2025-10-15

 

 

 

 

EL ESTEBANILLO HIJO FORNECINO DEL LAZARILLO Y OTRAS MUCHAS HISTORIAS

 


Vida y obra del Estebanillo González hombre de buen humor compuesta por él mismo

 

I

Cargar en España para descargar en Flandes… porque desestimando los hispanos lo bueno que encierra su patria sólo dan estima a las raterías extranjeras. Estas son frases de esta novela picaresca, la más completa, acaso la más ácida y desvergonzada, la de un soldado de los tercios viejos, aunque siempre procuraba hurtar el cuerpo a las balas alemanas o suecas o haciendo los más bajos oficios cuarteleros como ranchero o furriel, bien cargada la escopeta de donaires y estratagemas, pues nos dice que la misión de un soldado es sobrevivir pero en esta supervivencia afanosa el autor anónimo hijo de un converso va demasiado lejos criticando la heroicidad de aquellos militares al servicio del rey.

No cree en el heroísmo del Miles Gloriossus (su autor debió de ser un clérigo que conocía la obra de Plauto) el buen Esteban, pero se muestra tan ingenioso en sus salidas que consigue el perdón de su coronel, del almirante y hasta del verdugo, porque formó parte de la tripulación del maestre Colona y posteriormente en el ejército del Cardenal Infante. Peinó el viento y fatigó las selvas, navegó todos los mares y combatió en todas las ciudades de Europa: Milán, Nápoles, Rocroi, Innsbruck, Viena, Brujas, Mastrique, Nimega, por más que siempre procurando cobertura en la retaguardia como marmitón o jefe de cocina en campaña. Su testimonio bufonesco y deformado-una furibunda diatriba contra los estragos de la guerra- fue recogido por los partidarios de la leyenda negra, parcialmente, y sólo en aquellos puntos que les interesan como tesis y antítesis, soslayando el aspecto libérrimo y tolerante del alma española en aquellas pavorosas guerras de religión. Guillermo de Orange por ejemplo no hacía prisioneros. Enemigo capturado, enemigo muerto. El Estebanillo no es la obra de un motolita cualquiera ni de un bufón. Hace una defensa de la fe católica desde la oposición a través de unos ojos aparentemente picarescos.

No era un tonto y parece bien informado aunque, de lo que se desprende de tanta correría que hacen del protagonista un mílite ubicuo, no pudo tener los dotes de la bilocación mística. La narrativa da la sensación de que se metió en batalla y que estuvo en todo el fregado, pero físicamente esto es imposible.

Las escenas de su novela parecen copiadas del cuadro de LAS LANZAS, la Rendición de Breda, vista desde la óptica de uno de los más ínfimos soldados, de un mandria, que fue machacante de los sargentos del mariscal Espínola, ese que pinta Velázquez en la rendición de Breda.

 En todas sus hazañas se muestra indiferente a la adversidad, taimado, descreído, antisocial o poco solidario como se dice ahora con las miserias ajenas y las propias, sucio y desnudo sin demasiada afición a la honra, la riqueza, los amores lo que la sociedad de su tiempo en tanto aprecio colocaba, resultando el bufón de corte (pudo ser también el enano de las “Meninas”) un místico en potencia por el desapego a las cosas del mundo, profeso de la Orden de la Desventura y de la Hermana Pobreza por único dios su propio pellejo, hábil y sutil en el manejo de la lengua, habla en germanía pero su español es de tan calibre que por lo acendrado del estilo supera a toda la novelística del género, el Lazarillo incluido y los libros menores de Cervantes. No pudo ser testigo de tantas guerras ni andar metido en tantos follones, lo cual evidencia la habilidad del narrador para contar las cosas igual que si las hubiera visto. Tampoco cabe duda de su estampa autobiográfica.

El libro está escrito en primera persona pero ello también ocurre en el Pedro de Urdemalas atribuido al doctor Laguna. El médico de Carlos V nunca pudo viajar a Turquía. Cuando se lee este viaje para cuya escritura el autor recopiló mucha información y testimonio de personajes epocales en el lector cunde la impresión de que se trata de una vivencia personal, siendo todo imaginativo. Recoge la información de centones, habladurías, lo que se escribía y decía en aquella época. El siglo XVII fue muy hablador.

Aunque gallego de Salvatierra, desprecia a su patria con una frase que haría a más de uno del BNG llevarse las manos a la cabeza… no hay cosa más grande que no tomarse uno en serio a lo propio o que saberse reír de sí mismo… “antes puto que gallego”… “soy Estebanillo González y fui niño de las escuelas, gorrón de nominativos y llamador de molleras. Romero, medio tunante, fullero de todas las tretas, aprendiz de guisar panzas, soto alférez de cien banderas,”.

II

Se conjetura que su padre, un físico judío que curaba en la corte de Carlos V, que se retira a Galicia emulando al del Lazarillo que era un soldado que regresa a Salamanca al disolverse su compañía de los Tercios Viejos. Parece el Estebanillo emular al Lazarillo, pero hay pasajes en los cuales la supera, dibujando un cuadro de costumbres de la época tan maravilloso, trepidante como desenfadado que hacen pensar en una cosa: que no en vano fue nuestra nación-España contra todos, decía Quevedo- el primer país del mundo de grato vivir y fácil amar, a despecho de las penurias y congojas de un galleguiño que marcha a Roma en busca de fortuna y en recorridos por el orbe ejerce todos los oficios: paje, escudero, estudiante, buhonero, cohén de una coaxca (burdel), monaguillo de un clérigo y ordenanza de un capitán de los tercios viejos. Es también anónima esta obra, aunque publicada casi medio siglo más tarde que la de su paradigma.

 El autor debió de ser, lo mismo que el de Lázaro de Tormes, o un cura rebotado a la delincuencia, o  un soldado de los del tornillo, esto es, desertores que acaba en galeras sentado en el duro banco del cómitre junto a los remos, la barriga llena de torreznos y de frascas del tonel, harto de vino y comiendo tajadas de raya y filetes de tiburón, en coloquio perpetuo con los atunes pues aquí una de tres: o iglesia, mar, o casa real. Boga, boga, marinerito.

La escuadra castellana era temida a través de los siete mares. El protagonista conoció las tres bazas como seminarista en Alcalá, embarcado en la marina de guerra comandada por Antonio de Oquendo el que combatiera a los piratas ingleses que asolaban las costas de Cádiz. En un pueblo de Córdoba, estando un capitán de banderas “haciendo gente” después de su naufragio en el Golfo de las Yeguas vio los fuegos de San Telmo haciéndose soldado de tierra en Arahal. El cabo o capitán de aquella compañía marchaba para Mastrique pero, como de los arteros se hacen los osados, volvió a desertar quedándose en el Potro de Córdoba de vendedor ambulante. Comió el potaje de frangollo de los cuarteles, compartió tasajo, bacalao y cecina con la chusma de forzados.

Arreó mulas cerriles y cabañiles con los monteros de Sierra Morena. Fue lugarteniente de pobres, mozo de espuelas de un caballero santiaguista, galán de monjas y flor de conventos a cuyos muros se arrima en procura de la sopa boba. Lo mejor de la picaresca es lo que tiene de exagerado, de esperpéntico. No deja de ser más que una deformación literaria de la realidad como la novela negra o el western de invención anglosajona. Lo que ocurre es que aquí son más realistas y tratan los autores de hacer un poco de crítica social. La vida se vivía con mayor intensidad por tales fechas.

Esculpe un cuadro brioso de costumbres, un kaleidoscopio de la vida bajo el reinado de Felipe III y de Felipe IV cuando paradójicamente España se militariza y la gente viaja de modo constante. El imperio español era aun el mayor de Europa y no había sobrevenido aun el declive que con tanto tesón intentan adelantar los apasionados de la Leyenda Negra. El hambre y la penuria eran mayores en Inglaterra, los Nederlands o Francia, de donde llegaban todos los buhoneros de Madrid a vender baratijas y alfileres a las damas bobas. Vualá. Pero esos no nos lo cuentan. España era el país más libre de la Tierra. El verdugo de la Torre de Londres no paraba de cortar cabezas y en Paris se organizaban a cada poco noches de San Bartolomé.

 Tardaría casi dos siglos más en ponerse el sol  de los Austrias pues en Flandes el  Apolo español calentaba a los hugonotes a conciencia, que para eso allí estaban los tercios del Duque de Alba. ¿Quién dijo que España estaba machacada? Con el cuarto de los Felipes nuestra monarquía alcanza su glorificación visto a través de la lente cóncava y convexa de un gallego cara linda y mucho donaire que decía de sí mismo ser un hijo de puta… pues antes puto que gallego.

 Hijo de padre desconocido que debió de ser un cura o un militar. Desde las orillas de Rivadavia se dirige a las riberas del Betis atravesando Portugal que seguía siendo español por aquel entonces y nos cuenta sus aventuras. Gustábale  el trago por cierto… “soy un cuba en Sahagún y en San Martín pellejo, piezgo y odre en Rivadavia, del de Montilla consuelo y al de Sacramenia no le hago ascos”.

Se embarca con la flota, se desembarca, es pícaro de costa. Sube, baja, sale y entra del calabozo, pega alguna que otra cuchillada, participa en un duelo. La acción de la novela es un truculento vaivén que a veces marea o cansa porque las tretas y añagazas son siempre las mismas y no tan ingeniosas como las de Lázaro de Tormes aunque cuando engaña a los judíos de Ruan demuestra que no hay cuña peor que la de la misma madera. El episodio se parece al de los yangüeses del Quijote y al cervantino daca la cola, asturiano.

III

 El Esteban se hace pasar por el hijo de un portugués quemado por la Inquisición y se presenta en la sinagoga de Rouen a que le socorrieran, con unos papeles, y una redoma en que traía las cenizas de su progenitor que fue carne de hoguera, según les contó a sus “protectores” que al escucharles no paraban de soltar el guay y de hacer aspavientos de dolor, y hablándoles en su lengua les pidió ayuda. Pero la cendra era un pufo. ¿Se adeanta añ Holovausto como bulo en el cual hay que creer para ser redimido?  

Todos con el rabí a la cabeza aflojaron la mosca y le dieron junto con una bolsa de monedas un salvoconducto para que se presentase ante un “mercadante” de París, pues decía que iba a Viena a ver a unos parientes, recalando primero en la capital de Francia (¿No serían estas cenizas falsificadas un anticipo de la profecía del Shoah?) y les explicaba cómo se había quedado sin dinero, cosa imperdonable en uno de la tribu de Leví, pues al pasar por Pirineos fue asaltado por unos ladrones.

Los hebreos se mostraron conmovidos por la historia que les contara el portugués en ladino (toda una patraña) y le pidieron algunos de aquellos polvos para quedárselas como reliquias de mártir pero él dijo que no les podía dar más, que se le acababan y quería guardar alguna para sí, y ellos bendijeron al peregrino y cantaron la Chemá… el dio de Israel te de infinita gloria pues mereciste corona de mártir.

Con los veinticinco ducados que escotaron aquellos buenos hijos del profeta Moisés en la faltriquera y una carta de recomendación para el tratante de París, de su mismo gremio, Estebanillo tomó el olivo orgulloso y ovante… alegre de haber salido tan bien del encuentro con aquella gente que siempre engañan y jamás se dejan engañar. Según confiesa en un párrafo del capítulo más brillante y de una gran penetración psicológica sobre el carácter de sus hermanos de tienden a la exageración a montar el cristo, suspicaces y descreídos.

 Muy ufano se muestra de haberles dado el timo de la estampita con aquellas cenizas de un quemado por la Inquisición, reemprendió ruta. Mucha gente hoy en Europa, empezando por el ministro de Justicia. Gallardón debieran de haberse palpado la ropa antes de promulgar como dogma de fe casi escatológico un hecho que siempre será discutible y al que todo el mundo ha de decir Amen. Los polvos de este pícaro sirvan para evitar y prevenir los lodos de tanta credulidad. ¿No estaremos aceptando una estafa histórica que destruirá a la religión cristiana y a muchas naciones?

No pudo ser más gloriosa su entrada en Paris con dinero fresco y la promesa de un empleo… cata Francia, Montesinos, cata París la ciudad, escucha cantar en ladino a los mercachifles prófugos de Sefarad.

El que le esperaba entre grandes reverencias, porque los informes no podían ser mejores, le puso a vender agujas. Pertenecía la tienda a otro de los expulsados de España que se llamaba Granados y por lo visto se sabía de coro el romancero y lo contaba por tierras ajenas para su consuelo de desterrado  con voces tan poco entonadas que resonaban por todo el faubourg de Saint Germain des Prés.

Los parroquianos se preguntaban unos a otros por el nombre del que cantaba y temiendo no iría a llover se decían:

-Nous aurions de la pluie, monsieur.

-Ah bon

-Tiens, ils sont içi les espagnols

-Deja?

-Oui

Luego se fue a ver al embajador de Felipe IV que se llamaba el Marqués de Mirabel, don Antonio Dávila y Zúñiga, gran diplomático supuestamente de la tribu de Abrahán pero bautizado por lo que alcanzaría preeminencias en la corte del francés que seguía curando lamparones todavía según nos informa el protagonista de esta novela.

IV

 Nos cuenta que en Cazalla (Sevilla) cada día cogía a un lobo por las orejas y a una zorra por el rabo. Haciendo alarde de ese menoscabo de las cosas del mundo que caracteriza al pícaro y al místico (la honra, las riquezas, el nombradío, el abrigo, la salud, la potencia sexual, echar cinco casquetes en una noche toledana) no le da demasiada importancia a que lo tomen por cornudo, en Constantina tiene a un cabrero por amo el cual no se siente avergonzado de echarse a cuestas un cabrito de pitones considerables “a causa de ser el animalejo de buen tamaño”.

 En mística este tropo se denomina santa indiferencia y Sta. Teresa lo explaya en su célebre soneto “Vuestra soy para vos nací”. Al sexo y eso que dicen el amor no lo tiene en mucha estima Estebanillo aunque tampoco lo desdeña, si a mano viene.

 La carencia de obsesiones carnales y de pasiones [la maté porque era mía] otorga al libro ese desenfado y donaire que impregna sus páginas, con dosis de senequismo, aguante ante las adversidades, estoicismo y hasta resignación cristiana, lo cual tampoco quiere decir que la satisfacción del apetito genésico no fueran en aquella época tan cabal como en la actualidad. Ya que por lo demás, no había televisión ni luz eléctrica.

 El gran protagonista de la novela picaresca son Hambre y  Desnudez. Pues la pereza engendra pobreza y aquellos haraganes no pegaban golpe. Comer más que holgar era el primer objetivo… “vendí mi hijo de cabra por cuatro reales, aplaqué el cansancio con ostiones crudos y camaroncitos con lima. Fuime a dormir a la calle La Galera donde hospedan de ordinario a la gente de mi porte”. Así entra en Sevilla persignándose pues al andaluz hazle la cruz. A la mañana siguiente se fue a la Cartuja donde le dan de comer los hijos de San Bruno habas o frangollos y ración de brandevín (brande wine) brandy o coñac.

 La verdad es que los vagamundos de aquellas horas de imperio pudieron comer caliente y huir de los corchetes acogiéndose a altana en los refitorios  y claustros de los monasterios. Demuestra cuan ruin era la suerte que corrían aquellos pobres soldados, que, habiendo expuesto al tablero sus vidas por favor al rey,  en pago, los desdichados recibían no más que desdén; y en fatiga  pululaban por los caminos y trochas de media Europa como espectros, licenciados de las levas por mutilación, por deserción o porque expiró el contrato… Tocaban caja en esta villa para ir en corso contra el Inglés…De esta forma (el estilo es muy lacónico y desenvuelto en toda la obra) se nos narra cómo se apuntó el “héroe” al tercio y se fue a combatir a los herejes, más que por patriotismo, pues nos asegura que para él la bandera de Carlos V no era más que una sábana pintada, por la hambruna.

Iba al husmo de las perolas y del rancho del cuartel. Su capitán era don Pedro de Ulloa En esta primera parte se describen aquellos encuentros guerreros (autenticas sarracinas) de las guerras de Flandes. En la segunda parte del libro el autor se muestra menos escéptico, no rezuma su estilo tanta desfachatez ni tanto donaire. Porque segundas partes, y aquí ocurre al revés del Quijote, nunca fueron buenas. La trama sigue tejiéndose de embustes y fechorías contadas con no poco despejo y desparpajo. El tomo segundo es un buen cuadro de campaña para conocer las operaciones guerreras y asaltos en los que participaron los Tercios Viejos. Pero todo eso lo veremos después

 

notas

# Lenguaje de los hermanos, surgió con la guerra de las Comunidades, un lenguaje cifrado que por Cantalejo llaman gacería

# Era el espacio comprendido entre el Puerto de Santa María y Canarias temido por los navegantes a causa de sus temporales

# arroz con legumbres

# dieta casi exclusiva de los embarcados

# tres zonas españolas famosas por sus caldos

 

 

 

 

# los que desvalijaban las embarcaciones y robaban a los marinos cuando estaban borrachos o dormidos. Eran muy hábiles descuideros y carteristas. Eran del Gremio de la Ganzúa que también describe Cervantes

# yo como mostrando un poco de sentimiento, diles amplia comisión, reservando algunas de aquellas cenizas para mí pues perdí parte de dichos polvos en una tormenta que tuvimos en el Estrecho de Gibraltar

# plegaria hebraica

# se creía que el rey de España era exorcista capaz de expulsar demonios y el de Francia curaba la escrófula (lamparones) y las llagas del mal gálico o sífilis

# una buena borrachera

# Vuestra soy para vos nací ¿qué queréis hacer, Señor de mí? Dadme alegría o tristeza, dadme riqueza o pobreza, sol con nubes, sol sin velo… pues del todo me rendí ¿qué queréis, Señor, hacer de mí?

# ostras

# la palabra es de origen inglés

 

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ESTEBANILLO Y LA LEYENDA NEGRA. II PARTE

 

Segundas partes nunca fueron buenas. No embargante lo cual este aserto falla en el Quijote lo mismo que en el Estebanillo González, que en la segunda entrega se muestra superior. Era pequeño y bufón, asiduo de tabernas bruselenses y usuario de lupanares de media Europa. Viva la infantería española que se cubrió  de galones y valor en Flandes. El pensamiento puede que les repugne a los globales pero el gracioso de corte, el  ranchero de las cocinas de campaña no se cansa de gritar Santiago y cierra a España. Con razón y sin ella mi país. Es la voz la que está detrás de ese grito, no las explicaciones intelectualoides de la historiografía al uso y que se ha transformado en leyenda negra. Organizan las guerras los más cobardes, los señores en sus castillas y los papas en sus palacios. La padecieron los más valientes y sufridos, las castas de los de abajo. Luchan por Cristo, derraman su sangre en defensa de la fe y de la cruz. La tragedia de España es que Roma no creía en las lágrimas y los pontífices a la sazón estaban encastillados en su negocio. España contra todos y mihi non placet Hispania que intimaba Erasmo. Los banqueros holandeses por una parte y los de San Juan de Letrán financiaron aquellas guerras de religión. Al autor de esta obra cuyo padre converso pertenecía al elenco de sefarditas que se refugiaron en la Ciudad Eterna y a la sombra de los dineros de San Pedro hacían sus negocios no le duelen prendas Esta obra denuncia lo que la leyenda negra silencia entre bromas y veras y chacotas como por ejemplo el relato de su propia emasculación a la que fue condenado por violar a una criada. El pasaje ha sido borrado de las ediciones posteriores a la edición príncipe. La cosa debió de ocurrir en Bruselas. Era el castigo a este tipo de delitos que se acostumbraba en los viejos tercios, como prescribían las ordenanzas. Cuando ya el matarife estaba preparado con los trastos de matar y el jifero se disponía a hacer carne en lo más reservado y valioso de su anatomía llega un mensajero del cardenal Infante – hermano bastardo de Felipe IV- con la papela. Del susto casi se muere nuestro personaje y de la alegría del indulto encuentra una taberna y se emborracha como de costumbre. Es uno de los pasajes más tersos, deliciosos y divertidos de nuestra literatura clásica. Y conserva una modernidad pungente y pinjante, nunca mejor dicho, que parece haber sido ayer mismo. Salió nuestro héroe de Capadocia, quisieron caparlo y no lo consiguieron por la gracia de Dios y prosigue sus travesuras y aventuras de las que al contrario de lo que acontece en otras novelas picarescas suele salir airoso. Como vivandero de las tropas y entre la impedimenta y los bagajes, lo que hoy se denomina Logística, defiende las banderas del emperador. La guerra huele mal. A cadáver, a mierda de mulo, y a chamusquina por el incendio de las ciudades y no solía haber piedad para el vencido. Las villas eran saqueadas, las mujeres forzadas por la soldadesca. Pero hay en toda ella una vibración épica y hasta cierta generosidad. Estebanillo siempre las apaña, cruza con su regimiento el Rin varias veces. Su columna llega nada menos que a Cruzenaque (Kreuznach) en Prusia casi en la frontera rusa y cuenta cómo era la vida en Bruselas donde se situaba el cuartel general. El personal al atardecer se dejaba en la Cur que era como el Prado de Madrid. En Mansfeld monta un tenderete de tabaco y aguardiente donde gana de dinero pues los legionarios no miraban dispendios. Iba y venía con los convoyes portando sus menudencias y remediando las necesidades de la tropa, les vende botas y piales, ropa de campaña por lo general requisada a los holandeses a los que odia lo mismo  que a los judíos, siendo él de la misma raza por parte de padre y hablando hebreo a la perfección, pero no le duelen prendas. A los primeros llama gorgoteros porque al hablar parece que hacen gárgaras y a un hebreo en Viena que no le pagó una deuda lo tiene metido en un pozo de nieve que era una especie de nevera que tenían las casas aquel entonces para conservar la vianda. Se echa varias novias alemanas y las pone al punto. No le importa servir al oficio más viejo del mundo de macarra. En Maguncia tiene un duelo con un compañero por una trampa al juego de dados. Y era tan poco escrupuloso con su mercancía que bautizaba la cerveza que expendía con el orín de los caballos y los parroquianos no notaban sedientos y bebidos como estaban estas bodas de Caná. Que no tienen vino, pues méales la jarra, no se van a dar cuenta. Nos cuenta la victoria de las armas españolas frente a los franceses en Namur y al llegar a Lovaina se emborracha para no variar. Llegué a Lovaina, insigne universidad de Brabante y refrescándose la memoria de mis estudios pasados me entré en un escolástico tabernáculo adonde tomando un calepino de tragos, en poco espacio, pensando hablar romance, hablaba un latín que ni yo mismo lo entendía. Sus aventuras etílicas siguen en Schenke isla del Rin que tomaron los tercios y al bufoncillo hasta el nombre de la ciudad le agrada pues Schenke en alemán significa taberna. Allí siguiendo al grueso de la caballería española se gana el favor de un capitán al que le arrima las mozas, le limpia las botas y el correaje. Era don Pedro de Montemayor.

 En Mastrique entró al grito de Viva España y muera Holanda pero en la famosa plaza de los Nederlands cae prisionero del ejercito del Duque de Bullon. Salva el pellejo en un canje de prisioneros. Al leer esta obra, uno no puede menos de mirar para el Cuadro de Velázquez el de las  Lanzas, en la rendición de Breda, hoy Brest, una victoria para las armas españolas. En esta panorámica de un campo de batalla se espeja el ambiente caballeresco de aquellas guerras de religión que el protagonista cree que financiaban los banqueros judíos de Amsterdam. Hay una relación circunstanciada de los campos de batalla y la zona de operaciones de su hoja de servicios mucho más circunspecta y humorística de la que traza la leyenda negra. Ya sabemos lo que decían las madres de Nordinglen para asustar a los niños. No decían que viene el coco. Decían que viene el Duque de Alba.El Esteban, a  lo que estamos, sigue a lo suyo que es la supervivencia del enemigo en el campo de batalla y de sus jefes que lo arrestan por inquieto y revoltoso al corneta, machacante, ranchero, vivandero y provisor, mozo de mulas y pincerna del general al que le bebe el mejor vino poniendo en la copa otro de inferior calidad. Es un soldado profesional que sin grandes alharacas defiende su bandera aunque del propio estandarte hace befa diciendo que era un trapo colorado. Si viviera ahora mismo hasta se limpiaría el trasero con la señera catalana, esa que cuando la ve Arturo Mas y sus comilitones parece que les da un telele y entran en trance. En Ruppelmunda se echa novia, una Dama de Dame esto es una poligonera. Con esta moza todo el escuadrón tiene esposa aunque sea por un cuarto de hora y el dulce meneito. No sale muy mal parado el amor cortés de esta furibunda diatriba contra la mujer, que rezuma misoginia. En un par de párrafos pone en berlina a las Frigilis, a las Tisbes, las Elisas, los Heros y Dafnes de los sonetos. No existen Lucrecias ni Porcias en la vida real. La fuerza de la sangre es la fuerza del semen y de los dineros con estas damas de toldo y arandela que llamaban en el Prado y en Flandes eran soldaderas y en la legión hasta no mucho cantineras. Su poca discreción y temple arisco con las señoras pues nuestro bufón debía de seguir la técnica de aquí te pillo aquí te mato le va a costar una condena a emasculación (lo caparon, le dieron el tormento de Capadocia) que el sentiría más que la propia muerte en Ruppelmunda. Se trata de uno de los pasajes más escabrosos, aunque nada morboso, y más divertidos de todos nuestros clásicos. Con cuanta resignación, un mar de lágrimas los ojos y dando por perdidas sus mejores prendas, aunque reconociendo su delito va a caminar hacia la toza de un capador de gorrinos con más angustia que si fueran las escaleras del patíbulo. Al otro día vendría el sastre de cortar trajes. Era un castigo muy frecuente en palacio pues los enanos y bufones aparentemente inofensivos se convertían en favoritos de las damas con gran furor y celotipia de sus correspondientes esposos. Es posible que don Francesillo el pequeñete que aparece en las Meninas hubiera sido despojado de sus atributos por orden del rey. Sin embargo, Estebanillo volvió a tener la suerte de cara pues se salva en el último instante cuando el albéitar preparaba los instrumentos para infligir tan horrible suplicio. Atroz pero frecuente en la edad media. A los ladrones se les cortaba la mano, una costumbre prescrita en el Corán. Y a los violadores y abusadores de niños, chas... por eso no abundaban ni el estupro ni el pecado nefando al menos tanto como hoy. Esteban por su parte no quería acabar en eunuco de Constantinopla, ni músico de capilla ni carabina de damas con guardainfante en poder de la gura que es como se llamaba a los cercenados en la edad media pues iban por la vida como esa paloma de bellos colores y con moño, esto es: ramalazo. Aparte del gozo estético que supone su lectura y la viveza y donaire del estilo castellano impregnado de modernidad El Estebanillo posee una contextura profética y nos precave contra la credulidad o papanatismo que desdeñan lo suyo y aceptan como tesoro las baratijas extranjeras. El episodio de la cendrera con la ceniza de los mártires con que engaña a los cansinos zabulones de Rouen es un presagio de la teología del show del Shoah. No consiguieron acallarlo ni convertirlo en caballo percherón. Él era un brioso corcel que coceaba y relinchaba a cada paso. Tiene la desfachatez y el desparpajo de los hijos de la raza, que conocen bien el mundo a partir de una formación clásica en latín y en hebreo. No hay peor cuña que de la misma manera o la befa que hace de los godos, de las ejecutorias de hidalguía y de los linajes. El antisemitismo español no se plantea en términos de raza sino de credo. El protagonista, que es leal a su Rey y a los capitanes que tuvo, acepta con longanimidad los gajes de lo oficio y la vida a la cual le  llevara su infortunio. La bufonería tiene del pan y del palo, de la miel y de la hiel, del gusto y del susto porque no hay cochura sin hermosura. Toda la obra es un canto a la libertad. A veces se lo pasa bien....en Viena celebramos carnestolendas con regocijo y otras horas son horribles...me asieron cuatro galafates de pan de munición, bajándome las bragas me montaron en un potro que no era el de Córdoba y el jifero ya había aderezado una ristra de vendas y estopa... ya afilaba el cuchillo. Su entrada en Bruselas no puede ser más deplorable. Entra en la ciudad llevado por un arriero  que le coloca un par de cuernos de ciervo en la testa y le da de beber toda la cerveza que quisiera...dimos tres o cuatro vueltas al Tur bebiendo a tantas saludes que padecieron detrimento las nuestras y cuando ya el aduar iba cuesta abajo y nos hacía el vino y la señora cerveza a unos de Asperges me y a otros de Humilate capita vestra, acertó a pasar Su Alteza el Príncipe Cardenal Infante, y haciendo todos una salva real de tragos puros y refinados que nos fue forzoso caer rendidos habiendo entrado triunfantes... nos quedamos todos de judíos de paso de la resurrección sin poder ninguno levantarse del puesto ni menearse.

Ignoramos si llegó a enamorarse de aquella frisona que le fue tan ingrata. Aquí los sueños del eterno femenino se vienen abajo. Como en el Quijote, Dulcinea se convierte en Maritirones y la guerra es un pesadilla como la pugna que mantiene el Ingenioso Hidalgo contra los molinos. El amor es una utopía. Revela el autor buena psicología y dice que las mujeres desdeñan al que las quiere bien y se inclinan por  quien las maltrata. Desconocemos el nombre de pila de su querida Balerma  y se parte a campaña no sin antes encerrarla en un monasterio... más de fuerza que de grado y tomé las prevenidas postas y repitiendo al son de su trote adiós Bruselas marché a Namur adonde después de romper los cristales del Mosela y de fatigar el bosque de Crucenaje y de desempedrar las calles de Worms me embarqué en el caudaloso Danubio rumbo a Viena. aunque como dice la copla

madre la mi madre

guardas me queréis poner

 mas si yo no quiero

 yo solita me guardare

La descripción corográfica de los lugares de Europa es una majestuosa descripción de la geografía europea en el siglo XVII. En sus correrías, pasado el Oder, alcanza las riberas del Vistula y se hospeda en el palacio del Duque de Varsovia Ladislao. Poco antes de alcanzar esa frontera tienen un encuentro con los suecos en las filas de la Armada del Archiduque, olvidándose de sus obligaciones castrenses huyó a retaguardia y, afufando, no paró hasta ocultarse dentro de un pajar y debajo de la paja y ser  rescatado por su capitán y esta es la razón que esgrime para justificar su cobardía: si vuecencia me mandó llamar a Flandes para que le sirviese de soldado, está mal informado de mis partes, pues como otros son arciprestes de presbíteros yo soy archigallina de gallinas. Su excelencia estalló en carcajadas esta vez pero en otras ocasiones la suerte pintaba de bastos y el marmitón recibía sarta de palos en pago a sus insolencias y cobardías. Ya dijimos que el protagonista se burla de todo lo divino y lo humano. Al soldado el valor se le supone pero esa frase es muy elástica. Lo suyo eran las provisiones de boca (bocólica), potajerías, perolas de la cantina y andar entre los carromatos o levantando la moral de la soldadesca con alguno de sus donaires y cuchufletas, arrimándoles putas o proporcionando raciones de aguardiente con los que cobraban valor antes del asalto a la trinchera o de una carga de la caballería ligera. Tampoco oculta su menosprecio hacia los zabulones ni su amor al catolicismo que es la única religión verdadera. Cuando Estebanillo se pone serio escribe algún acróstico o un maravilloso poema de felicitación al cardenal infante al que llama rayo de la guerra. Cuando por el contrario está de bromas se mete una cendrera en la faltriquera y dicen que son las cenizas de sus abuelos quemados en un auto de fe cuando no eran más que la escoria de un fuego de campamento. Catalogado como novela picaresca el  Estebanillo tiene su buena dosis de Libro caballeresco pero también es un reportaje periodístico de un corresponsal de guerra desplazado a los países bajos empotrado en las filas de la tropa del Duque de Amalfi y otros insignes mandos militares.

 

 

 

 

VUELVO A CONFESARME DESPUÉS DE DIEZ AÑOS ALEJADO DE SRI

 

No es que me haya alejado de la iglesia pero circunstancias largas de explicar y la entronización del papa Prevost (un pontífice como Dios manda al parecer y muy diferente a ese don Pancho el argentino judío) me empujaron a arrodillarme ante el tribunal de la penitencia. Otro aliciente que podría venir al caso y es que esta pascua de resurrección y de pentecostés (Pfingstein lo llaman los germanos) he sentido aletear la paloma del Espíritu Santo a mi alrededor.¿Un llamamiento de la gracia de Dios? 

Para “soltar e saco” opté por acudir al penitenciario de la catedral de Segovia, don Crescente, que era de mi curso, contemporáneo y compañero de fatigas, ya algo viejo y torpe, de la antigua escuela, que no colgó la sotana a pesar de las convulsiones experimentadas en el seno de la Iglesia con esto del concilio y del Aggiornamiento. 

Le recuerdo bien cuando eramos niños: no muy grande de talla pero fuerte como un quejigo; jugando a la pelota pegaba unos mangazos que eran como disparos contra el frontón de la torre Carchena esto es el paredón del cine Cervantes que decíamos la huerta del seminario. allá cargabamos nuestra furia dandole pelotazos o arrancando las ramas del viejo moral milenario cabe la muralla que fue plantado por un decurión romano. Le pedí cita en la capilla del Cristo que remata la nave del crucero de la última catedral gótica. No sabía cómo empezar la declaración de mis culpas pero ¿Qué pecados se pueden cometer a los 81 años? Cuando uno va de vencida, en el atardecer de la vida, cuando uno está de vuelta de todo.

─Ave María purísima

─Sin pecado concebida ¿Qué te trae por aquí, Antoñito?

─Pues vengo a confesarme contigo Crescentín- ¿Te acuerdas de mí?

─Cómo no me voy a acordar. Tú eres Parra, el hijo del sargento Parra.

─¿Cuánto hace que no recibes el sacramento?

─Más de tres lustros

Noto al penitenciario hacer un mohín de incredulidad y revolverse dentro de la cajonera, alarmado en su asiento detrás de la rejilla. Suspira, se hace un largo silencio y después dice:

─Tres lustros son quince años

─Cabales.

−En Sevilla y en Linares veinte mulas son diez pares. ¿Perdiste la fe, Parrita?

─Quiá. Sigo los viejos misales y rezo El oficio divino del rito de San Pió V.

─Fue abolido

─Por eso mismo y me hice ortodoxo ruso, en Londres fui ordenado diacono por el metropolita Antonio

─Que disparate pero Xto lo perdona todo. Además veo que obraste con rectitud de intención.

─¿Vas a misa?

─La rezo en casa

─Esas misas no te valen. ¿No te acuerdas de lo que nos enseñaba don Demoque, mi predecesor en el cargo que era un experto canonista. Las leyes no te las puedes saltar a la torera, están ahí.

─A ver cuarto mandamiento ¿Honraste padre y madre?

─Les ayudé en lo que pude. De joven entregaba todo lo que ganaba en casa y de mayor cuidé de ellos pero ellos me devolvieron mal por bien, yo era la oveja negra, un rebotado, un perdís desde que me salí de los curas.

