismo, el materialismo egoísta, la protervia y la soberbia. Ellas han truncado los sueños de amor y han tornado los paraísos en infiernos. Si la familia se destruye todo está destruido. Malamente se toleran los insultos pero mucho peor los cuernos. Convertios. “Metanoite”, digo con San Pablo pero este pueblo es sordo de oído y duro de cerviz. No escuchan. El Juicio Universal se acerca.
29/07/2010
2010-07-27
milagro hoy a las tres de la tarde enn Madrid
SAN PANTALEÓN DE BITINIA. HOY SU SANGRE LICUÓ EN MADRID
La liturgia tanto la romana como la griega es concisa y parca en detalles a la hora de trasladar a la historia a uno de los mártires más venerados y milagrosos: San Pantaleón de Nicomedia cuya sangre en su fiesta del 27 de julio, sólida y coagulada durante la mayor parte del año, se vuelve líquida en la quiroteca que guarda sus reliquias en el convento de la Encarnación de las agustinas de Madrid y, si no licua, malo. Se anuncian calamidades y pestes. No licuó por ejemplo el año de 1936 ni tampoco en el 1917 ni en 1808 cuando la francesada. Es omen o pronóstico de guerras y calamidades pero en el presente año dentro de la clepsidra goteó, lluvia de gracia, volviéndose a repetir un milagro consuetudinario. Menos mal. Curiosamente este convento fue erigido por Felipe III para conmemorar la expulsión de los moriscos en 1609 y su esposa Margarita de Austria, devota señora, fue mentora de esta entidad monástica Donde profesaba toda la alcurnia y nobleza matritense. Menos mal; la sangre del santo mártir que recibió su corona durante la persecución de Diocleciano, la más acérrima de las diez persecuciones padecidas por los cristianos – aunque hubo doce en realidad, porque dos que pasan desapercibida, la primera organizada por los judíos y la de Juliano el apostata, poco después del Edicto de Milán siglo IV, siendo las otras, la de Nerón, Vespasiano, la de Tito, Nerva, Domiciano, Maximino, Decio, Galo, Valeriano y la mencionada de Diocleciano, se obvian por los historiadores, una tanto alacremente- este año de 2010 cuando Madrid vuelve a ser una ciudad morisca y de otras múltiples etnias, licuó.
Conque podría decirse con el bueno de ZP que “estamos tan mal” y que la gracia operante del Espíritu Santo sigue trabajando. Aunque no se la ve. Va subterránea. Pobre Zapatero chivo expiatorio de todas las culpas burro de todos los palos. La derecha fascistoide, el siniestro Medina el hijo de Rafael que es un pijo, facha químicamente puro, los de Intereconomía a sueldo de save dios quien eligieron a nuestro presi de cimbel pero de nimis non curat praetor. Y, hecho el inciso, veamos lo que dice el martirologio romano de San Pantaleón que fue médico de los cuerpos y presbítero de las almas, uno de los santos intercesores cuya vida se situa en Nicomedia, lo que es hoy Turquía y lo que fue Bitinia la provincia romana poblada por los tracios.
“Pantaleón micomediensis nobilis medicus ab Herbolano Jesu Christo fide presbiterus eruditus baptizatus est: Qui mox pastri Eustorgio persuasit ut christianus fieret. Quare cum Nicomediae postea Xti DOMINI fidem libere praedicaret, et ad hujus doctrinam omnes cohortaretur, Diocleciano imperatore, equleo tortus, et admotis ad ejus corpous laminis candentibus, cruciatus est: quam tormentorum vim aequo et forti animo ferens. Ad extremum gladio perscussus, martyrri coronam adeptus est. Te Deum laudamus.
Que era médico de profesión que fue bautizado por el sacerdote Herbolano, que convenció a su progenitor, Eustorgio, para que se hiciera cristiano y que predicó la fe por lo cual fue aprehendido por los guardias de Diocleciano. Lo estiraron los miembros en el cueleo, lo laminaron con planchas de hierro candente, y resistió. Al final fue decapitado. Hacia el año 303.
Los médicos junto con san Lucas, san Cosme y Danian tienen por patró a San Pantaleón. En Oriente es uno de los mártires verdades pero la esquela no dice mal y yo ahora mismo parece que estoy escuchando al de Valdesimonte, desde el pulpito leyéndonos en el refectorio del seminario de Segovia el martirologio romano un libro gordo y marrón con el santo del día y que terminaba siempre con la siguiente estrofa:
- Y en otras muchas partes otros muchos santos, confesores y santas vírgenes.
- Amen
Entonces todo el seminario menor atacaba el tazón de café con leche con un bollo para mojar. La frase de en otras muchas partes oros muchos santos se me han quedado grabado concomitante a la sensación de un nuevo día que amanece dominado por la seguridad de que nuestra fe es incombustible viniendo avalada por la sangre de todos aquellos que dieron testimonio de su amor a Cristo pero resulta duro comprender. San Pantaleón a mi me recuerda aquellos desayunos con tostadas.
¿Por qué Diocleciano que según la historia romana a la que soy tan aficionado y al cual la leyenda le situa como un restaurador del imperio y de un gran imperator la emprendió a mandobles contra aquellos pobres ciudadanos cristianos que se resistía a adorar a los ídolos, situándose en la marginalidad de lo políticamente correcto cometió semejante torpeza de echar a los leones a los bautizados imitando a Nerón que fue un hombre terrible? ¿O Vespasiano, un hombre culto y discreto, romano de buenas costumbres, el que mandó construir las grandes calzados que comunicaron Roma con las provincias del imperio y fue el arquitecto del acueducto de Segovia, y el que arrasó Jerusalén a la cual quiso denominar Elia Capitolina y su hijo Tito cumplió la profecía de Cristo de que de la Ciudad de los Profetas no quedaría piedra sobre piedra?
Los hechos van por cima y el espiritu que los conforma por abajo. Es una explicación simplista y poco rigurosa que a mí me sobra. Las conjeturas a mi alcance atisban que esto forma parte de la historia externa que nada tiene que ver con la historia de la gracia y de la redención que va por debajo. Sólo la creencia en el Dogma de la procesión trinitaria (tiempos del Padre tiempo del Hijo tiempo del Espíritu que aglutina a los viejos paganos – estamos en deuda con Roma)- nos da las claves para salir del laberinto. Él es el alfa y el omega. Cristo está presente en la historia hieri et hodie semper. Las formulas de adoración no tienen nada que ver. Y eso por lo que hoy en este Madrid morisco descreído y laico haya licuado la sangre de san Pantaleón. Laus Tibi, Christe. Viva la gracia y la vida.
27/07/2010
2010-07-26
SANTIAGO PATRON DE ESPAÑA NO TAN SÓLO DE GALICIA
Santiago no es gallego. Es el patrón de España
La fiesta del Jacobeo se ha convertido por desgracia en una festividad descafeinada. Ese hermano marista casposo y mirada antipática, un hijo fornecino de Fraga el del contubernio de Munich que preside la Xunta en su afán nacionalista aldeano barre para casa y quiere hacer un negocio turístico lo que no constituye más que una sagrada tradición cristiana. A esa figura simonía la llaman, cuando a cambio de ciertas dádivas espirituales se ofrecen granjerías espirituales. Están ahora tratando de jugar con el patrón de España.
Con independencia de que siempre estos temas de las peregrinaciones en que la fe corre el riesgo de los peligros de las doctrinas de la indulgencias, un escándalo medieval, cabe recordar a los mitificadores-desmitificadores que la devoción santiaguista tiene que ver con la unidad de la patria que nace del enfrentamiento contra el Islam. Pelearon con el sarraceno los de abajo mientras los nobles y los señoritos gallegos tenían tendencia al escaqueo; por eso mismo, los Reyes Católicos desmocharon las torres de los palacios de los Pardo, de los Celas, de los Lois y de algún que otro arzobispo de Compostela.
