BENIDORM
UN PARAÍSO ABIERTO AL MERCADO TURÍSTICO RUSO
Vengo con el alma
encendida, el corazón alerta, el espíritu recién carenado como un galeón harto
de galernas, escorado a la izquierda, estivado por la derecha, pero navegando,
el timón firme. El Mediterráneo serena, te hace ver las cosas de forma más
diferente que tierra adentro. Es un mar más humilde y más viejo, acostumbrado a
ver en sus riberas el paso de las viejas civilizaciones.
El Cantábrico a veces
encrespa y nos hace ser altaneros. Tuve la suerte de celebrar el 12 de octubre,
Día de la Hispanidad, nuestra querida Pilarica, en Benidorm que es una de las
ciudades más interesantes y bonitas-bonita por dentro- de la península ibérica
y a la sazón yo me acuerdo de una crónica que escribió allá por el año 68 Lucio
del Álamo, maestro de periodistas, sobre Benidorm en su espacio de la Hoja del Lunes en su espacio habitual
que se intitulaba “crónicas de mar a mar”, una pura delicia estilística.
Era la época del pleno
boom turístico. Hoy este pueblo alicantino ofrece otro aspecto y acaso se
encuentre en recesión. El mercado se abastece de turistas ingleses. Esas buenas
gentes de los condados norteños como Yorkshire, Northumberland, Newcastle, y
los Midland, austeros pensionistas que por unas pocas libras pueden gozar de
una semana cara al sol, alojados en un buen hotel y con una comida copiosa.
Los pensionistas ingleses una clase a extinguir
Lo justo para recuperar
la salud y el buen humor y enfrentarse a los cruderrimos inviernos que brinda
la climatología más allá del río Ouse y del estuario del Humber. El aforo en el
pasado puente ha batido las marcas de lleno pero según me comunicaban los
hosteleros es una clase a extinguir por lo que los empresarios están escrutando
otras opciones y la mejor es el mercado ruso. Veraneantes de Petrogrado y de
Moscú los cuales por lo general no crean ningún problema, gastan más que los
suecos y que incluso los alemanes y se comportan con una dignidad que es
auténticamente cívica y ejemplar.
Los ingleses son también
hombres y mujeres de una gran probidad, buena educación y simpatía. Todos te
saludan en el ascensor. Hasta que se emborrachan. Me estoy refiriendo a los
jóvenes, a esas hordas de los suburbios de Manchester y de Liverpool que
pernoctan un par de noches y luego se vuelven a su país en medio de una gran
resaca.
En Rusia son tolerantes con el alcohol, compasivos con el borracho
pero empinar el codo en público está mal viso
Algunos no saben beber. Los rusos todo lo
contrario aunque no niego que el vodka a veces sea un problema nacional. Sin
embargo, no suelen embriagarse en público y un borracho un “ pianitsa” está muy
mal visto aunque tolerado (en las calles de Moscú hay un servicio de vigilancia
que recoge a los beodos y vagabundos y los lleva a un albergue de misericordia
a dormir la mona, lo que evita que perezcan congelados).
Por desgracia, el
gobierno español ha suprimido los dineros que se destinaban en la prensa rusa
para campañas de lanzamiento y marketing de ofertas turísticas en la zona de
alicantina. Con lo cual la promoción ha quedado a medias.
Se dice que es a causa de los recortes pero no
me gustaría suponer que se deba a una campaña de odio y difamación contra la
Madre Rusia desde nuestros medios de comunicación. Esto es también incitación
al odio y a la violencia y a la desinformación y a la manipulación, habría que
decirle al ministro de Justicia, el señor Gallardón que en la reforma del
Código Penal ha impuesto esta cláusula.
La rusofobia es una incitación al odio, señor ministro
La rusofobia, señor ministro, también es
xenofobia, lo quiera usted no, lo mismo que la difamación que se hace contra el
gran presidente Putin y contra la Santa Iglesia Ortodoxa apoyando a esas
insignificantes jovencillas del Movimiento Pussy.
Rusia, empero, es un país
fuerte y poderoso, ahora bastante rico y que siempre fue generoso con los
españoles (recordemos a los Niños de la Guerra a los que al parecer también ha
suprimido el gobierno Rajoy subvención) donde se ha estudiado con tesón la
lengua española.
Por favor, aparquen usted sus prejuicios y
manidos tópicos sobre Stalin, el KGB y comprendan que en Rusia se encuentra una
de las avanzadillas del progreso científico, de la tecnología, y también de los
valores del espíritu. Ofrece a los que como yo amamos la belleza, la compasión
y ese no sé qué de la vibración estética la mejor literatura del mundo. Una
verdadera pena que el ruso que es el cuarto o quinto idioma más hablado del
mundo no entre en nuestros planes de estudio. Es una lengua moderna pero a la
vez clásica que diseña capacicades del intelecto como el Griego o el Latín.
Así que vengan más
turistas rusos. Ya lo creo que vendrán. Estoy seguro de que los españoles pese
a la crisis, como somos un pueblo resistente, tenaz y un poco terco, pasaremos
el Rubicón y las Termopilas de las que nos hablan los políticos. Conviene no
perder la perspectiva. Dense un garbeo por el Mediterráneo. Vayan a Benidorm, a
Javea, Altea, a Gandía. Mirarán la vida con otros ojos. Amarán más la paz, y no
hablarán con tanta acrimonia. Nuestra caja tonta es una hura grillera donde
resuenan las perversidades… el constante cri-cri de nuestros bustos parlantes,
de nuestros politólogos. Desenchufen el aparato, para no vivir asediados por la
mentira, el odio y el corazón en vilo.
Tengo que acabar acopiando una frase del Rey
Prudente y a todos les digo:
-Sosegaos.
Habrá que confiar un poco
más en el Paráclito y no perder la esperanza