─Bueno, eso ocurre en las mejores familias. A ver el quinto. ¿Mataste o heriste de palabra u obra a un semejante?

─Ganas me dieron, padre pero en lugar de agredir a los que me agredía o difamaban intentó olvidar agravios.

─Bien. El sexo mandamiento. ¿Cometes actos lujuriosos?

─Que cosas tienes, Crescente. A estas alturas, ya somos más viejos que san Hilario. Castos a la fuerza. Me operaron de la próstata y fue como una emasculación química. Sin embargo, la vista y el oído son los últimos que pecan y a mí me gusta consultar las páginas porno de internet, Entro en los teatros pornos para ver el culo y lo que haga falta a las gachís. es una forma de deshinibirme de la presión recibida cuando eramos latinos cuando si a una la veías el peroné había que mirar para arriba e ir a confesarte el pecado. porque pecar con la vista era una ofensa gordisima y nada se diga cuando pecabas en solitario con la mano. Entonces te decía el P. Muñana que ibas a las calderas de Pedro Botero de cabeza.

─Ay, Dios pero qué cosas dices, pues? Eres un hombre casado. Faltas al sacramento del matrimonio.

─Sí pero mi parienta anda a lo suyo, se cansó de mí y yo me alivio de mis cuernos entrando en esos chats infames donde toda suciedad encuentra un hueco. En los masturbatorio veo como se meten el dedo en a vulva las mujeres de medio mundo, se meten el dedito y parecen estar batiendo una tortilla, vuelven la vista y eyaculan espuma por la vagina. A mí no es que me solace esto. Es que siento horror. Porque se cumplen las profecía de Sodoma y Gomorra al alcance de un clic.Las  peores, las más hernecidas, duchas en la felación, el sexo anal son las rusas, Crescencín. Estoy por decirte que casi me enamoro de una. Una siberiana guapísima. Aparece en su portal luego cierra la ventanilla cuando es requerida por alguno de sus lujuriosos solicitantes para un privado. Regresa al cabo de un cuarto de hora todo despelujada y dando la impresión de que el cliente de turno la ha dado una paliza luciendo moratones en nalgas y pechos.

─Uy por Dios y esa porquería miras

─Se llama Estrella y yo trataba de convertirla hablándole de las penas del infierno.

 Me escuché con atención y luciendo una cara virginal con aire de no haber roto nunca un plato. Le hablo de que la prostitución es no solo peligrosa para la salud del alma sino del cuerpo también. Le hablo como diacono de la iglesia rusa pero por toda respuesta me mostró un gran cipote de plástico y dijo una blasfemia este es mi Dios. Fue vendida por un macarra judío y acabó en Estambul en un lupanar pero consiguió regresar a San Petersburgo donde se gana la vida haciendo la carrera. Sexo cibernético.

─Esta Estrella, Crescente, ilumina los cielos tenebrosos del terror del milenario.

─Pero hombre, querido colega, ya no eras aquel piadoso seminarista que ibas camino de la capilla con los ojos bajos ¿cómo te metes en esos tinglados pecadores? Mucho cambiaste´¿Por qué lo haces?

─Porque tengo ordenes sagradas bizantinas- Así me lo encargó el obispo, Parra, hay que traer a las descarriadas al redil y porque soy periodista y me gustaría anunciar a la juventud de los peligros de estas corrupciones, de estas putas.

─Esas pobres mujercillas acabarán en la cárcel, el hospital o la calle

─Sí ciertamente. Vosotros los que os quedasteis en el seminario ─le digo a mi antiguo colega─ no sabéis la fuerza que tiene el diablo y yo donde me ves soy un luchador contra la bestia. Vivis en la inopia. escuchando a ña COPE

Mi confesor frunce el ceño y tarda de reaccionar unos minutos a mi interpelación para decir:

─No te puedo dar la absolución

─¿Por qué?

El viejo penitenciario Crescente se hace de pensas. El Crescentín, al que yo tanto apreciaba cuando éramos latinos y jugábamos al futbol en Baterías aquel viejo campo de futbol, me despide con cajas destempladas y yo estoy a punto de mandarle a tomar por culo pero aprieto las cuentas de mi rosario y me voy que bufo. Dios los perdone a él, a Estela, a una iglesia que no ha sabido estar a la altura en su lucha contra el diablo. Esperemos que el papa León XIV retorne a la iglesia de Roma por donde solía. Amen. Mi exomologesis acabó como el rosario de la aurora. Pienso para mi consolación que hay sacramentos que nos son dogmas sino meros símbolos y que sólo Cristo puede perdonar los pecados. No un cura inepto mal encarado y gilipollas.

 

 

 PRIAPO

El dios Príapo padre de la fecundidad orgánica fue una de las divinidades señeras del Olimpo- protector de las mujeres sobre todo de las prostitutas y de los eunucos sus templos se elevaban por todo del imperio romano. Venerado como transmisor de la vida, tenía sin embargo un rival: Tanatos (la muerte) y ambos cabalgaban el mismo corcel. Como Castor y Pollux, sendos mellizos hijos de Jupiter. Representantes del amor y la muerte

 Los estertores del coito son lo más más parecido a las contundentes sacudidas de la agonía. Se trata de dos realidades polimorfas de los seres vivientes. Todo lo que sube baja. Todo lo que asciende se derrumba pero recordemos la frase del Arcipreste "por dos cosas se afana el hombre por haber mantenencia y por folgar con fembra placentera". 

Esta faceta del sincretismo pagano siempre me fascinó. ¿Vuelve el culto a Príapo? 

En los portales de internet aparecen las sacerdotisas del gusto acariciando un falo descomunal al cual besan o chupan y con tal aparato que descarga semen sobre los clítoris y ponen perdidos los labios con el flujo seminal a la caza del ovulo fecundador. 

Me maravilla y me aterra a la vez porque yo como muchos de mi generación fui educado en el culto a la castidad, la fidelidad como seguro de vida, la fornicación como pecado y el sexo como un don divino que sea  delito profanar.

 Quebrantar el sexto mandamiento, segun los antiguos canonistas, abre las puertas del infierno y desencadena la enfermedad, los celos, y puede que también la muerte.

 Actualmente, el sexo es mero artículo de trámite, mero deleite; su misión genética, evitable o subyacente (pildora anticonceptiva, el Dew, el aborto) carece de importancia formal. Las relaciones sexuales se pluralizan y a ver quien da más.

Lo malo para los creyentes es que Cristo no dejó en su legado evangélico ninguna instrucción al respecto. Sólo escribió en la arena y desconocemos lo que allí escribió cuando los escribas y fariseos iban a dilapidar a la pobre pecadora, “El que esté limpo de pecado tire la primera piedra” dijo a los fariseos… “Sed perfectos como mi Padre celestial es perfecto”. 

Esta tesis supone  contradicción contra el mundo judío del Viejo Testamento. David pecó con Betsabé y lloró su pecado. Entre los hebreos, excepto entre los esenios y nazarenos que no bebían vino ni yacían con mujer, la soltería era un castigo divino. 

Mahoma permite a sus fieles tener en su harén todas las hembras que puedan mantener.

Los primeros cristianos preferían la continencia y para apartarse de los peligros de la mujer huían al desierto, se encuevaban o se cortaban la mano para no pecar como hizo el eremita san Sergio. Así nació el monacato como camino de perfección ¿O de ruina total? Ya lo dice el refrán "mujer sin hembra pierde el hombre y pierdese la siembra"

Primó la castidad como una de las primeras virtudes cristianas pero ¿no era eso una entelequia propio de gazmoños y de tarados? No, responden los padres del desierto.

 Si un ojo te escandaliza arrancatelo. Es preferible entrar tuerto, cojo o manco en el reino de los cielos que ir entero al infierno. 

Convertirse en eunucos de Xto es el afán de los primitivos eremitas, los puros, los que heredaron la tradición mosaica del nazarinato, que no bebían ni vino ni sidra ni yacían con mujer.

 Ahora cunde entre nosotros la prostitución, la incontinencia y el libertinaje, a muchos se nos caen los pelos del sombrajo.Descripción: https://blogger.googleusercontent.com/img/a/AVvXsEi0K-MXq-2BD-644d-We034SzPJx55JzCJAS38LnNhU-62PYSqFM3k2mk32lfCno0TqK4aY-8z86jHKx0vqulXSwAWPqUaBscNR8KAIqH7rMIAujvdOg_rTpu-oMte86V-43Kj50Szhx9WZ34dj9YXB7nqblg9b9PARHQ6aqAEsM1UROIPAwRVv91LFhH8

 A mí por lo demás todos los dedos se me vuelven huéspedes. Los bajos instintos, el falo es lo importante, mientras la pureza de costumbres, el amor cortés, la ternura son algo del pasado. Yo debo de ser un pijo aparte. Porque a estas alturas de mi vida los falos y los coños, las crijas y verijas son el hazmereir al ver a los mortales que se afanan por tan poca cosa. Dentro de cien años todos calvos y miembros yertos

 

 

 

EL EBRO PASA POR ZARAGOZA CANTANDOLE JOTAS A LA PILARICA

 

Agua que se quema el río y cosas veredes. Los desgobiernos y despropósitos nacionalistas de esta plutocracia que está derivando en Putocracia y no hay que ver más los programas de la tele en las veladas aburridas que aquí unos pocos deciden el destino de las muchedumbres controladas por el voto y la bota de la ley de Hont, le quieren meter mano al Ebro. Esta  es una de las primeras cosas que se estudia en poliorcética. Lo primero que hay que hacer cuando se asedia una plaza es cerrar la canilla y cortar el agua. El Guadalquivir por ejemplo fue desviado, cuenta un cronista, de su curso por Leovigildo cuando asediaba a Córdoba defendida por su hijo Hermengildo. Almanzor talaba campiñas y quemaba la mies  pero los cristianos que tampoco eran mancos controlaban el flujo de las grandes acometidas. Así Alfonso secó las fauces del Tajo. La guerra del agua es vieja como el mundo. Era una táctica estratégica practicada por los cartagineses de Anibal y por los romanos. Ahora el Ebro agua que se quema el río agua para Barcelona, un capricho de los nacionalistas catalinos, los españoles a pagar la obra y ellos el beneficio, cuando vienen a Madrid nunca hablan en catalán puede hacer una revirada de su curso natural. Obras y desvíos. Pero cuidado el río Ebro es el río padre de España a la cual entre unos y otros están desmembrando. Ebro. Iber. Y dice el refrán que Segre, Arga, Gallego, Zadorra, Nela y Aragón hacen al Ebro un río mayor. Es el río padre. El más caudaloso de España. Recordemos aquellos nombres que aprendimos en las lecciones de geografía en la infancia. El Ebro nace en Peña Labra y desemboca en Amposta por Tarragona. Su curso se prolonga 927 Quilometros bajo la mirada de las crestas nevadas del Pirineo. Padre de España. Ay si Gracián levantase la cabeza. Caudal libérrimo que pasa cruza españolísimo por las barras aragonesas y que ahora quieren los pruritos nacionalistas catalanes convertir en cuatricolores. Se hace grande y gana empaque en Miranda y al cruzar por Zaragoza a la Pilarica le canta una jota. Nadie ha escrito mejor sobre este tema que Pedro de Lorenzo aquel falangista placentín al que los avatares hicieron monárquico y terminó engalanando el ABC –ay aquel ABC de don Torcuato ¿adonde fuiste a parar?- en una obra cumbre que se llama Viaje a los ríos de España siguiendo los indicios de la Crónica General del Rey Sabio que llama a España “tierra de bienes favorecida y de gracias naturales bien abastada”. Ebro es río padre de España. Y madre de Aragón a libre Aragón, comentaba Gracián. No entiendo mucho esto de los trasvases. Me huelen a chamusquina pero muchos políticos y politicastros y crestas coronadas (muchos cetros derribó la ira) de la punta al pomo son unos tanarras. Los catalanes quieren volver a sacarnos los cuartos y cabe recordarles que si beben agua todavía en Barcelona lo poco que queda el chorrillo se lo deben a los pantanos de Franco. Pero claro aquella infraestructura era para un país de poco más de treinta millones de personas y hoy en las grandes mega-polis del mundo entre las cuales se encuentra la capital del principado con sus casi diez millones de habitantes se está acabando lo que se daba. Se agota el surtidor. Agua que se quema el río. Guerra del agua. Aquí podemos reventar todos como el lagarto de Jaén pero uno está preparado de antemano. Me crié en un pueblo donde aun no habían hecho la traída. Si te daba un apretón había que ir a obrar a la cuadra, y de lavarse, en la palangana y vas que chutas, grifos no había. Soy de la generación que llegó la primera al bidet y al inodoro porque antes no había papel higiénico en España y las mozas se limpiaban el culo y lo otro con una teja Y mi tía Paulina me ponía en la mano un botijo:

      -Venga, Antonio, a por agua.

Estuve yendo y viniendo a la Fuente Colorada y Uy dios mío que chorro manaba en aquellos tiempos. Tenía que echar tres o cuatro viajes pero no me importaba. El sitio era agradable. Las mozas enamoradas pelaban la pava con sus pretendientes y de paso llenaban el cántaro. Yo me conformaba con mi botijo. Humilde e inocente niño me era yo. Hoy aquel lugar es un asperizo. Ya la fuente no mana. Y no es que haya venido Almanzor a sitiar el pueblo. Que va. Es la avaricia de los aldeanos que han perforado el somo con taladros kilométricos para chupar H2O para su remolacha y venga líquido elemento. La avaricia rompe el saco y no les tengo ninguna lastima a los de Fuentesoto, buen pueblo pero muy mala gente. ¿Que tienen sed? Pues que se aguanten. Que los acuíferos no son inagotables. Tiempos vienen de vacas flacas y dicen los asturianos: “ficistela en Pajares, pagastela en Campomanes”. Es el pueblo de abajo. Y en España los de arriba y los de abajo siempre anduvimos a cantazos empuñando el bichero o el garrote para deslomarle las costillas al prójimo. Agua que se quema el río. Convite de catalanes y dicen los cursis que el agua es un bien escaso. Eso ya lo sabíamos. ¡No te jode!               

 

 

 

ES LA MANO ASESINA QUE MUEVE LA CUNA QUIEREN HACER DE ESPAÑA OTRA GAZA MIENTRAS NUESTRA CLASE POLÍTICA SE PONE DE PERFIL

 

los sionistas están detrás de los pavorosos incendios de la peninsula iberica ponendo en juego una tecnología de drones lo he logrado saber a través de los chats pornos que controla la mafia judia y esta que dice llamarse stella con un suteneur o pimp macarra diriamos nosotros judeo polaco me amenazó con pegar fuego a mi casa. le sonsaqué la información pues soy un periodista de la vieja escuela de investigación que sirvo a mi patria y no soy la voz de su amo que parla por boca de ganso. el gobierno de madrid debería pedir explicaciones y la benemerita hacer las pesquisas correspondientes de esta mafias judias. todo ello tiene que ver con la guerra de gaza y la de ucrania. se trata de recoger datos sobre lo que pasaría en caso de una guerra nuclear donde lo primero que arderá será el bosque dando pabulo  después a las ciudades y pueblos una idea demoniaca dios no lo permita


 

 

 

ALFAQUEQUE DE PUTAS

 Había esta tarde sobre el cielo inquietantes signos apocalípticos: un sol rojizo como la grana y espesa niebla se cernía sobre el horizonte que atravesaban sus rayos.Los tejados de las casas y el techo de los coches se cubrían de ceniza. Quise dar de lado a los mamporreros y mamporreras informativos y en internet me encontré con el pimp ese macarra judeo polaco que trafica con damas. Es un tipo del mossad encargado de pervertir a Europa mediante el trato de blancas. El incendio de los bosques puede también estar en los planes del Gran Diseño de la agenda 2030 que los globalistas traman. Y es el grito de delenda est Hispania (acabemos con España). Todos los chats porno de la red bajo su control las girls dando gemidos aullando igual que gatas en celo y recibiendo proposiciones deshonestas… me comería tus tetas, moza… ¿te gusta mi polla de veinte centímetros?… ¿eres peluda? escribía un usuario que decía llamarse Terremoto. Parte de la clientela es norteamericana soldados de la base de Fort Brag, muy salidos porque en la compañía no les echan permanganato ni bromuro para mitigar su ardor sexual, pero había franceses, ingleses, algún alemán y tres indios. Me disfracé del templario que porto conmigo y entré en el chat con un alias.Me indignaban las burradas que ponían negro sobre blanco tales individuos y como don Quijote de la Mancha salí al campo de batalla para luchar contra los malandrines, a desfacer entuertos en defensa de Olga la Larga la modelo que tiene secuestrada el macarra polaco que atiende por el nombre de Fairy Tale y del cual hablé ya varias veces. La rusa enseña sus perfecciones anatómicas y el hebreo hace caja. Con halagos y promesas el oro y el moro se la llevaron a Jerusalén pero no la probaba. Apareció al cabo tomando el sol en una playa de Tel Aviv para establecerse en Estambul a los pocos días. Allí fue maltratada y violada por los turcos. Un jeque árabe quiso comprarla. Fue sacada a la fuerza de su país y ahora creo que Olga la Larga hace la carrera por algún lugar de Europa no te dicen quienes son pero yo soy listo.Me huelo la tostada y con la ayuda del arcángel san Miguel le dije al libidinoso personaje las verdades del Barquero:

There are a lot of motherfuckers in Poland

Contesta Fairy Tale:

What are you doing here, then?

─Trying to put you in gaol. Porque es en la cárcel donde debes de estar y no viviendo a costa de las mujeres

El pimp es un macarra de cuidado pero se zafa del golpe poniendo el grito en el cielo. Porque intuye que sigue sus pasos, que una organización con brazos muy largo anda tras él y me banea, me lanza a las tinieblas exteriores. Miente el bellaco pero yo soy un proscrito que  adivinó un axioma: ocupación triste entre los hombres es adherirse a la defensa de la verdad. Yo canto la salve: vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos los desterrados los hijos de Eva. ¿Por qué te metes donde no te llaman? Siempre fuiste abagodo de las causas perdidas y ellos tienen la sartén por el mango. Dominan. Al Trump el bisoñé postizo le cae sobre la frente mientras lanza excomuniones y maldiciones

─Te expulsamos de esta sala porque te has metido con la modelo, la injuriaste. La acosaste

─¿Injuriarla yo? Si es a ella a la que trato de defender salvándola de tus sucias garras, so mamón.

Siempre mienten estos tipos tratando de blanquear sus crímenes bajo una apariencia de legalidad, echándote a ti la culpa de su trata de blancas, la inmigración ilegal, tráfico de armas, guerras y titulares a toda plana del New York Times. Siembran la corrupción, la mentira y la desolación por donde van, para luego motejarte de nazi y de anti sionista cuando los nazis, los partidarios del exterminio y de la guerra de Ucrania en colusión con los gringos son ellos. Me sentí orgulloso de mí mismo. Salgo al campo a defender doncellas profanadas y alzar la bandera de la razón contra la sinrazón. Mas, me da pena Olga la Larga. La mujer más despampanante de Rusia es un caso perdido. Trabaja como esclava para un pimp que la exprimirá hasta conseguir todo el dinero que reporte su trabajo de cantonera para después arrojarla a la basura como un juguete roto. Gracias a mi enfermedad y a las horas de reflexión que permite mi convalecencia me puedo permitir el lujo de ser alfaqueque de rosas cautivas como esta bella siberiana, incauta y desaprensiva hembra. El KGB, por contraste, tiene el brazo largo y ese macarra que se esconde bajo el alias de Fairystory (en traducción al inglés del polaco) no tardará en caer. Quizás le aguarde una temporadita en Siberia por salaz y mentiroso.

 

 

 

Alcanza su zenit el verano cuando los días van acortando. La trilla y la siega acabaron pero aguardaba la vendimia. Hoy 20 de agosto. Íbamos mi abuelo Benjamín y yo tal día como hoy a uno de los majuelos, el de la cuesta del hoyo Castrillo por donde la fuente Colorada, de su propiedad a ver las cepas y alegre y ceremonioso atentaba debajo de las hojas de aquella uva aragonesa que daba un tinto superior:

─Están pintonas

Quería decir honremos a Baco que nos da el mejor mosto de Castilla la Vieja y los racimos generosos colgaban de la rama de la cepa, ya no siendo verdes sino moradillos. La cosa iba buena, había que ir preparando los lagares de octubre. Endespués reunía a todos sus nietos (Agustin, Maudillo, la Rosario, Lidia, Pedrico, Salva y yo) y nos montaba en el carro. Los machos el Cordobés y el Noble bien recuerdo los nombres de la pareja de mulos bajaban la cuesta de San Vicente dejando la ermita románica atrás más contentos que unas pascuas. El abuelo les ponía cascabeles en la collera y tira millas, una hora de camino y de pronto avistábamos los muros del monasterio de santa María de Sacramenia. Llegábamos a misa.  Los curas de las parroquias de la contornada hacían misa solemnes en latín, tantos kyries, tantos credos, tantos gloriapatris, ¡cuánta belleza y devoción!.  Después la romería y los cohetes, el baile, las garrapiñadas de Alcalá, algún humilde juguete para entretener nuestros ocios aldeanos. Éramos niños tristes y éramos niños alegres a la vez. Arriba la banca.  Los mozos hacían corrillos alrededor del Tío Bigotes el del mandil y se gastaban los cuartos en aquel tenderete trolero cuando no les veía la Benemérita. Los guardias se quedaban mirando a las parejas velando por la moralidad, el recato y la virginidad de las muchachas en aquellos bailes de candil y si algún mozo se arrimaba a la novia más de la cuenta el cabo decía que corra el aire.  El tambor, la gaita y el caramillo habían sonado en aquel redondel delante de las puertas del cenobio desde siglos. En mi infancia tuve la suerte de asistir a una romería medieval. El abuelo volvía contento después de los traguillos y de las parladas que había tenido con los de su cuadrilla y los que eran de su quinta. Él estaba muy orgulloso de ser de la quinta del rey Alfonso XIII (1886). Y decía que su padre Toribio se libró de ir a la guerra de Cuba por ser hijo de viuda. El regreso a Fuentesoto era cuesta arriba y tardábamos algo más que a la ida cuando ya los luceros tachonaban las altitudes del empíreo y las mujeres salían a recibirnos para vernos llegar sin dejar de mirar para arriba. En el cielo de las noches de agosto “lloraban las lágrimas de san Lorenzo”.

─¿Qué nos traéis, padre ─decía mi tía Paulina cuando desuncíamos bajo el bardal de la portada

─Garrapiñadas de Alcalá y un “sí, señor, y un mande usted”

─¿Había mucha fiesta?

─Algo había─ decía Benjamín que era hombre de pocas palabras y de menos explicaciones

Ahora que lo pienso cuando han pasado tantos años recuerdo con devoción grande a aquel abad francés que fundó la orden del Cister y propagó por Europa la devoción a María. Era la regla del ora et labora, los cantos de vísperas en monasterios edificados en valles nemorosos apartados donde era más fácil el encuentro con Dios y con la naturaleza. Yo he sido un poco cisterciense a lo largo de mis días y suelo rezar el “Acordaos” antes de dormirme que aquel monje nos enseñó cuando no trasegué más de lo que cumple el dulce vinillo el cual a cultivar él nos enseñó. Glorioso san Bernardo, siempre fuiste santo de mi devoción. Mira para Europa destruida. Llegue a ti nuestro clamor.

 

miércoles, 20 de agosto de 2025

 

GOYA 69 RECUERDOS DE MARIASCEN

 

Times goes quickly y todo ha desaparecido en el turbión de los años y la resaca del tiempo se llevó aquel amor. No volvió más como no retorna la juventud ni el amor un recuerdo triste en e desván de los álbumes las viejas fotografía y las cajetillas de cigarrillos que no fumé. Tuve suerte pero desperdicié la ocasión. Yo era un hombre guapo pero un estudiante con la cabeza a pájaro que quería hablar inglés quizás me adelanté a mi época y aquel afán por el que renuncié a tantas cosas ahora se vuelve resentimiento. A Mariascen la abandoné por la Suzi ir y venir en mis seiscientos nuevecito cajetillas de Rumbo fumados en compañía necking and love making not the whole way. Ayer dos años después de ser operado de cáncer de próstata con metástasis regresé a la calle de mis viejos amores, Madrid ya no es aquel Madrid de las acacias de Velázquez, no se podía dar un paso. Se ha vuelto una ciudad extraña. Me siento un extranjero en mi propio país. Empero reboso de salud y soy un hombre feliz por haber alcanzado la edad provecta. Creo que,  pecador de mí, fui un elegido.

miércoles, 9 de julio de 2025

 

 

 

 

Envejecer es regresar a la infancia y no sé dónde estoy, sumido en esta vorágine de los afanes y los días. Febrero fue un mes fasto sin estridencias ni derivado del alcohol. Erifos se presenta, letal, con su cara desgreñada, dando tumbos y parlando en alemán con las farolas. Es el diablo en la botella cuerpo de cristal ahumado y cabeza de corcho ¿Vencí a la dipsomanía secuela, madre que tú me dejaste con tu desamor? Yo te perdono. Fui hijo en rebeldía desde la primera leche que mamé. Ayer fui al cementerio y coloqué un ramo de guirnaldas en tu tumba, hice la consuetudinaria ofrenda de las Protelias a Diana y me acordé de Otilia mi único amor a la que tú despreciabas. El quietorium o columbario donde se guardan las cenizas de papá, del abuelo, del tío Perico y del pobre Agustín estaba dentro de las helgaduras de los huecos de paloma del columbario y aquello me recordó a las catacumbas de los primeros cristianos polvo en espera de la resurrección, polvo pecador y enamorado, el eco de las risas de las voces de los llantos de los que se fueron. Llamé. Di voces:

¿Alguien ahí?

El silencio furibundo del huerto de los callados me sobrecogía. La brisa vespertina meneaba las hojas del espino milenario. Muerte y desolación. La nada.

El tío Pedro tocaba la marcha real me pareció ver sus dedos gafos pulsar el teclado del armonio como cuando al final de las misas de tres curas interpretaba la marcha Real desde el coro y el abuelo Benjamín afilaba las hoces antes de la siega, percibí el bamboleo de los carros cuyos cubos cantaban, dejando una rodera, al subir la cuesta de las siete revueltas y Elpidio sentado en el trillo cantaba en tono de prefacio las jocosas diferencias vernáculas de cada uno de los pueblos de la Villa y Tierra: Castro los chivos Torreadrada las Cabras, Membibre para molinos, Aldeasoña no vale nada, Sacramenia para albarcas Fuentesoto cagaberros que se crían en Peñacolgada donde se caga y se mea la zorra cuando a ella la viene en gana. Cada pueblo un mote diferenciador poseía, siendo esto motivo de rivalidades y peleas en las fiestas patronales. La melopea infinita sonaba a lo largo de la tarde dorada bajo el sombrero del Elpidio que era de paja. Canto gregoriano a la manera aldeana. ¿Quién anda ahí? ninguna respuesta daba. Era mi imaginación que percibía los sonidos, los olores y mis ojos contemplaban el cielo radiante del páramo. Pero yo estoy desalmado recapitulando sobre mi vida pasada y sólo encuentro desdichas, fracasos, esquelas mortuorias, actos fallidos, días de autos, comparecencias ante la justicia, engaños, mendacidades. Mi historia es una larga novela picaresca. Quise escuchar la música del Celestial Zar Consolador. Tírate del terraplén, no te harás daño. Recomendaciones suicidas del diaño. Una voz que me empuja a lanzarme desde lo alto del acueducto romano. Treinta metros. No lo hagas, se me apareció una mujer del velo transparente. Con el pañuelo de Orenburg. No me pareció bien quitarme la vida. Era un hermoso día de primavera. Venía el deshielo. Soplaba viento del sur y yo caminaba con Masha del brazo por un bosque de la Vasilievske Ostrov desde donde se veían las torres de Petersburgo. Ay Dios mío, siempre volviendo a los rusos por obra de mis copiosas lecturas. Rusia es el molde de un enigma. Durante muchos años yo caí en la lazada de la fascinación rusa, pegado a mi radio de onda corta donde escuchaba las emisoras de Radio Moscú con un aparato de onda corta que compré en Nueva York cuando era corresponsal de Pyresa. Escribí un libro el año 1993 que ahora trato de dar a la imprenta "Rusia el molde de un enigma. No soy un comunista, soy un español libre de hondas convicciones cristianas que me han llevado a la Ortodoxia bizantina sin renunciar a mi acendrado catolicismo. Rusia es el país de Cristo que porta su cruz en medio de grandes convulsiones y sufrimientos como demuestra su turbulenta historia llena de mártires y de testigos de la Fe. No hay grandes diferencias en la Fe sin embargo yo diría que la ortodoxia es un cristianismo sin dogmas bajo el escudo de la tradición y de su gran liturgia. La ortodoxia habla al corazón mientras el catolicismo romano se dirige al intelecto. En el primero Dios se hace hombre mientras los romanos queremos convertir al hombre en Dios. Luego existen las contradicciones sobre el papado cuya primacía negaron los bizantinos desde Miguel Cerulario. Y en la procesión trinitaria al cantar el credo de Nicea los latinos decimos "qui ex Patre Filioque procedit" El Espíritu Santo que procede del Padre y del Hijo. Los ortodoxos suprimen la conjunción copulativa del "Filioque". Claro es que las diferencias dogmáticas son mínimas En cuanto al sacerdocio los popes del clero regular suelen ser casados pero el monacato ruso es célibe. El cristianismo llegó a Rusia con el bautismo de San Vladimiro de Kiev (Ucrania es parte importante del alma rusa) casi diez siglos después que en Roma. Por regla general entre los rusos no existe esa obsesión sexual que en occidente nos aflige. El sexto es uno de los diez mandamientos que hay que guardar, no el más importante ni aberrante.

En general la clerecía ortodoxa se divide en dos ramas: clero blanco dedicado al culto de los feligreses y atención espiritual de las parroquias. Y clero negro de los monasterios que siguen la regla de san Padnufo y san Basilio. Su misión es cantar el oficio divino durante muchas horas y el trabajo manual. Los monasterios fueron muy importantes en la irradiación de la fe cristiana sobre todo el de Solovky Optina Pustin. Hacia ellos se dirigían las peregrinaciones de los creyentes porque en estos cenobios solían morar "starzi" (santones) que hacían milagros, doctos en la Escritura y colmados de sabiduría.

Dentro del clero blanco la más alta dignidad era la de los protopresbíteros. Siguen los obispos "archierei" que gobiernan sus diócesis (heptarquías) y las parroquias "prijodi". Cada iglesia está gobernada por un párroco (slavinski) un proto diacono y un diacono (todos ellos debían poseer buena voz) y un sacristán o salmista. Los seminarios eran bursas y allí se preparaban a los candidatos al sacerdocio. Contiguos a la Bursa había conventos de monjas de donde se escogían a las esposas que habrían de casar con los popes antes de su ordenación presbiteral. No se permite la incineración porque existe el convencimiento de que el alma tarda tres días en salir del cuerpo. Ínterin los popes vestidos de blanco cantan responsos y leen durante el día y la noche trozos de los evangelios. Se dice que los popes se casan antes de cumplir treinta años y que con frecuencia se dan a la bebida y es frecuente verlos borrachos desde la pascua de Resurrección hasta Pentecostés, pero es lo que hace el pueblo y ellos se identifican con su grey. A los rusos les gusta el vodka. Eso es un hecho ineluctable y los sacerdotes de esa manera quieren identificarse con el pueblo. Para ellos la fe y la liturgia o la guarda de las tradiciones rituales es más importante que la moral hipócrita. Acaso por eso no se da entre ellos el clero bajo la violencia de género y los abusos sexuales a menores que son pandemia en la iglesia latina.

En el clero negro de menor a mayor se cuentan los siguientes cargos: posluchnik (lego o donado), monje monak, igumeni (prior), archimandrita (abad), metropolita y patriarca de todas las Rusias. Esta institución fue suprimida por Pedro el Grande que la sustituyó por el Santo Sínodo como cabeza de la Iglesia, siendo restaurada por Nicolás II y restaurada por Yeltsin después de la revolución.  

 

 

Soplaba una brisa que arrancaba las hojas del espino milenario y la torre románica con sus dos ojos grandes que miraban para el pueblo de forma enigmática advirtiéndole de los Novísimos. Caronte aguarda, la torre de la antigua iglesia de San Gregorio miraba para la aldea las cavidades vacías del campanario, y fijándose bien ofrecían el perfil de una guadaña. El quietorium siempre en calma. Allí sepultaron a un quincurión romano que desvió ruta cuando su falange se dirigió a Uxama. Cinco de sus vélites vinieron a recogerlo y querían reportarlo en andas hasta la cohorte, pero el centurión dijo enterradlo en Foncalada y que la tierra le sea leve. Luego quemaron incienso a los dioses. Aquellos páramos guardaron para siempre el perfil augusto de Roma. Siglos adelante, los templarios fundaron en aquel monte sagrado un ara a Júpiter. El vino de la tierra fue la causa de aquel desvío. Paró en una bodega  (caupona) de Sacramenia de las que abren sus fauces en el cerro internándose en la montaña y honró a Baco con profusas libaciones y subió hasta Foncalada dando tumbos. Al legionario romano los campos se volvieron del revés, la tierra arriba y las estrechas calles a sus pies, pues de la tajada que agarró perdió el camino y se perdió él. Caldos exquisitos de la tierra vinos traidores. La cencellada de la noche castellana heló sus huesos y sucumbió arrecido antes de alcanzar los castros de aquella tierra alta. Mucho me impresionaron a mí desde niño aquellas cavidades ojos vacíos de un campanario sin campana que se llevaron los soldados de Murat cuando la francesada; me hablaban del destino misterioso que a todos aguardan y no cesaba de darme golpes de pecho en un acto de contrición. Mucho me pesa, Señor de haberte ofendido. Por las tapias del cementerio se alzaban las cabezas de gente que yo conocí, sombras distantes la puerta cerrada del recinto y el hastial solemne de sillares como nuevo y tenían más de diez siglos. Habían exhumado los restos de mi hermana Henar fallecida en 1941.

Parte del antiguo templo había sido destruido. Uno de los lienzos de pared mostraba las adarajas o quixaras devastados por la destrucción. Aquella era una tierra de frontera y el antiguo templo sucumbió a cierta razzia de primavera del moro Almanzor que pasó por allá tocando el tambor. Traté de explicar esto a mis paisanos rabaneros por las fiestas de san Pedro cuando di una conferencia pero me cortaron a media oración. Dijeron que el parlamento era muy largo. Nadie es profeta en su tierra.