La barca de piedra, el obispo san Payo, etc. Las grandes perdonanzas de cada decimoprimero año no son el predicamento de una región con todos los respetos y admiración que uno sienta hacia los gallegos sufridores, buenas personas, muy trabajadores, los que lindan la vaca Morela y los que andan navegando o subidos al andamio, pero las cosas se están sacando de contexto en aras del papel moneda, de poner caja y de hacer queja.
Cabrá recordar que el amigo Zapatero, ateo y descreido pero mucho más fementido y funesto, se negó en la festividad del 25 de julio de 2004 a dar el abrazo tradicional o acolada al Apóstol. Él nos ha traído el dialogo de civilizaciones y ha abierto la puerta al moro en España, secuaz infame del obispo Opas, en su afán descristianizador y todos esos atropellos de la memoria histórica.
Los santiaguistas- y yo me encuentro entre ellos- con Quevedo a la cabeza, que rechazaron a una judía Teresa de Ávila- y de su mano intrigan por detrás la gran caterva de judaizantes y conversos- para velar por los intereses nacionales desde arriba y todos los guerreros que lucían al pecho la cruz colorada, no nos sentimos identificados sino con la España una católica apostólica y romana aunque también en el Vaticano haya no pocos clérigos que dieran vuelta a la chaqueta.
El glorioso Boanerges me regaló en el día de su fiesta un hermoso gesto, un españolito que ha venido al mundo bajo la advocación de Sanctus Iacobus, san Yago y ha cantado el Herr Sant Yagu, Gott Santiago, aurrerá, desde el primer alhorre. Espero que el Hijo del Trueno vele por mi niño y siga defendiendo a nuestra hueste y nos proteja de la peste nacionalista. Amen. Señot Santiago, y cierra España.
26/07/2010
el heredero de la Corona de Francia defiende al Caudillo
EL DUQUE DE BORBÓN HONRA SU ESTIRPE
Luis Alfonso de Borbón, el hijo del Duque de Cadiz, honra a su estirpe y mantiene la serenidad en estos tiempos difíciles. Contra viento y marea y pese a a las tragedias familiares que han rondado su vida (la muerte de su padre y su hermano, que aparecen en esta foto tomada por mí en 1981 en el Valle los Caídos, en circunstancias misteriosas, aun no aclaradas del todo, ni la una ni la otra porque a medida que pasa el tiempo crece la sospecha de conspiración, y el hostigamiento contumaz que realiza contra su madre la prensa de la entrepierna aunque ella demuestra pese a sus líos de alcoba ser una Franco, una señora, que se ríe de tanta estupidez programada, saliendo a campaña de infundios contra su abuelo, Maricarmen no es la Belén Esteban por mucho que os corroa, malsines) ha defendido también a su bisabuelo.
Dios bendiga al hijo de tan alta señor y por cuyas venas corren sangres de los Franco empapadas de amor a España.
Toda una soez orquesta de voces desentonadas dirigida por el marxista ZP que aunque no ha leido a Lenin está aplicando sus principios (destrucción de la familia y de la fe cristiana, aborto barra libre, condones gratis para la juventud, exaltación del feminismo hasta el grado de tiranía, la exclusiva de los medios de comunicación, el fomento del separatismo y la secesión en sus conciliábulos con el casposo Montilla ese charnego que tan casposo que es que no le queda un pelo de tonto en la cabeza).
Menos mal que en medio de este coro de ranas croando desgañitadas ha surgido la voz de un arcángel la de Luis Alfonso denunciando la maniobra infame de desprestigio en la que participa no sólo la izquierda desmelenada de ZP y sus comilitones sino una derecha egoísta y desmememoriada para la cual- tienen el miedo y la pasión del buen burgués- los intereses particulares están por encima de los de la Patria- y ahí no las den todas con un tipo tan ridículo e inepto como Rajoy. Otro día con más tiempo hablaremos de donde viene y donde se origina esa cruzada de desprestigio y a lo mejor no se lo iban a creer porque me vienen a las teclas nombres tan repudiables como el de un historiador que estuvo al frente de la Fundación Nacional Francisco Franco y entró en el gran contubernio para destruir la memoria de nuestro Caudillo. Se llama Luis Suárez Fernández. Yo acuso. Y que no me hagan hablar que no me crecen pelos en la lengua. Por ahora, don Luis Alfonso, gracias por su valentía y su coraje. Gallarda actitud de un prócer contra tanto malandrín como puebla los colmados de este patio de Monipodio que es la vida pública españolas
2010-07-24
LA MAGDALENA
MARIA DE MAGDALA Y EL DIABLO
Suelo celebrar con gran regocijo esta fiesta de la Magdalena. Cuando viví en Inglaterra impartí un curso de poesía castellana en el Magdelene College. Hermosas vivencias paseos junto al río los cisnes sobre la superficie y en el espejo de las aguas se reflejaba creí entender la rubia cabellera de la que fue gran peccatrix (pecadora). Pero amó mucho más que pecó y todo se la perdonó. De ella dice el evangelio que Jesús expulsó de su cuerpo hasta cinco diablos, dulce Jesús exorcista mucho más contundente que el padre Fortea. Este supuesto acendra su talla gigantesca porque ESTA HERMOSA SANTA a la que los imageneros medievales pintan siempre de rubia representa la victoria del bien sobre el demonio, y uno de los más refractarios, según saben los teólogos, creo que es el de la fornicación porque es el envés del poder, el afan de riqueza y de posesión.
La lujuria embota las lamas y suele ser compañera de la ira, la soberbia y la gula. Aquella al que Fariseo Lázaro ignoró fue la que se arroja a sus pies, los unge para el sepulcro con esencias de nardo y los seca luego con sus propia mata de pelo. La pecadora, la vieja puta, se convertiría en uno de los personajes más importantes de su vida pública, una de las santas mujeres. La citan los sinópticos de pasada al pue de la cruz acompañando a la Virgen Pura. El salvador no era misógino. Era acusado de andar con publícanos y pecadores que comían y bebían y en su retaguardia tampoco faltaban las putas, humilde oficio, el más viejo del mundo.
La presencia del Ungido las redimió y volvieron a ser castas y puras, restituyendolas y reconfortándolas en el honor perdido. Los demonios que arrojó N. S del cuerpo de María de Magdala son casi una explicación histórica de la confabulación de Eva con la serpiente. Por ellas viene el mal y también el bien al mundo y conviene tener presente algo importante: el amo del mundo, el señor de la historia es Satanás y siempre establece ligas y alianzas con el femineo sexo, segun la antigua teología cristiana. Es algo impepinable. Forma parte de la naturaleza humana aunque no les guste a los marxistas que generaron el feminismo y la libe3rtad de costumbres sexuales que predicara Lenin.
Es el diablo el que manda y su presencia se ha hecho más activa en los últimos tiempos a medida que nos acercamos a la parusía. Rige sobre todo los designios de la política, de los medios de comunicación y sigue en su acción de enfriar y echasr jarros de agua helada a la hoguera del amor, aquel fuego de amor divino en el cual se abrasaron Magdalena y algunos santos. Papini, uno de los autores más entendidos en satanismo, glosando a León Blois, dice que el Gran Separador es el que impera en la edad moderna Escuchemos un convierto de rock, contemplemos el Guernica, leamos las novelas del tonto de Pérez Reverte, veamos los seriales y sitcoms mada in Hollywood, echemos un vistazo a las primeras páginas de los periodicos. El New Yok Times se encuentra entre los más diabólicos. El Principe de la Mentira tiene muchos secuaces en el mundo hoy.. Parece muy congruente esta visión.
En España la política, amen de un esperpento, es un perpetuo desasosego, una irreverencia, un insulto a la lógica. Los comisarios de Belcebú cuidan bien la parva ,no se les desmonte el almiar o se revuelvan los haces.
