SEGOVIA LLENA DE MOROS Y DE JUDIOS
06/07/2011
Hace unos meses en una de mis visitas a mi ciudad un moro y un cristiano discutían en la calle de Muerte y Vida y el alauita llevaba la voz cantante, le decía al bautizado una injuria que me apabulló:
-Vosotros los católicos para nosotros oléis mal.
Aquel insulto me dolió en mis carnes vivas y estuve a punto de mediar pero opté por la callada y la huida conociéndome como me conozco pues no soy de esos que achantan la muí y una de dos o el moro acaba en el hospital y yo en la comisaría o al revés. El otro día subiendo hacia la catedral por la calle real varios de estos hijos de Alá- se les distingue porque nunca utilizan zapatos, caminan en sandalias o en babuchas- se paseaban orgullosos y ceremoniosos entre desafiante y orgullosa la mirada. Por todo Segovia no se escucha parlar sino en algarabía. El pensamiento lógico de muchos de nosotros es que “estos nos comen”. No lo decimos pero lo pensamos. Estoy seguro de que esta situación de la invasión callada y subrepticia no es casualidad sino obedece a los programas de un gran diseño hispanófobo que han dibujado los forofos de la teología del Holocausto un verdadero caballo de Troya contra el dogma cristiano. No para ahí la cosa porque el turismo de Israel ha crecido sobremanera. Grupos de señoras gordas acompañando a un rabí apelotonados se dirigen a la sinagoga sita en la iglesia del corpus que ellos reivindican. Percibo ese desaliño, esa falta de confianza, esa mirada irónica siempre debajo de la yamulka y de la kippa de los circuncisos que iban pregonando calle arriba calle abajo por la calle San Juan ahora es la nuestra. El judío y el moro saben esperar, tienen una paciencia milenaria y han caído sobre mi ciudad como bandada de cuervos. Me aflijo pero es poco lo que puedo hacer sino rezar y a lo mejor prepararme para el martirio. Los que creemos en Jesucristo en esta España nuestra laica, y en manos de la marranería, tenemos que prepararnos para el martirio. Se avecina en lontananza una buena sarracina. Puede que se haya repetido en estos años de democracia el 711 en versión corregida y aumentada. Siguiendo las mismas pautas. Antes de que la morisma cruzara en barca o en patera el Estrecho antes llegaron los judíos estableciendo una de las sinagogas más importantes de Occidente en Guadix y luego en Granada. Los enemigos de España tienen mucho dinero y mucho poder ahora mismo pero carecen de imaginación porque quieren repetir la afrenta de don Rodrigo en su cava empujando a las harcas de Tarik. Los enemigos de la cruz ya están aquí y yo me acuerdo de los versos de un poeta mirobrigense en esta hora amarga de apostasía y de rendición:
“Muchos monteros la garza combaten
Neblíes muy ligeros sobre ella se abaten
Por altos oteros los perros la llaten
Malo será no la maten”
La garza es España por supuesto y los sabuesos que ladran y pegan mordiscos sobre sus carnes son la Media Luna y el Menorah. Entre bonos anda el juego y entre moros y judíos confabulados contra la cruz la involución universal. Hoy me duelen los insultos de ese marroquí que decía que nos huelen los pies – ellos siempre andan con pediluvios y zalemas y ellos sí que huelen mal- y me duelen sobre todo la ignorancia y desatención de un obispo libelático como el de Segovia Ángel Rubio que ha cometido la torpeza de abrir la catedral a los mahometanos y los mosaicos para una liturgia de hermandad. Juntos pero no revueltos, monseñor. Este fue el obispo que me negó el pan y la sal cuando le propuse que los ex seminaristas de mi promoción, ante la pavorosa carestía de sacerdotes que padece la diócesis de San Ceroteo, antigua cátedra visigótica, fueran ordenados in sacris y recibieran las ordenes que les quedan: el presbiterado como es mi caso o el diaconado. Nos mandó con viento fresco a la farola. Sin embargo, ha abierto la catedral de Segovia a los muslimes y a los herederos de Anas y Caifás y otros sanedritas que mandaron crucificar al Redentor. Este Ángel Rubio episcopios es un traidor. Y tendrá que dar cuenta de su pecado el día del Juicio. Recomiendo a mis lectores que adquieran mi novela reportaje SEMINARIO VACIO LA PUERTA CERRADA. LOS PECADOS MORTALES DE LA IGLESIA que está a punto de salir de imprenta. Estas cosas me llenan de melancolía pero hay que denunciarlas.