 Bajé besando las cruces del calvario a un pueblo en quietud que me resultaba extraño, retomando los pasos perdidos de la infancia. Escuchaba los carros cargados de hacinas, los cantos de la gente que iba a la siega, el son de las esquilas de los asnos castrones y el gruñir de los marranos en el henil. Corté el cordón umbilical del cariño, pero sigo unido a tu amor como el arado a la esteva, aun estando desencajadas las belortas y la reja sin filo. Soy yo, parlando desde una época que pasó, hombre de ayer que no encuentra resquicio. En verdad, no maldigo a los dioses, feliz de haber llegado a viejo cuando mi infancia parece que fue ayer. Un Hado perverso al ostracismo me condenó y todos se ríen de mí. Ya lo hicieron con Job. Propalo quimeras, redacto fantasías, porque he visto dar vueltas a la cabeza furibunda de la medusa quimérica con melena de león el cuerpo de cabra y la cola de dragón, vagina de mujer y bálano viril; las ubres las arrastra por detrás y por delante, pega bandazos a diestra y siniestra         como el destino cruel y proclama al igual que el pregonero de la gran manifestación del ocho de marzo la emasculación liberadora a petición de los Huecos Grandes. En la fiesta de las vaginas las Euménides nos cantan las marzas. Las gomias marimachos van seguidas de la peste en la gran cabalgata de la Reina Ester. Tiempo de voraces tarascas aniquiladoras. Una reina putona que le cortó a Haman la cabeza después de hacerle el amor quiere enmendarle la plana a la doncella de Nazaret. Desfilan gritando consignas y escupiendo gargajos contra la religión estas busconas atalajadas con arreos y carteras de ministras, empoderadas se llaman a sí mismas. No pueden pese a las apariencias esconder el pelo de la dehesa; se educaron con las ursulinas, se ríen de la maternidad con un no es no y con mi cuerpo yo hago lo que me da la gana. Son los postulados de una sexualidad insaciable e irascible sin control. Carmen Fernández del Toro la gran bollera encabeza la gran manifestación. Entran en las iglesias y descabezan las imágenes de la Virgen María. Los buharros bailan mientras tanto en la plaza del Carmen su rigodón con banderas arco iris desplegadas al viento. Yo no iré nunca a esa demostración. Lo mío es la fábula, el placer y el arte de las tres verdades que se fraguan en mi imaginación y en mi ilusión inventora. Hijos sí padres no. Pero esto es trágala, chiquitos.  Nos adentramos en el reino de las quimeras del que nadie vuelve con el cuerpo sano. El alazán apocalíptico trota al paso entre gritos y consignas y reportajes in situ de las reporteras de la Telebasta. Allá van las féminas de la exaltación arrastrando sus pies enfermos de quiropedia y sus labios malos que piden la lanceta del cirujano que les haga una quiloplastia. Mujeres de silicato saltan a la red opíparos bustos hinchados artificialmente. Acampa en el prado el sindicato de las peores furcias. Es la hora de los coños grandes despiadados. Es cosa de arreglar todos esos morros caídos a causa del desenfreno, les gusta demasiado chuparla. Hijos sí maridos no. Vivan los vientres de alquiler. Las cotorras se suben a los árboles empuñando el micrófono con punta de alcachofa y largan sermones preñados de visceral oratoria anti viril. Es el tiempo de Acuario. Vengan los marimachos, mujeres al poder. Estoy triste con este desvarío, pero me consuelo cantando el evangelio mirando para Aquilón, el quiasmo de la cruz de Constantino se perfila sobre el horizonte. Ellas no vencerán pues su grito es contra la vida. La espada de Miguel acabará con el libertinaje, aunque han conseguido ponernos a todos el bozal. ¿Madre por qué callas, por qué no te enfrentas y levantas el pendón de la verdad? ahí tenemos al preste Zabulón haciendo misa en las campas de Iraq. Su antecesor fue el responsable de la muerte de Hussein y de la gran efusión de sangre porque lo mandaba el Gran Sanedrín y en el Vaticano os callabais por la cuenta que os tiene. ¿Y el holocausto de Siria y las aguas del Éufrates y del Tigris que bajan raudas de sangre de las muchas víctimas de estas guerras? Madre no calles más. Los enemigos de la iglesia se esconden bajo el halda de tu sotana blanca. Deja de sonreír con tu cara asnal, Culo Magno, y de mover tu inmenso pompis que emite cuescos con olor a mate. Dice que el catolicismo no es la religión verdadera pues ahora sí que estamos buenos.

Uno no se desunce tan fácilmente de los genes. Hoy dije mi misa como de costumbre y quedé en paz conmigo y con el mundo dispuesto a trovar aun con cierto rezago las vivencias del pasado a título de inventario nada más sin ánimo de lucrarme ni prurito artístico pues soy un escritor fracasado. Todo se fue por la posta. En el entierro de la sardina di a la tierra lo que es suyo: mis sueños redentores. Sigo siendo cura. Mis manos fueron ungidas por el obispo. Me separé de la iglesia con el Vaticano II. La Virgen me apartó de esa patulea de clérigos fornicarios vagabundos y borrachos. Tuve un amor o muchos amores, fui leal y nunca cometí adulterio con la sacristana ni con la mujer de cualquier feligrés incauto, esos curas que miran con ojos de fauno y ponen en la cabeza el mirmillón como un saliente Príapo protuberante en el casco. Con eso y todo la clemente Venus madre de todos los hombres me devolvió a ese epicentro mágico (oko los), epicentro, cordón umbilical, manantial de vida. Venimos de ese flujo que se derrama en esas eyecciones guarras que las meretrices en pantalla tienen a gala mostrar coram populo. Hijos somos de un excremento líquido y nos cagamos cuando exhalamos el último suspiro Orgullosas de que les vino el latigazo consolador de pilas en ristre volviendo los ojos de placer para poner los dientes largos de los mirones que pagan un euro por contemplar el lastimoso espectáculo de estos estertores venéreos. ¿Y qué dicen las feminoides? Nada. Estamos en la era de Acuario. Ya dijo Protágoras que el hombre es la medida de todas las cosas cuando yace con hembra placentera sobre todo. De esa creencia se mofaba Plauto en sus comedias. ¿Existen los dioses del Olimpo? ¿Serán las religiones una excrecencia de la mitología pagana? No sé, pero a mí me gusta rezar la misa según el canon gregoriano. Mi alma se llena de una tranquilidad venida de lo alto cuando me dispongo a consagrar.

Luego reconózcame pecador. Para distraerme pulso los portales porno de la red y miro para las hembras y ¡qué hembras, Señor! Venus nació de la espuma y el primer hombre fue extraído del barro. Fuimos concebidos en la inmundicia y rodeados de corrupción y hedentina cadavérica nos vamos. Estoy asustado de semejantes visiones lúbricas; grandes vergas de todos los tamaños y colores, clítoris rasgados o en escuadra. Algunos tienen el diseño del arco escarzano. Líbranos señor de tanta inmundicia que difunden los pornógrafos por la red ¿No les dará vergüenza? Los cóhenes y macarras de este gran puterío cibernético hacen caja y no dan abasto; cada vez hay más mujeres en el mundo empeñadas en no esconder sus galas naturales lo que les dio Natura, unas por prurito, otras por coqueteo otras por necesidad como las viudas milf puesto que el porno manda. Recordemos que este es el tiempo de Acuario una constelación húmeda que otorga el mando a las hijas de Eva. El hombre se siente desterrado e impotente. Sexo y más sexo y exhibiciones procaces donde toda la lujuria tiene cabida. Aúllan algunas como lobas. Otras más precavidas gimen imitando a las gatas en el celo de enero. Aguardando el vestigial o denario con que Roma pagaba a sus putas. Hoy es fácil irse de picos pardos. Basta con un clic abrimos internet y ala allá están las señoras meretrices muy emperejiladas. Hay una rusa que es la mujer más perfecta que yo alcancé a ver a lo largo de mis muchos años de vida. Es muda y cuando recibe la moneda del mirón o sienten la explosión de una sacudida en sus entrañas lanza un mayido, un alarido con su voz de trapo un cuerpo perfecto de Jengibre, una hermosa ucraniana con el pelo de estopa a la que apodan Gingerbread nunca vi carnes tan blancas ni ojos tan azules. Está encinta y trata de disimular su gravidez poniéndose bañadores negros. Es una superdotada. Despliega sus senos al aire y calculo yo han de pesar media arroba. Su mirada es entre triste y divertida. Todos los televidentes muestran curiosidad por saber quién fue el afortunado que dejó la huella de su virilidad en útero tan precioso y ella dice que fue en el privado de un chat, un soplo aleteando por internet en sus alternancias binarias del yin y el yen. ¿Por virtud del espíritu santo? No lo creo. La preñez no fue virtual sino a efecto de un contacto físico, un polvo salvaje aunque haya dice que va a parir un hijo cibernético. ¿Será Billy  el padre de la criatura? Esta mujer aun desnuda sin embargo parece el paradigma de la castidad. En otras congéneres el espectáculo se convierte en algo brutal, libidinoso que incita al asco ante semejante perversión coprológica. Al verlo muchos se acordarán de la sentencia de Job; tengo que insistir por ese cabo que me asusta la promiscuidad y falta de recato sobre la mierda en que nacemos y envueltos en ella nos vamos, hijos somos de una eyección excretoria, de una secreción vaporosa… “Et in corruptione genuit mihi mater mea”. Pienso, madre, que tú no me pariste en el dolor, pero no en el alfaque de los bajíos de la secreción vaginal. Yo soy un tío que mamé buena leche y de calidad. “A este lo crías con polvos finos, Felicitas” oí decir al tío Matías el sacristán que era un borracho empedernido. Tú no te colocaste en la cabeza el  “pallolium”, la mantilla corta con la cual iban las mujeres de la vida caminando por las calles de Roma. A uno que me llamó una vez hijo de hetaira le hinché los morros.

Nos están dando gato por liebre, nos venden la burra mal capada, yo estoy sumido en mar de dudas pero grito para adelante siguiendo el paso de mi amigo Quosquetandem. Deja que las olas del mar de la vida te suman en las olas del absurdo, `piensa tú que es bello vivir. Bueno lo que tú digas, Quosque. Luego Verumtamen el otro yo me dice lo contrario. Así estamos entre Ibis y Cabidis. El bombo de los noticieros se repite, cada mañana nos cae el premio gordo cañonazos en Bajmut, tiros en una escuela de párvulos de Carolina del Norte. Kelensky que berrea y pude más madera. Se queman nuestros montes. Una niña de catorce es violada por catorce tíos en cuadrilla. La metieron en el retrete. Cuando un monte se quema algo tuyo se quema, `piensa en el adagio. Relinchan las yeguas andaluzas preñadas por el viento dijo Góngora. Paren potros percherones. Por el valle de las Luiñas chillan en las cuadras de Armagedón los caballos del Apocalipsis. Escribote yo sin esperanza, ya sé que mis novelas se dan un aire de misas cantadas. Amontono con dolor de atrición los recuerdos. Tú no sé lo que me has dicho, cállate, Verumtamen. Ya sé que maté a la Susi. Fue mi único amor, después vinieron las furcias esas yeguas preñadas por el viento. Carmina la Polvorosa hoy lo traen todas las revistas del corazón la preñó un centauro y parió un muleto a los setenta años mitad hombre mitad cuadrúpedo. No era ciertamente un bujarrón, pero átame esa mosca por el rabo. Medio país elucubra sobre el caso si es lícita la inseminación subrogada. Mal debe de andar Ucrania país corrupto cuando sus mujeres por un puñado de dólares se ofrecen como vientres de alquiler. La preñez de la Polvorosa no cuadra. Es un imposible metafísico. Vamos a contar mentiras tralará pero es de lo que vive: ten, tu primer reloj y desde entonces pasados muchos años sigue contando y cantando las horas. Tenía toda una vida por delante. Te sentaste a contemplar el tiempo. Pusiste tu culo gordo sobre el cuadrante de Cronos que sigue dando los cuartos las en punto y las medias impertérrito. Inexorable. Por entonces todo mi afán eran las declinaciones latinas los verbos fuertes griegos y las misas cantadas. No concibo la existencia sin liturgia. Aquel mi primer reloj suizo sabe mucho de mí. Iba a compás del gran reloj de la Torre Carchena. Ni adelantaba ni atrasaba. Desde la altura observaba nuestros juegos a la pelota en el frontón de la Huerta del Judío pared con pared con la `pantalla del Cine Cervantes. El rabino don Cleofás hacía de árbitro de aquellos juegos infantiles en sueño transformados bajo la sombra de aquella morera centenaria que era el árbol del Bien y del Mal en el rincón de la muralla casi de frente al aljibe donde se estancaban las aguas del acueducto. Ay aquella obra de romanos. Pero no te estrujes más el cerebro con las hojas urticarias ramios de la literatura. Lo tuyo fue el absurdo: roquetes y misas cantadas. Regando fuera del tiesto. Fuiste demasiado solemne para un época tan ramplona y venal como la que te tocó vivir. La realidad es más prosaica de lo que se creen los ilusos zurcida de crueldades, enfermedades, asaltos, estupros, robos, desfalcos, guerras, la vanagloria, el crimen, la envidia, la mala uva, la política y tú atendiendo a las leyes del levirato te fuiste a casar con la viuda que era la mujer de tu hermano. Se te partió el corazón cuando supiste que tus hijos no eran tuyos. Un tropiezo de tu dama. Susi ¿qué fue de ti?

 

MANIPULARIO

 

Escucho el zureo de la paloma mientras se arrullan los palomos y los tertulianas largan y garlan sus espiches. ¿Gozas, vida? nada, pues entonces algo huele a podrido en Dinamarca. La chica del autobús iba con un cartapacio escolar en el autobús y dentro de los apuntes en un cuaderno como un marca páginas llevaba un condón. La vida no es seria no demasiado serio y ahí estaba el obispo Camino con su pectoral de arrastre barbilampiño que a mí me recordaba al gran inquisidor de Dostoievski cuyo mensaje es apriorístico ni más ni menos que si cristo bajase a la tierra lo detendrían los obispos. Yo no sabía mucho de los engaños del mundo pero me dejé engañar por aquellos clérigos con chafarrinones de sopa en la sotana y los bonetes torcidos de la orden del domine Cabra arrastrando sus manteos y lobas por las calles congeladas camino del coro a cantar el oficio. Luego supe de los engaños del mundo y de las mentiras de las mujeres. Yo no era más que un hijo de la piedra que en el devenir de mis días me juntaría con las hijas del arroyo. Esta noche de San Martin acabamos de pasar la novena de las ánimas y medio pueblo anda borracho como en el cuadro de Grügel para festejar mes de las vendimias al santo del caballo blanco "Panonius" y la buena capa. Una buena capa todo lo tapa y un día es un día, padres conscriptos, mercaderes que han vendido la patria. Era san Martin un manipulario de la caballería romana que un día se le apareció Cristo en forma de pobre y a la caridad toda Europa se consagra. Un manipularius era un soldado raso pero él llegó a general y luego lo hicieron obispo de la Galia. De mozo sabía utilizar el harpagón o gancho con que las acies disparaban contra las murallas y decía adelante y adsumus y al combate le seguían las mesnadas. El pilorius, haciendo uso de sus arcos, lanzaba los dardos o tragula que portaban en la aljaba. Detrás arreaba la infantería con la emsis o espada. Los infantes cortaban las gargantas, golas y golillas de enemigos. Bien podía san Martin un soldado de Cesar combatiendo con los aquitanos en la guerra de las Galias. Llevando el pecho constelado de medallas y de signa militaria. y como zapador abría zanjas et ad fodiendos puteos. No me lo tomen a mal, puteos no es puta en latín pero fodiendo es casi la misma cosa por la que todo la entendemos: excavar, meter la pala y sacar, porque fodere vale tanto como joder y no es igual estar jodiendo que estar jodido, evolucionando por aspiración consonántica a esas bellaquerías en las que piensan a todas horas los hombres y las mujeres, mocosuena mocosuenae. No hay polisemia que valga que el latín es lengua expresiva. Pozxhivaete... Kak diela? Xarashó. Pero España es un solejar donde toman el sol los jubilatas. ¿Adónde vamos los licenciados de la existencia? A un banco del parque. Mejor a la taberna. Hay en Madrid buenas casas de conversación. Si te quedas quieto, viene un guindilla y te manda a limpiar las cuadras de Augias. Tántalo habita entre nosotros y nuestras zozobras no tienen fin. Que de un tiempo acá andamos entre la cruz y el agua bendita y nos llaman carcas y meapilas. El Valle de los Caídos lo cerrarán y echarán a los frailes pero no los fusilarán. España es laica, laica, judaica. ¿Una más de ZP? No gracias que hoy tengo el hígado un poco revuelto

 

 ONÉSIMO REDONDO  FUSILADO HACE LXXXIX AÑOS

“No puede decirse hoy cuántas docenas de millones se llevarán los catalanes – escribía Onésimo Redondo Ortega en “Libertad” de Valladolid palabras que le costaron el destierro en 1932- de la hacienda española regalados por Azaña y sus sirvientes; el regalo lo pagarán otras regiones autoras del engrandecimiento catalán y de la hostilidad antiespañola de aquel separatismo. Según Azaña, la Generalidad Catalana va a tener sus guardias propios y sus gobernadores como país extraño, sus tribunales, sus cárceles y su universidad. Se nos rompe la unidad patria”. Estas frases conservan hoy una rabiosa actualidad. Onésimo aparte de un gran pensador – el abnegado jonsista filosóficamente cuadrado ante la revolución pendiente y al que los españoles deben, que no a los rojos ni a los tecnócratas, esas mejoras sociales: empleos fijos, vacaciones pagadas, el derecho a la atención sanitaria, a la educación gratuita, un techo donde guarecerse etc.- fue un profeta que dio la vida por la unidad española cinco veces centenaria en la defensa de los de abajo. No era ciertamente un señorito,  sino un agrario entusiasmado con la reforma del rústico y propulsor de un sindicato remolachero. Fue asimismo un brillante periodista de lo más congruente, la mejor pluma sindicalista y, repito, dejó detrás  una obra “cuadrada”, como prolongación a su rotundo y augusto apellido, dispersa a lo largo de una serie de antológicos artículos, descatalogados adrede, pero que, leídos hoy, guardan un palpitante ahora y son una invitación a la reflexión para la juventud del.Desgraciadamente a esta juventud se la mantiene a blancas. Nadie les ha contado de dónde venimos ni les ha razonado las claves del laberinto español. Es el silencio de los corderos que se propugna desde arriba. Se pretende borrar la memoria y sustituirla por otra memoria, un juego ciertamente peligroso porque no es bueno ni conveniente para la salud mental meter la vertedera en los osarios. El cainismo que algunos pretenden cargados por el odio y el instinto de revancha nos lleva a este pobre Abel. Abel Redondo, Onésimo (el piadoso que es lo que refiere su nombre en la lengua griega). Otra de las innumerables víctimas. Juventud generosa que caminó al matadero aquel bochornoso mes de julio de hace 89 años. Únicamente era un periodista. Yo también soy periodista. ¿Me rindo?  Onésimo desenmascaró a la bestia, expuso sus brillantes ideas en el foro. No se lo perdonaron nunca. Otro vallisoletano, José Antonio Girón, recogería el guante y pondría en ejecución aquel proyecto de futuro para España que Onésimo Redondo firmó con su sangre y la verdad que a setenta y siete años vistas de aquella tropelía, de aquel asesinato, cabe traer a colación aquellas palabras del líder José Antonio: “Ojalá que mi sangre sea la última que se derrame entre españoles”. Onésimo Redondo Ortega el “divino impaciente” formó parte junto con Ledesma Ramos  y Primo de Rivera  del trío de “eternos ausentes”. Pero él más que nadie fue un pensador para un pueblo. ¡Presente! Si José Antonio fue un poeta más que un político, estos dos últimos eran dos castellanos filósofos, asqueados del vano parlamentarismo de políticos banales y trincones, dos pura sangres, casta de hidalgos que llevaban la revolución social en la piel. Se les incluye entre las derechas pero eran la izquierda pura dura y el pensamiento independiente y leal del ideal cidiano.  Castilla los hizo y los deshizo, y hoy parece haberlos olvidado. Enemigos del marxismo ciertamente pero fustigadores del neoliberalismo capitalista. Nadie habló tan recio y tan claro de los estragos de la masonería. Su muerte se produjo en extrañas circunstancias el 23 de julio de 1936. Mi teoría es que lo fusiló un cabo de la Guardia Civil alertado por un “chivatazo” en un control de carreteras ipso facto en la cuneta de la Nacional VI a la altura del pueblo segoviano de Labajos. Pero hay quien sostiene que cayó en una refriega con facciosos milicianos de la columna que mandaba el coronel republicano Julio Mangada. Hoy a causa de la pazguatería o el chaquterismo de los desmemoriados Onésimo Redondo, el de los pensamientos cuadrados, un verdadero Aquiles egregio y un español entero en medio de un rebaño de enanos, es el gran olvidado de los Tres de la Fama  Nacional Sindicalista, un trío que empezó a desmemoriarse merced a la traición de los “aprovechados”: los Laín, los Tovar, los Ridruejo. Y por todos aquellos que habiendo gozado de las granjerías y prebendas de Falange no tienen redaños ahora para llamarse a sí mismos falangistas. Dicen “sólo soy joseantoniano”. ¿Por donde? ¿Por el ano? En cualquier caso, sus escritos siguen ahí para el que los quiera mirar alentando una verdad incontrastable. Onésimo murió a las cinco de la mañana del 23-VI-1936 y a los cinco días de  haber sido  puesto en libertad. Era un preso político en las cárceles de Ávila cuando el triunfo de los sublevados en la Ciudad de las Murallas le valió su amnistía. Había padecido prisiones y destierros por haber puesto en berlina al presidente Azaña, blanco favorito de sus dardos y al que tachaba de judío y masón. No era más que un periodista, un hombre de ideas. ¿No decían que el pensamiento no delinque? En este caso sí. La DGS dio orden de su busca y captura. Parece ser que había estado organizando la resistencia jonsista e iba camino del  Alto de León cuando fue apiolado por la Benemérita y pasado por las armas sin más. Cabría decir que no fusilaron a un hombre,  destrozaron una idea, mataron a un paisaje y despilfarraron el futuro en un acto de barbarie irracional que sólo encuentra explicación en la vesania y en la ira ciega de los españoles a la sazón.Cuando paso por Labajos camino del Alto León, siempre miro para el monumento a Onésimo a mano derecha de la carretera siempre tiene flores frescas al igual que el monolito al Padre Huidobro en la cuesta de las Perdices. Una mano invisible coloca allí esas cinco rosas en honor de los que montan guardia cerca de los luceros.He vivido largos años en el Yorkshire. En todos los pueblos de la campiña inglesa se alzaron monumentos parecidos a los que encontramos por ejemplo al llegar a Labajos. A la memoria de los caídos en las dos guerras mundiales. En la batalla del Somme por ejemplo en un solo día perecieron treinta mil británicos, quince mil franceses y de alemanes no hay casi recuento puesto que perecieron muchos más. La Gran Guerra se llevó millones de europeos pero a diferencia de aquí allí los muertos no son arma arrojadiza ni moneda de cambio. Ni se ponen cadáveres sobre la mesa. Lo que ocurrió pues ocurrió y a lo hecho pecho y “let bygones be bygones”. Se les deja descansar en paz y no se indaga si fueron buenos o malos, de un bando o de otro. Aquí, por lo que se ve, no. El victimismo de Zapatero, pretexto para una segunda transición, está provocando un tremendo malestar y el enconamiento de ciertas heridas que creíamos cerradas. Él era uno que creía en la capacidad vertebradora  y redentora de Castilla como nexo de unión del centro con el litoral y un católico ferviente a machamartillo pero sin alharacas porque sabía que el catolicismo para bien o para mal formó parte de los destinos de España. Propugnaba que es la síntesis, la cifra y el compendio de muchos pueblos, muchas etnias y muchas razas y, aunque formado filosóficamente en Alemania, Onésimo Redondo nunca comulgó de las doctrinas hitlerianas sobre la superioridad de la raza aria.Era un mesetario del Centro. Al pan, pan. Nunca fue amigo por su mesocracia castellana basada en el lema calderoniano del rey abajo ninguno en la superioridad de las castas ni en los privilegios y derechos adquiridos de los de arriba – hombre del común nacido en Quintanilla pueblo castellano de la misma manera que Ramiro procedía del zamorano Sayago – y no creía mucho en el lema de los “puños y las pistolas” ni el matonismo pijo que caracterizó a primera hora a algunos miembros de Falange, afortunadamente no todos.  No fue hasta enero de 1936 cuando se produce la fusión de FE con las JONS. Onésimo, insistimos, era un jonsista nato poco partidario de la violencia. Eso sí propugnaba un rearme espiritual basado en el lema paulino de que la vida es lucha constante. Vita militia estHoy cuando se cumplen 89 años y pico de su fusilamiento desde estas páginas recordamos su memoria sin ningún instinto de revancha y aspiramos a ánimo a los jóvenes a que vuelvan a leer a Onésimo. Sus artículos olvidados  son esféricos y – por aquello de la cuadratura del círculo y en honor de su apellido una vez más-“cuadran” plena y brutalmente con el presente de nuestra pobre patria.

Sigue siendo un olvidado, un preterido, un periodista que firmó con su sangre el proyecto de futuro en él que creía para España. Y eso es tan respetable como el de los que cayeron en el otro bando. Porque no es conveniente aquí establecer categorías. Todos son nuestros muertos aunque por desgracia aquí los que fusilan y los que caen fusilados son siempre los mismos. ¡Qué fatalidad! Debería haber en Villanueva de la Cañada un monumento a la memoria de los caídos en la Batalla de la Sed (45.000) de los dos lados, como lo hay en Labajos y yo propugno en mi libro REMEMBER BRUNETE

 

 

MIS RECUERDOS DE CORRESPONSAL EN NUEVA YORK. AMERICA HIZO DE MI UN BUEN PERIODISTA

 

El 30 de noviembre de 1976 enviado como corresponsal de la Prensa del Movimiento aterrizaba yo en en el aeropuerto Kennedy en medio de una gran nevada. La cellisca fue a más y yo trataba de conseguir un hotel. Trampeando por las calles aledañas a la ONU con nieve hasta las rodillas fui al despacho en la planta primera del Edificio Azul y desde allí firmé mi primer despacho. Un colega indio me miraba de reojo, yo estaba nervioso cigarrillo tras cigarrillo de aquel paquete de celtas cortos. Fui a cenar y a la vuelta unas gafas bifocales que yo había comprado en Londres y el tabaco habían desaparecido. Logré una habitación en un hotel de la Segunda avenida. Estaba exhausto y calado hasta los huesos. Tiempo adelante traté de escribir una novela bajo el título de corresponsal en Nueva York pero la narrativa se me iba de las manos. Aquella megapolis era demasiado grande. Nueva York y América en general es el paraíso de los superlativos: las casas más altas, los hombres más ricos pero está llena de dropouts y de mendigos, las mujeres más bellas y las más horribles, lo más exquisito y lo más vulgar. Yo no sé cómo conseguí abrirme paso, comprar una casa que al venirme malvendí y de sufrir no pocas incidencias y contrariedades. Yo cerré el ciclo de los grandes corresponsales españoles que conseguían conjugar la información con la literatura, no estaban mediatizados por los grupos de presión ni escribíamos al dictado. Al menos yo no era un mindundi pero tengo bien grabada aquella noche toledana en Nueva York cuando me quitaron las gafas, me robaron el tabaco y cogí una pulmonía con la nevada que casi me lleva para el otro barrio. A pesar de todo sobreviví. En Nueva York aprendí este duro oficio de periodista, oficio sagrado de compromiso con la verdad, la tolerancia, el escepticismo y la belleza. De todo eso hablaré más adelante.

miércoles, 25 de junio de 2025

 

 

 

 

ABUELO BENJAMÍN

El abuelo Benjamín era otra cosa. Casi fue el que me crio en la aldea de Fuentesoto pueblo también románico con una vega triunfal camino de los monasterios de Cardava a la cual se asomaban los somos, cañadas y eriazos. Por lo menos no me tiraba piedras cuando pisaba sus viñas que el otro estuvo a punto de deslomarme de un cantazo. Aquellas vivencias hicieron de mí un escritor, acaso un escritor iconoclasta y a redropelo del sentir general. Mala cosa llevar la contraria pero yo siempre me mantuve en mis trece seminarista fracasado pasado por el filtro de la literatura pero mi alma se moldeó en aquel seminario cuyas vivencias rememoro cuando estoy aquí postrado en la cama del hospital recién operado de la próstata.  Próximo a la muerte o a la analepsia, me curo en salud dando albergue a mis reconcomios, no encuentro sino traiciones, mala baba, julepes y mohatras de pícaro (no podía ser de otro modo, nací en Segovia, madre de la picaresca) y una misteriosa supervivencia a los avatares. Este es un tiempo de expiación. Los noticieros nos traen cruderrimas imágenes de niños masacrados, aparece Netanjayu con rostro de Herodes. En Oriente hay un cisma prologado por el patriarca Bartolo, ese obispo de barbas hirsutas mientras Zelenski aúlla pidiendo dineros y quemando iglesias rusas. Ucrania reivindica Crimea la vieja Quersonesos mostrando su faz terrible epítome de las crueldades de la guerra. El sicario Biden, padrino del sionismo, quiere acabar con toda la fe que teníamos los creyentes y demostrarnos que Cristo era un loco antisemita que se hizo pasar por hijo de Yahvé. Tendido en el lecho del dolor en esta cama de hospital convaleciente de una operación de próstata, ya puedo mear gracias a Dios pues anduve medio año con el zambullo pegado a la pierna izquierda y exonerando mis orines en una bolsa de plástico, rumio sobre mi pasado. Me dan ganas de gormar mi arrepentimiento pero soy incapaz de vomitar toda la bilis que llevo dentro. Es como si viese un trailer de lo que mi vida pasada. Tiempo pasado, tiempo presente en el lecho de Procusto pues más que el dolor físico o la incomodidad es la pena moral que me aqueja por no haber hecho las cosas bien. Perdono a mis enemigos. Este sea mi llanto de atrición por la Suzi. Las ideas se agolpan, quieren salir a toda prisa, pues siempre pensé y escribí a gran velocidad, y me aturullo, me atasco y pierdo el anhélito; vuelve el ritmo pero mi vida es un eterno combate con las ideas y los formularios volcados en palabras, angustia vital, desazón, vértigos, el vértigo del escritor que sólo se cura escribiendo, bufando pipadas de humo, o camino de la despensa, somos propensos a criar carnes, la furia del español sentado en su sillón que se desgañita contra la injusticia contra esto y lo otro. Extraño mi cachimba (en el hospital no dejan fumar) que ha sido compañera de mis largas vigilias, mi ametralladora, mi “novia” y mi tormento, que a veces no me deja ni respirar. Saltan las imágenes de un lado a otro, se enredan las palabras. Viene Maite la dulce enfermera. ¿Cómo estás, cariño? Quisiera fumarme una pipa, no se puede, corazón. Dentro de un rato vendremos a hacerte una extracción, más tarde la compañera te tomará la tensión. La urraca del patio central faltaba poco para acabar de construir su nido. Las noches se hacían largas e insomnes. A la madrugada el diligente córvido seguía su labor. Pronto te darán de alta. Esto no ha sido nada. ¿Nada? Un cáncer, hoy el cáncer si se coge a tiempo es curable. Más duro lo tenías si fuese de pulmón. Era lo que temía yo, pero el tak que me hicieron reveló que estaban limpios. Soy un fumador empedernido. El vicio lo cogí a los catorce años con un mataquintos que sabía horrible. Me vio mi padre que venía del cuartel y apagó la tagarnina de un sopapo. Zas. Vi las estrellas.

Ando en desacuerdo con Andrés Laguna autor desconocido y al que yo he descubierto como autor críptico del “Lazarillo de Tormes” gloria inmortal de la novela picaresca y que he sacado de pila librándole del anonimato de siglos, que dijo:

 ─Se escribe por la honra pues la fama es la orla de la artes.

No, señor, hoy se escribe para echar los demonios fuera, lanzar pestes contra los nazis y los judíos que pueden ser consistentes en el mismo perjuicio, los extremos se tocan la serpiente cambia de piel. Eso de ser escritor famoso debió de ser antaño, hogaño el vulgo vierte suspicacias sobre nosotros. Nos mira mal. Somos delincuentes y nos desprecia o nos compadece como enfermos bipolares, o adictos a un vicio tan inconfesable como el onanismo. Escribir consiste en masturbarse con palabras y eyacular proposiciones y asuntos que no son de recibo. La gente lo que quiere es que la dejen en paz, que no la vengan con historias. Tú no te pases, mira lo que te digo. El escaparatista de Arévalo un martes de mercado me largó está pregunta a bocajarro:

─ ¿Sigues escribiendo?

─Sí

─ ¿Y te la meneas?

─ ¿Por qué no?, de vez en cuando

El cara de pájaro, ese librero de lance, un tipo un malauva, el cual me ha maltratado, timado y puesto en berlina todo lo que ha querido, me recibió con una frase que es todo un dardo al bandullo de un poeta.

-Tus libros no se venden, deben de ser muy malos.

-Si no los pones en el escaparates y los tienes ocultos en la sacristía ¿cómo se van a vender, cacho cabrón?

Le hubiera dado al bibliopola un garrotazo en los hocicos pero no estaba de nones sino de pares. Por lo demás buenas tragaderas he. En una bella mañana de octubre no merecía la pena meterse en reyertas con un hijoputa. Escribir es llorar, Larra dixit; hay que estar dispuesto a ser crucificado y coronado de espinas cuando no de gargajos como le ocurrió a Lázaro de Tormes en la novatada de Alcalá. Y decir lo de Pablillos:

- Ojo, Pablos que asan carne

Sin embargo, tonto de mí, no me olí la tostada, todos me apalean y difaman.

La desconsideración la mala educación y el morbo visigótico o envidia es el estigma de esta nación. No es cosa fácil vivir entre españoles, el país más bello del mundo pero en España siempre amurcan los toros. Nuestra religión guarda esencias del minotauro. Nos apasiona la tauromaquia. Tengo que confesar a mis detractores para que se calmen y no se pongan nerviosos que yo solo emborrono papel para dejar de fumar o el que se divierte con papiroflexias o pintando monigotes. Así nos las van a dar todas en un carrillo. El abuelo Benjamín era otra cosa. Tenía una faja blanca rodeándole la barrica con flecos, a la manera de los israelitas para que no se le cayeran los pantalones y al orar que lo hacía de mañana y la noche se balanceaba como tratando de conseguir que sus plegarias llegasen a Adonai, para que Yahvé le diera un empujoncito. Las mujeres en misa se sentaban en cuclillas a la morisca delante del hachero y eran fatalistas los de mi pueblo en sus conversaciones sea lo que Dios quiera (makfut está escrito. escrito, y escrito estaba) Dios lo ha querido, tendrá que se ser así y Alá Akber. Todos nos prosternábamos ante la cruz del Calvario pero había viejas reminiscencias  antiguas saliendo a la palestra, otras adoraciones antiguas de los dioses ibéricos: Baco, Cibeles, Mitra, Eritreia. Éramos judíos, moros y cristianos todos al de por junto y cada uno hijo de su padre y de su madre. Hacíamos a tres velas, a tres palos, la convivencia a veces resultaba penosa pero fue posible y cuando el abuelo se quitaba  el abuelo cinto… Habíamos ido a melones y nos pilló el guarda Melares, quien a la noche se presentó en casa y dijo tu chico fue cogido in fraganti haciendo destrozos en la finca de la tía Piquilaya. Son cinco pesetas de multa. He aquí el papel.