Antes se solía decir no está el verde para pitos ni el Alcocer para zampoñas ni tampoco el manto de Magdalena para tafetanes. Sin embargo todos los 22 de julio es una fiesta importante para mí que celebra como el triunfo del amor sobre el odio, la envidia, la mentira, la coz que siempre nos encuentra desprevenido, el letargo de la estupidez humana que no cesa, el culto a todo lo que es feo y estridente, y el marasmo de horizontes sin esperanzas en que vivimos. Esta mujer que fue puta le hizo un corte de manga al diablo. Fue una de las más hermosas hembras de la antiguedad.
El ósculo a los pies de Dios la llenó de fortaleza, e incentivo su belleza, sobre todo su belleza interior. Magdalena muestra el camino de la victoria que no es otro que la renuncia a sí misma, la penitencia constante, el ayuno, morir a los sentidos, indiferencia ante todo lo que nos pasa. Su festividad fue muy importante sobre todo durante la edad media. A raíz de la peste negra y de la sífilis de la debacle sexual que asuela a los siglos medios cuando se emnacipa la gleba y empiezan las peregrinaciones, en los hospitales y lazaretos del viejo camino jacobeo no faltaba nunca una imagen de la santa. El oficio divino le dedica unos himnos deliciosos en latín y su nombre está en primera fila en las letanías mayores.
- Santa Maria Magdalena,
- Ora pro nobis
Paz y bien, presencia de ánimo y mucho contento, hoy creo que voy a ser abuelo.
2010-07-22
2010-07-18
POR QUE TANTA RUSOFOBIA. ALGUNAS PUNTUALIZACIONES A IM GENERAL SOBRE LA DIVISIÓN AZUL
DIVISIÓN AZUL. CARTA ABIERTA AL COMANDANTE GENERAL DE INFAnnnnnnnnnERÍA DE MARINA, JUAN CHICHARRO ORTEGA por antonioparragalindo
nnnnnn
Mi general:
nnnnnn
Mi general:
Me ha gustado mucho su carta publicada en la Tercera de ABC el sábado 17 de julio del corriente en el cual anuncia que la División Azul tendrá una sección en el Museo del Ejército que se va a instalar en el Alcázar de Toledo, así como el relato que nos ofrece acerca de la participación de su padre y de dos tíos suyos, los cuales [estos últimos] cayeron en el Frente del Este, demostrando el valor y el espíritu de sacrificio (¿inútil?) de nuestros sorches en aquellos combates de una guerra de exterminio que llegó a revestir caracteres apocalípticos de auténtica hecatombe.
Como estudioso del tema y amigo del pueblo ruso, sobre todo de su religión ortodoxa, que es el cristianismo en estado puro, después de rezar un responso por los que sucumbieron, por los dos bandos, sobre todo en las trincheras del cerco a Leningrado – slaba y pokoi, gloria a los héroes y descanso eterno- quisiera realizar algunas puntualizaciones al referente. Pues como bien dice usía: nuestros divisionarios fueron a luchar por la defensa de una civilización y allí no encontraron a comunistas con rabo, COMO SE LES DIJO O CREÍAN, sino gente normal y sencilla, que padecía los estertores de una guerra que había sido decretada por las fuerzas oscuras.
¿Quién denunció el pacto Molotov-Ribbentrop? ¿Cómo se le ocurrió al Führer la locura de invadir un territorio tan vasto como la URSS ignorando que Stalin iba a contar con el respaldo financiero de los banqueros suizos y norteamericanos, los cuales habían articulado ya de antemano su Wehrmacht y construido las famosas Autobahn, armando a Alemania hasta los dientes?
Stalin contó con otros aliados formidables: los popes. Ellos fueron determinantes porque apelaron al sentimiento patriótico de fuertes imbricaciones cristianas contra el invasor alemán, hereje y protestante. Mucho más que los comisarios, casi todos de origen judío que impedían retroceder a sus hombres a punta de pistola y a base de vodka en medio del fango de la “rasputitsa” o deshielo, los calores del “leto” o caluroso verano ruso infestado de mosquitos o los 40 bajo cero en Novgorod o el Lago Ilmen. Iban a por los rojos pero sólo encontraron “babuskas”, viudas y madres de combatientes, ancianos y algunas mozas a las que llamaban “pañienki”. No estaban aun en Rusia. Estaban en Polonia y al Voljov lo llamaban Volchó castellanizando la pronunciacjón alemana del fonema eslavo “ja”. Algunos no sabían ni donde estaban ni qué había venido a hacer allí..
Acabo de publicar un libro “Franco y Sefarad un amor secreto” en el cual cuento, rastreando entre los papeles de algunos escritores y periodistas – la Blau tuvo un glorioso plantel de literatos eximios, algunos conocidos como Dionisio Ridruejo y otros obviados y descatalogados como Rodrigo Royo y Tomás Salvador, éste último uno de los mayores novelistas del siglo XX, culpable tan sólo de su amor a España y de su falangismo- cómo aquellos guripas nuestros se jugaron la vida ayudando a los judíos perseguidos y confraternizando con la población ocupada. Muchas de las chicas con las cuales salían a bailar eran miembros de la resistencia.
En conjunto, y personalmente fue un derroche de agallas lo que hicieron aquellos cerca de 18.000 mozos españoles que combatieron en la estepa teniendo un cupo de bajas importantes, cerca de cinco mil y muchísimos heridos. Militarmente- los generales alemanes tenían sus prevenciones ante la operación Barba Roja decretada por Hitler en un blitzkrieg al principio despampanante pero luego Rusia sería el campo de Agramante donde sucumbirían las divisiones motorizadas de la invencible Wehrmacht-, la Azul fue un desastre, pero su sacrificio no fue inútil porque evitaron y -ello formó parte de la fría estrategia del general Franco- que los panzer germanos entrasen en la península ibérica.
Generacionalmente, nunca tuvimos un cupo mejor de sangre joven española. Como su padre y el mío y otros, los que volvieron y los que no regresaron, quedando sepultados en los bosques y los pole en tumbas anónimas de la estepa, a la sombra de cruces de abedul. Lo que relata usía sobre la acogida que tuvieron entre la población de las aldeas donde operaron las unidades en que estaba encuadrados los caídos de su familia me emociona pero no me sorprende.
El pueblo ruso es un pueblo sorprendente: cristoforo y mesiánico que ha ido por la historia con la cruz a cuestas. Es el pueblo del perdón cristiano y la resurrección, justamente lo que nos falta en nuestra católica España, donde afloran las mismas amenazas de cuando entonces y males idénticos (el separatismo, la fractura de la unidad nacional, la procacidad, la estupidez programada de nuestros medios de comunicación, el egoísmo de las derechas y el odio de las izquierdas a nuestra historia común que es la de España, contada muy sagaz y torticeramente por profesores anglosajones muy cizañerosnnnnnnnnn nnnnnnnnnnnnnnnnnn) que llevaron a su padre y al mío a empuñar las armas. Por otro lado, nuestra mentalidad, nuestra literatura y nuestra visión del mundo a vueltas con la utopía- en Rusia uno de los pueblos más instruidos se sigue leyendo al Quijote- nos acerca a estos grandes eslavos.
Sin embargo, nuestros medios de comunicación, nuestras teles y nuestras radios, en manos de los herederos de aquellos odiosos comisarios estalinistas que no hacían prisioneros y fusilaban a llos rehenes, porque el marxismo hoy en España se ha hecho de guante blanco y tiene cuentas bancarias en Wall street y en Suiza- son todos ellos rusófobos.
Todos nos hemos vuelto yanquis en este país obviando la voladura del Maine y el apoyo que prestan los americanos a la segregación de las Vascongadas, Cataluña y Galicia. Nuestros intereses no son confluentes, no están en colusión sino en colisión con los de la gran potencia.
Se denuesta a Rusia mientras los nuevos españoles cantan el God bless America y luego se suben en el cuatro ruedas, se compran segundas viviendas, hacemos mangas y capirotes de la crisis y estamos viviendo por cima de nuestras posibilidades. Y parece que suena todavía el grito irresponsable de Ramón Serrano Suñer, que decía lo que sabía pero no sabía lo que decía, de Rusia es culpable. Es posible que la URSS fuera en parte culpable pero había otros culpables que desencadenaron el arroyo de sangre de nuestra guerra civil. Una inquina y una antipatía que parece que profesaban sus padres tambien hispanófobos y rojos perdidos.