-Ah sí, bájate los pantalones, chiquito que te voy a sacar el duro del culo y los melones de la Piquilaya y las cinco pesetas. 

Diez vergajos con la correa ni uno más ni uno menos. Fustigados con la solemnidad y eficacia de un lictor romano. Desde entonces no se me ocurrió ir a melones, ni a peras, ni a sandías. Fueron los chicos del pueblo que me malmetieron y yo inocente de mí caí en la lazada. Era yo tan inocente que me creía todas sus infamias. El Pedrete el del tío herrero, el Elpidio, el Agustín mi primo hijo del sacristán y su hermano el Maudillo, el Micha hijo del sastre que era tan pequeño que no podía con las albarquillas, el Julián el de la tía Pilar y el tío Pedro Sancha pero el más cruel de todos era Pedrete el del tío herrero y la señora Marceliana. Fue el que me encomendó la tarea de asaltar el melonar de la tía Piquilaya.

─Entra ahí en eso, segoviano, y arramplas con un par de melones.

─Tengo miedo, mi abuelo me dice que hay que respetar lo ajeno.

─Tú ¿miedo? Eres hijo del sargento Parra.

─Yo no tengo miedo a nada

Y salté la cerca. Fue entonces cuando vi venir al Melares pegando voces y juramentos apuntándome con su tercerola. Del canguis que me entró se me cayeron los melones del peto y creo que me cagué en los pantalones literalmente. Los melones no estaban maduros, eran badeas. Los otros habían puesto pies en polvorosa, me dejaron solo como siempre. El maldito Melares me trajo para el pueblo por las orejas y yo llorando como una magdalena. Acto seguido, me condujo al cuartelillo, vino el juez de paz el tío Bernardo. ¿Qué ha hecho el chico? Robar melones. Vaya una educación. Que se avise al señor Benjamín Galindo. Mi abuelo el pobre estaba avergonzado y corrido de mi “hazaña”. El juez de paz era su amigo. Eran quintos, él, el tío Dominguín y mi abuelo. Nacieron en 1885. Se ufanaban de ser quintos del rey Alfonso XIII. Habían participado en el guerra de Cuba. El trío de veteranos del Desastre (aun guardaban en un arca los correajes y el uniforme de dril a rayas)  sentabánse en un banco de honor en el presbiterio durante las ceremonias religiosas. En las misas solemnes eran los primeros en besar el portapaz que les ofrecía el monaguillo como gesto de preeminencia y veneración. La noche que recibí la somanta de palos con la correa del abuelo era una noche de luna, lo recuerdo bien. Así pues, para Segovia. Al día siguiente tomamos el coche de linea de la empresa Gutiérrez

─No podemos contigo. Así que te mando a tu padre a que te dome.

Cuando regresamos a Valdevilla la colonia militar donde vivimos mi madre me recibió con la zapatilla. Así te comportas, dijo y me puso el culo como un tomate. Yo no tuve la culpa fueron el Pedrete y el Agustín los que me mandaron asaltar la cerca de la tía Caya. ¿Robar? Vaya un hijo. Traté de escapar y anduve perdido por los peñascales de Valdevilla recorriendo los andurriales del río Clamores llorando mis desdichas, esta vez temiendo la correa de papá. Venida la noche, llamé a la puerta de la casa que era verde y de madera de pino con mucho tiento y sigilo. Me estaban buscando. Mandó mi padre al machacante por ver si me encontraba y yo no daba señales de vida, así que estaban preocupados. Pero cuando aparecí a la puerta de casa  en vez de la correa fui recibido con besos y abrazos. El sargento Parra saltaba de alegría, hijo, hijo. Por donde te has metido, donde anduviste. Tu madre y yo creíamos que te había ocurrido algo. Me senté a la mesa. Huevos con patatas fritas. El abuelo había traído un clarete que pasaba bien al cabo de tantos sinsabores por culpa mía.

─Bebe, Silvino. Bebe, hijo, que este clarete es superior y pasa bien.

─Gracias, señor suegro, de hoy en un año.

Y tentó la bota embelesado con un largo trago. Por la provincia de Segovia los casados llaman al padre de su mujer “mi señor”. El chico es un poco mostagán pero hay que meterlo en vereda. Hay que llevarle al seminario. El dictamen del abuelo se cumplió al cumplir yo once años. Había habido muchos curas en la familia. Estaba don Linos pariente suyo que ejercía el arciprestazgo de Calabazas, el P. Galo que se fue de misionero a África y nunca se volvió a saber más de él o don Priscilo cuñado suyo nombrado por oposición canónigo magistral de la catedral de Burgo de Osma. Tanto los Parra como los Galindo tenían fama de beatos y no existen dudas de que esta veta tan clerical y bíblica les venía de su ascendencia. Aquel rincón extremo de la provincia segoviana había sido repoblada por moros y judíos y se produjo el milagro de que Alá, Moisés conviviesen en plena armonía practicando usos y costumbres, ritos, intercambiables, diciendo ojalá cuando les acuciaba un deseo de que algo ocurriese, o pronunciando el nombre de Jesús al estornudar al besar el pan cuando la hogaza se caía de la mesa. Pero yo creo que veníamos de los arévacos aquellas tribus numantinas que no consiguió dominar. De ahí que muchos de aquel pueblo a los que llamaban los coritos no habían soltado. Estuvieron de tertulia ellos dos dándole tientos al jarro hasta la madrugada. Yo me dormí como un bendito

 

COAXAS Y PROSTIBULOS EN LA RED

 Vine estudiando el caso de una mujer rusa un verdadero bellezón de mediana edad y observé como era persuadida y seducida por un pimp o macarra especialista para ser llevada a Polonia, acabó en un harén turco, obligada a hacer el amor con los clientes unas quince veces al día. Después creo que ha sido deportada a Israel. Por los gestos y una belleza incomparable que no parecía humana llegué a la conclusión de que no se trataba de una mujer. Era el diablo o una posesa de Satanás. Sí, estaba poseída. De otra manera no se explica su sexualidad insaciable de ninfómana incontinente. Si alguno de sus clientes se aventuraba en preguntas personales a la mujer ipso facto era expulsado de la sala, que más que un chat me parecía un paritorio donde las pupilas mostraban con desvergüenzas toda la carne de su natura que han de comerse los gusanos. Creo que es una táctica que emplea el demonio para doblegar a Rusia. Va con todo para acabar con Putin. Sus armas son el engaño del prostíbulo. Putas hubolas siempre pero en la antigua Urss la permisividad sexual y las aberraciones de la carne tienen todo asiento. Sodoma y Gomorra para doblegar al único pueblo verdaderamente cristiano que queda en el mundo. Rusia no podrá ser vencida por la fuerza sino mediante la vagina de sus mujeres. En estos chats de la masturbación y la fornicación yo he visto pasearse al diablo con una sonrisa de oreja a oreja. Es bello como Luzbel el ángel caído el que dijo non serviam y al decir esto no soy un orate ni un aventado. Sé lo que me digo. Opugno a la Bestia. Conozco las tácticas del Engañador supremo. Los pueblos se corrompen por la fornicación como ocurrió a Roma y Luzbel el ángel de luz convertido en heraldo de las tinieblas es fornicario.

 

 

 

LA OLMA

 La olma que había frente a la iglesia de mi pueblo tenía más de dos mil años. Había sido plantada por los soldados de Trajano (la historia hace nacer a dicho emperador en Pedraza) que era un poco paisano nuestro y era mayor que la de Pedraza, un redondel su tronco de cerca de quince metros que no la abarcaban veinte paisanos, cuyas raíces desde el arroyo circundante se extendían por todo el pueblo desde la casa curato a la pobeda. La olma allí estaba siempre mirándonos, impertérrita, augusta, siglos y siglos, contemplando el paso de generaciones. Sus ramas florecidas se extendían por los lados a manera de grandes candelabros protectores. Los niños de la aldea trepábamos por el tronco hueco, nos sentábamos, echábamos risas y jugábamos a la malla. Sus ramas crecían hasta tocar la punta de los aleros y las raíces reptaban subiendo la ladera del calvario donde estaba el camposanto. La quima formaba un corro donde se sentaban a tocar la gaita y el tambor en las fiestas patronales. Y algunas veces se celebraban los concejos. Había sido plantada seguramente en tiempo de los romanos. Y esto no son conjeturas sino probabilidades porque aquel villorrio en una esquina de la provincia de Segovia estaba inserta dentro del itinerario de Antonino. Fuentesoto, al pie de una fuente salutífera que manaba un chorro ingente de agua calda por el invierno y muy fría por el verano, debió de ser un vivaque o manor donde descansaban las legiones que iban desde Astorga a Uxama. Al recordar aquel árbol de mi infancia se me caen las lágrimas porque su tronco y sus raíces guardaban el polvo de las crepidas o botas militares de las acies de Roma y vieron pasar a los guerreros moros que arrebataron el castillo a los visigodos y después a los Tercios de Flandes. Más tarde, a los guerrilleros que lucharon contra la francesada. Aquella era la tierra del Empecinado. De últimas, se había venido diciendo que nuestra raza viene de los judíos; creo que se trata de una tesis poco segura y sin base histórica. Algunos debieron de morar en Sepúlveda y Sacramenia y Riaza que estaban cercanos pero por lo general los rasgos faciales de nuestros antepasados no eran israelitas. Éramos tierra de frontera. Estábamos en una linde. Al otro lado de la cordillera era ya tierra de moros. Se fundieron las razas. Esa simbiosis misteriosa de judíos, moros y cristianos que conforma ese enigma nacional que es España. Los musulmanes allí apercibidos tras la conquista del valle del Duero fueron bien recibidos, se asimilaron, aunque conservasen algunas de sus viejas costumbres venerables, trabajaron la piedra de las iglesias románicas y nos enseñaron a regar las acequias de la vega. Todos los alarifes y los molineros de las aceñas eran moriscos. Pienso que esta exaltación del judaísmo, ahora todos los españoles quieren venir del pueblo elegido, no es más que una entelequia propagandística pues siempre habrá que estar con el poder. Somos godos, provenimos de los vacceos. Somos numantinos, indomeñables, gente difícil, acostumbrados al sufrimiento, guardadores de las viejas tradiciones cristianas y de los santos del calendario. El año 53 fue talada aquella olma cuando pusieron el coche línea Peñafiel-Madrid. Un sacrilegio biológico que quizá anunciase los terrores del milenario: las aldeas vacías, la despoblación del campo y la emigración a las ciudades. Pero los iberos somos así de recios. La España carpevetónica desprecia cuanto ignora y prefirió subirse al carro de heno del progreso. Aquel ulmáceo creo que era el más antiguos de Europa, divinidad maternal que guardaba el secreto de los antiguos dioses protectores del pueblo. Allí me mandaron mis padres los veranos, una boca menos porque entonces no había. Yo era un niño frágil tierno, crédulo y muy guapo. Las vecinas del barrio de San Andrés Puerta del Socorro lindante con la judería vieja donde nací me comían a besos. ¡Qué niño tan guapo tiene usted, señora Juanita! Ya ves, mis padres me mimaban demasiado por ser el primero y por haber venido después de una hermanita, Henar, que murió a los tres meses de meningitis el año 41. Yo era un niño triste, ingenuo,  de mirada reconcentrada al que le gustaban los libros. Una de las primeras fotos que conservo aparezco con un libro en la mano. Estaba sellado mi destino, he de decir, lo que son los genes, mi nieto Pelayin es también muy guapo, creo que más guapo que yo y menos triste y más simpático. Iba a un colegio de pago, las Jesuitinas y allí aparecieron los primeros signos de rebeldía que me persiguieron toda la vida. Escribía con la zurda y la monja sor Josefina me ataba la mano a la silla para que escribiese con la derecha. Demasiado crédulo e inocente, algo soñador, pensaba haber venido a un mundo hermoso y agradable donde no existían traumas ni dolores ni pecados. Donde no existían ni los perdedores ni los malos. Cuando me mandaron al pueblo “a tirar varetas” el contraste fue cruel. Antoñito, espabila y llevo sin espabilar toda mi vida. Por eso me las dieron todas en un carrillo. Los muchachos aldeanos se reían de aquel pobre niño de ciudad. Le hacían toda clase de perrerías y aprendí sin utilizarla una palabra que está ahora muy de moda: bulling. Papá y mamá cerraban la casa y se llevaban con ellos a Javi el preferido de mi madre, el más simpático. Papá tenía una comisión como instructor de reclutas del Campamento de Robledo. En tal comisión de servicio enseñaba a los estudiantes de la IPS que hacían una mili especial y salían de sargentos y de alférez. Robledo era un paraíso a la sombra del monte Peñalara contiguo a la Granja de San Ildefonso. Más de diez mil tíos (quince bajo la lona se reunían en aquellas chabolas en aquellas chabolas circulares Robledo era el Grafenwohr español). Había  los domingos unas misas de campamento impresionantes en el Llano Amarillo. Recientemente fui a visitarlo y se me cayó el alma a los pies. Crecían zarzas cerca del sagrario donde se exponía el Santísimo y el cristo de la buena muerte había sido profanado. Era un tiempo triunfal que nada tiene que ver con la tristeza y el egoísmo de ahora pero en fin, corramos un tupido velo porque tras de tiempos vienen tiempos. A mí me sacaban billete en el Gutiérrez el coche de linea que hacía la ruta Segovia-Aranda de Duero. Mi abuelo Benjamín me estaba esperando en el empalme de las Suertes Viejas con el carro. Uncidos al yugo del carro de mi abuelo tiraban dos mulos. Uno el “Sevillano” y el otro el “Noble”. Este último tenía poco de su nombre porque era mohíno y más falso que Judas; en una ocasión a tía Paulina la tiró una coz que por poco la deja sin nariz cuando fue a hacer pis a la cuadra. El cambio fue traumático, insisto. Fuentesoto me hizo abrir los ojos y contemplar las contrariedades, injusticias y arbitrariedades de la vida No había leche y nos alimentábamos de pan y cebolla. El abuelo Benjamín era otra cosa, pese a la pobreza y a las carestías de aquel tiempo. No había seguridad social y cuando el abuelo enfermó de la próstata hubo que vender algunas tierras para pagar al cirujano del Hospital de la Misericordia. Quedó mal y sufrió muchísimo. “Tengo muchos dolores hijo es como si un mastín me ahincase los dientes en la rabadilla”, me decía el pobre. Los chicos de mi edad eran paupérrimos. Calzaban albarcas y peales como los romanos. Cuando me acanteaban, volvía a casa por los pantalones rotos por la culera y el peto con unos retales que me hizo la tía Dominica con un mono de soldado con un tirante fuera. No se me olvida: la experiencia más traumática y cruel que padecí un verano fue cuando el Rufino un gañán don la cabeza abombada que odiaba a mi padre por ser militar y toda su familia era de izquierdas me azupó su perra, era un cánido color marrón y los ojos fulgurantes que me mordió el culo y parte de los tobillos, volví a casa llorando con el pantalón roto y sangrante. Aquella maldita perrita ratonera atendía por el nombre  de “Maula”. Toda la vida se me representa aquella perrita enana de color canela ahincando sus dientes en mis calcaños. Fue en la era del Tío Maudillo. Desde entonces tengo pavor a los perros. Las risotadas que se daba el Rufino en la era de Maudillo se me quedaron grabadas. En el infierno deben de resonar eternamente estas carcajadas satánicas que fue tan vil como incitar a la Maula  a que mordiera en el trasero a un niño de siete años. A pesar de los sufrimientos y humillaciones que padecí en aquel pueblo Fuentesoto tan feroz yo seguí amando aquel lugar que fue el escenario de mis primeras correrías infantiles, añorando sus piedras románicas, y la olma triunfal que fue derribada para dar paso al Albarrán, un verdadero sacrilegio ecológico. La venalidad de aquellos pueblerinos, sus mofas, sus carcajadas me enseñaron una cosa: hay dos Españas

 

 

 

 

 El domingo de ramos será una pantomima en la borriquilla y el buche, los cantos del hosanna, gloria al hijo de David, centro de bondad Hosanna que viene en nombre de Jehová, compramos un ramo y nos pondremos zapatos nuevos, tiraremos de las carrozas de la protección, veremos a los soldados desfilar ante los pasos, Segovia olía a primavera. Veneramos y adorábamos al hijo del hombre plasmado en aquella figura de escayola. El anticristo suplanta de forma tan atroz al cristo y no quiere morirse. Yo me subí a muchos andamios, me caí de muchos burros y no aprendí de mis trompazos. Culomagno vestido de blanco y esclavina bautiza neófitos y enseña el alta del hospital, no quiere morirse, se niega a que le canten el gorigori, no quiso ser sacramentado. Aderita la de Gordaliza fue mi madrina en tanta tribulación- una mujer se convirtió en mi baluarte, me puso a cubierto de los disparos de las poderosas armas de guerra. Ella era la virgen que me salvó cuando íbamos al Escorial en espera que llegasen los mensajes de los viernes de dolores- tales telegramas no venían o eran un tongo que se marcaba la pitonisa con la voz cascada… hijos míos. El morbo y la depresión me impulsaron a tales esperpentos, llegué a darme cuenta de que toda la parafernalia eclesial era tongo. Escuché los jipíos y suspiros de la saludadora que hablaba en nombre de Satanás y comprendí que Wojtyla era su aliado. Dios me permitió vivir tiempos de la gran impostura.

Culomagno el judeoargentino vino a poner la guinda. No obstante, en aquellas nefastas vivencias quedé persuadido de la presencia de Cristo en la historia.  Satanás hablando desde la cima de la encina más antigua de Prado Viejo a veces hablaba en acento gallego, otras en andaluz. La voz de la sorguina, cuando se ponía en trance, sosegaos. Las turbas sin embargo estaban hechas un flan porque el monarca de los dominios no se ponía el sol largaba su sermón en cinta magnetofónica lo que no dejaba de ser una ucronía. Aderita mientras tanto rezaba por mí

 

 

Mi amigo Quintiliano Quindejas al que llamábamos "Soguillas" cuando éramos guajes regresó de Foncalada tras su visita al cementerio lugar más romántico y mejor ventilado no puede haber en el mundo para dejar la carcasa con el ánimo entristecido y yo voy a tratar de poner blanco sobre negro los puntos de su azarosa biografía.  Me llamo Eutimio Guzmán pero en el pueblo me llamaba Quinolas por mi afición a la brisca. En esta parte de Castilla todo quisque tiene un segundo nombre. A Quintín lo conozco muy bien. Fui su amigo de infancia, fuimos juntos a la escuela e ingresamos en el seminario al mismo tiempo. Él llegó a cantar misa. Yo colgué la sotana en primero de Teología. A los dos nos une un estrecho vínculo de amistad y compartimos la afición por la literatura, vivimos enterrados entre libros y nos fustiga la misma comezón desalentadora por estar viendo morir al mundo en que vivimos y la destrucción de nuestros sueños. Ya somos viejos, pero hemos sobrevivido a la peste pandemita que asuela toda la tierra. Aunque con diferentes ideas los dos hemos sido periodistas. Somos en una palabra el yin y el yen hecho carne la tesis y la antítesis sin que nuestras diferencias políticas empañen el vínculo de nuestra amistad.

 

 

 

 

 

DELITESCENTE

 

Delitescens es una bella palabra latina significado esconderse y en medio de tanta bulla y de tanto grito a muchos no nos queda otro remedio que encuevarnos.

Huimos al desierto buscando un apartamiento que nos aleje de la horda mediática. Los altavoces del éter no cesan de referirse al coronavirus. Se ha convertido en el afrecho y abrevadero de los medios. Esta catafases o afirmación no la hago a humo de pajas, tampoco estoy loco, aunque a veces miro para atrás con ira y siento el punzón de los recuerdos que me hieren.

Tengo el alma en carne viva y por eso escribo desde este catábulo o zaquizamí, zulo literario, abrevadero y refugio o cuadra en el sótano de mi morada convertido en oratorio, fumadero, escritorio, biblioteca y apiarium (colmenar) donde libo el dulzor ático de la miel de la palabra. Escucho a través de ondas hertzianas voces que me llegan del extranjero.  En un par de generaciones cambió el mundo hasta el punto de no reconocer yo al niño o al mozo que fui dentro de esta gran catarsis trascendida que ha mandado las viejas ideas a un rincón. Hoy Día de Difuntos ya no se venera a los santos antepasados. Salen a la calle las máscaras de Jalo güin. Sin embargo, yo voy a la ofensiva, quemo las naves como Cortés en mi empeño de remar contra corriente. ¿Dónde está el Jalo y donde el güin? Vete tú a saber. Acabo de cerrar el blog que fue para mí durante cinco lustros. Este palimpsesto o cuaderno de bitácora fue mi aguja de marear, así como la barrera contra la que embisto glosando la actualidad a contramano. La actualidad es una anáfora repetitiva, una lucha de buenos y malos. El malo Putin y el bueno Zelensky. Vivimos tiempos de guerra y desde el día de San Matías no damos ni pie ni mano. Estamos con el alma en vilo. No me ha ido mal en este tiempo a excepción de algunos fatídicos encuentros con Erifos algunos para beber el vino del dolor y la desesperación. Pero Fray Jarro es mi enemigo hoy la política mundial y nacional son una larga borrachera. Los españoles no sabemos beber En esta situación atípica los buenos son los malos y yo me pregunto dónde está la justicia de Dios y grito con Cristo en el Calvario:

─Dios mío, Dios mío por qué me abandonaste… Elí, Eli, lamma sabactani

Todo eso que yo aprendí ya no sirve para nada es de mi gusto. Dicen que soy un hombre que vivo en el ayer y me refugio en los matacanes de la antigua muralla de York centinela en mi tronera auscultando las evoluciones del río Ouse que fluye hasta matrimoniar con el Támesis, los vientos cambian. Ayer teníamos lebeche, hoy sopla el terral y tú, Etsi, ¿dónde estarás? ¿Qué habrá sido de tu vida? ¿Te casaste? como yo. Y sí volví a pasar por la vicaría, pero este segundo amor sucedáneo de lo que tuvimos tú y yo fue un trago amargo, me eché una cruz a la espalda, alquilé una mula aragonesa que me cocea cada día, contraté una verduga. En mala hora porque Lavinia convirtióse en mi verdugo. Pasó a ser el arráez que fustigaba mis espaldas con el látigo de la ignominia y he ido bogando por los siete mares bajo la sombra de ese rebenque que fustiga a los pobres cómitres incautos, condenados a galeras. Es el destino que aguarda a los locos y a los criminales. Lamento mi suerte porque lejos de ti esto no es vida. El destino se portó conmigo de manera cruel, si bien creo que lo tengo merecido por los malos tratos que te di, los celos, las voces, las recriminaciones. Vivo rodeado de papeles y de palabras escritas. Fui un goloso de palabras porque creo firmemente en el axioma de en el principio era el Verbo y las palabras guardan un poco de ese aliento divino. ¿Estaré majareta? Todos han mudado de piel (versipelis) yo continúo adherido a mis principios. ¿Soy un diamante en bruto o una florecilla en agraz la cual no acaba de madurar? Tranquilos. El peristilo sigue en su vaina. Amanece todos los días. A todo esto, se dirige mi clamor contra los predicadores de vereda. Han regresado a las tertulias los émulos de fray Gerundio de Campazas. Ya no hablan de la vida eterna sino de los métodos para conservar la salud. Radio Carcamal vocifera contra las toxinas y don Rafa hace de su capa un sayo vociferando contra los peligros del cáncer, la crasitud, la vida sedentaria y falta de ejercicios. Todo el país se calza las abarcas y se tira a correr por las veredas. Un aluvión de informaciones nos refiere los peligros del Corona Virus que se ha convertido en eje de marcha del sistema. Las páginas de Internet son un perpetuo obituario que nos traen cada mañana la lista de los fallecidos. A contrapelo de sus sermones yo no voy a dejar de fumar por más que estos señores me atruenen las meninges advirtiéndome de los peligros del tabaco, siempre habrá de tenerse en perspectiva un enemigo, alguien contra el cual batirse. Antaño fueron los rusos. Cuando yo vivía en la Isla de los Muertos (Staten Island) siempre estaba a pie de obra escuchando las noticias de una emisora de Manhattan Radio WW700W7. Dicha estación cada cierto tiempo interrumpía sus emisiones. Sonaba una sirena y al cabo surgía la voz engolada de un locutor para realizar un llamado:

—Estimados radioescuchas, esto es un simulacro de alerta. Atención. Atención. Si hubiese sido una emergencia real, les impartiríamos instrucciones sobre cómo y dónde acudir a un refugio de los diferentes que hay en esta isla.

Yo estaba acojonado al sintonizar tal mensaje. Pensaba en la guerra de las galaxias. Ya están aquí. Que vienen los rusos. Como en la Guerra de los Mundos de Wells que hizo cundir el pánico por aquella capital. Pensaba que vivimos en un mundo en el cual la ficción se entrevera con la realidad y en la supremacía de los medios de comunicación para dominar a las masas. Era la América de Jimmy Carter discípulo en la academia de guerra de Annapolis del almirante Rickover especialista en mísiles intercontinentales. Eran los años 70 cuando América vivía la efervescencia de la guerra de las galaxias. Los malos eran los soviets como ahora es el virus y el tabaco y Putin. Ronaldo Reagan la ganó y determinaría la caída de la URSS. Yo por mi parte pobrecito español nacido en una ciudad de provincias había aterrizado desde el medievo una ciudad episcopal como York sobre la Gran Manzana el emporio del futuro la ciudad automática que decía Julio Camba. No era más que un lamerruinas que viajaba desde el humanismo católico y sentimental hacia la tecnología del gran diseño de los nuevos amos del mundo. Cogí el tranquillo. Me costó lo mío pero aquel mensaje de la radio de Manhattan emitiendo noticias las 24 horas del día para la ciudad que no duerme y aterriza como puedas marcó mi existencia, desde entonces tengo pesadillas y emulo del almirante Rickover, odio la guerra especialmente la de exterminio que supondría una conflagración nuclear. Aquello me marcó conservo su huella indeleble. Vivimos con miedo a la bomba, aunque no deja de ser una ironía que el enemigo a batir sea las toxinas que encargó míster Trump a los chinos y esas toxinas corporales y bacterias que andan por el aire al que se refiere don Rafa el de Radio Carcamal. Hago propósito de apagar el transistor que no deja de difundir proclamas y consignas sobre los peligros del tabaco y la vida sedentaria, yo seguiré escribiendo en mi acetábulo del jardín de atrás y fumando en pipa, mi cachimba y yo estamos unidos hasta que la muerte nos separe. Me siento acosado por las dudas. Los pecados y fracasos de la vida pasada pesan lo suyo y allá voy trepando con mi cruz a cuesta buscando el silencio de los montes y la fragancia de los pinos. Una grulla me arrulla con sus cantos espaciados midiendo el tiempo de mis vigilias, A la puerta de la verja que protege la entrada de la casona donde vivo un centurión romano alza su penacho sobre el muro, no es un soldado romano, Es un ángel con alas

 

DON HOWEVER NO SE CORTA UN PELO

 

Vísperas de Todos los Santos buen tiempo y las máscaras de Halloween tras las cuales se esconde el pateta. Todo el mundo anda haciendo el tonto en bacanales y bailes de disfraces, vuelve el bacanal tras la pandemia, bajé al estanco a comprar tabaco y allí me encontré a don However que es de los que no se cortan un pelo y el cura de mi aldea don Xantipa, alto, huesudo la cara triste, palentino y algo pesetero. Ya frisa casi los ochenta pero de joven era un clérigo gayaspero, las mozas se acorralaban a los pies del confesionario y lo perseguían hasta la rectoral pidiendo no precisamente absoluciones sino la gracia de Dios. En España el poder siempre atrajo las faldas por eso entre la monarquía y la clerigalla se llevan al huerto lo más granado del elemento femenino. Solteras, casadas, viudas forman parte de su patrimonio sexual. Hubo obispos como el cardenal Mendoza que guardaba un verdadero harén en su palacio y de reyes ¿qué decir? A Felipe IV le daban tantas bascas eróticas que refieren sus biógrafos que padecía una especie de furor uterino a la inversa, llegando a procrear setenta hijos entre legítimos y bastardos. Alfonso XII donde vas triste de ti bebía los vientos por las coristas amargándole la vida a su mujer la reina austriaca María Cristina. Su hijo Alfonso XIII inventó el cine porno y siguiendo la tradición de la dinastía no daba paz a la mano. Por su lecho desfiló el gran puterío matritense, marquesas, señoras de la limpieza e incluso novicias de los más aristocráticos monasterios de Madrid. Sigue la racha; Juan Carlos I es hoy la comidilla de las redes y aunque actualmente no pueda con los calcaños y ande en el exilio, sus coimas se cuentan como las cartas de la baraja. Así que el bueno de don However no pudo resistir sus impulsos republicanos en el estanco al ver al cura de nuestra aldea cuyas correrías por los pueblos del concejo sentaron cátedra pues preñó a muchas. Mismamente cuando voy al surtidor a llenar el depósito el que me sirve es Fabián.

─Super... llenar

Fabián ríe para el cuello de la camisa y ni se inmuta.

─En este país nadie está libre de dudas. Se lleva aquello de que nadie puede decir este cura no es mi padre. Por eso abunda tanto hijo de puta.

Clava el mozo sus ojos burlones en mí para que me aplique el cuento.

Pues eso, mi amigo However al ver al arcipreste en el estanco le soltó una andanada:

─ ¿Cómo está el cura?

Xantipa que no es tardo de reflejos le soltó otra:

─Pues de pie como me ves.

─Con ese monstruo que tenéis en el Vaticano

However quedó cortado ante la contundencia de su respuesta, recogió su cajetilla y se largó.

Silencio administrativo y procesal, el cura de mi aldea es un buen pájaro y listo como los ratones colorados.

Regresé a mi chabola en lo alto de la montaña y me asomé a la ventana para ver el paisaje. La cima del Fornax mostraba sus crestas peladas coronadas por molinos de viento. Aún no había nieve, aunque dicen que por los Santos la nieve en los altos y por San Andrés en los pies. Aquel verano de sequía traía de cabeza a los científicos. Todos hablando del calentamiento terráqueo y del cambio climático. El Fornax formaba parte de su familia casi de tanto salir a observarlo por el ventanuco que da a la huerta del Niso. Casi invita a subir. Para él era una tentación, realizaría escapadas ascensionales cuando era mozo. Ya no pues le dolían las piernas. La cumbre coronada albergaba una ermita blanca a la que acudían los romeros el día de Santa Ana. Fiestas de prado. Tambor y gaita. Ahora me resigno a verla desde lejos remembrando el vino y la sidra que bebí en mi juventud, es el monte más alto de la Sierra del Viento en perenne coloquio con la cordillera que desciende hasta el mar horadando el paisaje de picachos y nemorosos valles. Era el paso antiguamente de peregrinos compostelanos.

Mirándole desde abajo le miro extasiado bañando mi vista con el verde de pinares que cubren las espaldas y costillares del Fornax. Fue un antiguo volcán. Ínterin, hago examen de conciencia aterido de punzantes recuerdos en los que estalla la melancolía y el arrepentimiento. Veo a Etsi encaramada en lo alto de la cúspide. Ella era una dulce Gioconda inglesa. Su sonriso sale en cada retrato que conservo de su persona. Me mira con sus ojos zarcos que envían a la vez dos mensajes: ven y aléjate. Todo está consumado, you are not welcome. Podría tomar un avión de Ryan Air y plantarme en menos de una hora en su pueblo, mi hija vive cerca del tercer aeropuerto londinense. Expurgo mi archivo interior y ella sigue ahí intacta, inmarcesible por haberla amado valió la pena vivir, i was a lucky man. Los dos años más felices de mi vida los pasé junto a ella. Un serafín de fuego vigilaba la garita de sus ojos. Tras el maná vino la sed. Todo lo eché por la borda. Mas, tiré para adelante, fui andarríos, correcaminos sin brújula devine en pícaro al igual que ese cura don Xantipa. Lancé una moneda al aire caras o culos, salieron cruces y vine a dar en la áspera Castilla madrasta de sus mejores hijos. Si España fue mi cuna, Inglaterra me hizo, Nueva York me deshizo y Asturias me rehízo. I lernt things the hard way, no quiero pensar en aquella Eduvigis que me dejo a la puerta de la iglesia. El rechazo marcó sin embargo otro camino

Y por él estoy aquí, inconstancias de la vida, misterios de la existencia. Hay que engañar. Eso forma parte de la idiosincrasia del pícaro. Desde entonces me asustan las bodas, los trajes de novia me parecen camisas de fuerza, yo soy libre, voy a mi aire. A ti también te dejé a las puertas de la iglesia Etsi, luego el destino se vengó conmigo.

 

 

 

 

EL DÍA QUE NACIÓ HELEN

 

Amaneció espléndido, pero luego tornó el aire de calima. La maternidad de Westow Croft al norte del Yorkshire era una vieja mansión que había servido de hospital de sangre durante la guerra. Pocos saben de la entereza y sufrimientos del pueblo inglés durante aquella contienda cuando los alemanes bombardearon todo el condado. Era un edificio victoriano rodeado de pinares detrás un cementerio. Acudí a primeras horas de la mañana no me dejaron pasar:

Your wife is in labour

A mi mujer la habían trasladado en una ambulancia de madrugada y yo hice autostop hasta York y desde allí me trasladé a la localidad en un yermo que llaman “moors” donde el viento sopla con ganas. Estaba yo muy nervioso y me entretuve dando paseos por el lugar, no había un alma, penetré en el cementerio.  Lo recuerdo bien había una sepultura reciente de una muchacha de veinte años. Las flores y la corona mortuoria estaban frescas y la tierra removida se amontonaba en un túmulo. Saqué el rosario que siempre llevo conmigo y recé los cinco misterios por aquella joven desconocida que acababa de ser inhumada precisamente cuando mi hija estaba a punto de nacer. Fue un parto lento y difícil. A Suzanne la pusieron cloroformo nada de epidural. Estaba muy sofocada pero tranquila y feliz tras el supremo esfuerzo de parir En los años setenta la ginecología inglesa estaba aún en agraz y me pareció muy primitiva. Todo el día me entretuve ensimismado con mis pensamientos. Por fin a las nueve y media de la noche precisamente a esa ahora había venido yo al mundo veintiséis años atrás vino al mundo mi primera hija aún no puedo zafarme de aquella impresión. Suzanne estaba cansada, pero me lanzó una sonrisa con sus ojos verdegay era una mujer hermosísima la más bella de Inglaterra y apretó mi mano. Y le dije: “Well done Zanny you are a heroine”. Al poco rato se me acercó el doctor Isherwood hermano del famoso poeta inglés de la década de los Treinta y estrechó mi mano:

 —Mister Parra you have a beautiful daughter.

—Thank you, Sir, She is going to be beautiful, Her name us Helen the shining one.

Isherwood era el médico de Pocklington, siempre llevaba una cartera de cuero en la mano y una sonrisa en los labios donde guardaba la lanceta y el estetoscopio. Era el clásico doctor inglés with good bed side manners.

La madre de Suzanne y yo tomamos un taxi y regresamos a Wilberfoss. Mi suegra la pobre de la cual había heredado mi esposa su belleza era un manojo de nervios. Creo que celebramos la llegada al mundo de mi primogénita con media pinta de ale yo y un babysham mi suegra, eran las doce de la noche cuando entramos en nuestra casa de Wilberfoss. Todavía luz en el cielo. The limelight  el entrelubricán del hemisferio norte. Esperando el sol de medianoche. Los nervios, el amor y la añoranza de aquella jornada no se me pasaron todavía. Tardé en dormir y escribí este poema

 

 

DIARIO DE VACACIONES 1972

 

23 julio viernes

Fin del trimestre en escuelas apenas se hizo nada por lo que a mí respecta. Llevamos tres semanas de completa inactividad. Los periodos se reducían sentarse enfrente los alumnos y mirarnos unos a otros esperando que sonaran los timbres. El tiempo no parecía correr. Tuvimos la asamblea en el York Hall cielo plomizo calo pegajoso. No obstante el sol hizo su aparecieron y se animaron los cánticos. El headmaster Mr Stevenson lanzó una arenga a los chicos estrujando hasta el máximo sus escasas cualidades dialécticas. Dijo que las vacaciones son tiempo propicio para cargar las baterías del alma dio su despedida y expresó sus mejores deseos tanto a profesores como alumnos tanto los que se iban como los que se quedaban recordándoles que al paso de los años recordasen a la Armthorpe High School con nostalgia olvidando los malos instantes y recordando los buenos. Yo no sé si regreso a mi pueblo con las pilas cargadas. Estoy en crisis y mis problemas de adaptación siguen en rampa.

 Dirigió la ceremonia el reverendo Kirkup de la iglesia metodista. El nombre no puede ser más clerical. Nos confesó que él siempre escribe un diario de vacaciones que suele releer por navidades.

Me despedí de todo el mundo. Algunos me preguntaban si volvería. Yo contestaba que no sabía. Estoy en Inglaterra porque tenemos casa coche y pan. Pero estos meses han sido muy duros. Creo que por problemas de mi carácter y mi temple literario.

El profesor  McAlpine se mostró taciturno. Es difícil saber por donde va este escocés. Son los escoceses como los gallegos. Te los encuentras en la escalera y no sabrás nunca si sube o baja pero yo me he portado mal como dijo el director Stevenson tengo teething problems  o problemas de dentición en el aula. Aun no me han  salido los colmillos Me entrego al mutismo Antonio no habrás tanto la boca que te la paparán las moscas. Aspiro a la serenidad y a la continuidad.

El cuentakilómetros marcaba 10112 millas cuando iniciamos camino a las cuatro de la tarde. El mini se portó bien, consumía kilómetros como un jabato al enfilar las rampas de la A1. Al principio no pasaba de las cuarenta millas pero aceleré a medida que nos íbamos acercando a Londres mientras cantaba una balada popular de Tom Jones el tigre de Gales... to touch the green grass of home.

 No funcionaba el ventilador. Así que abrimos la ventanilla. Me causa mucho dolor recordar estos azares. Tengo de aquel fracaso espinas clavadas en el corazón y duele desenterrar los recuerdos punzantes pues todo fue por mi culpa... por mi gravísima culpa. Fui un fementido. Con Suzanne no me porté bien. Olivia apenas durmió a pesar de que su madre la embutió en un saco de dormir. Llegamos a Hornchurch a eso de las nueve de la noche con 10242 millas. Entre mi casa de Edenthorpe y la de mi suegro hay una distancia de 132 millas.

Otra vez la paz y el silencio de Harrow Drive. En las noticias de las nueve Ludovico Kennedy entrevista al jefe de prensa de la OMS acerca del estallido de cólera en España. Pese a tales reparos epidémicos la gran masa de ingleses se desplazará a la Costa del Sol. Mi suegro me pregunta si no será peligroso por la niña y yo me encojo de hombros. La costa del sol para estos isleños cloróticos y desmedrados se muestra como un paraíso a despecho de las campañas de descrédito antiespañol que suelen airear los diarios ingleses por estas fechas.

Los rostros de la gente del condado de Essex todos parecen iguales humanidad trabajada por un siglo de revolución industrial, pelo lacio, los ojos chiquitines el gesto desabrido entre chusquero y gremial. Las muchachas de buena pernamenta. Ha sido todo un descubrimiento  la minifalda. Mary Quant dio realce a la buena figura de las inglesas, al descubrir que las mujeres de estas Islas poseen unas patas olé. Por algún lado ha de manifestarse la rebelión años 60. Las británicas dejaron de ser bolsas de agua caliente para sus maridos en la cama.

 

24 de julio sábado santa Cristina

 

Olvidé en Doncaster la agenda de direcciones… pequeña gresca con Suzanne no pasa nada. Al fin telefoneo a la agencia EFE en Londres. Caño no estaba ni el sustituto supo darme sus señas y direcciones. He comenzado en el sentido barojiano de la palabra la Busca y la lucha por la vida. Lo cual significa que no podré saber si aceptaron mi colaboración sobre el diácono un hombre casado del Yorkshire que ha recibido las ordenes de diacono un tal señor Green. Me gasté más de diez libras en la elaboración de la información. Por primera vez desde la Reforma un hombre casado puede administrar sacramentos. Caño no se molestó el cabrón en enviarlo a Madrid como me prometió miedo a la competencia o simple mala uva. De todas las maneras yo voy a comprobar los hechos en la calle Ayala 5, donde está la central de la agencia de noticias y lo que sea sonará vaya si sonará.

Paseo por Hornchurch y voy de tienda en tienda en busca de un mapa de carreteras de Francia. No encuentro el itinerario por mala fortuna pero me tomo una pinta en el “Cricketers” y otras dos en el “Harrow”. Me encuentro bien de ánimos y con tres litros la rubia cerveza en la barriga se me da la baza de mirar al futuro con cierto optimismo. No quiero que nadie me gobierne. Regreso a España para volver a Inglaterra. Tengo que persuadirme a mí mismo de que triunfé en la empresa. No soy un derrotado. En el Cricketers el amo de la posada era un tipo delgado alto con la raya en medio no muy comunicativo pero perfecta imagen de una película años 30; las gentes al envejecer se llevan consigo ritmo y maneras. En el lounge del Harrow había un loro enjaulada que propalaba consignas de las Trade Unions y llamaba hijo de soltera a quien le parecía o cosa así. En el salón había un viejo piano de cola para tocarlo en los grandes partis y fiestas de solemnidad. Las gentes de Hornchurch, no es que destaquen por su belleza. Dice mi suegro que la gente peor encarada del mundo se pasera por Romford Market los martes a primera hora. Las gentes al envejecer se llevan todo consigo, ritmo y maneras. En el Harrow había un loro que alegraba las veladas del pub, mientras los clientes consumían su pinta el lorito no paraba de llamarles cabrones.

Incluso se metía con la Reina. Aquí uno se siente masa pero no nos pongamos tristes pues no hay razón para ello. Pensemos en cambio en las muchachas en flor cuando acabo de cumplir los veintiocho, acabo de tener una hija, estoy en la plenitud de mi existencia.

Anoche tomé sardinas en lata y me levanté con ardores de estómago. Mañana saldremos camino de la dulce Francia. Tomaremos el ferry en Dover. A ver el minicooper como se porta. No puedo pegar ojo y aquí estoy asomado a los renglones de este cuaderno escolar donde escribo lo que se me ocurre. No es un dietario al uso pero los ingleses me han enseñado que son minuciosos memorialistas. Son las dos de la mañana paz completa en Harrow Drive. Me bullen grandes planes en la cabeza. Casi toco con los dedos el dedo de Isis me siento sublime pero todo se derrumba cuando arrecia la depresión.

Dick Howells rindió su consuetudinaria visita de los sábados. Es un galeses y Suzanne dice que todos los galeses tienen el perfil de jilguero, son buenos cantarines nunca aves de rapiña Es un hombre en el buen sentido de la palabra bueno. Me dijo:

—Vivo como si fuese el último día de mi existencia

 

LLEGAR A LA PÁGINA 50

 

Nunca me resultó fácil escribir. Tengo que darle cien vueltas al palo, frotarme las manos. Estrujarme las neuronas, un café, varios cigarrillos y a contar historias. Consciente de vivir en una época demasiado cómoda, sin guerras sin hambre (En España todo era sencillo aquellos días) pero buscando un mundo mejor. Sentía pavor a la enfermedad. En Madrid cuando acababa el último curso en la Facultad una amiga de la familia María la de Urueñas la viuda del brigada Galo caído en la guerra civil compañero de mi padre enfermó de cáncer de ovarios. Yo tenía que levantarme a las seis de la mañana para sacarle el número de la consulta del oncólogo en el hospital militar de Gómez Ulla. Aquello supuso un trauma porque la María fallecería a los pocos meses. La tuvimos en casa casi hasta que falleció. Empezaron a aquejarme las depresiones y se me declaró una infección bucal que tuvieron que extraerme un paleto y dos colmillos. Desde entonces tuve que llevar un aparato. Empezaron mis complejos. No me atrevía a sonreír y tuve la sensación de que no me querrían las mozas que nunca tendría novia. El maldito complejo se desvaneció al conocer a Suzanne que me amaba tal como yo era. Fue un amor intenso. Después de conocernos en Hull y cuando regresé a España la escribía casi todas las semanas. Este incentivo de amor epistolar donde puse a contribución y toda la carne en el asador de mi fantasía y de mi poder literario determinó el enamoramiento. Lamento no conservar aquel mazo de cartas de amor.

Mi madre las quemó

Yo era un triunfador. Así y todo, en mi interior yo sentía mis dudas de si sería capaz de hacerla feliz a la mujer más bella de Inglaterra. Afloraron mis complejos, mis inseguridades que trataba de combatir con la cerveza. He sabido mucho después que soy un alcohólico intermitente.

—“You Always are trying to proof yourself. Why?

Tal pregunta me dejaba descolocado.  En medio de mis dudas y vacilaciones partiendo de mí nunca de ella tuve que enfrentarme a mí mismo. Quiero ser escritor.

Algún día mis obras serán un tema de coloquio en los periódicos y en las revistas literarias. Seré famoso y tú estarás a mi lado siempre. Seré tuyo hasta mi último suspiro. Cuando yo muera, serán tus dedos los que cierren mis ojos. Por eso me esforzaba en aprender leyendo todos los libros que caía en mis manos. De los ingleses aprendía el “endeavour” la fuerza del empeño y los jesuitas me enseñaron el “cunning” la picaresca. Yo quería ser un caballero andante un nuevo Palmerín de Inglaterra y cabalgar por el mundo a lomos de mi Rocinante rescatando doncellas del ultraje pero comí ajos y tenía los dientes malos. La realidad desbancaba mi idealismo romántico. Estaba abocado a las depresiones ¡pobre de mí! La más fuerte la que me dio en marzo de 1971, precisamente cuando mi mujer tuvo los primeros síntomas del cáncer tiroideo del cual yo me sentía culpable.

 Estuve casi diez días en la cama sin moverme sin comer ni beber como en una campana de cristal y en el más augusto de los desdenes.

—“Dont be sorry for yourself, dont take no for an answer”.

Lady Suzanne era la mejor consejera pero la hice sufrir. La decepcioné cuando se dio cuenta de que aquel Tony de las cartas no era el hombre que ella había soñado. Al regresar de la escuela en la espaciosa sala de estar me sentaba en una mesa de roble que compramos, ponía música en el radiograma y empezaba a escribir siempre horrorizado de la página en blanco. Un sábado garabateo este poema que conservo en mis cuadernos olvidados:

 

Llego a la página cincuenta

Señor, y he escrito tanto

El poder mío es finito y microscópico

Reflejo del afán de un enano

Ansiedades mías

Fragilidades mías

Soy una caña destrozada por el viento

Un corazón solitario

Conseguí con too y eso

Llegar a la página cincuenta

De este pobre epistolario es un éxito ¿Triunfaré?

¿Fracasaré?

Eso no me concierne

Será lo que dictaminen los jurados Heme aquí pobre cucaracha literaria

Despreciable gusano

Avanzando por las páginas

De mi cuaderno

Con patitas entumecidas vacilantes

Y me pregunto:

¿Esto valdrá algo?

Colecciono palabras del abracadabra

Solfeo partituras en mi menor

No me traicionan los pensamientos

De ellos buen amigo soy yo

Hoy escribo un epitafio al general de Gaulle

Quiero examinar las células

Quiero ver pisar el vino

Mi vida es un torbellino

 

 

 

 

 

DE VUELTA AL HOGAR

 

 

Y poesía cada día

El pájaro pinto te llevará en sus alas

Helen niña del alma

Si no te duermes llamaré a la grulla

Que te mire con sus ojos que pasman

Duerma Elenita

Que el mundo es un cajón deshabitado que el ciempiés tiene cien patas

Que los caballos se han ido tritones

A galopar por el espacio

Duerme, y duerme, niña del alma

Yo te arrullo y te canto una nana

Cuando mi niña crezca la llevaré a la feria

La compraré un pony y una guitarra

Cabalgaras sobre la trompa de un cínife

Y dirás hala, caballito, hala

 

 

CUANDO AMANECE

Me espera la niebla

Los periódicos

Y la botella de leche

Pasteurizada

Que deja el lechero

Viajando en un coche eléctrico

En el zaguán de la portada

Es la belleza de la aurora inglesa

Paisajes llanos con alma

En San Juan de Beverley repican las campanas

Ora a clamor, ora a la misa del alba

Que dice deprisa un cura anglicano

Con su voz cavernosa se come

Muchas palabras

No hay cosa más grande que poseer una bicicleta

Y pedalear sobre la marcha

Camino del trabajo `por la senda del briddle path

Allí la buena de Mrs. Peak prefectica de estudios me aguarda

El me de octubre es claro

Como el ojo de una avutarda

Las nubes traen mensajes invernizos

De lluvias intempestivo

Cuádrate, chaval, la buena bufanda

Y el jersey que te tejió la Suzi con sus dedos de hada

Galopan los castillos de piedra blanca hacia las montañas

No pararé hasta llegar a mi casa

 

 

DONCASTER

 

El proyecto de lenguas de la Universidad de York para el cual yo trabajaba en aquella casona de estilo georgiano cercana a la puerta de Micklegate  pasado el río Ouse cerró sus puertas. Eran los tiempos en los cuales Inglaterra abría las puertas al mundo y el gobierno Laborista acariciaba un plan para enseñar diferentes idiomas (francés, alemán, italiano, español y ruso) en los institutos de segunda enseñanza: Comprehensive Schools y Public Schools.

Lo pasé mal pues la carta de despido llegó el 21 de mayo de 1970 al día siguiente del nacimiento de Helen. Gracias a Dios el jefe del Departamento Mr. Rowlands tuvo la bondad de hablar con las autoridades educativas del condado del Yorkshire, reconocieron mi título universitario para enseñar en un colegio de secundaria en Doncaster localidad cercana a Wilberfoss. Nos dieron una casa estatal (council house) protegida de renta baja, cerramos la de Wilberfoss un bungalow que me llevaba parte del salario. Para ahorrar dinero yo solía acudir al trabajo en autostop. Tuve muchas aventuras que no quiero explicar aquí pero que me facultaron a conocer la idiosincrasia de los ingleses del Norte. Buena gente. Hasta asimilé su acento y los amigos me decían si era irlandés pues se me notaba la vocalización "brogue" que arrastra las erres, otros que si era judío pues mi locución era algo nasal como la de los hebreos. Yo estaba decidido a quedarme a vivir en Inglaterra para siempre y llegué a dominar el inglés casi como los propios nativos. Seguía picándome el gusanillo del periodismo.

Envié varios artículos a The Guardian que fueron rechazados e incluso escribí aplicaciones para colocarme en la BBC en el Departamento de español. Hice una buena entrevista y yo creía haber ganado el puesto pero también suspendí. Por lo visto era jefe de aquella sección un catalán que se llamaba Rafael Sala ferviente catalanista y él debió de olerme los zancajos franquistas con los que he ido siempre por el mundo con la frente muy alta. Levantamos la casa los pocos enseres que teníamos y Suzanne que había sido feliz en Wilberfoss en aquel chalet al lado de la autopista casi debajo de unos cables de alta tensión desde se veía la campiña, encontró difícil acomodarse a Doncaster ciudad obrera ella que venía de una aristocrática familia londinense. La coucil house tenía un jardín trasero delante de un campo de fútbol. De dos pisos arriba la cocina el lounge y dos dormitorios un servicio con baño. El barrio un suburbio de Doncaster se llamaba Edenthorpe que viene a ser algo así como el collado del Edén. A mí me gustaba aquella gente. Todos me ayudaron pero yo tenía dificultades de comunicación. Les enseñaba a los niños canciones y villancicos pero un día alzó sui dedo índice en alto se levantó uno el más pequeñito de la clase hijo de minero que se llamaba Pailing y me dijo:

Why do I want to learn Spanish, Sir, if I go to be all my life in the pit? (Para qué demonios quiero saber yo español, señor, si me voy a pasar la vida abajo en la galería de la mina)

Aquella pregunta del intrépido y avispado Pailing me descorazonó acabando con mi decisión de ser un benigno teacher en cualquier escuela del Reino Unido. Eran los tiempos de las "packet holidays" y muchos de los padres de mis alumnos habían pasado temporadas vacacionales en la Costa Brava, Mallorca y Benidorm, coincidiendo con el boom turístico. Otrosí, Suzanne empezó a sentirme los síntomas de una enfermedad grave que la llevaría a la mesa de operaciones en poco tiempo: picores, pérdida de pelo, ojos saltones, pescuezo inflamado, el cuerpo hinchado. Había llegado la enfermedad. Era un cáncer de tiroides. Dios mío. Un día al llegar de dar mis clases la encontré llorando en el sofá y me dijo algo que me destrozó interiormente:

─You brought me bad luck.

Yo era el culpable de aquella enfermedad. Habíamos pasado un drama antes de casarnos. La boda por la iglesia había sido suspendida y se hizo en el jugado de Hounslow. ! Pobre Mr. Hugh qué bueno y qué paciente fue conmigo! Tuvo que aplazar la ceremonia, los gastos del banquete, todo. Su madre Mary Joseph sufrió muchísimo. La razón de aquella desacertada decisión por mi parte la tuvo mi madre que se opuso como una loca. "Tú te vas a casar con una puta inglesa". Pobre Mr. Hugh, un caballero, un santo varón. Ahora, pasados más de cincuenta años, perdono a la que me dio el ser y pido perdón a mi suegro el pero a mío mismo no me perdono. He de confesar con versos de León Felipe "suplicaré perdón a mucha gente pero soy incapaz. Todos aquellos que me podrían perdonar están muertos". Recojo del calepino lo que escribía yo en mi dietario personal promesas deslavazadas, un grito en la oscuridad que me llena de remordimientos:

 

Juana Galindo Martín, mi madre

 

No alabaré tu grandeza de castellana implacable

Nada diré de tu hermosura

Para mí nunca envejeces

Ni nada sabes de este amor hacia Suzanne que me penetra

Y tú no comprendes

Son los extraños ligamentos de la carne

Que pocos entienden

Mi inmadurez mi locura de amor

Mis indecisiones

Segoviana altiva

De la estirpe del Cid

Que ignoras cuanto desconoces

Madre, yo solo puedo gritar mi rabia en estos versos

Nada diré contra ti

Pues te llevo dentro y fuera de mi carne

Porque sin hablar

Conocías mis pensamientos

Tú me pariste

Y me destruiste

Asia lo quis Dios

 

 

MISTER BLACKBURN THE  GOOD NEIGHBOUR

 

Recapacitando, al mirar atrás, a la hora de poner en la balanza los hechos buenos y los malos, los triunfos y los fracasos, en medio de la efervescencia de aquellos amores─ yo era un ingenuo joven recién casado que desconocía las reglas inexorables del juego pues creía que todo el mundo era bueno en la Inglaterra de mis sueños a tenor con el título de una novela de Graham Green "England made me". Aprendí dos palabras casi inexistentes en el vocabulario español: "compassion" y "coziness". Confío que cuando llegue la hora de comparecer ante el arcángel Psicagogo  el que pesa las almas poniéndolas en la romana del día del Juicio. Según el resultado del pesaje y lo que marque el fiel de la "statera" se inclinándose  del derecho (rebaño de los corderos; izquierdo en el  tropel de los cabritos), les llevará al infierno o al cielo. Que me conceda el pase de pernocta al Paraíso por toda la eternidad. La compasión es una prerrogativa del cristianismo anglicano que consiste  en ponerse en los zapatos del otro para comprender las razones que lo llevaron a un determinado modo de proceder. Es lo contrario que el avieso y envidioso del temperamento inquisitorial español. La "british compassion" resulta del desencanto de sus guerras de religión medievales: la guerra de los cien años, la de loas dos Rosas, la revolución social que supuso el puritanismo de Cromwell y la Reforma. Un paso más y nos encontramos con el parlamentarismo. Por cuya causa la democracia funcionó siempre en el país y ha sido siempre un desastre en España. El concepto "cosiness" intraducible al castellano tiene que ver con el confort, el aislamiento. Los ingleses llevan una vida de hogar, se embrocan en su hogar my home is my castle. Basta un pequeño jardín and a little plot of land cerca de la tierra para cuidar sus rododendros. No les gusta la vivienda en vertical, aborrecen los pisos sólo en Londres viven en flats y esos penthouses que denominan los norteamericanos condominios. El sentido de la independencia y la privacidad es para ellos un mandamiento sagrado. Puerta por puerta vivía un matrimonio de jubilados. El marido Mr. Blackburn había trabajado toda su vida en una mina de los midlands y al alcanzar el retiro se habían retirado a vivir a la casita de campo invirtiendo en la vivienda todos los ahorros de una vida. Yo por mi pelo largo mi aspecto bohemio mi abrigo de la Navy compadro en las rebajas y mi bufanda de estudiante de la universidad de Hull debía de levantar alguna sospecha de contestatario y además extranjero. Yo lo notaba al pasar cuando iba y venía en auto stop enfrente de la casa de los Blackburns donde día una señora austriaca muy católica pero muy alcahueta y murmuradora  debía de ser algo nazi. Sin embargo, con los Blackburn no tuve ningún problema. Les daba los buenos días o las buenas tardes. Y ellos me los devolvían con una sonrisa.

─Good morning Mr. Blackburn

─Good morning Mr Parra

─Nice day isnt it

─O yes

Yo le sentía salir al jardín a fumar un cigarro para pasar inadvertido con su mujer que se ponía de uñas cuando lo sentía toser. El antiguo minero padecía de silicosis y el doctor le había prohibido el tabaco. Ellos eran conscientes de que nuestro matrimonio había sido un matrimonio a cañonazos (shotgun marriage) lo cual no era bien visto en aquella aldea del Yorkshire de ideas tan conservadoras. Sin embargo, cuando Suzanne le faltaba a una barra de pan o un ajo Mrs. Blackburn la socorría con generosidad. En casa no sabían que yo me había casado. `pensaba que había ido a Inglaterra en viaje de estudios para `prepararme a las oposiciones en España. No teníamos teléfono, la tele alquilada, sólo una aparato de radio que le había regalado su abuela a Suzanne. El día del nacimiento de mi hija Helen me vieron muy emocionado. Yo lloraba de tristeza porque había contraído matrimonio sin la autorización de mi madre que era la que llevaba la voz cantante y de alegría pues para mi aquella tarde había sido la más feliz de mi vida. Mr. Blackburn me ofreció a Mary Heagerty y a mi entrar en su casa. Me ofrecieron una taza de té y le pedí a mi vecino si podía telefonear a Madrid para anunciar a mis padres que eran abuelo.

─Sure, Tony. Why not

La llamada costó diez libras y el pobre Mr. Blackburn no me las cobró. He was a good neighbour. El hombre de la parábola del buen samaritano.

 

 

 

CAMINO DE DONCASTER

Carrión Carrión

El zancarrón de Mahoma

Pájaros vienen de mal agüero

Yo me disperso

Dios  ¿por qué escribiste

Nuestros nombres en el cielo?

Las letras estaban del revés

Y nos dispersó el destino

Juegan a la guija mis pensamientos

Tres en raya

Yo me quedo

Tú te llevas el mal fario

De la augusta diosa

Del calor nace la hierba

Abriéndonos estábamos a un horizonte de colores

Pero no era el mundo como tú y yo  lo soñábamos

Valió la pena la aventura

No mires cómo vuelan

Los buitres de tus pensamientos

Carrión

Doblón

Tres esquinitas

Tiene mi cama

Cuatro angelitos

Que me la guardan

El viento mueve las cañas

Una perra chica

Te daré por un beso.

Un cínife vagabundo

Pasó moviendo sus élitros

Carrión

Plastrón

El zancarrón del burro muerto

Parra, parrilla, te pegó tu madre con la zapatilla

Las ideas vuelan por tu cabeza disparatadas

Cuando se conduce

Siempre hay que pensar en algo

Yo me quedo

Heagerty y Heeney

Amarga cerveza negra

Que bebí de mozo

una barrica y un tonel.

Acabó la espicha

E hicimos cacharritos.

Apellidos trotamundos

Arribando a la verde Erín

Flores que se lleva el viento

Tú estabas subida al olivo

Escalé la cucaña

Y gané el quiñón

De tu sonrisa en la orla de tus labios

¡Qué tiempos!

Atardece

El sol envía

Rayos de ausencia

Quiñón, carrión

Cantón

De sopetón

Bajaron las ninfas

A bañarse desnudas

A las aguas pandas del río Ivel

Cambridge con todo su poder, a mano izquierda

Cuando conducíamos hacia el norte

Mi mini Cooper se sabía el camino

De aquel soñado Hornchurch

Un pís, una taza de té en el apeadero

Y nuestra niña dormía en tu regazo

Millas y millas, rubia y pecosilla.

Leguas y leguas

Varas y veredas

Yardas, millas and milestones

Kilómetros y kilómetros

Anochecido,  llegábamos a los jardines de Doncaster

 Una casa, un hogar, una taza de té

Y yo me sentía centauro sobre aquel caballo de hierro

Písale bien.

¡A fondo el pedal  del motor alado!

A modo de Quirón cabalgaba sobre el mundo.

La Old Merry England un lecho de flores a nuestros pies

Empuñando el volante como las riendas de una cuadriga.

 

 

 

En mi llegada a Doncaster

 

Doncaster carbón y plomo

Los castilletes de la mina

Besados por la lluvia

Baena gente obrera

Señor, danos tiempo y gracia

Mientras esperamos

Las particiones del Amor

Esa herencia que dicen que nos legas

Ando por las calles de una ciudad desconocida

Que me acoge

Soy un refugiado

Acaso un judío errante

Portando en mis adentros

Las contradicciones y reparos

De un monólogo interior

Me paro a pensar mientras voy

Por Doncaster ligero de equipaje

Una hija nos ha nacido y mi mujer está enferma

Hay niños en el corro

Que esperan la redención del viento

El dulce soplo de los sueños

Jugando en los suburbios

¿Mañana qué serán?

Quien les dará pan

Quien les dará amor

Barrios de emigrantes

Suburbios de esta vieja ciudad romana

Cerca de la estación

El pitido de los trenes me despiertan en la noche

Vuelan los fantasmas a través de mi imaginación

Prorrumpen en carcajadas

Tienen rostros tiznados de carbón

Beben cerveza en Friday Night

Y llevan sobre las espaldas el peso del mundo

Son la fuerza motriz que mueve el movimiento

 

En Doncaster a 21 de julio de 1970

 

 

A los que se llaman como yo

 

Mi nombre es vulgar

Frondosa parra sin uvas

Miles de hombres que se llaman como

No los conozco

Estoy en el exilio

Alma herida de fracasos

Bebo en la fuente del silencio

Aguas turbias

Vivo donde río lloro muero y paso

No le importo a nadie

Pero nuestra esencia es universal

Todos reverberamos en la luz de un espejo

Universal

Yo solo soy piedra matorral y monte

Me llamo Parra y me gusta el vino

Vengo de la cepa del Rey David

Desgrano los dieces de un rosario de versos soñados

Que nadie escuchará

Vayamos con la música a otra parte

La barca navega sin rumbo

¿en qué bajío encallará?

 

CARTA A MI HIJA INGLESA O LAS PERVERSIONES DEL TABACO

 

miércoles, 15 de diciembre de 2021

 

QUERIDA HELEN:

Llegadas las navidades, me entran el morbo, lleno de pujos melancólicos de Dickens.  

Se me aparecen Scrooge y Mr.Ebenester y su cuadrilla de desharrapados walking the London streets and saying: "Humbug". Todos son tonterías. La vida pasa y el cielo no se apiada de nuestros dolores y nuestras súplicas. Debe de ser la nostalgia del Xmas pudding y aquellas nochebuenas junto a tu madre en la casa de los abuelos en Hornchurch que no volverán. Hacia ellos llenas de compunción y arrepentimiento mis plegarias vayan, y les pido perdón por el mal causado por mi inconciencia e incompetencia como padre y como marido. I wasn´t suitable to make you and mum happy. Sin embargo el barrenillo o gusanillo de la conciencia siempre vuelve por estas fechas cuando las calles se iluminan y a la puerta de los grandes almacenes pascueros vestidos de rojo y barba blanca ho ho ho aparecen a las puertas del Corte Inglés y los supermercados; yo me pregunto que qué tendrá que ver el nacimiento del Salvador con el consumo la venalidad de nuestra sociedad deseando gastar y comprar. Así es. Afloran las olas de los recuerdos. Para conjurar ese dolor suelo entregarme a las debacles báquicas. Pues dicen los entendidos que el liquido elemento mata las penas. Vinum bonum laetificat hominum (El Eclesiastés) no sé si será cierta esa admonición bíblica que suele aplacar los escrúpulos de los borrachos. Aquí estoy fumando mi pipa como hace tantos años. Mi cachimba es una compañera de trajo y acudo a su ayuda para que ilumine las fuentes de mi inspiración asaz secas a la verdad pero mi chiscón búnker chabola biblioteca o fumadero tanto como oratorio asimismo me proporciona distanciamiento del mundo y en esta reclusión vivo añorante del amor perdido.  Soy pájaro de un solo nido, tuve en la vida un único amor tu madre la dulce Suzi de los ojos bellos y un sentido del humor londinense. Verdad es que conocí a otras mujeres y estoy casado con una que me dio cuatro hermosos hijos (no sé si habrán salido de mi fabrica pero al menos yo pagué el bautizo) y a veces recapacito y una voz me dice interiormente "eres un afortunado tío, fuiste amado por la mujer más bella de las Islas Británicas y lo echaste todo a perder". Pues sí. Hay un refrán en español que lo certifica: "De lo que te di con putas y gañanes yo lo perdí". Ah la Navidad ¡qué solsticio más triste! Son la idus de diciembre cuando los romanos encendían faroles por todo el imperio para invocar a Saturno el dios de la oscuridad para que aplacase sus iras y permitiera el regreso de la claridad allá por la Epifanía el seis de Enero. Mientras en mi bunker yo inhalo el humo de mi pipa a mis 77 años. Me convertí a la pica desde los cigarrillos viendo fumar a Harold Wilson aquel primer ministro del año que tú naciste. De ninguna manera justifico este maldito vicio de la hoja del tabaco pero me ayuda a sentir compasión de mi mismo a soportar con entereza las contrariedades del destino y tal vez a soñar en un mundo feliz. En verdad no fui feliz más bien un escritor fracasado, romántico empecinado en acariciar el cielo con las manos. Cuando lo intentaba una nube se interponía en el camino y yo caía en el abismo. Otrosí, tuve mucha suerte pues como decía tu madre "you always land on your feet". Llegué a alcanzar las cotas más altas de periodismo con mis dos corresponsalías para ponerle los dientes largos a mis enemigos. Que los den con un canto en los dientes. Fumar o no fumar that is the question. El tabaco se ha convertido en el terror del milenario. Abstemios o fumadores todos la palmamos. Obsesionados con dar de lado a tal flagelo se creen los muy ilusos que es la entrada de las puertas de la inmortalidad. No saben que una cuarta más arriba o una cuarta más abajo aquí no va a quedar nadie y que aquí no va a quedar nadie para simiente. Ellos, en cambio, duro que te pego, no fumes que te mueres. Claro que me moriré cuando me llegue la hora. Han vuelto los inquisidores. La Spanish Inquisition  llega de la mano de estos entusiastas de una vida sin humo. ¿Y la contaminación del óxido de carbono o los pesticidas? Siempre hay un enemigo a batir y las furias antitabaco sirven de tapadera para ocultar otros males como el humbug, el desamor, el egoísmo, la insolidaridad en que vivimos. Nos quieren quemar vivos a los fumadores. A mí me causan hilaridad tales desatinos. Ciertamente, mi padre murió de enfisema y tu abuela Mary Josheh Heagerty esto es Mrs. Hugh fue victima del tabaquismo pero yo creo que murió de pena a causa del disgusto del fracaso matrimonial nuestro y tu abuelo Mr. Graham Hugh Dios lo tenga en su reino era un justo de Israel murió por causa del tabaco aunque este no fuera agente sino una enfermedad laboral trabajaba en la city en una empresa de importación de maderas finlandesa y el serrín que despiden los troncos al ser cortados desencadenó el mal en sus pulmones. Cuando vivía en Reino Unito puedo asegurarte la marca de las hojas que fumaba. Empecé con Number 6 muy baratos o Benson and Hedges para los domingos y días de fiesta. A medida que fui ascendiendo en la escala social tiraba de Woodbines y cuando supe que era lo que fumaban los mineros empecé a tirar de Navy Players un especifico egipcio los paquetes venían envueltos en papel de plata y los cigarrillos eran ovalados aspirándolo me colocaba y su humo me dolía la cabeza. En Londres los puritos panatelas me ayudaban a terminar de escribir la crónica que yo mandaba desde el telex en mi casa de 41 Roland Gardens el piso bajo (siempre he trabajado en un alguarín con luz eléctrica pues la cenital no me inspira) y ahora mi marca preferida para la cachimba es Brookfield que apenas se encuentran pero ayer fui al Corte Inglés y allí tenían. Creo que el tabaco ha sido el consuelo de mi vida. Fue mi salvación en los momentos difíciles. Espero que no sea mi perdición. Mamá también fumaba. Espero que lo haya dejado. Te escribo querida hija a humo de pajas sin saber si esta carta será leída pero seguramente será del gusto de ese robot de Google que controla mi quehacer desde los Estados Unidos ayer casi diez mil visitas. He tratado de buscarte toda mi vida hasta entré en los chats porno para ver si alguna de esas pájaras se parecía a ti. Qué horror mi hija convertida en una de esa lagartas que enseñan el culo y el ojete por la red a cambio de un dólar. No tú no podías ser una de esas. Tu has debido de ser igual que tu madre una rosa inglesa alegre y fragante llena de vida y de buen humor. Te deseo que pases una feliz Nochebuena en compañía de la gente que te quiere. Yo también te quiero pero estoy muy lejos. Daría años de mi vida para que el implacable reloj de la vida diera marcha atrás y no haber abandonado Inglaterra. Tú tendrías un padre que ahora anda perdido pero en mi corazón estás presente todos los días. Mis oraciones la elevo al Altísimo para que te proteja en las horas altas y bajas de tu existencia. Estoy ahorrando para que cuando me muera seas heredera universal de todos mis bienes más de seis mil libros y papeles, la mitas de esta casa y de la otra que tenemos en el campo. Sería una forma de hacer justicia al gran agravio. Sé feliz querida Helen, cuida de tu madre y no pienses que estás sola en la vida. Evita las depresiones y ven a España. Tu padre te recibirá con los brazos abiertos aunque tal medida me cueste el divorcio. Vivo con una señora a la que no amo. Es una extraña para mí. Pero bueno. Cosas de la vida. Merry Xmas ad a happy new year 2022

 

 

eucologio de la catedral de york, peregrino a la tumba del rey santo en remisión de mis pecados me prosterno ante la tumba de san Guillermo

17 de diciembre de 2001

I read York and dreamed of the three turrets.