En esas seguimos. En la ignorancia de lo que pasa en el mundo. No saben algunos donde tiene la mano derecha y usted, como militar, bien conoce que un buen servicio de información estratégico, evita muertes y ahorra sacrificios inútiles. Aunque por desgracias las guerras suelen ser una gran ceremonia de la confusión en las que se desencadenan hecatombes.
Aquí la gente tiene la manía de cambiar de chaqueta con pasmosa alacridad.
En cuanto a la decisión de la ministra doña Carmen Chacón de dedicar un sector del museo del ejercito no es más que el parto de los montes. En el antiguo museo del ejercito de Madrid se guardaban muchos objetos, armamento, indumentaria de la División Azul. Que nos venga esta señora con alharacas. Parierunt montes raquiticus mus. Por lo demás, reitero la impresión de agrado que me ha causado su carta. Excuse, mi general, estas puntualizaciones de un humilde periodista. A sus ordenes.
19/07/2010
2010-07-17
2010-07-12
2010-07-10
2010-07-08
2010-07-04
añoranzas del chirimiri
Martínez Cachero
In memoriam. Ha muerto Martínez Cachero un gran clarinista. Aulas de literatura. Oviedo años 60. La regenta y don Fermín de Pas. Fue un personaje real. Era un pasiego que llegó a magistral y luego sería Obispo. A Clarín que era un místico lo crucificó la Santa Romana Iglesia. A su hijo, su único hijo, qué gran novela profética lo mandó fusilar un tal Tovar que por aquellas fechas era falangista luego se hizo del régimen judeocratico, sólo por ser el hijo del poeta. Repugnante. Sin embargo, nadie definió a Vetusta tal cual. A Clarín le amargó sus días un tal Bonafoux un fulano que trabajaba para el americano. Le llamaban la víbora. En fin todo aquello pasó y ¿qué se hizo de nuestras regentas? Pues acabaron siendo barraganas de cura. Sin embargo, el perfil ideal con que nosotros las soñamos sigue incólume a los zarpazos de la realidad. Eran dulcineas con poca capacidad de cabida en la vida real. No me quejo sin embargo. Los vuelcos de la fortuna, sus fragosidades y angosturas, nos llevan al ancho mar de la libertad. Bendito seas, Señor. Asturias paraíso natural. Es lo que dicen pero no lo encuentro tanto. El principado lo encuentro deprimido, ensimismado, con pocas ganas de reír. Impalatable e infumable el bable, la llingua que nos quieren vender. El impulso nacionalista está destruyendo a España. Me consuelo leyendo a Galsworthy, uno de mis autores ingleses preferidos. Es la vida de un pobre cura rural anglicano cuya gran preocupación era casar a las hijas y que el alcalde del lugar no se le durmiera en el sermón dominical. Como tampoco que la chiquillería del pueblo le robase al pobre sacerdote las manzanas del huerto de su rectoral. Otra preocupación fue fomentar entre los clérigos las excelencias del matrimonio. Debieran de leer a este autor inglés, padre de la novela sentimental en Roma, para que a muchos de nuestros curitas se les bajasen esos humos de soberbia apostólica y las ansias de ser sal de la tierra y cambiar el mundo. Menos globos. Cristo es mucho más sencillo y avenido a la humana naturaleza. El Cristo total. Ese pragmatismo de los ingleses con que el clero rural anglicano – rito, tradición, algunos libros, las buenas obras, la compasión, la tolerancia y la humildad- desempeñó su función es digna de imitar por nuestros curas trabucaires llenos de odios y de prejuicios. Fue el odio que crucificó a Jesús y fue el odio que fusiló al hijo de Leopoldo alas. Los estudios clarinianos incoados por Martines Cachero han decaído bastante y Oviedo vuelve a ser una ciudad levítica, impenetrable. Quieren convertir a la región en el eje de la historia y Asturias tan aldeana y reconcentrada sobre sí misma no es más que el culo del mundo. Son tiempos muy duros los que nos ha tocado vivir, inmersos como estamos en la gran contradicción, mientras España se descuartiza a efectos de la globalización que tanto unos y otros cacarean. Asturias antes era universal. Ahora no se ven más que monteras piconas. Menos mal que el tirillas de Villa, el guaje de la cuenca minera, nos ha metido con su gol ante Paraguay, en las semifinales. Este chaval al que el pueblo corea como Villa… Villa qué maravilla, ha devuelto un poco la ilusión de vivir a los deprimidos españoles puesto que gracias a sus remates la roja y gualda vuelve a colgar de la barandilla de los hórreos y del pavés encristalado de los miradores. Madrid qué calor. Añoro el orbayo.
05/07/2010
In memoriam. Ha muerto Martínez Cachero un gran clarinista. Aulas de literatura. Oviedo años 60. La regenta y don Fermín de Pas. Fue un personaje real. Era un pasiego que llegó a magistral y luego sería Obispo. A Clarín que era un místico lo crucificó la Santa Romana Iglesia. A su hijo, su único hijo, qué gran novela profética lo mandó fusilar un tal Tovar que por aquellas fechas era falangista luego se hizo del régimen judeocratico, sólo por ser el hijo del poeta. Repugnante. Sin embargo, nadie definió a Vetusta tal cual. A Clarín le amargó sus días un tal Bonafoux un fulano que trabajaba para el americano. Le llamaban la víbora. En fin todo aquello pasó y ¿qué se hizo de nuestras regentas? Pues acabaron siendo barraganas de cura. Sin embargo, el perfil ideal con que nosotros las soñamos sigue incólume a los zarpazos de la realidad. Eran dulcineas con poca capacidad de cabida en la vida real. No me quejo sin embargo. Los vuelcos de la fortuna, sus fragosidades y angosturas, nos llevan al ancho mar de la libertad. Bendito seas, Señor. Asturias paraíso natural. Es lo que dicen pero no lo encuentro tanto. El principado lo encuentro deprimido, ensimismado, con pocas ganas de reír. Impalatable e infumable el bable, la llingua que nos quieren vender. El impulso nacionalista está destruyendo a España. Me consuelo leyendo a Galsworthy, uno de mis autores ingleses preferidos. Es la vida de un pobre cura rural anglicano cuya gran preocupación era casar a las hijas y que el alcalde del lugar no se le durmiera en el sermón dominical. Como tampoco que la chiquillería del pueblo le robase al pobre sacerdote las manzanas del huerto de su rectoral. Otra preocupación fue fomentar entre los clérigos las excelencias del matrimonio. Debieran de leer a este autor inglés, padre de la novela sentimental en Roma, para que a muchos de nuestros curitas se les bajasen esos humos de soberbia apostólica y las ansias de ser sal de la tierra y cambiar el mundo. Menos globos. Cristo es mucho más sencillo y avenido a la humana naturaleza. El Cristo total. Ese pragmatismo de los ingleses con que el clero rural anglicano – rito, tradición, algunos libros, las buenas obras, la compasión, la tolerancia y la humildad- desempeñó su función es digna de imitar por nuestros curas trabucaires llenos de odios y de prejuicios. Fue el odio que crucificó a Jesús y fue el odio que fusiló al hijo de Leopoldo alas. Los estudios clarinianos incoados por Martines Cachero han decaído bastante y Oviedo vuelve a ser una ciudad levítica, impenetrable. Quieren convertir a la región en el eje de la historia y Asturias tan aldeana y reconcentrada sobre sí misma no es más que el culo del mundo. Son tiempos muy duros los que nos ha tocado vivir, inmersos como estamos en la gran contradicción, mientras España se descuartiza a efectos de la globalización que tanto unos y otros cacarean. Asturias antes era universal. Ahora no se ven más que monteras piconas. Menos mal que el tirillas de Villa, el guaje de la cuenca minera, nos ha metido con su gol ante Paraguay, en las semifinales. Este chaval al que el pueblo corea como Villa… Villa qué maravilla, ha devuelto un poco la ilusión de vivir a los deprimidos españoles puesto que gracias a sus remates la roja y gualda vuelve a colgar de la barandilla de los hórreos y del pavés encristalado de los miradores. Madrid qué calor. Añoro el orbayo.