To my mind came names of the norman bishops and cannons 32 of the chapter under the mandate of the dean.

A seat in the choir to sing matins with precentor.

There was the crypt of st. Stephen its massive piers built in 1154 by Roger of Point-l-Evêque.

Bernard of Clairvaux imposed the archibishops pallium in a time of great conflict among the Sees on Cantorbery and York for the primacy and cowing and resentement towards Rome.

Eboracum was my destiny.  For me it was more than a city. It is an estate of mind.

Remember Wilberfoss. My rides to Micklegate.

In Saint Marys by York cathedral my child was christened on Saint Peters Day 1970.

The temple is also dedicated to that saint.

I feel remorse and sadness for that dream, but my love must be hanging somewhere from the peak of a pinnacle or absconding underneath the abraxas of the chapiters framing the majestic perpendicular walls.

That time was a symbol.  The fullfilling of a prophecy.

I will see you again Suzanne and Helen when reencarnate.

Abbeys, minsters, old stones and parapets remain meanwhile for my console.

I adore the crucifix in the nave of the south transept.

The English gothic two styles, decorate and perpendicular, but one soul. The cathedral was built by Eddius Stephanus, biographer of St. Wilfrid in 669, that was the year of its consecration, a wooden church.

In the aisle was crowned William the Conqueror in 1066 after the battle of Hastings, the year of ninth centenary I arrived in England and I remeber the postcards and stamps and all memorabilia that Mary, the mother of my love sent me.

Normans and Danes, the different tribes.



I fancied the lovely Virgin and child in sculptured stone, Santa Maria. Archibishops Holgate of the reformation in 1554 ordered the decapitation of the resemblances, sacrilegous act.

There I felt the pressence of St. Anselm, the mystic explanator of Divinity, the first of the great theologician and you have to bear in mind that York was the craddle of the cistercian. He was an abbot, pilgrims came to venerate the shrine of William of York whose body distilled a most salutiferous oil and performed many wonders and cures.

This cathedral is a big dream plastered in the scultured of same details of the canopied seats in the chapter house. Monster and angels in the misericordias .

The arch of the porch built by Anthony Bek Bishop of Durham. Doncaster Hatfield and the broom plant(escoba, retama, inhiesta) or planta ginesta. Neville cross and the black death and Leonor de Castilla.

It is a soothing vision os bays and archivolts. Boothambar where I rented my first house and had an argument with the chap of the real state.  It was a difficult time but also a a season for wonders and miracles. God writes straight with wrong lines.

In the dream of York embarked fought the gales aboard Saint Nicholas´corbel and I arrived shipwrecked to the shores of of northern England my life kind of sinking.

The primrose stone slab depicting the Maternity was hacked away by the clastomanía of certain archibishop bowing to Luther. His name was Holgate, chairman at the primacy 1545-1554. Now have the clastic fragments of that beauty in the byzantine style.

The interior brings serenity, peace of mind, and also awe. The feeling is overwhelming. No one can see other spectacle of the same majesty as the Window called of the Five Sisters. Stained glass and dog tooth and herring bone ornaments and decorations.

Gables and pinnacles and my life hangling down from the spear of one of the pinneals in crestery.

There are triforiunms and clerestories. Saint Niocholas saving the three pueri from the seas brings a crozier and a baculum.

I saw the burning cross in the illuminated skies of York. A finger was rising to the heavens in a motion of acceptance under the trumpeted shaped vaults.



Oh my god that simmetry meaning highness and adoration

 

28 de enero de 2002

I had the flu and got to drink a bottle of Ponche.

By the skin of a teeth I escaped. There was that guy threateing eyes so you came here and you are a stranger. Behave yourself dont touch the buttocks of the ladies.

The ladies nowdays go to the pub with mandragora complex. Queens of the behive drones their victims men have become idlers and loafers in the sinister sight of the draconide. The drip stone of the porch bay windows music of the soul I confess that in the beginning was my end.

The question is which side are you in? The question is not the Press but success. Look you for stories that are more constructive in character. Why dont you write more abad what it is right in América?

The handling of news publish and be damned the untouchable essence of american democracy conservative for them deletereous and destructive to other that is the secret formula.

30 de noviembre de 2002

Hoy san Andrés y recurro como Amiel, agostado el filón de la inspiración, al mundo lineal y cuadriculado de esos diarios que uno se propone acometer sin que se materialicen los buenos propósitos.

Un año y diez días han transcurrido desde que abrí este archivo. En verdad, no creo que lo conseguiría pero he dejado de fumar y de beber, a resultas de una crisis en la que no hago más que pensar en la muerte y en la que se me demuestra lo baldío de mi existencia.

No se puede decir que haya tenido mucha suerte con la literatura siendo yo por otro lado un decoroso factor del cultivo de las eminencias literarias pero los tiros iban por un lado y los estampidos por otro y así no hay manera.

He adoptado también otra resolución la de adelgazar, que no es manca a efectos de mi bulimia pero quisiera darle al psiquiatra con una canto en los dientes.



MJ dice que cada vez ando más inclinado, que me va a comprar unos tirantes para sujetar esa espalda ladeada a los efectos de una cifosis severa, las radiografías lo muestran, que comenzará como tantas y tantas cosas en la infancia o en la adolescencia. Es cierto cada vez me parece que estoy más vencido.

“El Cero y el infinito” en versión de Eugenia Serrano Balnayá (tomé copas con ella en el Gijón) todos tenemos un poco de Rucbachof. Todos estamos condenados a muerte. He aquí el poder profético o mesiánico del hecho literario. Rubachof pudiera ser también Gorbachof. Los creadores de la invención ellos se lo guisan y ellos se lo comen.  Muchos textos, es maravilla, al cabo de los años, tomaron aires de presagios cumplidos. Dinamitaron el comunismo desde dentro y ahora nos encontramos en el Efecto Falena que no es otro que el de la mariposa. En la conferencia de Reikiavik un rabino sonreía a los pies del volcán mostrando la torá envuelta en faldellín. Sonrisa mefistofélica del que ha ganado la partida. Cuando vieron que ya había cumplido su misión en Rusia cambiaron de senda. Hubieron de pasar por cerca de cincuenta millones de cadáveres. El comunismo tuvo que ver con la Apocalipsis a consecuencia con las guerras que desencadenara pero en esa misma dirección de una forma más deletérea e intensa fue la revolución acontecida en 1989. Un producto del agit prop universal. Como todas las revoluciones tendrá su efecto estrambote.  Tendrá que haber muertos. Hoy san Andrés la nieve en los pies. Justo a un años vista de que me salvase por los pelos. Mala cosa el beber.

La dictadura libertaria que estamos viviendo es también una mascarada.

Ay de los vencidos. Pobres de aquellos a los que la historia hunde en el polvo.

Me sigo acomodando a vivir en una campana de silencio. La muerte de Rubachof está descrita de una manera genial. Al cabo de los interrogatorios sólo deseaba una cosa dormir y soñar en la Arlova. La muerte no es más que dormir. Es el letrero que impera en el cementerio de Paris donde están enterrado Robespierre y sus cofrades campea ese letrero. Quizás sea como entrar en una especie de sentido oceánico, unidos todos a la totalidad del ser divino.

Hoy sábado conduje hasta Majadahonda, compré unas pastillas. Hacía viento pero se estaba bien al solillo



3 de diciembre de 2002

La soledad es un pájaro de fuego que crece mar adentro.  Podría sentar sus reales en el centro asturiano, por ejemplo, que está en la calle Farmacia por donde sacaban a los presos de la cárcel de san Antón. Desolación pero ya pusieron las iluminaciones en las calles madrileñas. De regreso al conducir vuelvo a sentir vértigos.

También puede que la batalla con la báscula la tenga que dar por perdidas.

¿A qué escribir si no tengo nadie que me lea? Santos dice que le gusta lo que escribo en un estilo medianamente pasable. Toco los temas que nadie se atreve.

Tendría que salir a dar mi paseo diario pero me disuade el viento favonio que pega con fuerzas.

Ahora mis noches son mejores, las duermo de un tirón aunque tenga que alzarme a mear varias veces. Jesús omnipotente, ten piedad de este pobre pecador que ha hecho resolución de no fumar y de no beber pero que está anquilosado en un taedium vitae como nunca en su vida.

Cansancio y agotamiento. Veo pocas perspectivas como no sea el ir tirando. Mi mujer dice que me siento todas las mañanas en el sofá a aguardar a la pelona.

Nos pide el ayuntamiento de Oviedo las tasas atrasadas por el el renault y suman casi quinientos euros. Tienen que sacar de las gabelas para financiar los costosos premios príncipe de Asturias. No hay que abrir al cartero que ya no es de antemano heraldo de las buenas noticias sino un vulgar recaudador de las contribuciones más impensadas. El estado de las autonomías cobra por todo. Hasta por respirar. Tienes que escribir al desgaire, escribir sea acaso un acto venial para el cual no se exige tanta preparación como acostumbras.

¿Seguirá adelante el diario? No hagas jotter. Batete el cuero con la sabana en blanco del ordenador sin preparación en sucio, ni trabajos a maquina. Tienes que perderles el respeto a las Nueve Musas. No es lo mismo decirlo que hacerlo. Hombre ya. Y si no emborronas a qué te podrías dedicar, yo me pregunto. Has de resignarte a vivir contra las cuerdas y a llevar una existencia anodina, no eres más que un prejubilado.



14 de marzo de 2003

Aquí estoy recién evadido de Asturias, con un vacío interior y con una depresión que alberga el pecho como un runrun. Libo la flor de lo inane. En estos tiempos en que la vileza se prodiga vivir acogotados no es vivir.  Se acentúa la vacuidad retórica. Me refugio en la ergoterapia pero soy incapaz de catalogar todos mis libros. Me digo y esto para qué quien me los va a comprar, puesto que acudí al último remedio que es el de vender libros por Internet. Si otros lo hacen ¿por qué no lo puedo hacer yo? Me pierdo en los floreos del canto de la epístola y enero ocho buen día para matar el gocho. Ando muy machucho o entrado en días. Padezco las dolamas, alifafes y achaques de la incipiente vejez. Tiempo de pundits y tertulianos que se regodean en el deshoje de la margarita con respecto a la viniente guerra en Iraq. Vivimos en una sociedad en la cual la pobreza, la decrepitud y la vejez son pecados capitales. Se estrecha el círculo de la vacuidad y la bestia saca pecho. Parece que le campanea el busto.

Prosigue mi ergofobia. No sé cuál puede ser el registro de esta palabra; tal vez ergotismo.  Registrase un miedo al tajo y lo demás

22 de octubre de 2003

MISIÓN CERVANTES

Cuando el pasado sábado a media mañana se encendió el retroceso de la nave Soyuz TM3 en la base espacial rusa de Baikonur, en la ciudad de las estrellas, en la que viajaban los astronautas el español Pedro Duque, el ruso Alexander Careli y el británico Michael Foale, con destino a la base espacial ISS, en España muchos sentimos que se estaba haciendo historia.

El viaje ha sido costeado por el gobierno español que ha pagado a las autoridades rusas la cantidad de doce millones de euros.



Esta puesta en órbita ha significado que España  hiciera el otro día sus pinitos en el espacio uniéndose al grupo de naciones pioneras en la carrera del espacio aunque para conseguir este objetivo tenga que ir a las ancas de la eficiente tecnología rusa. Se dice que los rusos han demostrado trabajar sobre seguro y que incluso  llevan un pie delante con respecto a los norteamericanos en esta parcela. Ya llaman aquí a Pedro Duque el Gagarin español por estos pagos.

En el palmarés de la Ciudad de las estrellas en Kazajastán no se registraron sorpresa. No puede decirse lo mismo del proyecto Apolo el cual ha registrado ya más de un par de accidentes espectaculares.

De momento la maniobra de atraque con la base espacial Soyuz fue llevada a cabo sin novedad y con el aliciente de una conversación telefónica entre la tripulación y el presidente José María Aznar.

En el módulo acompañaba a Pedro Duque una gran bandera española, dato que no hay que dar de lado precisamente en un momento en que la enseña de la patria es ultrajada y está siendo motivo de escarnios y de refitoleos. Pedro Duque, un español que nació en los Estados Unidos la pasea con honor por el espacio durante los días que dure la operación Cervantes que regresará a la Tierra el 28 de octubre.

La prensa pone de relieve aquí que mientras los transbordadores de la NASA se encuentran aparcados en sus hangares de Cabo Cañaveral después del percance del “Columbia” las naves Soyuz circunnavegan el empíreo lo que no deja de ser un timbre de gloria para Rusia y una paradoja para los Estados Unidos que dicen haber ganado la guerra de las galaxias.

Micahel Foale y el comandante Alexander Kaleri relevarán a la tripulación de la nave TM2 que llevan seis meses en el espacio y que está integrada por el ruso Yuri Malenchenko y el estadounidense Edward Tsan Lu. Mientras Duque que fungirá como ingeniero de vuelo está previsto que aterrice a bordo del transbordador que dejará su órbita en los próximos días.

 

 

 

 

 

 

 

17 de noviembre de 2001



Afternoon of heavy metal grey skies, I think November is a beautiful month of crops loaded with fruit, in this arva acorns when the oaks exhibit their garlands over the hills, where the ambry of Nature conceals the chalice of the seeds; there was an accident in motor way: a blue car turned down left inside civil guards seemed to panic derouting traffic, must have been people trapped underneath, the Valley of the Cross packed, mass inside the big basílica, the mine excavating the mountains in scoop of piety and perpetual memory, tunnel of greatness, hundreds at the mass for our leaders, XXVI anniversary and LXIV respectively, we are getting old. There was a great liturgy preached by an abbot in full gait, the benedictines know how to perform all movements counted and every thing here is symbol, has something to do with a bimilenary history, the steps, the signs.

For example, the singing of the Passion Christi at Good Friday embraces the postulate of standing up looking towards the North from where Aquilón wind blows. At consecration lights went off and the whole cathedral was in darkness. Only the great and impressive crucifix leading the altar remained illuminated under the big sabbaoth depicting the triumphant procession of saints and martyrs stepping the cuppula. That procession of the happy blessed it is an overwhelming feeling from above. Below, lie Franco´s and José Antonio hearses. The base of the cross in the valley of the fallen is flanked by the gigantic statuas of the four evangelists.

I have gone this year after three of absence, and I found the same people: patriots going in a big ship travelling without a rudder in an empty course heading for disaster.  We feel exile in our lands, strange to our people. The chief gone, we are left with the gestures and the big panoply, uniforms showing off, and tomorrow I know the headlines in the papers: “Less people attending Mass for Franco and José Antonio. A bunch of nostalgics”

But a young girl in clue shirts and the badge of yoke and arrows over her lap was handing out leaflets shouting out: “We are not the past, we are the future, we belong to the eternal Spain”

I don´t know. They put all of us on a barrel of dynamite for a lag explosion.  All is under control but in spite of all I have not done so bad.



At the entrance of the church Security scanned all the people who went to gain access. It is the first time I have seen such an scrutiny at the door of a catholic temple, but beforehand they were bomb threats. I walked down. The interior of this cathedral reminds of a cellar of a cave. We go through the tunnel of time. The lines are symetrical, austere and imposing. There are no glass windows. The building was made inside of a mountain, removing the insides of mother earth.

I arrived home at last after the influence tried to cure a catarrh with punch typical business as usual and the thread of reason is subtley cut off by Erifos he wants my perdition but it is part of me and not easy as it seems to get rid of his ventures and strategy.

25 de diciembre de 2002

Sigue el miedo al vacío. Llevo sin encender el ordenador más de dos semanas. Una aflicción interna, el dolor de costado y la desalineto de saber que todo cuanto haga será inane me aleja de la tarea que ha sido razón y norma de mi vida, pero fue una noche buena bien pasada con mi madre, mis hijos, mi mujer mi hermano Fernando y Fuencisla. Mi madre la salió un grano en una pierna y creo que era un cáncer, la han tenido que hacer un injerto, fijate un granín cuando sale con mala leche. Temo a la nada, al vacío. Los cadáveres se mojan más en los cementerios en estas noches de lluvia y ese solo pensamiento me hace acorrucar junto a la almohada en espera de que la muerte me sea esquiva. No soy lo que se dice un valiente a tal respecto. El papa de Roma no es más que un ansia consolidada de poder. Sigue impartiendo bendiciones desde su carretón y sonriendo con una sonrisa enigmática cuando se le aclama. Estoy confuso, apenas puedo poner en solfa mis pensamientos pero al menos he podido vencer una resistencia inaudita que dura ya demasiado tiempo. Y ahora me voy a comer. Anduve esta mañana las dos praderas y  ya me roe un poco el gusanillo. Es angustia vital lo que siento. Nada más. Tú no te rindas.

 

 

 

 

 

 

 

 27 DE SEPTIEMBRE

 

4 ABRIL LUNES SANTO:

Hoy Se Fue María. Al hora que redacto maría Prudhome la gran revelación de esta primavera estará paseando por las calles de la ciudad del Dante. Cuando huelo mis manos aun aspiro el perfume que ella me dejó de las suyas. Me acariciaron como nadie en el mundo aun me acarició. Tu partiras demain et tout sera oublié”... alors on verra... je te aime je t´adore antonino  mais tu vais c est pas `possible... je voudrais t´en donner tout, mais cést pa possioble je l´ai promis a mon Dieu.... quie tu es jolie muy darling, havent met another like you. You are the first and the last

On Friday evening we were dancing trembling of happiness and desire. I respected her. We went for a walk at Retiro park. The sunset glared on her eyes. Al abandonarla en su hotel vagué por las calles madrileñas. Estaba confuso. Era la primera vez que yo besaba a una mujer. Me levanté y fui a misa para pedir por ella. Este Domingo de Ramos  fue inolvidable. Nunca la volvería yo a ver a este dulce profesora canadiense.

 

13 de abril miércoles de pascua.

 

Bajé unos días a Fuentesoto. Me hinché a comer rosquillas de palo, que es una tradición de pascua, pero me dicen que los lugareños abandonan el campo cierran las casas abandonan el arado y la reja y se vuelven a la capital. A mi me tira esa tierra.

La torre de san Gregorio que divisaba en lo alto al levantarme de la cama a través del ventanuco de la portada es un lugar mágico. Antigua iglesia construido hace ocho siglos. Creo que el abandono de la tierra traerá consecuencias y ya nada volverá a ser lo mismo aunque no lo dudo la gente quiere progresar y echarse coche.

En preparación del examen final en la Escuela de periodismo estuve trabajando toda la tarde en la hemeroteca municipal. A las siete regresé a la casa de Alvaro de Bazán a ver el partido de fútbol que transmitía TVE.  La final de la Copa del Mundo. Inglaterra se impuso a Alemania por 3-2. Fue un momento histórico. El estadio de Wembley vibraba de emoción patriótica.

 Nobby Stiles sin dentadura alzaba la gran copa y bailaba en la cancha. Impresionante el gol fantasma de Hurst y los tiros a puerta de Bobby Charlton. Las paradas de Banks. Hoy me siento muy inglés. Tuve el sentir de que alguien me llamaba a Inglaterra. Tengo algo de caballero andante y tal vez yo forme parte de la hueste de Palmerín de Inglaterra que marchó con su ejército a conquistar Jerusalén. Sueño despierto alguna vez.

El agua y el viento  de Fuentesoto ennegrecieron y purificaron mi piel. Vienes más moreno mi madre dijo. “madre, cargué las pilas y vengo con el espíritu en forma. En el pueblo se respira bien. En Madrid no. Amar a Castilla es una gran idea. Los dolores de barriga desaparecieron ya estoy curado o casi de esa operación de apendicitis que yo temía fuese un cáncer.

 

16 junio 1967 jueves

 

La pasada navidad me operaron de apendicitis en el Hospital del Generalísimo. Parece ser quedaron secuelas o adherencias según el lenguaje quirúrgico. Poco antes de que me operaran murió en una de sus salas el general Muñoz Grandes.

Los puertorriqueños  andan a palos con la policía federal tratando de defender su idioma castellano. Estos mestizos de Borinquen les dan una lección a los vascos y catalanes separatistas, que menuda la prepararon en  Barcelona cuando entró a tomar posesión de la archidiocesis de Barcelona Don Marcelo el primado de Toledo. Recibieron a a palos al buen prelado que es de Valladolid. Los separatistas hablan de progreso pero yo me digo qué tipo de progresismo puede ser ese. Son unos maldecidos unos bujarrones. Creo que para salir en defensa faltan intelectuales pero aquí lo que tenemos es a don Bartolomé Mostaza.

Vietnam. Mil muertos en la operación Hawthorne. Una celada en un bosque de los vietvcongs.

Las cadenas radiales hablan de la próxima caída de Hanoi. Una foto trae el Arriba impresionante, capta corriendo a una niña ardiendo desnuda  por medio de una carretera para ponerse a salvo del gas mostaza. En otra imagen un oficial de los leales a Nhgyuen disparando en la sien  de un prisionero del Vietcong. Son dos fotos dignas del Pulitzer. El fango, los arrozales y los pozos de tirador donde los combatientes vietnamitas se emboscan constituyen una pesadilla para el poderoso ejército yanqui. “Es una guerra extraña y horrenda” declara Luis Ponce de León un uruguayo encuadrado en las tropas USA, de permiso en Montevideo. Todo apunta a que los EE.UU han perdido la guerra.

Conflictos laborales en Amsterdam y en Helsinki Kosiguin el presidente ruso continua su visita a Finlandia. Se entrevista con Kekonnen primer mandatario finés

 

17 junio 1966 viernes

A partir de esta fecha los nacionales de Honduras gozarán de pasaporte español, decisión que me gusta y trae hoy el BOE. El gobierno de Franco tiende los brazos a Hispanoamerica. Es fruto de las relaciones comerciales del ministro de Industria López Bravo. Ya digo es una decisión la mar de acertada. Nuestra patria tiene allá un compromiso ineluctable que hubo un tiempo que fue obviado. Ahora vuelve a surgir. America del Sur siempre me ha encandilado desde que escuché las lecciones magistrales de nuestro profesor canario  Mario Hernandez  Barba. Se ofrecen coyunturas favorables para cuajar una via de acercamiento con aquellos pueblos hermanos. Propone este profesor abrir nuevas cátedras de Historia de America. Sólo existe una en nuestro país, mientras en Rusia hay 47.

Criticas a de Gaulle que en Moscú habla de una Europa desde Gibraltar a los Urales. Ello le desplace a los norteamericanos.

El ayuntamiento de Cadiz está incómodo con el Correo Catalán porque publica un articulo en el que dice que los gaditanos son la cuna del señoritismo. En Cádiz ha surgido un grupo de presión que quiere constituirse en enlace entre los republicanos y monárquicos. Pemán es su adalid

 

18 de junio 1966 sábado

Entre los jóvenes americanos a punto de graduarse en Harward únicamente un 12% piensa dedicarse a los negocios. Les trae al pairo el sistema capitalista, dando preferencia a los valores espirituales al ocio y la cultura y la paz no la guerra. ¿Decadencia del capitalismo?

Aquí ciertamente proliferan los lectores a de Alan Grimsberg el poeta que dijo “America vete a hacer puñetas con la bomba atómica”. Es la generación hippy flores en el pelo y canciones, sentadas en California y en Chicago riots. Me gusta el disco y no dejo de ponerlo en el tocadiscos “If you go to San Francisco” de MacKency emblema de las marchas anti guerra de Vietnam. Las antorchas humanas siguen ardiendo en la ciudad de Hue. La primera víctima fue una muchacha: Djo Thi Yen Pi de 16 años que se quemó a lo bonzo en Nha Traurg en enero del pasado año. Las autoridades budistas designan a los que han de inmolarse de acuerdo con sus condiciones psíquicas y religiosas. Antes del sacrificio se les proporcionan anestésicos de hierbas naturales para mitigar el dolor del trance. No se sabe si van de grado a la hoguera o a la fuerza.

 

20 junio 1966 lunes

 

Qung principal monje budista entra hoy en su segunda semana de huelga de hambre para protestar contra el gobierno de Saigon y a favor de Ho Chih Ming. Fue internado en una clínica de Hue. Ciudad que ha sido tomada por los gubernamentales con un solo muerto en la lucha.

 

 

El primero de julio próximo se hará cargo de la  presidencia de la Republica Dominicana Joaquin Balaguer, ex colaborador de Trujillo. Balaguer es un intelectual amigo de España y su cultura que ha publicado libros de versos. Estuvo en la embajada de Madrid y Paris. Habrá de enfrentarse al paro endémico y al analfabetismo cuando jure el cargo.

En Argentina la situación sigue confusa. Hay ruido de sables en torno a la personalidad del general Onganía.

 

 

8 de agosto 1966

 

Como me he vuelto un ser sin intimidad voy a decidir proseguir este memorial tratando de dar de lado a la gazmoñería y a las mariposas negras que revuelan en mi mente. No cobro en Radio Nacional soy compañero del arbitro Galende y un vasco. El pluriempleo la envidia la palabra vacía la puñalada por detrás trabajo con compañero de la Escuela de Periodismo que se llama José Luis Albeniz

Cuando acabe las prácticas me marcharé a Inglaterra

Estoy harto de este país y de este Madrid lleno de hipocresía y pecados burgueses. Estoy harto de las mujeres de mi país. Dinero y agasajos a las del bello sexo, tiempo perdido. Noto que ellas se burlan de mí. Me toman el pelo

Hay que aprobar la reválida del periodismo.

 

11 de agosto 66

 

Voy a dormir a casa de Pérez Mateos porque hace unas noches tuve un ataque de los suyo. Ay, chato, chato estoy muy mal. Llamamos a la vecina, una señora de Riaza que es frutera y tiene dos hijas muy bonitas, pues creíamos que se moría. Salió la mayor Milagritos en camisón y  el enfermo al ver sus transparencias resucitó. Se le pasaron todos los males.

Fui al baile y conocí a una chica me dio el teléfono y quedamos. No sé si iré. La voluntad se va debilitando y viene el desengaño no sé de quién será la culpa del ambiente o el responsable seré yo con mis telarañas en la cabeza. Cada día todo se me hace más cuesta arriba. Quiero superar las depresiones que me dan de vez en cuando y me dejan baldados. He cogido el vicio de fumar. Una cajetilla de Celtas largos me dura una semana pero con el estudio y el trabajo en la radio va aumentando la dosis. Reconozco que el tabaco es malo pero me fortalece el espíritu y me ayuda a sobrellevar las largas horas de estudio. Estoy preparando los exámenes de reválida y validación. Muchas noches no me acuesto hasta las tres de la mañana. Soy ave nocturna como la lechuza que dicen que es el ave de la sabiduría.

 

12 de agosto de 1966

 

Hoy día de Santa Clara recibí mi bautismo de fuego en la radio. Entrevisté a Federico Martín Bahamontes en el programa Gaceta de los Deportes que se emite a las nueve de la noche. No salió del todo mal. Me escuchaban en casa y señalaron mis defectos. Se me notaba algo nervioso y titubeante pero Federico es todo un prócer. Aparte de un gran ciclista el mejor que ha dado España es una gran persona, muy simpatico, me habló de Toledo y lo mucho que quiere a su mujer Fermina. Está derecho como un huso. Es todo músculo. Me recuerda a aquel santo extremeño, San Pedro de Alcántara, que tenía el aspecto de un manojo de sarmientos. El toledano es un místico del pedal. Rey de la montaña.

La cosa no salió mal del todo pero a mi me gusta más la máquina de escribir que el micrófono.

Desde que olí la tinta de las enfurecidas linotipias se adueñó de mi el duende de la imprenta.

Llamo a Blanca Valle para preguntarle sobre nuestro viaje a Inglaterra. A ella también le han concedido una beca para enseñar castellano en calidad de profesor asistente.

Quiero aprender inglés perfectamente antes de iniciarme en periodismo. Yo suelo tomar las cosas ab ovo desde el principio. Por eso tendré que renunciar a ser redactor deportivo en Radio Nacional de España. Estoy columpiándome en el tiovivo de la duda. Unas veces me parece maravilloso ese sueldo de seis mil pesetas aquí y marcharme a Inglaterra a pasar hambre.

El Mateos con sus neuras me hace perder mucho tiempo.

 

14 de agosto

 

Transmito un partido de beisbol, no tenía ni idea de este juego pero un cubano que trabaja en la radio me iba soplando las jugadas. Un buen consueta. Yo diría un buen samaritano. Creo que también salí airoso. Sustituimos Albeniz y yo a Juan Manuel Gozalo (le llaman Kubala) y a otro locutor granadino que es el segundo de Matías Prats. Estoy apabullado y me siento muy pequeño y neófito en estas lides al lado de tales divos de la radiodifusión.

Tuve que ir a dormir en ca Pérez Mateos. Le da miedo. Estoy de él hasta los mismísimos. Espero que venga pronto de Soria su compañero de Piso el cura Abel Hernandez quien ocupa la habitación contigua a la suya. Está Abel de vacaciones. Es un gran periodista aunque dicen que está en dudas si no cuelga la sotana.

 

26 de agosto

 

Un compañero de Filología que va a ir también a England como assistant teacher conocimos en el bar de Filosofía a dos australianas muy simpáticas. Estuvimos de mesones y yo quedé con una de Melbourne para vernos en Victoria Station. Descabellada idea. Lo pasamos bien a pesar del calor de Madrid. Está cayendo plomo derretido. Las noches las paso insomne por el ardor estival y la preocupación de viajar a un país que apenas conozco. Estuve en el 64 en un campo de trabajo recogiendo fresas, pasé hambre, no encontré trabajo y crucé de nuevo el Canal. En Paris pintó bien. Ahora no voy a la aventura. Tengo un contrato de trabajo en un colegio del Yorkshire.

Nuevamente tomé el coche de linea que sale de la calle Alenza el Albarrán y me fui a Fuentesoto a pasar unos días con mis tios. No me recibieron bien.

—¿Otra vez por aquí? Me dijo el tío Dionisio.

A la mañana siguiente tomé el coche de línea para Segovia. Estuve en ca mi tata la señora Antonia Sabaté que me crió de niño. Me invitó a comer. Hablaban catalán y a mí me gusta ese idioma- antes de regresar al foto en el tren estuve tomando unas cañas con mi primo Agustín al cual quiero como un hermano. Hace allí la mili y mi padre le ha enchufado en Mayorías.

Hasta primeros de octubre no es la partida para la Rubia Albión. Dios qué nervios. Me he comprado alguna ropa pero mi ajuar es escaso mu made me compró en Sepu un impermeable tres cuartas Topo Gigio que ahora se lleva mucho. En la Radio siguen pidiéndome que me quede. El director de informativos un falangista insiste en que me darán un contrato fijo. Sigo deshojando la margarita.

 

8 de septiembre 1966

 

Los exámenes para convalidar el título de periodista serán el 21 de septiembre. Llegado el otoño la luz es distinta pero nosotros no la vemos porque pasamos encerrados en casa de Mateos toda la noche cantando los temas el canario Pedro Fernau, Pedroche, Perreta y yo. A base de café cargado. Cuando nos da sed levantamos el botijo y para el hambre mi madre nos prepara bocatas de tortilla. Con ellos matamos el gusanillo. De vez en cuando un break para echar un pitillo. Son casi doscientos temas.

En casa mi madre ha acogido a una medio pariente suya Amelia operada de un cáncer de mama. Hubo que habilitar un cuarto para ella, la están dando radioterapia.

Nos visitaron la señora Henar y su marido el teniente Casado. Sus hijos José Luis y Merceditas son amigos de la infancia. El tenienta Casado es de Prádena. Ahora viven en la colonia militar de Campamento.

 

 

29 de septiembre

 

Una vez celebrados los exámenes de Revalida de Periodismo en la Escuela Oficial obtuve un aprobado con Notable. Don Pedro Gómez Aparicio que presidía el tribunal amablemente me entregó la papeleta y me dio una palmadita en la espalda. El espaldarazo. Sólo me dijo: “muy bien Parra, audaces fortuna iuvat” (citando a Virgilio de Mantua. Salí corriendo de la parte trasera del Edificio del Ministerio de Información y Turismo pegando brincos de felicidad. Aprobamos doce tío ente un grupo de más de cien tíos. Fue una sorpresa que yo, pesimista de natura, no me esperaba. Esto supone para mí uno de los grandes momentos de mi vida. He pasado una noche feliz. Lo celebramos con el cura Abel Hernandez y Gabriel Plaza Molina. A Mateos lo catearon pero fue una coincidencia porque Gabriel Plaza que trabaja  ya como redactor en YA y un servidor entramos en la Escuela de la Iglesia de periodismo en la misma convocatoria. Juntos entramos y juntos salimos. Es un gran amigo mío. Muy inteligente. Sabe ruso y cuando psa por casa mi padre le llama el “Pensao” por su manera de ser taciturna. Atribuyo este éxito a ni suerte pues me tocó un tema que me sabía al dedillo, a la benevolencia de Don Pedro Go al cual hice un buen trabajo de investigación sobre el periodismo madrileño en el siglo XIX y a la intercesión de San Antonio Divino y Santo a quien mi madre puso velas en los Capuchinos de Cuatro Caminos.

Me subió la moral y he pasado unos deliciosos días de fines de verano. El otoño madrileño es el mejor. Hay que abrir nuevas brechas y luchar. Ya soy periodista español por la gracia de Dios.

 

30 de septiembre 1966

 

 

 

 

 

Fui a Espasa Calpe a comprar libros y por la tarde invité a bailar a Milagritos. Le hablé de una novela que estoy escribiendo muy mala por cierto que se llama los Momentos y ella me soltó:

—Ser escritor es morirse de hambre.

Milagritos fue siempre una buena amiga a pesar de sus caídas poco amable. Como buena serrana siempre dice la verdad.

 

 

6 de octubre 1966

 

Emprendo el viaje con la idea fija de que estoy quemando las naves. La estación del Norte era un hervidero cuando el tren arrancó. Salí de mi tierra el día 2 por la noche cuando se celebraba el santo de Franco y llegué a Hull el día 4. Lo peor fue el ferry en el que cruzamos el Canal de la Mancha de Dieppe a New Haven. Me marée y un marinero inglés me sostuvo para no caer por la borda. Eché la pota sobre una mara arbolada. En Londres no me ocurrió ningún incidente desagradable como la primera vez y supe tomar el metro hacia Liverpool Stret Station sin equivocarme de ruta en el underground. Los campos de los midlands son verdes llanos y misteriosos. La gente no habla en los trenes como en España. Ofrecí un cigarro al viajero de mi compartimento cuando estábamos llegando a Peterborough y lo rechazó:

—Yo fumo en pipa.