05/07/2010
2010-06-26
VAGABUNDAJES
A LA ROJA LE SIENTA BIEN EL AZUL
Antonioparragalindo
Escucho a la SER después de la tormenta después de los de ayer… it is brewing a store. Hablan de sexo. Algo sicalíptico están estos chicos por ahí pero no hacen mal periodismo. Una pena que sean rojos. Porque a nuestra selección le sienta bien el azul, igual que la muerte le sienta bien a Villalobos, título de un Nadal de hace muchos años. A lo mejor este año me presento con mis Nabos. Razón: aquí publicas un libro y te lo tienes que comer con patatas, casi dos mil € a la basura y es que el engranaje de la Inquisición Española (yo le añadiría un epígrafe ya saben mis lectores cual es porque estamos en las manos de los marranos y no son moratos, precisamente, ni aquellos que mi abuelo colgaba de una viga en la portada, sino bípedos y opíparos… todo lo quieren para ellos, gana la Banca de Botín y sus muchachos, lo malo es que están enseñando la patita y según entendí el Pasiego ha reforzado sus medidas de seguridad y viaja por el mundo con una escolta de zaguanetes, verdaderos armarios y con todos los kits de detección electrónica, tiene miedo algo habrá hecho… el gachó). Que si esto es civilización yo me voy a Estella. Nos crecen los enanos y bordonean los moscardones por la bragueta. La diabetes, azúcar al canto en los cojones. O a lo mejor es la sífilis. Estos chicos no piensan más que en lo mismo. Pero es muy aburrido todo eso. Yo una vez pasé por Madrigal que es el pueblo con el nombre más hermoso y vi un viejo sentado en el poyo del quicio de su puerto. Tenía un verdadero enjambre de moscas revoloteando en torno a los genitales y me dijo:
- Como no la uso ya, quieren comérsela estas condenadas moscas. Si tendrán hambre los animalitos.
- No se preocupe, abuelo porque se la hayan pasado las ganas de hacer el tonto.
- si me fuese de niñas seguro que haría el ridículo y no como esos de la tercera edad, viejos y viejas que aparecen por la tele contándonos batallitas de tres en una noche.
- Lo que hay que oír y lo que hay que ver.
El vagabundo, después de cuadrarse ante aquel monumento a la sabiduría, cerca de diez arrobas de humanidad y con los molestos dípteros lamiendo los quince botones de la pana que escondía su aparato urinario, a la sombra del castillo donde nació la gran Reina, pasó de largo y torció por la senda que lleva a Barrerán. No quedaba muy lejos Barriomán. Había salido de Arévalo al cantar la alondra y con buen paso y buen andar empujando su bicicleta se plantó a la hora de comer. El vagabundo que fue archivero había querido ir a visitar el castillo de la capital de las Morañas, donde se firmó el Tratado de Tordesillas entre España y Portugal de 1502 y se concertaron las paces de las dos naciones ibéricas que habían andado metidos en guerra por cuestión de una bastarda: la Beltraneja y donde se montó en un pavés la estatua de Enrique IV al que quemaron en efigie por orden de dos arzobispos, seis obispos y una cuadrilla de noble levantiscos. Al vagabundo no le pareció bien que trataron de tan mala manera a aquel buen rey que tanto quería Segovia y le entran ciertas prevenciones al respecto cuando entra en aquel pueblo donde quedan sus mejores amigos por la Puerta de Alcocer. Que reyes España los tuvo peores que aquél y no los queman en efigie. Antes bien, les besan el culo los lamerones y andones ansones de la hora presente. En fin corramos un tupido velo y no hagamos demasiado caso a estas invenciones y sacamientos de gente ociosa y con poco que hacer.
Se le hace de noche poco antes de alcanzar el termino de la Nava y como no tiene posada, echa la manta y el morral sobre un barbechera y se tiende cual largo es para pasar la noche debajo de las estrellas, consolándose un poco lo que puede con el pensamiento de haber circulado por las Morañas que son el entrecuesto o la espina dorsal de Castilla, como si dijésemos el riñón y el solomillo. de las España. Había rodado escuchando el partido por un transistor pequeñito escuchando la narración de la SER de cesar de la Lama. Parlas más que un sacamuelas y ahora otra vez en la senda se entretiene y cachondea con los cuentos amorosos de Soledad Domingo. Los oyentes llaman a la emisora para contar el número de casquete que echaron la noche antes con su marido, su amante o su ligue de taberna con motivo de la victoria de la roja sobre Chile. El vagabundo es de la opinión que a España le va mucho mejor que el bermellón, aunque, castellano de pura cepa y sabiendo que en el pendón comunero el color que manda es el carmesí. Antes se bailaba la Yenka y la Raspa, hoy se homenajea a los movimientos de cadera del Miguel Jackson ese cuyo cabo de año celebra el mundo con tanto hastío como regocijo oficial. Pero en los bailongos de los jubilatas y de los miembros de la Tercera Edad siguen poniendo a Karina y a Manolo Escobar y pasodobles que no falten. Al vagabundo no le gusta demasiado el baile ni los bailongos ni los bailones y bailonas. Ir al baile en sus tiempos mozos era como salir de caza. Además los curas de su tiempo llamaban a los dancing el saladero de la lujuria y los tornaderos del pecado. Y desde entonces no se le fueron de la cabeza tales prevenciones. Su punto flaco no era ese. Si había que cumplir con una mujer se cumplía, hijas mías de mi vida, pero en formación hubo algo de disposición hacia la castidad y era del criterio de que fornicar no es el mayor de los deleites que depara la vida sino el gustirrinín que suavizan el alma las caricias de Baca. Vade retro, Satanás. De últimas, al pobre vagabundo que agarró más de una curda y más de dos cuando ve un jarro de vino piensa que se le aparece el diablo. Huye de las tabernas como del nublado y en muchas botella de vino en los escaparates ve sentada a la muerte. Rechazando la tentación de una bodega en un ventorro que hay en el camino poco antes de llegar a la ciudad de los Santos y de los Cantos y ya a la v vista de sus murallas con sus 88 cubos y más de cinco centenares de almenas entona el Herru Santiago como los peregrinos que van a Compostela. Herru Santiago, Got, Santiago, aurrerá, canto mágico que suena bien en alemán y en latín con algo de vascuence. Nuestro vagabundo es un hombre que prefiere al síntesis. No le gustan mucho las comas. Porque las pone el diablo. Busca la unidad total del mundo. Tiene alma de templario. Saca su libro de rezos y entra en la catedral donde salen a recibirle dos guerreros bien armados. En todo el sentido de la palabra pues bajo la cabeza y el lambrequín y allá donde la espalda pierde su honesto nombre los guerreros de piedra ostentan, cosa que es maravilla de ver, un contundente “tentemozo” mas que el as de bastos, y eran las doce y media. Príapo en la misma cancela del portal de una de las catedrales más viejas de la catolicidad. Oró ante el altar de un obispo que hay en la nave derecha y luego se fue a honrar la memoria del Tostado que levanta sus reales en una estatua de jaspe en el trascoro. Él es un poco el patrón de los escritores y el vagabundo bien es cierto dicen que ha escrito más que el Tostao en sus 66 años de existencia “que en su vida diaria tres folios legó”. Nulla dies sine linea, también fue el lema del vagabundo que fue un escritor sin suerte. Dicen que aquel obispo abulense era algo zarrioso, enano, genial y con malas pulgas y tuvo sus más y sus menos con Roma. Una vez que el papa Eugenio IV lo recibiera en audiencia y como el papa se maravillase de la pequeñez del exiguo mitrado el bueno de don Alonso de Madrigal al pontífice le soltó una fresca:
-La altura del hombre, Santidad, se mide desde el empeine de la ceja hasta el nacimiento de los cabellos.