En boca cerrada no entran moscas. Una señora ña kefa de estudios se encargó de mi acomodo en Hull. Viviré con una familia de obreros, ella se llama Thelma y el marido Graham. Parecen amables pero no les entiendo ni papa. Y yo creía que sabía inglés. Ahora he de tenérmelas tiesas con el endiablado dialecto Yorkshire. Los alumnos que me han asignado de los cursos superiores son muy inteligentes sobre todo no que se llamaba John que va a ser futbolista y ha fichado por los Tigers el equipo local. Otro que se llama Paul Preston y es de Liverpool parece el más zoquete pero ha estado un verano en Valladolid en el colegio de los irlandeses. Su padre militó en las Brigadas Internacionales. Así se explica sus risas causticas cuando les hablo de Franco y la paz que tenemos en España. Paul alza la mano y muestra su camisa sucia, su pelo desgreñado y la chaqueta del uniforme con coderas. Su madre no debe de creer mucho en la plancha y la lavandería:

—Sir, Franco is a dictator, a criminal.

Me quedo de un aire sin saber qué contestar. Rojo de vergüenza hasta las orejas. Para tales cuestiones políticas no tengo respuesta. Son una inconveniencia pero mi orgullo patriótico se resintió y determinó que las clases con el A Form equivalente  a nuestro preu fueran para mi un suplicio. Nunca pude olvidar la acrimonia de Paul Preston en la clase de presentación. Un verdadero desencuentro. Se me cayeron los palos del sombrajo e inculcaron en mí una pequeña dosis de anglofobia de las cual aun me resiento. Los ingleses son gente maravillosa, tuvieron un imperio, y manejan bien el columpio de la balanza de poderes. Son muy suyos y siempre consideraron a España su enemigo histórico

Roy el marido de Thelma me llevó en su Morris 1100 a arreglar algunos asuntos con la policía. Me han dado seis meses de estancia en el país. La comida escasa pero buena. Sin embargo esta noche tuve algo de cólico. Me hizo daño el té que aquí toman a todas horas.

 

Saturday October 8th

 

I walked around town. Mosto of the harbour was destroyed by the bombs of the Luftwaffe. A great line of worker with cloth caps were riding their bicycles on the way home. Went shopping with Mike Newton my head teacher. People here eat a lot of sweets and chocolate. Newton is 24 oxford graduate in Spanish. He has read el Quijote ten times and speaks good old Castilian. Nice bloke. His wife is called Margaret. The Spanish department in Kingston Upon Hull High School is Michael s first job. What  impressed me was their youth and their happiness and optimism. This  couple shall be declared the propaganda of marriage

I went later to a party at 173 Cottingham Rd. It was freezing. Vinieron muchos extranjeros negros sobre todo y bailamos con los locales el baile de la comba con un estribillo que decía “Kiss me in the middle”. había que buscar a tu pareja entre los danzantes y estamparle un beso en la boca. Estuvo bien. Inglaterra es hospitalario. Al final cantaron el Dios salve a la Reina O Britannia rule the waves. Vuelvo a casa y mi visita una de mis “pájaras” me tumbo en la cama y empiezo a llorar. Homesick. Murrias indefectibles. Me parece que he cometido una equivocación al enterrarme en este agujero inglés pero a lo hecho pecho,

La madre de Thelma un abuelita inglesa. La espalda curvada en un desbordande hunch o joroba me regala un libro de Shakespeare que coservaré toda mi vida pero que no acabaré de leer jamás. Books. Books. Tantos libros que fueron mi norma de vida y para qué. La viejecita tiene 64 años pero parece diez años más. Las inglesas muy bellas y candorosas de mozas envejecen mal.

 

November 4th

 

Guy Fawkes. I feeel better but nealy two weeks since I went to the loo. Constipation. It is the horribleEnglish food. There ware binfires in the boggy nigut of Guy Fawkes, no es bueno sentirse español pues toda Inglaterra celebra con hogueras el dia que se abortó la conspiración de la Pólvora. Un espia español que militaba en los Tercios Viejos de Flandes quiero volar el parlamento. Terminó en la horca luego de ser descubierto, bloody Spaniards. Me compré una radio transistor y escucho a los Beatles y la música pope que transmiten desde un buque fantasma en el mar del norte un tal Jimmy Savile al alimon con Tony Blackburn.

Cenécon los Dohertys. Hospitalidad britanica. La mujer de Paul Doherty es muy fea pero hizo un pudding riquisimo. There was a brawl yesterday in my class.

Me gasté diez chelines en cerveza en el pub de la esquina Cross Kews situado en el empalme de Vottingham Rd y Beverley Rd. No me gusta la cerveza pero es buena para hacer pis.

Fui al baile del Locarno una sala que está bastante bien. Había yn grupo de baile brasileño y las muchachas se lo rifaban. Ali conocería a Suzanne el amor de mi vida pero no aquella noche

 

26 de noviembre

 

Un recital de flamenco en la univrsidad. Uno de los profesores es un joven de Liverpool que habla con acento sevillano. Está enamorado de Andalucía. Yo me mudo de pensión. Me mudo de Falmouth a Pearson Park. No me estoy adaptando bien a mi nueva vida. Creo que tengo cancer. Me duele muchisimo la tripa. Una familia catolica me invita a pasar la navidad con ellos pero no sé si iré. Me siento como un refugiado. Nunca pensé que este lugar fuera un destino de una especie de exilio. La gente me mira como un antifranquista y me mira con compasión. Very poor Spain y a mí me entran ganas de llorar cuando escucho eso.

La nueva patrona es polaca. Vinieron aquí despues de la guerra. El marido era militar y cayó en el frente luchando contra los alemanes. Tengo un disco de Lili Marlene lo puse en mi tocadiscos y se puso la señora como una fiera. Lo comprendo. Los recuerdos y sufrimientos de la pasada guerra mundial son muy recientes. Mientras tanto yo leo a Kafka y me siento un poco cucaracha. La lectura de este autor no calma mis dolores de barriga. La gente se porta muy bien conmigo. Otro profesor mr Whitecomb me invita a cenar en su casa. Una buena cena de domingo sacia mi hambre. Los ingleses son muy hospitalarios y abiertos mucho más que los españoles, creo que son mejor gente y nos derrotan siempre con su inteligencia. El español es muy católico y muy cruel. Padezco el sindrome de la English Rose. On boxing day I came  back to my garret

 

1967

 

Nunca pasé tanto frío la Nochevieja más triste de mi existencia. Los polacos fueron a misa de gallo. Yo preferí seguirla por mi misal. Compré una botella de vino blanco que aquí llaman plonk y me fui a la cama antes de las Campanadas. En casa estarían cantando villancicos mis hermanos Ponciano y Fuencisla mi hermana habrá colocado el Belén con la supervisión de mi hermano Nano. Año nuevo vida nueva. Ha nevado. El vino blanco me hizo bien y no tengo resaca. El balance en lo personal quizás sea amargo pero pienso que he venido a una Inglaterra feliz de gente que lo pasó mal en la guerra y no se queja. Politica de pleno empleo unas pocas libras en el bolsillo la tele en blanco y negro pagada a plazos y las tardes en el paz donde los mozos salen de caza. Aquí lo llaman chatting up the birds. Las chicas son menos gazmoñas y más amables que en Madrid. Aquí por lo visto es fácil ligar. Esta es la Inglaterra de You never had it so good. You never explain you never explain. Me cruzo todos los días por la calle con personajes que parecen salidos de una novela de Sillitoe o de Room up the top. Imitan el peinado y el calzado de los Beatles y hasta su manera de hablar. Hace un frío del carajo. Es lo malo, tengo sabañones como en el seminario.

 

6th February 1967 Monday

 

Vinieron a visitarme Blanca y Juanito. Blanca vinieron a verme. Su escuela está en Leeds la capital del condado. Dicen que allí todo es mejor. Quedaron estupefactos ante lo duro de mis condiciones de vida y lo estrecho de mi habitáculo. Blanca Valle es una manchega muy guapa el busto grande de la cual yo que soy tan enamoradizo estuve enamoriscado. Mucha mujer para mí. Nos pasábamos los apuntes en la clase de Historia del Arte que daba Azcarate. Me dio su número de teléfono pero no me determiné a darla un paseo en el 600 de mi padre. Soy tímido; les enseñé la ciudad que tiene poco que ver y visitamos la catedral de Beverley. Nos fotografiamos en el porche del templo. Soplaba un viento del norte que congelaba las orejas

 

8 de Febrero

 

Conozco a Suzanne una bella londinense del Endsleigh College que creo que llenará de felicidad y de tristeza mi vida. Fue amor a primera vista el otro día en una misa. Como cuando Petrarca encontró a Laura y el Dante a su Beatriz.

Me da ahora por la poesía. Aquí mi último poema

 

Yo quiero ser inglés

Para tomar el té de las cinco

Dar cuerda al reloj los fines de semana

Pasar la rueda por el jardín

Vivir cerca de ti

Quiero ser inglés

Mi barco dio de través

Me ahogo en este mar de dicha y lágrimas

Quizás sea poco para ti

Dulce Suzanne

Toda roja y toda azul

Bajo la niebla de Hull

Sus ojos flamean en el lábaro

De mi estandarte

 

Ayer me robaron la bicicleta. Tendré que tomar el autobús y acercarme a la escuela, las tres millas que separan el colegio de mi casa las pedaleaba en algo más de media hora.

 

Siguen las poesías

 

O Suzanne Hugh

How much I love you

Rose of my rosebush

That I will take with me

Always

Smelling spinnaker and lilies

She is like an Spring garden

All is a dream

Cross keys and cross hearts

Venus stepping out

From the sea

Blond hair and rozagante

I swear it for the cloud

And the wind

For the harbour for the sea

Athletic London girl

Swimming laughing

Riding horses

She brought life to me

 

1966 tudel y estrangul

 

Así que pasaren 55 años he vuelto sobre mis pasos a revisar aquel cuaderno sacado del material escolar del alumnado un jotter sobre el final de aquel 1966 en el cual mi vida pegó un viraje en ángulo agudo. Estoy abrumado por la melancolía y el remordimiento. El amor hjacia Suzanne es para mi un sacramento que me acompañará a la tumba aunque todo falló por mi culpa por mi inseguridad por mis celos por la ingenuidad de mis pocos conocimientos. En el seminario no nos enseñaron a tratar con las mujeres. Books no more. Siempre el maldito idealismo que deforma la realidad como el rayo de sol que penetra en un estanque límpido.

Hicimos una excursión a un pueblo más allá de Beverley que casualmente sería nuestra residencia de casados porque en Wilberfoss nació Helen. A mí me hubiera gustado llamarla Edelbertha o Edwin, si fuera niño nuestro primer hijo. El nombre arcaico no le gustó a Suzi. En Wilberfoss se me ocurrió esta poesía aquel día de las Candelas de 1967.

 

A UN SACRISTÁN

 

Come On sexton

Let us go to the belfry

And toll the bells

Glorious peels of our wedding

Spread the message to the meadows

Climb to the tower step by step

Sexton, sexton, dear man

Imagine what my feelings are

I am in love

With Suzanne

We kiss in the porch

And the parson won’t wrangle us

Love is no sin

I will invite you sexton

To the pub

You will drink till

You are drunk

You will clean the strings and the ropes

And the clapper bells

Mind you

The wind is blowing

 

 

14 de febrero 1967

Todo está dicho desde que se hicieron las guitarras. No hay nada nuevo bajo el sol. Bajó anoche el Espiritu Santo a ka playa y dejó en la arena música de sandalias. Hoy exulta mi corazón. se calmaron las desdichas mientras lanzo una moneda al aire y sigo amarrado a la rueda del destino. ¡Qué grande es Dios!

 

PROPHECY

 One day after ten years

I will come back to Hull

However, I wont find you

The neon lights of your street

Shall be gleaming like today

And the poplar growing by your window

Will be wet under the rain

Naked without leaves

Life as usual

Traffic lights

Cars tooting away

And the pompous birch in whose bark

I chiselled our names

Cupid dart broke other hearts

Shall exhibit other lovers

Other names

The old pensioner with his cloth cap

Walking with stick

Whom we used to meet on our way

Shall be dead for a long time

At the door will I wait

For you but never came

Ten minutes like ten years

Standing in the rain

I ´ll ask your landlord

Where is Suzanne dear man?

Gone, she is ever gone

Neither tacks, no trucks, no address

Like the Demerara rum

Vanished

Good days of wine and roses

This is not your street

Nothing of you in it remains

Only memories

Of happiness with you in the winter days

I will go the pub of the Cross Keys

And drink beer to forget

Beer without you will be stale

Of bitter taste

Where is Suzanne dear man?

The London girl of twenty year

Full of life

Plenty of grace

I´ll fetch my guitar and go

Back to Spain

And get older and older

Between printing words

And newspapers pages

You always hold yourself

Out of reach

 

He de dejar en esta entrada de abril las páginas de este diario redactadas con caligrafía nerviosa como resultado de mi excitación nerviosa y atolondramiento. El resto es muy personal y secreto, y no creo que interese a nadie. Baste  decir que me enamoré de la inglesa más bella y mejor de Albión. Moriré pensando en ella. Yo tuve la culpa de que todo acabara en desastre. No fui merecedor de aquel galardón de los dioses pero confieso que he vivido y el nombre de Suzanne brotará de mis labios cuando exhale el último suspiro. Puede ser que tal afirmación resulte grotesca en los tiempos que vivimos. Han pasado diez lustros y aun recuerdo aquel curso escolar en Hull la ciudad del viento. El amor es más fuerte que la muerte. Echo de menos su belleza y su sentido del humor. Sin su presencia he vivido una vida vacía infeliz. Por mi culpa no supe manejar el tudel y el estrangul propios de un buen gaitero. No supe tocar la gaita y ahora lloro mis culpas. Yo no soy más que un pobre y delirante soñador

 

Fin de los extractos de mi diario de 1966-67

 

Antonio Parra Galindo

 

Sunday, November 21, 2021

 

 

LLORO MIS PECADOS VIEJOS

 

Flores de arrepentimiento

Veo todo lo loco que fui en mi desmesura

Rumbos perdidos

Siguiendo los pasos del viento enfurecido

Del dalle de la vida

En sus ventalles

Juguete fui del apetito

Tú, Señor, me mirabas triste

Desde el árbol de la cruz

En que fui redimido

Abandoné el Amor

Y me eché en brazos de la locura

Derrotando por tabernas y quilombos

Todo es vanidad en la política

Es letra muerta todo cuanto fue escrito cálamo en ristre

Por mi mano

No di de mano a la presunción la lisonja y el ataque enfurecido

Persiguiendo fatuas quimeras y utopías

Del buen nombre

Mas, mi pasión es España

Razón de mi locura

Y del agua que corre en la Fuente de la Fama

Mis ideas me convirtieron en proscrito

Acepto el castigo

Dios de Israel, sin embargo

Sigues siendo pulso infinito

manejando la rueda del cosmos

que atestigua mi ruindad

lavabo Inter Inocentes manus meas

Lo dicen tus ojos doloridos

En el cerro del Calvario

Gólgota que amontona calaveras

El fuelle del recuerdo de mi pasos perdidos hace calle

A mis suspiros

Llorando estoy mis desvaríos

Muerde a la vejez  la mi conciencia

La inconsciencia y locuras de juventud

Dulce Jesus

Hay una flor en el pénsil de Inglaterra

Suzanne mi dulce Helen por quien suspiro

Y torcer quisiera el rumbo

De mis pecados viejos, despropósitos, y desvaríos

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

SANZ FRANZ KAFKA EN LA PATRIA DE ROBINSON CRUSOE

Antonio Parra

Hull era una ciudad del norte inglés destartalada, industrial, con pocos horizontes cuando yo la conocí, a la vera del Humber y mirando para el océano. Los arrabales de la bocana de un puerto con mucho abrigo que los prácticos conocían bien desde los navegantes ingleses hasta los U boats del almirante Canaris, debieron de inspirar a T.S Elliot su Wasteland. En el año 66 todavía algunos hangares y edificios del malecón mostraban las dentelladas y zarpazos de la Luftwaffe. Aquellos farallones ahumados eran reliquias de antiguos bombardeos, tarjetas de visita que dejaron los alemanes a lo largo de la batalla de Inglaterra.  Hull, sin embargo, tuvo siempre algo de ciudad germánica y anseática emparentada con Hamburgo y con Copenhague al otro lado del North Sea.

 Tenían fama sus dársenas de ser una de las zonas más peligrosas y sucias del planeta. Allí dirigí yo mis pasos en el otoño del 66 con mis veintidós años, recién acabados los estudios de Filología Inglesa y de la carrera de Periodismo, con ganas de comerme el mundo. Quería ser escritor. Recuerdo que cuando me giraron el primer dinero de la beca me compré una máquina de escribir sin eñes en un chamarilero de la calle Beverley  especialista en antigüedades que tenía a la puerta una pieza de artillería del once de la Guerra de los Boers. Tuve que tirarla. A lo largo de mi vida dactilógrafa  y de fascinación por las veinticuatro redondas blancas he aborrecido tanto las máquinas de escribir como las cachimbas.  Usar y tirar, pues en esta vida todo tiene un límite. Tal vez fumar y escribir sean actos tan compulsivos como correlativos. Las circunvalaciones del humo del tabaco  guardan un misterioso parentesco con las pesquisas que conducen al hallazgo de la frase y la palabra. La pipa, la estilográfica y la maquina de escribir  son cosas de uso personal; no se prestan nunca  a nadie al igual que la mujer. Cierto. Pero algunas aburren y otras cansan. ¿Todos los días potaje?  Pues sí de vez en cuando habrá que darse un paseo por las instituciones.

-El hombre es animal de costumbres.

-También es verdad. Lejos de mi “Olivetti” soy un hombre al agua. Me planto al ordenador y no me sale palabra. Yo tengo que sentir el ruido del teclado que ametralla el papel. Sin la pulsión de un contrincante la inspiración no acude a la cita bienaventurada. En España por lo que dijo don Miguel de contra esto y aquello, siempre estamos escribiendo contra alguien. La vida del escritor semeja a la del púgil. Nulla die sine línea pudiera traducirse como ningún día sin pelea. Por eso en esta profesión de sufridores abundan con frecuencia los matasietes. A Valle Inclán le dejaron una mano inútil en una trifulca de colegas.  Fue por una discusión tonta con un colega de Granada, que se llamaba Manuel Bueno y que de bueno debía de tener bastante poco, por lo menos el día que sacó el estilete contra  don Ramón, el de las “barbas de chivo”. Pushkin murió en un duelo y yo vi una vez a un colega en Londres por quítame allá esa crónica arrimarle un botellazo al pobre Federico Abascal que ya llevaba en el cuerpo media de Johny Walker. Menos mal que le sujetamos entre Alfonso Barra y yo  que si no lo esguardamilla. Hombre a un borracho jamás se le pega. Tampoco es para ponerse así, pero este oficio es la bimba. Ahora aquel matasiete está muy instalado y en la pomada en la Prensa del Meneo. Le supo bailar el agua a don Walamboso el Tramposo, como antes se lo bailó a otros.  Abundan los espadachines en esta noble profesión donde la vida es un desafío. La pluma sin la espada y somos de sangre caliente. Quevedo, por ejemplo, manejaba con tanta soltura el idioma como el florete.

De cachimbas, estilográficas y bolis tuve una harén. Mecanografiadoras, una colección. Hasta que llegaron los ordenadores. El teclado de una máquina de escribir es singular como el alma de una mujer. Todas son diferentes y todas acaban cansándote. Empiezan entusiasmándote. Luego las aborreces. Amores de quita y pon. Las teclas echaban humo. El hombre tiene que vencer a la máquina pero también las maquinas de escribir dan de sí todo lo que tienen que dar, se agotan, se extenúan y dejan de ser, machacados los tipos, fuente de inspiración. Ya no sirven para nada. Cuando dejan de cantar las veinticuatro redondas blancas es como si muriera un ruiseñor. Las pipas quemadas saben mal. Y son como las horas de los relojes Omnes caedunt; última necat  (todas hieren, la última mata).

Hacia Hull dirigí mis pasos al final de aquel verano del 66 cuando Inglaterra le robó el mundial a Argentina en Wembley por culpa de los árbitros que barrieron para casa. Se cumplían tres siglos del gran incendio de Londres y otros tres de la profecía proferida de Milton de que se iba a acabar el mundo. Lo había vaticinado en 1666. Vaya fechecita, guarismo del “anosmia” apocalíptico.

  Yo quería aprender inglés y creo que lo aprendí demasiado bien hasta el punto de que es un idioma que me aburre. Algunos dicen que parece que escribo en inglés, un idioma muy suple y contractivo en el que caben toda suerte de combinaciones, pero sigo pensando en español. La primera máquina de escribir de segunda mano que compré en la ciudad donde nació el padre de Robinsón Crusoe, Daniel Defoe, y me inicié en los estudios de Franz Kafka, carecía de eñes. Una terrible merma y fatal augurio. Soy hombre de eñes. Podré escribir en la lengua de Shakespeare correctamente pero en mis anglofilias nunca cometeré la tontería de renunciar a mi estirpe. Ese es un síndrome en la cultura española actual. Se escribe en español pero se piensa en la lengua del imperio. Para confirmar tales supuestos me remito al mundo de los best sellers, al lenguaje, a los giros, al contoneo de las tops por la catasta, a la forma de pensar de la gente, a los hijos de don Quirite Marujas,  todos en nómina, el sector de la publicidad y de la imagen en sus manos, sólo es noticia, sólo es novela, lo que a ellos les apetece. Perfectos “kingmakers” designan escritores y nombran y derriban gobiernos a dedo.  El arte se supedita a un lanzamiento mercurial, a ciertas sutilidades, manipulaciones y trampantojos. Es la política del doble lenguaje, el doble juego. Turbios manejos de trastienda que permite que en nombre de la libertad se cometan toda suerte de torpezas y tiranías. A mí, que soy transparente, me ocurre todo lo contrario. Escribiendo en inglés siempre me saldrá el hombre de Segovia en la papela.

Esta transposición es un caldo de cultivo para la mediocridad imperante. Han traído sus propios chistes. Hablan de humor pero les falta ángel. Manejan el insulto que no veas y parecen haber inventado a una rama de la literatura que debería llamarse octoscania  pues han institucionalizado la blasfemia. Tampoco es como para pedirle peras al olmo.  Mirando bien las cosas casi es un honor permanecer inédito, intonso y casi virgen y mártir de los tórculos con los tiempos que corren. Tampoco creí nunca en eso de los premios literarios ni en los comités de lectura. Tomemos el caso de un importante “tycoon” en el mundo de la edición española de cuyo nombre no quiero acordarme. Es un isleño que llegó a Londres lleno de odio hacia los peninsulares no sé por qué y al que veíamos andar siempre por Oxford street portando una cartera negra de cuero. En esa cartera no sabemos qué llevaba  si un kalashnikov, una máquina de retratar o una tienda de campaña dadas sus procedencias no sé si guanches o árabes aunque siempre sí un poco nómadas del sujeto. Hoy es otro instalado. Le llamábamos el polisario pues era muy de izquierda pero a Fraga le bailaba el agua.  Con ser don Manuel tan de derechas. Hacía por lo visto a pelo y a pluma, pues el personal anda a la que salta.

Pues bien,  que semejante tuercebotas, aquel palmero-sube-a-la palma, aquel arribista de la perilla negra y capruna, y que tiene una vocecita de eunuco -es hoy un señor que manda mucho en el mundo de las letras, está asomado a la ventana todo un jaque de los mandamases de la pirámide informativa y de la literaria- te rechace los manuscritos, uno por uno, lejos de ser un baldón, es un timbre de gloria. Cosas veredes. ¿Y ese Borras, gran preboste de los paneles de lectura?

-Que se lo lleve el diantre.

-¿Con acento grave y diacrítico en catalán? En castellano no se usa.

-Ya pero vivimos bajo la férula de lo cursi.

En aquella ciudad, Hull, con nombre de casco de barco, y asaz descuadernada, compré mi primera máquina de escribir y conocí el amor que pasa por la vida del hombre como un soplo, como una sombra. Sicut nubes, velut umbra, ut naves, que diría el clásico. Es talismán efímero. Su destino va íntimamente unido al de la literatura. El amor y el tiempo son algo que el hombre es incapaz de asir ¿Qué fue de aquella mujer de cabellos dorados y de mirada de madona, el rostro perfecto como un camafeo, piel blanca adornada de efélides? ¿Qué sombras ahora la escoltan, qué nubes la contemplan en qué barco viaja y con qué rumbo? Sólo puedo responder a esta interrogante con un poema  que Chesterton dedicara a la Virgen. Lady, Lady.  Altos muros del Endsleigh College que ella habitaba y que yo escalaba cual Romeo han sido derribados. Sólo siguen tiesos en el paisaje de la memoria. En la vida real son farallones, lienzos de adarve del olvido.

Precisamente en un lugar tan a trasmano y donde Mahoma perdió las pantuflas iba a transcurrir uno de los años más importantes y traumáticos de mi existencia. En mí se produjo una verdadero despertar, una auténtica epifanía. Los propios ingleses hacían befa de este lugar habitado por las gentes más rudas del rudo Yorkshire y que parecían hablar a voces como animales en un dialecto que se derivaba del vikingo y emparentaba con el norso. Eboracum (York) con su catedral y sus baños romanos estaban cerca. Pero a mí siempre me fascinó Whitby por sus ascendencias danesas.

Hubo allá una cristiandad procedente de la estirpe celta evangelizada por st. Columbano, base del monaquismo occidental del cual llegaría a tener un conocimiento más profundo merced a los legendarios de fr. Justo que describe esta zona mítica con emoción y belleza en sus calendarios. Los inhóspitos pagos del yermo Yorkshire fueron sede de una de las más importantes tebaidas. Los monasterios formaban un verdadero anillo de oro en torno a la capital, York. Eran centros de oración pero también baluartes contra las invasiones de normandos y de escoceses. Para defenderse del acoso de los belicosos “picti” ya los romanos habían levantado la Muralla de Adriano, en el condado un poco más arriba, el de Northumberland.

En compañía de mi amiga Nicole, aquella francesa de los cabellos de oro y a bordo de un mini hicimos a lo largo y lo ancho de esta tierra amor y geografía visitando las ruinas de los viejos conventos demolidos durante las guerras de religión y las consecutivas desamortizaciones. En nombre de Dios y con la Biblia en ristre los puritanos de Cromwell acabaron con todo. Desde entonces siempre tomo mis precauciones ante el Libro Sagrado prevenido por lo que decía san Agustín que no es lícito basarse en la letra desnuda de ambos Testamento sin un mínimo de bagaje iniciativo. Hasta hace poco en todos los hoteles del ámbito anglosajón siempre había una y a mí me inspiraba cierto temor al pensar en las barbaridades que cometieron los protestantes. Ninguno de estos textos supera a la Vulgata con todo lo que diga don Cesar Vidal y sus luteranos al respecto. Perdimos demasiados hombres en defensa del papa y de la verdadera fe en tiempos de la Contrarreforma como cambiar ahora de camisa. No somos culebras. Esta zona del arzobispado de York fue una de las más refractarias a renunciar a la tradición romana

En fin, por aquel tiempo en la radio del coche sonaba la música de los Beatles y el incansable hit parade que emita veinticuatro horas al día una radio pirata instalada en un barco surto en la Bahía de Scarborough. Se llamaba Radio 707. Tenía nombre de película y su `principal pinchadiscos era Tony Blackburn. Lo conocían todas las quinceañeras del Reino Unido. Dos canciones muy pegadizas y que aprendí de coro me traen memorias de aquel invierno: Lying in the sunny afternoon” de los Kinks y No milk today, cose my love is far away. Hoy no dejes botellas – se pedía al lechero- en el alfeizar pues mi amor está lejos. Sin embargo, la letra de aquella canción no era para mí. Mi amor no estaba lejos sino cercas. En  los labios de Nicole, toda la cerveza de la Old Merry England y el vino de la Dulce Francia me bebí. Tenía un cuerpo de diosa pagana y unos ojos de dulce y claro mirar. Aquella mujer se cruzó por mis horizontes como un viento de tragedia y libertad. Amor que pasa una sola vez y te deja marcado. Los vientos del 68 soplaban a modo. Lo decía otra canción de Joan Baez, Flying in the wind.

Íbamos al volante del viejo buga por los derroteros de los Yorkshire Moors, mundo onírico de veleidades y de sentimientos bajo controlada que contaran y cantaran las Hermanas Brontë. Paisaje sin árboles. Los barcos fueron talados para prevenir la escuadra. Por el invierno hace un frío que pela. El cierzo soplaba con ganas por aquellas desoladas parameras. Té y simpatía. Marchábamos a toda velocidad, sentados a la trasera del viento. Nicole, ¿qué ha sido de ti? Seguramente serás una viuda rica que con un ojo llora y otro repica o la barragana de un canónigo de Reims. En los pueblecitos olvidados de paredes blancas y techumbres de bálago tal como pallozas en plena campiña inglesa siempre había una vieja taberna con mucha historia. En las de York bebía Guy el Conspirador, en las de Grimsby los bucaneros de Sir Francis. El mundo yacía a nuestros pies. Íbamos a ser perennemente jóvenes y bailábamos el twist en bailongos de altavoces psicodélicos y focos foboscópicos. Noticias en la BBC a las cinco y a silbar por la vía. Blowing in the wind but we couldn´t care less. Había que apurar el cáliz de la felicidad de la vida hasta las heces.

El viento del norte se llevó nuestra juventud camino de las estrellas y ¿qué fue de aquellos besos? Andan todos rodando por las estrellas. El amor es la fuerza que mueve el universo. El odio lo para y aquellos tiempos eran los tiempos de la flor al ritmo de canciones que aconsejan hacer el amor y no la guerra. No había necesidad de emprenderla a martillazos contra la estatua de un general subido a un caballo de bronce. ¿Cómo es posible que ahora la enredadera del odio trepe por las paredes de nuestras casas? ¡Tanta inquina, tanta vesania cuando creíamos haber alcanzado el nirvana de la reconciliación!

Se me apareció la belleza en Hull aquella ciudad destartalada. Entre el hollín y el carbón y el beso gris de la lluvia sonó mi hora cero. Nunca fui tan feliz como aquel año en la patria de Robinsón Crusoe. Desde aquélla he venido practicando una suerte de robinsonismo intelectual. Me gusta la insularidad. Yo solo en mi isla y que me dejen en paz. Tuve un casero judío que se llamaba Frederick Weil que venía de Alemania y era un superviviente de Auschwitz. Era un judío ortodoxo que me hacía lavarme no sé cuantas veces cada vez que le iba a pagar la renta y se enfurecía cuando subía a mi novia a la habitación. Pues era muy ortodoxo y muy buena persona. Miraba al mundo con esa típica castidad judía obsesionada por la limpieza del cuerpo y por la del alma. Sin embargo, en punto a dineros no se casaba con nadie. Todavía estoy recordando la sobrecarga de ternura y afectación con que pronunciaba la palabra “property”.

En aquella pensión regentada por el exilado  me familiaricé con Kafka al que empecé a leer para aprender un poco de alemán. Me acabó enganchando. En su Metamorfosis veo yo retratado una semblanza del mundo actual. Esta sociedad que nos aliena y nos domina. Al final todos acabaremos convirtiéndonos en cucaracha. La vida viene del huevo. La muerte no sé. Sin embargo, la obra del judío de Praga, lo mismo que me contaba Mr Weil, mi casero judío, sobre su experiencia en los campos de exterminio (“los peores enemigos no eran los guardianes alemanes sino los de tu propia raza que te delataban y trabajaban para el espionaje nazi”)  fue toda una propedéutica. Eso está pasando ahora mismo.

San Franz fue un escritor químicamente puro que escribía sólo para el cajón. Sus manuscritos se salvaron de la hoguera gracias a su albacea Max Brod. No todos los escritores tendrán  esa suerte. Para mí Kafka es una especie de santo laico o de profeta, heraldo del tiempo que se acerca. Su “Metamorfosis” lo mismo que “1984” de Orwell o “Un mundo feliz” de Huxley es una utopía en que se narran las aspiraciones y fracasos del hombre gregario del mañana. Sus libros son una semblanza del “homo domesticus”, sometido a su mujer, bajo la bota del jefe en el trabajo, subyugado y contrito al que de vez en cuando le duelen los colmillos o que siente cierto malestar en la barriga. No será nada. Ya se me pasará. Me he visto muchas veces a mi mismo reflejado en la persona de Gregorio Samsa. Igual que a él me gusta la carpintería y el bricolaje, hacer crucigrama, dar cuerda al reloj de pared los fines de semana. Me pesa la incertidumbre. Me aburre la política con sus afanes inanes.  Por la metamorfosis o el embrutecimiento del presente me puedo convertir en gusano – vermis sum et non homo- del mañana. Franz Kafka da vuelta a los textos de Isaías. Sus libros constituyen una especie de evangelio al revés. El jefe siempre es el jefe. Tiene siempre razón. Me levanto todas las mañanas para ir a la oficina y al mediodía acabo derrengado en el sillón. Soy pasto de habladurías y víctima de confidencias de vecinos y compañeros. Veo que al mundo lo rige una mano invisible y sacrílega.

Vivimos en ascuas, vamos por la vida pisando lumbre pero a nosotros lo que nos importa es nuestra propia tranquilidad. Nos hemos vuelto egoístas e insolidarios. Los periódicos nos dan las mismas noticias. Para matar el gusanillo vamos camino de la nevera. Pero no tenemos hambre, sólo angustia y tal vez hastío. Por mucho que nos afanemos nunca saldremos del círculo vicioso. Eso es el gueto. Estamos acorralados y un poco perdidos. Esta metamorfosis que nada tiene que ver con el hilomorfismo platónico que dignificó y dio trascendencia a la vida humana (el judío de Praga nos baja un poco los humos de la filosofía griega), su obra es como el descenso de un pedestal que anticipa los desmanes de la II GM; es una parábola de actualidad, un thriller de la modernidad, una novela sin solución, una “morality” del anodino anonimato del hombre del siglo XXI.  Hoy te echas a dormir persona y mañana de te levantas cucaracha.

-Eso le pasaba a Kafka por ser un pobre diablo.

-Un mal bicho que tuvo la suerte de encontrarse con un sponsor, el rico judío, Max Brod que le publicó todos sus libros.

-No todos podemos vivir en la plaza. Pero el símil me gusta. San Franz Kafka encarna la idea de san Jorge que vence al dragón. Ganó las batallas después de muerto. Es la imagen del vencedor vencido, del fracasado que triunfó. De todas las formas toda la obra de este escritor checo que escribía una alemán pasable la cambiaría por una noche con Nicole.  El arte no es más que un pálido reflejo de la vida. Primum vivere deinde philosophare.