Lo que quería decir que a los hombres no se les mide por el grosor de sus cojones sino por la altura de su inteligencia. El papa que creía que su prelado en visita ad limina estaba de rodillas lo había mandado levantar y la verdad era que estaba de pie. El Tostao tenía esa mala leche de los pequeñetes y mandó encargó a su fámulo que pidiese al zapatero le fabricase unas cáligas con tacón para calzar coturno cuando iba a celebrar misa. Nicolás Zarkossy ha imitado su ejemplo y aunque no escriba tanto como el Tostao no permite que haya en su escolta ningún agente de seguridad que le saque la cabeza. Cosas de la historia. Y que el martes gane La Roja y Gualda en su nueva guerra- futbolera- con Portugal
(Continuará)
Antonioparragalindo
Escucho a la SER después de la tormenta después de los de ayer… it is brewing a store. Hablan de sexo. Algo sicalíptico están estos chicos por ahí pero no hacen mal periodismo. Una pena que sean rojos. Porque a nuestra selección le sienta bien el azul, igual que la muerte le sienta bien a Villalobos, título de un Nadal de hace muchos años. A lo mejor este año me presento con mis Nabos. Razón: aquí publicas un libro y te lo tienes que comer con patatas, casi dos mil € a la basura y es que el engranaje de la Inquisición Española (yo le añadiría un epígrafe ya saben mis lectores cual es porque estamos en las manos de los marranos y no son moratos, precisamente, ni aquellos que mi abuelo colgaba de una viga en la portada, sino bípedos y opíparos… todo lo quieren para ellos, gana la Banca de Botín y sus muchachos, lo malo es que están enseñando la patita y según entendí el Pasiego ha reforzado sus medidas de seguridad y viaja por el mundo con una escolta de zaguanetes, verdaderos armarios y con todos los kits de detección electrónica, tiene miedo algo habrá hecho… el gachó). Que si esto es civilización yo me voy a Estella. Nos crecen los enanos y bordonean los moscardones por la bragueta. La diabetes, azúcar al canto en los cojones. O a lo mejor es la sífilis. Estos chicos no piensan más que en lo mismo. Pero es muy aburrido todo eso. Yo una vez pasé por Madrigal que es el pueblo con el nombre más hermoso y vi un viejo sentado en el poyo del quicio de su puerto. Tenía un verdadero enjambre de moscas revoloteando en torno a los genitales y me dijo:
- Como no la uso ya, quieren comérsela estas condenadas moscas. Si tendrán hambre los animalitos.
- No se preocupe, abuelo porque se la hayan pasado las ganas de hacer el tonto.
- si me fuese de niñas seguro que haría el ridículo y no como esos de la tercera edad, viejos y viejas que aparecen por la tele contándonos batallitas de tres en una noche.
- Lo que hay que oír y lo que hay que ver.
El vagabundo, después de cuadrarse ante aquel monumento a la sabiduría, cerca de diez arrobas de humanidad y con los molestos dípteros lamiendo los quince botones de la pana que escondía su aparato urinario, a la sombra del castillo donde nació la gran Reina, pasó de largo y torció por la senda que lleva a Barrerán. No quedaba muy lejos Barriomán. Había salido de Arévalo al cantar la alondra y con buen paso y buen andar empujando su bicicleta se plantó a la hora de comer. El vagabundo que fue archivero había querido ir a visitar el castillo de la capital de las Morañas, donde se firmó el Tratado de Tordesillas entre España y Portugal de 1502 y se concertaron las paces de las dos naciones ibéricas que habían andado metidos en guerra por cuestión de una bastarda: la Beltraneja y donde se montó en un pavés la estatua de Enrique IV al que quemaron en efigie por orden de dos arzobispos, seis obispos y una cuadrilla de noble levantiscos. Al vagabundo no le pareció bien que trataron de tan mala manera a aquel buen rey que tanto quería Segovia y le entran ciertas prevenciones al respecto cuando entra en aquel pueblo donde quedan sus mejores amigos por la Puerta de Alcocer. Que reyes España los tuvo peores que aquél y no los queman en efigie. Antes bien, les besan el culo los lamerones y andones ansones de la hora presente. En fin corramos un tupido velo y no hagamos demasiado caso a estas invenciones y sacamientos de gente ociosa y con poco que hacer.
Se le hace de noche poco antes de alcanzar el termino de la Nava y como no tiene posada, echa la manta y el morral sobre un barbechera y se tiende cual largo es para pasar la noche debajo de las estrellas, consolándose un poco lo que puede con el pensamiento de haber circulado por las Morañas que son el entrecuesto o la espina dorsal de Castilla, como si dijésemos el riñón y el solomillo. de las España. Había rodado escuchando el partido por un transistor pequeñito escuchando la narración de la SER de cesar de la Lama. Parlas más que un sacamuelas y ahora otra vez en la senda se entretiene y cachondea con los cuentos amorosos de Soledad Domingo. Los oyentes llaman a la emisora para contar el número de casquete que echaron la noche antes con su marido, su amante o su ligue de taberna con motivo de la victoria de la roja sobre Chile. El vagabundo es de la opinión que a España le va mucho mejor que el bermellón, aunque, castellano de pura cepa y sabiendo que en el pendón comunero el color que manda es el carmesí. Antes se bailaba la Yenka y la Raspa, hoy se homenajea a los movimientos de cadera del Miguel Jackson ese cuyo cabo de año celebra el mundo con tanto hastío como regocijo oficial. Pero en los bailongos de los jubilatas y de los miembros de la Tercera Edad siguen poniendo a Karina y a Manolo Escobar y pasodobles que no falten. Al vagabundo no le gusta demasiado el baile ni los bailongos ni los bailones y bailonas. Ir al baile en sus tiempos mozos era como salir de caza. Además los curas de su tiempo llamaban a los dancing el saladero de la lujuria y los tornaderos del pecado. Y desde entonces no se le fueron de la cabeza tales prevenciones. Su punto flaco no era ese. Si había que cumplir con una mujer se cumplía, hijas mías de mi vida, pero en formación hubo algo de disposición hacia la castidad y era del criterio de que fornicar no es el mayor de los deleites que depara la vida sino el gustirrinín que suavizan el alma las caricias de Baca. Vade retro, Satanás. De últimas, al pobre vagabundo que agarró más de una curda y más de dos cuando ve un jarro de vino piensa que se le aparece el diablo. Huye de las tabernas como del nublado y en muchas botella de vino en los escaparates ve sentada a la muerte. Rechazando la tentación de una bodega en un ventorro que hay en el camino poco antes de llegar a la ciudad de los Santos y de los Cantos y ya a la v vista de sus murallas con sus 88 cubos y más de cinco centenares de almenas entona el Herru Santiago como los peregrinos que van a Compostela. Herru Santiago, Got, Santiago, aurrerá, canto mágico que suena bien en alemán y en latín con algo de vascuence. Nuestro vagabundo es un hombre que prefiere al síntesis. No le gustan mucho las comas. Porque las pone el diablo. Busca la unidad total del mundo. Tiene alma de templario. Saca su libro de rezos y entra en la catedral donde salen a recibirle dos guerreros bien armados. En todo el sentido de la palabra pues bajo la cabeza y el lambrequín y allá donde la espalda pierde su honesto nombre los guerreros de piedra ostentan, cosa que es maravilla de ver, un contundente “tentemozo” mas que el as de bastos, y eran las doce y media. Príapo en la misma cancela del portal de una de las catedrales más viejas de la catolicidad. Oró ante el altar de un obispo que hay en la nave derecha y luego se fue a honrar la memoria del Tostado que levanta sus reales en una estatua de jaspe en el trascoro. Él es un poco el patrón de los escritores y el vagabundo bien es cierto dicen que ha escrito más que el Tostao en sus 66 años de existencia “que en su vida diaria tres folios legó”. Nulla dies sine linea, también fue el lema del vagabundo que fue un escritor sin suerte. Dicen que aquel obispo abulense era algo zarrioso, enano, genial y con malas pulgas y tuvo sus más y sus menos con Roma. Una vez que el papa Eugenio IV lo recibiera en audiencia y como el papa se maravillase de la pequeñez del exiguo mitrado el bueno de don Alonso de Madrigal al pontífice le soltó una fresca:
-La altura del hombre, Santidad, se mide desde el empeine de la ceja hasta el nacimiento de los cabellos.