-Pues sí. Por eso se acuerda usted con tanto fervor del tiempo de vino y rosas.

-Ars longa, vita brevis.

-Cierto, el arte y el recuerdo son nuestro consuelo. Pero a Hull la ciudad desvencijada volvería mañana mismo. Allí dejé algo de mi sangre y en Wilberfoss fue donde nació mi hija, nuestra hija y allí construimos nuestro nido de amor.

-No me venga con romanticismos. No se ponga sentimental. Aparte tales chorradas y abandone su campana de cristal.

-Sí, volvamos a la cruel realidad. Al anodino san Franz. No importa que sea un autor sobrevalorado. El fin es el medio, no el mensaje. Aquí lo que vale es la imagen. Aparentar. Vivimos y nos fiamos de las apariencias.

-Esas a veces engañan.

-Cierto pero que nos quiten lo bailado.  

  

 

 

 

 

 

 

 

York Minster la catedral de York

 

I

 

There are more saints in Yorkshire than in heaven they used to say and I spent two years under the shadow of York Minster with its spire, its bells, the Yorkshire pudding. That land the biggest county of England remains engraved into my soul reverberating happiness of the good old days.

 It comes to me as the froth of Newcastle black ale. On saint Peter´s Day 1970 we baptized my daughter Helen. I wanted to call her Ethelburga named her under the protection of a queen married to the local king Edwin. In York wrote and studied the Bible the monk Alcuin.

However, my sweet wife Suzanne said no.

In a way, my life full of books trying to apprehend knowledge followed the bridle path of this venerable father of the universal Catholic Church followed his teachings.

Writing and reading sitting long hours imitating the scribes of Whitby was my unique purpose.

I hear the roar of the waves of the Northern seas always in turmoil and changing. Defeated by my eagerness for knowledge I developed a painful back after sitting by the stool thousand of days and many an hour.

Thus, I walk a bit swooping, developing a hunch, my eyes fixed in the floor and my bent to the earth yearning for wisdom and beauty, tilting under the burden of speculation of the unattainable learning.

It is not gratifying to be an intellectual.

I am rowing always against the tide, besides and that attitude is not advisable now days. I am the odd man out.

 I was born in Spain but I do not feel myself Spanish.

In me, there is the seed of the wandering Jew, a tribute to my ancestors, people with noses big and strong hips. They were conversos. Good in Arts and languages, Talmud and Bible abiding the Law and a bit free minders, but a disaster in social relations they were.

 Like an eagle, my memories fly to that city which was the cradle of Christianity of the British Isles. At this hour of looking back at the story of my life, I conjugate memories and feel full of repentance. I would like to ask forgiveness to people I hurt with my insolent behaviour but they are dead most of them while I go around the street of York.

My ex grandaunt Eileen had a vision and I saw her tampering with the cross of Santa Elena the daughter of Constantine emperor.

She unearthed the tomb of hour Saviour and I said in Latin:

·                    O cross sweet Cross save me Crux of Christ salvum me fac.

Through Via Dolorossa I saw climbing to the Calvary Mountain the flock of my sins. Aunty Eileen was one of the holy Women assisting Maria Magdalena and Maria of Cleofes to the crucifixion, as is represented in one isles of the Minster.

The cathedral was consecrated year 635 built over the ruins of a roman temple consecrated to Jupiter in a site called Cataractonium. There resided the “castra” camp of the Legio VII fighting the picti at the other side of Adrian Wall.

Why York was called Eboracum? I don’t know, but studying the history of Roman Empire I found many locations consecrated by noncupatio or benediction to the mineral god of ivory valued as much of gold for its application in medicine, they say that this mineral increases the virile potency: Ebora, Hervás, Eborarium. Ivory Coast.

The climate change transformed completely the surface of earth.

I assume that the British Isles had a milder weather then and perhaps was possible that elephants could breed there and they produced in those days the tusk tooth’s elephantine, walrus’s hippopotamus, rhinoceros’s.

At York Minster was crowned William the Conqueror and Edward the Confessor. One spandrel of the arch keeps the face of this glorious monarch. In the altar was also married Edward with Leonor de Castilla.

 

DIARIO DE VACACIONES 1972

 

23 julio viernes

Fin del trimestre en escuelas apenas se hizo nada por lo que a mí respecta. Llevamos tres semanas de completa inactividad. Los periodos se reducían sentarse enfrente los alumnos y mirarnos unos a otros esperando que sonaran los timbres. El tiempo no parecía correr. Tuvimos la asamblea en el York Hall cielo plomizo calo pegajoso. No obstante el sol hizo su aparecieron y se animaron los cánticos. El headmaster Mr Stevenson lanzó una arenga a los chicos estrujando hasta el máximo sus escasas cualidades dialécticas. Dijo que las vacaciones son tiempo propicio para cargar las baterías del alma dio su despedida y expresó sus mejores deseos tanto a profesores como alumnos tanto los que se iban como los que se quedaban recordándoles que al paso de los años recordasen a la Armthorpe High School con nostalgia olvidando los malos instantes y recordando los buenos. Yo no sé si regreso a mi pueblo con las pilas cargadas. Estoy en crisis y mis problemas de adaptación siguen en rampa.

 Dirigió la ceremonia el reverendo Kirkup de la iglesia metodista. El nombre no puede ser más clerical. Nos confesó que él siempre escribe un diario de vacaciones que suele releer por navidades.

Me despedí de todo el mundo. Algunos me preguntaban si volvería. Yo contestaba que no sabía. Estoy en Inglaterra porque tenemos casa coche y pan. Pero estos meses han sido muy duros. Creo que por problemas de mi carácter y mi temple literario.

El profesor  McAlpine se mostró taciturno. Es difícil saber por donde va este escocés. Son los escoceses como los gallegos. Ye los encuentras en la escalera y no sabrás nunca si sube o baja pero yo me he portado mal como dijo el director Stevenson tengo teething problems  o problemas de dentición en el aula. Aun no me han  salido los colmillos Me entrego al mutismo antonio no habrás tanto la boca que te la paparán las moscas. Aspiro a la serenidad y a la continuidad.

El cuentakilómetros marcaba 10112 millas cuando iniciamos camino a las cuatro de la tarde. El mini se portó bien, consumía kilómetros como un jabato al enfilar las rampas de la A1. Al principio no pasaba de las cuarenta millas pero aceleré a medida que nos íbamos acercando a Londres mientras cantaba una balada popular de Tom Jones el tigre de Gales... to touch the green grass opf home.

 No funcionaba el ventilador. Asi que abrimos la ventanilla. Me causa mucho dolor recordar estos azares. Tengo de aquel fracaso espinas clavadas en el corazón y duele desenterrar los recuerdos punzantes pues todo fue por mi culpa... por mi gravísima culpa. Fui un fementido. Con Suzanne no me porté bien. Olivia apenas durmió a pesar de que su madre la embutió en un saco de dormir. Llegamos a Hornchurch a eso de las nueve de la noche con 10242 millas. Entre mi casa de Edenthorpe y la de mi suegro hay una distancia de 132 millas.

Otra vez la paz y el silencio de Harrow Drive. En las noticias de las nueve Ludovico Kennedy entrevista al jefe de prensa de la OMS acerca del estallido de cólera en España. Pese a tales reparos epidémicos la gran masa de ingleses se desplazará a la Costa del Sol. Mi suegro me pregunta si no será peligroso por la niña y yo me encojo de hombros. La costa del sol para estos isleños cloróticos y desmedrados se muestra como un paraíso a despecho de las campañas de descrédito antiespañol que suelen airear los diarios ingleses por estas fechas.

Los rostros de la gente del condado de Essex todos parecen iguales humanidad trabajada por un siglo de revolución industrial, pelo lacio, los ojos chiquitines el gesto desabrido entre chusquero y gremial. Las muchachas de buena pernamenta. Ha sido todo un descubrimiento  la minifalda. Mary Quant dio realce a la buena figura de las inglesas, al descubrir que las mujeres de estas Islas poseen unas patas olé. Por algún lado ha de manifestarse la rebelión años 60. las británicas dejaron de ser bolsas de agua caliente para sus maridos en la cama.

 

24 de julio sábado santa Cristina

 

Olvidé en Doncaster la agenda de direcciones… pequeña gresca con Suzanne no pasa nada. Al fin telefoneo a la agencia EFE en Londres. Caño no estaba ni el sustituto supo darme sus señas y direcciones. He comenzado en el sentido barojiano de la palabra la Busca y la lucha por la vida. Lo cual significa que no podré saber si aceptaron mi colaboración sobre el diácono un hombre casado del Yorkshire que ha recibido las ordenes de diacono un tal señor Green. Me gasté más de diez libras en la elaboración de la información. Por primera vez desde la Reforma un hombre casado puede administrar sacramentos. Caño no se molestó el cabrón en enviarlo a Madrid como me prometió miedo a la competencia o simple mala uva. De todas las maneras yo voy a comprobar los hechos en la calle Ayala 5, donde está la central de la agencia de noticias y lo que sea sonará vaya si sonará.

Paseo por Hornchurch y voy de tienda en tienda en busca de un mapa de carreteras de Francia. No encuentro el itinerario por mala fortuna pero me tomo una pinta en el “Cricketers” y otras dos en el “Harrow”. Me encuentro bien de ánimos y con tres litros la rubia cerveza en la barriga se me da la baza de mirar al futuro con cierto optimismo. No quiero que nadie me gobierne. Regreso a España para volver a Inglaterra. Tengo que persuadirme a mí mismo de que triunfé en la empresa. No soy un derrotado. En el Cricketers el amo de la posada era un tipo delgado alto con la raya en medio no muy comunicativo pero perfecta imagen de una película años 30; las gentes al envejecer se llevan consigo ritmo y maneras. En el lounge del Harrow había un loro enjaulada que propalaba consignas de las Trade Unions y llamaba hijo de soltera a quien le parecía o cosa así. En el salón había un viejo piano de cola para tocarlo en los grandes partiose y fiestas de solemnidad. Las gentes de Hornchurch, no es que destaquen por su belleza. Dice mi suegro que la gente peor encarada del mundo se pasera por Romford Market los martes a primera hora. Las gentes al envejecer se llevan todo consigo, ritmo y maneras. En el Harrow había un loro que alegraba las veladas del pub, mientras los clientes consumían su pinta el lorito no paraba de llamarles cabrones.

Incluso se metía con la Reina. Aquí uno se siente masa pero no nos pongamos tristes pues no hay razón para ello. Pensemos en cambio en las muchachas en flor cuando acabo de cumpolir los veintiocho, acabo de tener una hija, estoy en la plenitud de mi existencia.

Anoche tomé sardinas en lata y mew levanté con ardores de estómago. Mañana saldremos camino de la dulce Francia. Tomaremos el ferry en Dover. A ver el minicooper como se porta. No puedo pegar ojo y aquí estoy asomado a los renglones de este cuaderno escolar donde escribo lo que se me ocurre. No es un dietario al uso pero los ingleses me han enseñado que son minuciosos memorialistas. Son las dos de la mañana paz completa en Harrow Drive. Me bullen grandes planes en la cabeza. Casi toco con los dedos el dedo de Isis me siento sublime pero todo se derrumba cuando arrecia la depresión.

Dick Howells rindió su consuetudinaria visita de losw sábados. Es galés y Suzanne dice que todos los galeses tienen el perfil de jilguero, son buenos cantarines nunca aves de rapiña. Es un hombre en el buen sentido de la palabra bueno. Me dijo:

—Vivo como si fuese el último día de mi existencia

 

 

 

 

PRIMAVERA 1970 VERSOS A Helen  

 

 

HOY  ES SAN ANDRÉS

 

30 DE NOVIEMBRE

 

Por san Andrés el vino nuevo añejo es

Por los santos la nieve en los altos

Y por san Andrés en los pies

Por san Eugenio las bellotas en el barreño

La leña en el brasero

Las ovejas a encerrar

Y quietos

Dejó ya su nido la golondrina en la viga el muladar

Si nieva por san Andrés

La res muerta es

Y si tronara

Buen año se preparara

Mi abuelo ojos tiernos

Por el ectropión

Todos se uncen al carro de los vencedores

Luz de enero que fortalece

Camino por lejanos caminos

No encontré la casa

Me siento a la trasera del aire en busca de la piedra filosofal

 

 

WHITMAWHOPTMAGATE LA RUA DEL LÁTIGO

 

SE escuchan las pisadas del verdugo vigolero

Ayudante del verdugo en el tormento

Un hacha y una segur

La calle más estrecha de York

Siempre en sombra

El sol luce lejos

Suenan los latigazos de la flagelación

Gritos y blasfemias

No me azotes más por amor de Cristo

Yo peleé en Jerusalén

Porté el grial santo

Preparan las plañideras

De aquel sacerdote indigno la mortaja

Se escucha el canto de maitines y el de los pájaros

Lo crucificaron le dieron a beber

Hiel y vinagre

No lo quiso probar

Un enfermero lo amarró en blanca

Y una doctora

Hincó en la barriga

La inyección letal

Los soldados

Hacían justicia en nombre de Dios

Maldito seas clérigo incontinente y fornicador

Anatemas llegaron de Roma

Lloraban las campanas bajo la lluvia de York

Whitmawhotmagate la calle del látigo es sólo un callejón

Estrecha y oscura como un cajón

Entre estruendos y carcajadas

Una doncella perdió la flor

Válgame Santa María

En la ayuda de la muerte

Ayudadme, Señor

 

 

 

SAN JUAN DE Beverley

 

Obispo y mártir

Ornamentos rojos decretaban las epactas

Estola blanca

En la mano una palma

Vinieron aguas río Ouse arriba

Valquirias de Finlandia

Un deseo rubio

Sobre el agua

Los cuerpos transparentes

Ellas cantaban

Oímos el canto de pájaros extraños

Iban ya las linternas apagadas

El santo mártir guiaba

A una luz celestial

Las limpiadoras de la oficina

Cantaban viejas baladas

Bebían té caliente

Escuchabamos una orgía de voces

Entrechocando las tazas

Percibíamos el silbido

De las marmitas cantoras

Echando humo

La reina de Inglaterra

Bajaba en enaguas

Fue

 un dulce despertar

Reginald se anudó la corbata

Escuchó las noticias BBC

Informando de guerras lejanas

For my breakfast bacon&eggs

Estaba oscura la mañana últimos días de diciembre

Sonó en la puerta aldabonazo del Evening post que aterrizaba a través

Del ojo del buzón

Business as usual Inglaterra despertaba

Antes del solsticio

Desde las cresterías de las torres catedralicias

Un ángel nos saludaba

Good morning

Good morning

Dulces besos al alba

El agua de la lluvia

Caía mansamente desde las gárgolas

Perpendicular simetría del arte gótico ingles

Sonaba una campana

Se alzó bruma desde el río

Y yo creía nos visitaban las animas

Escoltando al obispo que caminaba adelante

Arrastrando capa magna

Un roquete de armiño

Y el petaso episcopal

Atado a la barbilla

Barboquejo color grana

Nació el sol sobre el cielo triste

Y apareció la catedral clara adamantina

A san John los Ángeles en volandas lo llevaban

Cantando kyries y glorias a la antigua usanza

Y Mary jane y Peter cruzaron el puente al lado de su oficina

Sintiendo el paso de los días

Como un afán consecutivo

Tiovivo de repeticiones

Carrusel de esperanzas

Iba a juntarse con las nubes el humo de las fábricas

Portafolios carpetas y papeles

Las mismas gente la misma luz

York castillo de banderas

Oriflamas del medievo

Cuartel general de Adriano y de templarios

Que marcharon a la conquista de Jerusalén

Sonaban los tambores

Un rey de armas descendió por la escalera

Peter y Mary jane jugaban al escondite del amor entre matacanes y merlones de la almena

Un monje del cister se arrodilló en el reclinatorio

Desde el postigo sonreía macabra

La cabeza del obispo ajusticiado

Se desliza el tiempo imprevisible

Por las sendas de la historia

La rueda de la Fortuna gira sin detener

Creció una flor roja

En lo alto del postigo

Y no hubo memoria

Reginald, Peter, Mary Jane

Movían ficha de formularios

Levantando montañas de papel

Operaciones aritméticas  y algoritmos

El aburrimiento humano es

 

 

 

 

ASH WEDNESDAY

 

Because we are and we are not

Because we see and we see not

Matters of ashes

Cinders and sighs

Smoke of cigarettes

Made in wombs and dead in tombs one day

However, the stars always shine

Come and go

In an out our days

We laugh

We cry

We christen

Our sons

Living through the hours

Watching to the clock

The big horologe

The swinging pendulum

We are and we are not

Everything is trivial

Insecure

Ash in our foreheads

Memento mori

Nevertheless

Be, be, be

 

 

De ceniza nos coronaron

Somos el vilano

Que cruza el aire

Y en cualquier parte deja la semilla

El perfume de las rosas respiramos

Dragantes en la mañana

Marchitas al caer la tarde

Esperamos no obstante

La venida de las musas

Pero Euterpe y Clio pasan de largo

Tronando está los dioses

En el ancho cielo

Why was this big endeavour?

Miro para el Ouse

Los patos y los cisnes son mis compañeros

Las barquillas amarradas cabecean

El tridente de Neptuno se fue a pique

Yo pobre emigrado sueño en el hijo que vendrá

 

 

CAMPANAS DE YORK

 

They ring the bells

Melodies of the belfries

The peels of Avemaria

No

No

Que su virginidad no negamos

Madre de Dios

Pero no negamos

El culto de hiperdulía

Santa maría

Flor de pureza y sabiduría

Ruega por nos

Por camino recto

Llévanos

Canta el obispo un prefacio sin diapasón

La ciudad echa a andar

Entre tostadas bacon and eggs

Mermeladas y té

Un sándwich y perritos calientes

Cabecean las gabarras en el embarcadero

Hora punta y volandera

Campanas de cerca

Campanas lejanas

Lontananzas queridas

Mediodía sin sol

Agua del río deslizándose mansa por el regato

Bella ciudad pontificada

Soy su ciudadano

En un presente fugitivo

El horizonte invita a visitar los finisterres

Sueño montañas laderas verdes

Islas en el mar

De aquí no quiero marchar

 

 

PAJARILLO DE LAS MAÑANAS

 

¿Eres alondra o ruiseñor

golondrina o pinzón picoteador

¿Eres pardal eres gorrión?

Cantas en el barandal

Piropos a la luna

A la torre de la iglesia derrumbada

Ruinas sacras

Desvencijado palomar

El pardillo es un pájaro hada

Nuncio de los besos

Que estampo en tus mejillas Susana

Luego vuelvo al silencio de mis libros

Soñar no cuesta nada

 

 

El año del 70 fue fundamental en mi existencia. Alcancé el cenit. A partir de ahí empezó todo a declinar y a volverse agrio. Y de lo que perdí con putas y rufianes me lo comí. La verdad es quue mi existencia ha sido rufianesca. Me he bamboleado en el columpio de todas las pasaiones excepto en el de la mariconería o la marijuana. You havr jurt a loy og perople. It true that you said. Alguna maldad debe de despedir de mi ectopkasma psicquico que determina ek bayfragio de todos mis asuuntos- soy ya Viejo y mos parpados afligidos por el ectropión paracen emplomados por la luz. Me vuelgo loco en las noches de luna. Va a ser pronto navidad y aquí estoy sentado acribillando mi memoria con recuerdos que me perforan el alma como un bisturí. La navidad es tiempo de facturas y de saldar cuentas. Haciendo balanza se me viene a la memoria una palabra de Scrooges “humbug” (embelecos, enhaños, farsa) dejémonos de perversiones sentimentales añorantes. Lo que fue pasó but I renounced to my kith and kin eres un desdichado, Soguillas hoy no podrás asistir al filandón… alza la vista y remonta los vuelos del ahuila veras al petrel los pajaros de la tormenta que cruzan los océanos y tú lo conseguiste, eres un tío con suerte. Debieras de llorar tus culpas en lugar de salir a emborracharte y jugar a la gallina ciega y al adivina quien te dio. No frunzas el ceño, escucha la plática del angel de la verdad pero ya sé que tienes las orejas embotadas y tus odios son del gremio del  predicame cura predicame fraile por una lado te entra y por otro te sale. Deja de come offal y black pudding que son alimentos que embrutecen y atoran la tripa cagalar. Ebanister Scrooge es tu pariente. Era el hombre que no sonreía y decía que eso de la Nochebuena son sentimentalismos idolatras de los cristianos que veneran a un farsante Jesucristo y que la Virgen María era una puta y que el pesebre de Belén era un invento de aquel franciscano andrajoso de la Porciuncula… t4e pondremos en manos de un buen alinista y ya verás como sales desta. Tu no puedes escuchar a Wagner ni emborracharte con la trompetería apocalitica del Guhrer. Vuelve al redil.

—Yes buana. Ya voy

Las mariposas negras que de vez en cuando vienen a asolarme con sus monsergas y atruenan mis memorias con reivindicatorias de lo que sucedió hace más de medio siglo, volví del trance y me dispuse a copiar los librois del cuaderno hace diez lustros y pasar los apuntes a limpio.

 

 

PRIMAVERA EN Wilberfoss

 

Cada año te espero

Por las esquinas del viento del sur

Y ya estás aquí

Cabalgando un potro verde

Con alas en las patas

Guirnaldas de piedras blancas

Cíngulos de flor

Sonrisas de labios

Que se lavan en la fuente del amor

Hay mil pajarillos en la verde rama

 

 

21/3/1970

 

los domingos del señor

 

no sé donde está el principio

ni el fin

las monedas que Heliogabalo perdió

ni cuando llegará el padre Neptuno con el tridente

si serça al rayar el día

todos son interrogantes

los goznes del eje de la rueda de la vida

giran perforando interrogaciones

yo no soy nada

ni siquiera una flor acariciada por el viento

tengo la mesa llema de papeles

objetos multiples

puritos mios e indecisiones

banderas y unions jacks en la flor de mi edad

un jersey verde

En el reloj suena el tictac

La caja del tiempo

Guarda misteriosa

¿sueños maravillosos o funestos?

de sueños sorprendentes

que nunca se cumplirán

Suzanne se despierta de la siesta en el sofá

Y me pregunta dónde estamos y qué hacemos qié queremos

Ña mano dek destino nos unió

Adónde el camino una puerta se cerrará y otra se abrirá

Es abril. Es primavera

En el alfeizar de la ventana del bungalow

Tres abejas libaban las florecillas del tiesto que trajo Mary Heagerty

Los narcisos recien nacidos del jardín abren sus cúpulas

Ladra un perro lejano

Las horas pasan

Estos son los domingos de Wilberfoss

Los pasamois leyendo los dominicales en un sillón

Noticias amenazantes del hambre de Biafra

Té. Amor. Televisión y fantasía

Y silencios tristes interrumpido por el trepidar de la circulación en la autovía

Envejecer es seguir la ruta de la desilusión

Nuestros ojos se solazan con la puesta del sol

Alabemos al Señor

La luz se fue y otra vez fenece el canto del mirlo

Que se prolonga buscando horizontes sonoros

El más allá

Las nubes besan la quima de un tejo centenario con labios de carmín

Se va la tarde cantando vísperas

Y nosotros acá quedamos frente a la noche llena de bruma e interrogantes

Hay alguien en York que espera un hijo

Su esposa grávida duerme sobre el sofá

Nuestra sangre germinará en otra sangre

Cómo será, donde vivirá, ¿acaso feliz será?

Porque así estaba designado desde la eternidad, desde el principio

In principio erat Verbum

En el campo florecen los lirios

Y de narcisos de penachos amarillos

En la pared una bandera roja y gualda

Tú hijo mío estás aquí casi presente

 

 

 

A FELIPE II

 

Eres la flor del imperio. Cabalga buen caballero te ofrezco mi espada y mi sombrero

Crece la rosa de sangre en los jardines de Flandes

Emperador de Europa es mi padre buen soldado corona su cabeza el yelmo de Mambrino penachos y oriflamas clangores de guerra batallas perdidas y ganadas

La de san Quintín diametrada en la simetría escurialense

Cuando los hispanos queriamos edificar la ciudad de Dios una nueva Jerusalén

Juegan las olas del mar soñando nuevos continentes nuevos mundos de coral

La cruz y la espada símbolo triunfal

Cabalga caballero

Navega marinero

Somos la flor de Castilla

Y miedo nos tiene Lutero

Escoriales de oro pardas laderas

Montñas cargadas de simetría

Alud de plegarias

Canto vísperas con los monjes

Cartabón y plomada

Razón matemática

Escribo madrigales

Tuve cuatro esposas

Soy rey

Escribo madrigales

Mi corte es un convento

Visto sayal pardo y blanco

Soy un jerónimo más

Un prior austero

Creo en la Providencia de Dios

Ame

 

 

PITOS Y FLAUTAS GONGORINOS

 

Cuando pitos flautas

Cuando flautas pitos

Uno por otro la casa sin barrer

Vino la pasma serenísima

Ahí te quiero ver

Maneado en la pihuela

Lastre y ristre

Amarrado en blanca

Por un soneto

Y un sayón dándote vergajos en el culo y el coleto

No soy pastueño

Soy agraz

Y un poco montaraz

Clérigo díscolo

Que echa la siesta

En el sitial del oficio divino

Mirando para el facistol del coro

Me embeleso profano y torcaz

Ácaros, avariosis, el chancro sifilítico

Habitual de los prostíbulos

Un trono para mí en la ciudad de Córdoba lejana y sola

Grande fuiste algo bizco narigudo

Y temperamental don Luis

Presbítero indolente consagrado en lo que no creías

Por eso eras judío

Un genio de la palabra

Había que guardar las apariencias

A procurar prestameras

Y vengan días y caigan ollas

El mayor poeta de estos reinos

Cuando pitos flautas y cuando flautas pitos

Eso es España

Todos en el brete

Carne de horca

Carne de inquisición

Carne de prostíbulo

La luna y las nubes corren siempre en contraria dirección

 

 

 

 

 

 

 

 

A LA VUELTA LO VENDEN TINTO

 

Me sumergí en un dialogo de besugos mientras los pavos picoteaban en la corraliza

—¿Qué; ponen las gallinas?

Y la aldeana dijo andi di ahi que a la vuelta lo venden tinto.

La vieja no tenía cejas tampoco párpados, se le habían caído a causa de una enfermedad que llaman ptosis. Pobrecilla había hecho la carrera en la calle la Montera y regresó al pueblo enferma. Fue sacerdotisa del gusto, y al cabo ya era una arrecogida.

Yo seré puta, decía, pero siempre fui decente. Me entregué al oficio para comer, entonces no había. Iba todos los días a la iglesia le fregaba al cura la rectoral y le lavaba la ropa. Tocaba las campanas y daba el clamor de difuntos cuando alguno moría. Ahora la prostitución se había generalizado y tanto es así que muchas chicas de la tele eran putas y hasta alguna ministra no ocultaba su condición. Te abres de piernas y ganas un puesto y el que venga atrás que arree, pues ya digo a la vuelta lo venden tinto. Buena mujer la Jesusa a la que llamábamos en mi pueblo unos la Arrepentida. Otros la Arrecogida. Murió casi una santa y ponía velas a la Magdalena y hasta Nefrisa que lo hacía por amor al prójimo.

 Pues esta santa Nefrisa haciéndolo de balde y por caridad se santificó. De los mansos de corazón será el reino de los cielos.

Ya no se acordaba de sus profusiones orgásmicas ni de sus clientes de la calle la Ballesta. Eran tíos muy guarros. Se acostaban con nosotras y luego le pegaban a la mujer unas purgaciones de aquí te espero.

La cosa no tiene remedio y los que digan lo contrario proejan contra corriente. Solía decir la Jesusa que sus mejores clientes eran los curas. Y es que efectivamente la cosa no tiene vuelta de hoja. A la vuelta lo venden tinto.

 

69 PEARSON PARK AQUELLA NOCHEBUENA  EN HULL

 

Aquella nochebuena del 66

Conocí el amor en la misa de Gallo

Abismo de lo inefable

Cuando se descorrieron las cortinas

Del secreto arcano

Que pasa por la vida del hombre

Una sola vez

Fue una epifanía

No he vuelto a Hull aquella ciudad del norte

Los muros de Endsleigh College

No los salté

Conocí la felicidad y el destierro

Desde entonces soy

Un judío errante

Giran los días los meses y los años

Da vuelta la noria de los acontecimientos

Chirrían los cangilones

Y sin darme cuenta

Heme aquí un pobre viejo

Los dientes careados

Y copos de la nieve de febrero

Acariciando la piel de mi gorro

Y mi pelliza                           

Un nombre en mis labios

Rosa Heagerty

Nombre que suena como un beso

Ruso  c h e l o v a t b  tebiá

Troparios, kiries y canciones

Las fimbrias de la estola

Del diácono

Eras tan pura todo oro

Como la casulla del pope

Ahora escucho música de Mussorsky

Oye, amada, a los coros

Que siguen la himnodia monocorde

Después de cincuenta y cinco años

Se abre la puerta de los dones

Un santo anacoreta nos larga bendiciones

Es el símbolo de nuestro dolor

Santiguadas trazadoras de la inocencia

Te descubrí

Y mirándote subí al cielo

Peldaño a peldaño

Por la escala de Jacob

Un acontecimiento insólito

Como Petrarca cuando vio a Laura

Él también conoció el sacramento

En una iglesia de Aviñón

Como yo en Hull

 ciudad inglesa

Batida por el viento

Y las galernas del mar del Norte

Aquel instante

Aquella misa

Es el secreto de mi vida

Que me acompañará a la tumba

Gracias a Dios

2025-10-14

 

LA PILARICA

 

En el primer banco se sentaban los doce guardia civiles de guarnición. Era un sargento el jefe de puesto de la comandancia de un pueblo asturiano posado en un valle a la ribera de un río. Hay que atravesar un puente sobre el ejido donde pasta alguna que otra "Cordera" maternal y que para mí seguirá siendo vaca abuela con todo lo que digan - el peligro hoy no es el matadero de Noreña sino esa extraña enfermedad que trae a los ministros del ramo de cabeza: vacas locas- y luego se accede a través de una calle larga que se recuesta entre las peñas.


A mano izquierda hay un bar acera por frente del cuartelillo de la Benemérita y otro chigre más que se saltea con un taller de reparaciones de bici y un tercer figón más que regenta Mariano Proficuo dando a la plaza sombreada por la presencia de un carvajal secular cuyas ramas tocan los perfiles del alar de la iglesia y enraman como si fueran una pérgola del laurel de Baco la casa café de la panadera. Ésta debió de ser una mujer de buen ver pues más que comediados los setenta y próxima a los ochenta sigue pechugona ella y tan flamenca. Tiene el pelo rojizo y fabrica unas enfiladas exuberantes y tiernas igual que sus pechos.


Se la podría componer algunas endechas y dirigir unos buenos cantares a esta panadera comprensiva y rumiante que se trae un aire manso y ejemplar con las vacas que pacen en el sel de la entrada pasada la ferretería de Carola después de virar por la curva y ya estamos en el ojo mismo del valle al que mi vivir o la fuerza del destino me trajo rodando por las pendientes de la casualidad o de un secreto designio que llevamos al nacer todos en la frente y cuyo sentido oculto vamos desmadejando cada día de nuestra existencia. Nuestro porvenir cuelga de los cuernos enroscados del buey Apis.


Pues era el día de la Columna Nuestra. La Virgen sonreía en su trono de jaspe de su altar lateral en la iglesuca íntima llena de fervores tutelares y el anagrama mariano por todas partes; templo de traza cuadrada muy propia del arte visigótico que no utiliza el círculo para nada. Diseño primitivo y rural, la estampa románica conocería siglos adelante las excrecencias prendas y arrequives del barroco. En la nave de la epístola había un altar que representaba con mucho entremetimiento y pompa el árbol de Jetsé todo de colorines, muy rural, primitivo y tosco pero con un resultado que no podía ser más certero porque inducía a centrar el alma en el recogimiento. Un movimiento de piedad al tiempo que una sonrisa embargaba al visitante. Debajo del coro había un confesionario de castaño de porte cuadrado en cuyo dintel ponía el número de su data. Había sido construido en 1808, fecha evocadora de muchos sentimientos en cualquier español por poco patriota que se sienta un español. La junta de Asturias fue la primera en alzarse contra Napoleón. Esta comarca verdadero riñón de los concejos y cabildos todavía resulta efervescente en todo a lo referente a nuestro pasado. Por eso aquí se siente con más fervor que ninguna otra parte el sentido de la fiesta nacional. Al menos yo vibré el doce de octubre del 2000 con toda aquella escolta de gastadores rindiendo honores ante el altar mayor.


Tengo que decir que el arcipreste don Quintín pronunció un sermón muy sentido de los que por desgracia no se escuchan en nuestro templos desde que dirige los designios de la barca de Pedro ese polaco tan misterioso y comprometido con los poderes fácticos de la trilateral. Por eso tengo que aducir que la homilía del humilde sencillo cura de aldea me llenó de consuelo. Don Quintín, pequeño, algo calvo y rechoncho al que yo convido a culines o a una pinta en la taberna de la plaza adquirió ante mí una elevada talla moral que sobrepujaba a la del propio cardenal primado o el purpurado de Madrid. Porque si los príncipes de la Iglesia compasan y comanditan, transigen, tragan, ponen el cazo, acepto, lo que tú digas, vamos allá, París vale una misa, etc., con el orden terrenal los humildes clérigos de misa y olla se desentienden de esos planteamientos acomodaticios generales. Se les obliga a vivir hombro con hombro cabe el pueblo, sus problemas reales, sus zozobras, lejos de la retórica curial, los rescriptos y bulas papales; en una palabra, el Jesús de carne y hueso, hijo del carpintero y de María, el que talaba arados, mesas, ventanas, algún yugo de ciprés, la ventana que salía de sus manos no la carcomía la sarcoma, ni se abría con el viento recio de marzo, vedaba entrada a los ladrones.


Pero aquí estamos rozando uno de los enigmas más maravillosos de esta institución de origen divino a la cual los hombres bulderos y boleros han querido transformar a su capricho. Querían una iglesia hecha a su medida como una dulleta de magistral de encargo pero lo cierto es que a la institución empecatada y corrupta ya que siguiendo las indicaciones de Montesquieu -¿no fue el que dijo que todo el poder corrompe y el poder absoluto más todavía?- sólo le puede lavar la cara un san Francisco. Así la iglesia quedará a salvo de la ignominia gracias a un diácono.




La Tradición puede operar maravillas en misa de doce. En la ceremonia aleteaba un sentir antiguo que conectaba el presente con el pasado y nos colocaba delante de la mirada lo acontecido hacía muchísimos años y es que la memoria puede operar milagros. Es un divino don al que ahora combaten con tanto empeño los que hablan de borrarla en aras de su invento. Está visto que el legrado de memoria es uno de sus objetivos. Quieren convertirnos a todos en sapos y se inventa monsergas y acuñan consignas para que nos convirtamos a sus intereses. Tendrán bastante trabajo si de lo que se proponen es hacer que baje de su pedestal la Virgen del Pilar.