Lo que quería decir que a los hombres no se les mide por el grosor de sus cojones sino por la altura de su inteligencia. El papa que creía que su prelado en visita ad limina estaba de rodillas lo había mandado levantar y la verdad era que estaba de pie. El Tostao tenía esa mala leche de los pequeñetes y mandó encargó a su fámulo que pidiese al zapatero le fabricase unas cáligas con tacón para calzar coturno cuando iba a celebrar misa. Nicolás Zarkossy ha imitado su ejemplo y aunque no escriba tanto como el Tostao no permite que haya en su escolta ningún agente de seguridad que le saque la cabeza. Cosas de la historia. Y que el martes gane La Roja y Gualda en su nueva guerra- futbolera- con Portugal
(Continuará)
2010-06-24
OJALA GANEMOS A CHILE, PERO TENGO MIS DUDAS
MUNDIAL DE SURAFRICA
Me gustó Japón. Los japoneses han aprendido a pegarle puntapiés al balón y hacen un fútbol habilidoso y rápido, tecnología punta. Seguro que van a ser una potencia en el deporte rey. Juegan como robots y a lo samurai. Tanaka el portero que paró el penalti pero luego el delantero danés remató adentro por poco le vimos hacer harakiri. Golpeó el césped con la cabeza por tres veces en un acceso de cólera casi militar. Son cibernéticos hasta pasando la pelota y arrollaron a la Dinamarca de Laudrup y de Olsen, de viejas glorias. El centro de gravedad de la economía como el de la historia como el del fútbol se está desplazando hacia el este y el Sur. Menos mal que tengo satélite pues gracias a los alemanes he podido seguir todos los partidos del mundial por la RTL y una emisora austriaca. Aquí los partidos son de abono. Es el polanquismo que nos invade. El mercantilismo del laissez faire laissez passer ha llegado al fútbol. Ya lo dice “Pepiño” se acabó la era del “gratis et amore”. Y esto que está ocurriendo con la emisión de encuentros de fútbol se registra en España en todos los órdenes. Se acabaron aquellos viejos tiempos del paternalismo franquismo, del gol de Marcelino a Yeltsin el año 64. Yo estaba en el Bernabeu. La entrada me valió tres duros. Se llevaron las aguas del río del olvido la voz de Matías Prats y de Enrique Mariñas que retransmitan al alimón los partidos de la copa Jules Rimel. Toda España pegada al radio receptor. El gol de Zarra en Maracaná el año 50 lo oí relatar. Apenas me acuerdo. Y Pelé en Suecia el año 58. Luego en los de Chile cuando empatamos con Checoslovaquia a uno y en el último minuto el sevillano Luis de Sol con el portero batido tiró la bola a las nubes. En el del 66 ya estaba en Londres. Había ido a un campo de trabajo a Evesham a la recolección de la fresa. Vivíamos en un barracón. Aquello parecía un Konzentration Lager. Quisimos pasar a verlo en un pub pero había un letrero a la puerta en el que ponía lo siguiente:
-No dogs and no straberrypickers allowed in teh hause
Así pues, como en Inglaterra las casas carecen de persianas y los cuartos de estar dejaban ver el interior, conseguimos ver el partido por la BBC huroneando desde el jardín de la casa de una señora vieja, que no objetaría nuestra presencia de mirones, antes bien nos dio una taza de té, aunque no nos mandaría pasar. Era una tarde plomiza y hacía mucho calor. Recuerdo el gol desde casi cuarenta metros de Bobby Charlton, las paradas de Banks y el desdentado Nobby Stiles alzando la copa triunfante. Rugía Wembley a los acordes del himno nacional. El God save the Queen. Me impresionó aquel patriotismo. Claro que a Argentina el árbitro le robó el partido. Expulsaron a Ratin y a Mas por una tangana. Che, le entré un poco fuerte no más. Recuerdo las declaraciones del bonaerense. La historia de nuestra vida se circunscribe a estos eventos que ponen al mundo en pie cuatrienalmente. Es una forma de pasear la bandera (show the flag), ahora que no hay contiendas generalizadas y cada una de las selecciones hurga en el gusanillo del patriotismo. Cuando juega Inglaterra para muchos ingleses es como si zarpara la escuadra. Ayer el Times sacaba en portada una foto impresionante de una mujer en actitud orante. Se había pintado las uñas de rojo y blanco luciendo la cruz de San Jorge. Parece ser que las oraciones de esta forofa fueron escuchadas por un Dios que se mostró clemente y anglicano, salvando el italiano Capello su credibilidad ante una hinchada exigente que le ha llamado mercenario. You bloody Italian, pero el manager trasalpino al vencer a Eslovenia salvó la cara. Me dio pena Antic todo un caballero. Yugoslavia, la mítica Yugoslavia del Partizan de Belgrado hoy serbio sucumbió ante el empuje yanqui. El del 70 en México yo vivía en un pueblo del Yorkshire mis días de amor y rosas. Brasil dio un recital. Cole el dictor o locutor de la BBC hizo un tour de force contándonos aquellas jugadas de Rivellino, Carlos Alberto, Pelé y Garrincha. Del 74 no guardo memoria como tampoco del mundial del 78. Estaba en América y allí el soccer no había arraigado todavía y no se daban partidos más de béisbol y de fútbol americano por la tele... el del 82 en Lola Membibres acabamos de comprar una televisión en color. Una decepción para los naranjitos que organizamos los españoles. Arconada estuvo fallón y muy titubeante Maceda. Salinas frágil y sin encontrar puerta. Baquero no brilló como solía. Una tristeza densa invadió los bares de Madrid, pero otra vez será. Y así sucesivamente. En Corea un arbitro nos robó el pase a la final. Sí el libro de la vida de muchos que somos ya sesentones viene avalado por el hito de estos fastos futboleros cada cuatro años. Vicente Verdú, antiguo compañero de fatigas en el SP, y al que echo en falta sus artículos magistrales en EL PAIS, ha escrito libros importantes de las relaciones del balompié con la sociología... últimamente se ha convertido en una fábrica de acuñar billetes tanto para los que lo practican como para los que se ganan la vida contandonos las intrigas de los partidos, los jugadores y entrenadores. Es una actividad donde la mordida y el sobre están a la orden del día. Uno de los grandes corruptos y corruptores de este noble español ha sido José María García el inventor del butanitismo según creo saber yo. Es un periodismo marrullero y gritón donde lo importante no es el mensaje sino el medio, la farándula el circo que se monta en torno a los dos grandes clubes de la liga española. Por la Cuatro y por la Cinco una serie de señores y de señoritas se han dedicado a informar muy subjetiva pero sin contarnos lo que pasa en realidad. Se ha contaminado la crónica deportiva que tuvo grandes maestros como Gilera del ABC o Fernández Flores del amarillismo rosa. Esa Sara Carbonero, la chica de las pupilas postizas, ha acaparado la atención internacional por sus amores con Casillas. Como reportera está todavía en agraz. La flema de Del Bosque nos refleja un entrenador que ha ido a Sudáfrica sin ideas. Le pesa demasiado el peso de la púrpura del legado que le dejara Luis. Se echa en falta la furia de Zapatones que deparó a nuestra selección el único trofeo grande que hemos ganado, la Copa Europa. Pero a un Mundial no hay que ir de miramelindos con el tacataca. Es necesario la profundidad, la garra y nuestro once no parece que esté en buena forma física como tampoco está muy "fit "el propio Del Bosque del que no digo que pueda ser un señor pero es un trepa del Real Madrid. ¿Qué pasará mañana? Por supuesto mis deseos y mis mejore augurios para la Roja y Gualda. Al menos el fútbol nos ha permitido a unos cuantos mostrar la enseña patria y colgarla de nuestros balcones. En el 2002 en un viaje a Portugal no se me olvida que la insignia lusitana se asomaba a los alfeizares de todas las casas desde Oporto a Lisboa. Ojalá que los españoles podamos imitar a nuestros vecinos portugueses. Mañana. Hay que ganar a Chile. Y que Dios reparta suerte pero no somos muy optimista. Ojalá estemos en un error. Porque España, aunque no nos gusta, la llevamos siempre en le corazón
25/06/2010
Me gustó Japón. Los japoneses han aprendido a pegarle puntapiés al balón y hacen un fútbol habilidoso y rápido, tecnología punta. Seguro que van a ser una potencia en el deporte rey. Juegan como robots y a lo samurai. Tanaka el portero que paró el penalti pero luego el delantero danés remató adentro por poco le vimos hacer harakiri. Golpeó el césped con la cabeza por tres veces en un acceso de cólera casi militar. Son cibernéticos hasta pasando la pelota y arrollaron a la Dinamarca de Laudrup y de Olsen, de viejas glorias. El centro de gravedad de la economía como el de la historia como el del fútbol se está desplazando hacia el este y el Sur. Menos mal que tengo satélite pues gracias a los alemanes he podido seguir todos los partidos del mundial por la RTL y una emisora austriaca. Aquí los partidos son de abono. Es el polanquismo que nos invade. El mercantilismo del laissez faire laissez passer ha llegado al fútbol. Ya lo dice “Pepiño” se acabó la era del “gratis et amore”. Y esto que está ocurriendo con la emisión de encuentros de fútbol se registra en España en todos los órdenes. Se acabaron aquellos viejos tiempos del paternalismo franquismo, del gol de Marcelino a Yeltsin el año 64. Yo estaba en el Bernabeu. La entrada me valió tres duros. Se llevaron las aguas del río del olvido la voz de Matías Prats y de Enrique Mariñas que retransmitan al alimón los partidos de la copa Jules Rimel. Toda España pegada al radio receptor. El gol de Zarra en Maracaná el año 50 lo oí relatar. Apenas me acuerdo. Y Pelé en Suecia el año 58. Luego en los de Chile cuando empatamos con Checoslovaquia a uno y en el último minuto el sevillano Luis de Sol con el portero batido tiró la bola a las nubes. En el del 66 ya estaba en Londres. Había ido a un campo de trabajo a Evesham a la recolección de la fresa. Vivíamos en un barracón. Aquello parecía un Konzentration Lager. Quisimos pasar a verlo en un pub pero había un letrero a la puerta en el que ponía lo siguiente:
-No dogs and no straberrypickers allowed in teh hause
Así pues, como en Inglaterra las casas carecen de persianas y los cuartos de estar dejaban ver el interior, conseguimos ver el partido por la BBC huroneando desde el jardín de la casa de una señora vieja, que no objetaría nuestra presencia de mirones, antes bien nos dio una taza de té, aunque no nos mandaría pasar. Era una tarde plomiza y hacía mucho calor. Recuerdo el gol desde casi cuarenta metros de Bobby Charlton, las paradas de Banks y el desdentado Nobby Stiles alzando la copa triunfante. Rugía Wembley a los acordes del himno nacional. El God save the Queen. Me impresionó aquel patriotismo. Claro que a Argentina el árbitro le robó el partido. Expulsaron a Ratin y a Mas por una tangana. Che, le entré un poco fuerte no más. Recuerdo las declaraciones del bonaerense. La historia de nuestra vida se circunscribe a estos eventos que ponen al mundo en pie cuatrienalmente. Es una forma de pasear la bandera (show the flag), ahora que no hay contiendas generalizadas y cada una de las selecciones hurga en el gusanillo del patriotismo. Cuando juega Inglaterra para muchos ingleses es como si zarpara la escuadra. Ayer el Times sacaba en portada una foto impresionante de una mujer en actitud orante. Se había pintado las uñas de rojo y blanco luciendo la cruz de San Jorge. Parece ser que las oraciones de esta forofa fueron escuchadas por un Dios que se mostró clemente y anglicano, salvando el italiano Capello su credibilidad ante una hinchada exigente que le ha llamado mercenario. You bloody Italian, pero el manager trasalpino al vencer a Eslovenia salvó la cara. Me dio pena Antic todo un caballero. Yugoslavia, la mítica Yugoslavia del Partizan de Belgrado hoy serbio sucumbió ante el empuje yanqui. El del 70 en México yo vivía en un pueblo del Yorkshire mis días de amor y rosas. Brasil dio un recital. Cole el dictor o locutor de la BBC hizo un tour de force contándonos aquellas jugadas de Rivellino, Carlos Alberto, Pelé y Garrincha. Del 74 no guardo memoria como tampoco del mundial del 78. Estaba en América y allí el soccer no había arraigado todavía y no se daban partidos más de béisbol y de fútbol americano por la tele... el del 82 en Lola Membibres acabamos de comprar una televisión en color. Una decepción para los naranjitos que organizamos los españoles. Arconada estuvo fallón y muy titubeante Maceda. Salinas frágil y sin encontrar puerta. Baquero no brilló como solía. Una tristeza densa invadió los bares de Madrid, pero otra vez será. Y así sucesivamente. En Corea un arbitro nos robó el pase a la final. Sí el libro de la vida de muchos que somos ya sesentones viene avalado por el hito de estos fastos futboleros cada cuatro años. Vicente Verdú, antiguo compañero de fatigas en el SP, y al que echo en falta sus artículos magistrales en EL PAIS, ha escrito libros importantes de las relaciones del balompié con la sociología... últimamente se ha convertido en una fábrica de acuñar billetes tanto para los que lo practican como para los que se ganan la vida contandonos las intrigas de los partidos, los jugadores y entrenadores. Es una actividad donde la mordida y el sobre están a la orden del día. Uno de los grandes corruptos y corruptores de este noble español ha sido José María García el inventor del butanitismo según creo saber yo. Es un periodismo marrullero y gritón donde lo importante no es el mensaje sino el medio, la farándula el circo que se monta en torno a los dos grandes clubes de la liga española. Por la Cuatro y por la Cinco una serie de señores y de señoritas se han dedicado a informar muy subjetiva pero sin contarnos lo que pasa en realidad. Se ha contaminado la crónica deportiva que tuvo grandes maestros como Gilera del ABC o Fernández Flores del amarillismo rosa. Esa Sara Carbonero, la chica de las pupilas postizas, ha acaparado la atención internacional por sus amores con Casillas. Como reportera está todavía en agraz. La flema de Del Bosque nos refleja un entrenador que ha ido a Sudáfrica sin ideas. Le pesa demasiado el peso de la púrpura del legado que le dejara Luis. Se echa en falta la furia de Zapatones que deparó a nuestra selección el único trofeo grande que hemos ganado, la Copa Europa. Pero a un Mundial no hay que ir de miramelindos con el tacataca. Es necesario la profundidad, la garra y nuestro once no parece que esté en buena forma física como tampoco está muy "fit "el propio Del Bosque del que no digo que pueda ser un señor pero es un trepa del Real Madrid. ¿Qué pasará mañana? Por supuesto mis deseos y mis mejore augurios para la Roja y Gualda. Al menos el fútbol nos ha permitido a unos cuantos mostrar la enseña patria y colgarla de nuestros balcones. En el 2002 en un viaje a Portugal no se me olvida que la insignia lusitana se asomaba a los alfeizares de todas las casas desde Oporto a Lisboa. Ojalá que los españoles podamos imitar a nuestros vecinos portugueses. Mañana. Hay que ganar a Chile. Y que Dios reparta suerte pero no somos muy optimista. Ojalá estemos en un error. Porque España, aunque no nos gusta, la llevamos siempre en le corazón
25/06/2010
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